MISERICORDIA ¿Puede practicarse la misericordia en las diversas profesiones? ¿de qué manera? La misericordia está íntimamente vinculada a la salvación. Si el hombre se salva, no es por mérito propio sino por misericordia de Dios, que “tanto amó al mundo que envió a su propio Hijo para que todo el que crea en El no perezca y tenga la vida eterna” La misericordia se distingue de la caridad. Ésta busca la unión con el objeto amado. La misericordia es la caridad dulcificada que mueve el corazón del hombre a inclinarse para aliviar el dolor y hacer posible el perdón. La misericordia no fue impuesta como mandato. La caridad sí. La misericordia sólo es operativa respecto del prójimo. La virtud de la caridad dice referencia a Dios, a quien ha de amarse por sobre todas las cosas y al prójimo, como a nosotros mismos. (Berçaitz de Boggiano, 2017) Teniendo en cuenta lo anteriormente mencionado, la misericordia se puede aplicar no solo en las diversas profesiones, sino también en nuestro día a día, de una manera consciente y sin diezmarlo, misericordia no es perdonar, para mi misericordia es ayudar a quienes lo necesiten de una manera acertada, es decir, ayudarlos a buscar una solución, pero claramente no es ser misericordioso solo con esas personas, se trata de ser misericordiosos con todas las personas en general, desde nuestras diferentes profesiones podemos ayudar a cambiar la vida de muchas personas, lo cual para ellas puede significar una salvación.
La misericordia es un valor que se ha diezmado en la actualidad. ¿Cómo podría recuperarse este valor en nuestra sociedad? Para empezar necesitamos tener muy claro que el concepto de misericordia, si bien es cierto, en sus inicios era relacionado totalmente con la iglesia católica, hoy en día se le debe empezar a
MISERICORDIA dar un sentido o significado diferente, debemos empezar a mirarlo con un enfoque diferente, para que de esta forma podamos empezar a recuperar este valor en nuestra sociedad. Necesitamos entender que estamos en una sociedad la cual presenta una cantidad de problemas todos los días, los cuales se podrían empezar a mejorar un poco si los seres humanos apeláramos a valores tales como la misericordia, pero la sociedad todos los días se vuelvo más cruel y menos doliente de lo que sucede con su entorno en general, solo nos interesa el bien propio, y si yo estoy bien no tiene porque interesarme como estén los demás.