LA DUDA DEL 11 DE SEPTIMBRE
Transcurría la mañana de un día soleado en la ciudad de New York, todo parecía estar en orden y ser un día común para sus habitantes, nadie parecía estar preparado para el desastre que estaba a punto de ocurrir en el corazón financiero de los Estados Unidos de América. Fueron diecinueve (19) terroristas bajo el mandato de Osama Bin Laden, los que convirtieron 2 aviones comerciales en objetos de destrucción. Un evento lleno de muertes, terror y gran confusión empezó a desatarse el 11 de septiembre del 2001 a las 8:45 de la mañana, cuando uno de los 4 aviones, un Boening 767 de American Airlines convertido en misiles impactó contra una de las torres gemelas a la altura del piso 80, se activamos las alarmas del edificio y se dio paso a la evacuación. La gente estaba confundida, no sabían que sucedía, los noticieros aseguraban un posible accidente hasta que lo impensable sucedió, transcurridos 18 minutos, a las 9:03 el segundo avión estrelló contra la segunda torre a la altura del piso 40 y justo en ese momento la hipótesis del accidente quedo descartada. Las Torres gemelas, era considerado el símbolo del capitalismo, la globalización, y el poder financiero mundial que radicaba en Estados Unidos y tan importante estructura un día se desvaneció como un castillo de naipes.. Después los noticieros confirmaron el secuestro de estos dos aviones. La torre norte del World Trade Center cayó a las 10:28 a.m. después de 120 minutos del atentado y 1.600 personas murieron como resultado del ataque. La opinión de los medios no se hizo esperar, aseguraban que dos aviones abrían burlado la máxima seguridad del planeta, dato que genero incertidumbre en la gente, haciendo que cada uno sacara sus propias conclusiones. Se conoce de dos ataques más, uno de ellos al Pentágono y el otro avión estrello cerca de Pittsburg, Pensilvania. Estados Unidos entro en colapso, a las 10:00 de la mañana los hospitales no daban abasto, el país olía a luto. CITAR: (CNN) – Fueron 341 bomberos de la ciudad de Nueva York, 23 oficiales de la policía de la ciudad de Nueva York, 37 agentes de la policía de la Autoridad Portuaria, tres funcionarios del tribunal, dos paramédicos y miles de civiles inocentes.
Pese a la incertidumbre, datos inusuales se empezaron a revelar meses después del desastroso evento; Aseguraban haber sido un autoatentado el cual les permitiría generar una guerra y apoderarse del petróleo del supuesto país atacante y de esa manera subsistir de la crisis económica por la que pasaban en esos años. La perfecta caída que se podía observar en los videos donde se evidenciaba el desplome de las torres daban a entender una detonación asistida, las torres cayeron a pesar de que el incendio ya estaba siendo controlado por el sistema de incendios de estos edificios. Otros datos como la inasistencia de Larry Silverstein creador del
World Trade Center y aproximadamente 3.000 empleados más el 11 de septiembre pusieron la duda la hipótesis de un atentado. Miles de hipótesis se fueron creando a medida que el tiempo pasaba. Los familiares de las victimas pedían desesperadamente una respuesta a tan fatal ataque, lo que sucedió dentro de los aviones y el drama que vivo cada uno de los pasajeros quizá nunca se sepa con total exactitud, aun si, algunas versiones dicen que los pasajeros de los aviones secuestrados recibieron la orden de llamar a sus familiares para avisarles que morirían. Las historias de los sobrevivientes de los ataques son verdaderamente desgarradoras, el dolor y la tragedia que vivieron ese 11 de septiembre marco de forma radical la vida de cada uno de ellos. Hoy en día solo el 60% de las victimas de los atentados han sido identificadas, En un laboratorio de Manhattan, un equipo forense continúa la tarea con ayuda de herramientas de última tecnología. Trabajan de lunes a domingo, sin descanso, revisando parte por parte, el análisis es aún más complejo si se tiene en cuenta que esos restos humanos estuvieron expuestos al fuego, la humedad, las bacterias, la luz del sol y el combustible de los aviones que se estrellaron contra las torres del World Trade Center.
En 2001, el jefe del Instituto Forense, Charles Hirsch, ordenó la conservación de todos los restos del atentado e insistió en continuar la labor. Equipos forenses del resto del mundo visitan el laboratorio de Nueva York para aprender de sus técnicas y procedimientos. El rol de los familiares es esencial en el plano técnico, porque la identificación solo es posible a través de la comparación con una muestra de ADN suministrada por las familias. El Instituto Forense posee unas 17.000 muestras, pero ninguna para 100 víctimas que posiblemente nunca podrán ser identificadas.
El sin sabor y las dudas permanecieron hasta hoy día, después de 17 años, el mundo lleva dudas del 11 de septiembre del 2001. Grandes preguntas han permanecido con el paso del tiempo: ¿Atentado o Autoatentado? No se conoce una respuesta 100% cierta a esta duda, lo que sí se puede asegurar, es que para el mundo fue un acontecimiento que dividió la historia del país.