EL DEPORTE Y SUS DEMONIOS El deporte encierra todas aquellas actividades físicas que alejan a las personas del sedentarismo o problemas mucho peores, se requiere de un acondicionamiento adecuado para rendir apropiadamente, se vive un ambiente competitivo ya sea contra uno mismo o demás deportistas; todo esto envuelto en un conjunto de normas perfectamente establecidas; y es en este último punto donde entra el denominado doping. Con los avances tecnológicos en el deporte para mejorar de manera adecuada el rendimiento deportivo, se adhiere la parte ilícita donde se pretende aumentar el rendimiento físico del deportista suministrando sustancias que lo elevan artificialmente. Según el Comité Olímpico Internacional (COI), el dopaje es la administración o uso por parte de un atleta de cualquier sustancia ajena al organismo o cualquier sustancia fisiológica tomada en cantidad anormal o por una vía anormal con la sola intención de aumentar en un modo artificial y deshonesto su rendimiento en la competición. Cada asociación deportiva posee una lista detallada de las sustancias prohibidas con las cantidades máximas permitidas. De acuerdo a la sustancia utilizada y otros factores particulares, cada asociación sanciona al atleta en cuestión. El doping o dopaje no solo trae sanciones deportivas sino que también puede ocasionar problemas en el metabolismo del deportista, como paros cardiacos o respiratorios, entre muchas más afecciones, atacandolo al instante o a lo largo de su vida o acortándola; e incluso provocando su muerte en el peor pero no menos frecuente de los casos; como lo es el de la primera muerte registrada, en 1896 de un deportista por dopaje, el ciclista galés Arthur Linton quien dos meses después de ganar la carrera Paris-Burdeos muere a causa de una crisis de fiebre tifoidea, explicada por la exageración en el uso de cafeína y estricnina, o en 1987 el pentatleta germano Brigitte Dressel quien muere tras ingerir más de 400 dosis de anabolizantes que le habría proporcionado el médico de la federación Armin Kluenber; como estos casos existen muchos más.
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EL DEPORTE Y SUS DEMONIOS Las razones por las cuales los deportistas llegan a estos puntos son muy diversas, pueden ir desde la presión que ejercen los entrenadores, la que también proporciona el público aficionado, hasta la misma ambición
del deportista por acumular triunfos, añadido a todo esto
las altas recompensar monetarias y de reconocimiento que se obtienen al ser un campeón. La idea de deporte cambia y se pierde el verdadero sentido de competitividad y de amor hacia el deporte, la moral queda relegada a un segundo plano donde lo único que importa es ganar sin importar como se haga. ¿Es el fin el que justifica los medios?
BIBLIORAFIA: Doping
en
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deporte.
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http://www.monografias.com/trabajos4/doping/doping.shtml, recuperado el 08 de Octubre de 2009. Artículo:
Dopaje
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