La crisis económica impacta de manera más negativa en la mujer, los jóvenes, los mayores de 45 años y los trabajadores inmigrantes. Los sectores sociales que más contribuyeron al crecimiento económico pasado, son los que más sufren las consecuencias de la crisis actual.
Nova Època Núm. 1 (nov.-des. 2009)
Sólo los comunistas (PSUC, PCE, IU) defendemos una auténtica salida social a la crisis, a través de una alternativa económica en defensa del empleo, el aumento del poder adquisitivo y la defensa de la economía familiar, que sirvan de base para una gran movilización amplia y unitaria contra la crisis y el paro. Pero es más, los comunistas pensamos que todas estas medidas de tipo económico únicamente son viables en el marco de un proceso constituyente popular y participativo que establezca las bases de la III República. Somos conscientes de que este cambio político supone una ruptura democrática con el actual marco político y económico actual surgido de la transición y, a un mismo tiempo, con el marco político, económico y jurídico reaccionario definido por los tratados europeos de Maastricht, Lisboa, Amsterdan, etc. La lucha por la III República en este sentido forma parte de una lucha más amplia por una Europa que no sea la del capital sino la de los trabajadores. Nos proponemos elaborar soluciones alternativas, creando una nueva cultura republicana en la que lo de todos y lo de todas esté por encima de los intereses excluyentes. Queremos que la ciudadanía participe activamente en este proceso abriendo la perspectiva de una sociedad distinta, más justa y sostenible para nosotras y nosotros así como también para nuestros hijos e hijas, una sociedad en la que realmente se cumplan y hagan cumplir los derechos humanos, incluidos los derechos sociales, para todas y todos los habitantes del planeta. Nuestro objetivo, en definitiva, es que nuestra generación vaya construyendo una sociedad mucho más justa, solidaria y sostenible, una sociedad socialista para el siglo XXI
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el partit dels treballadors i les treballadores
CONTRA EL PARO Y LA CRISIS, 35 HORAS YA!! La situación económica y social en España y en Catalunya es la de una crisis que en estos momentos la sufrimos casi en exclusiva todos aquellos que vivimos de nuestro salario. Las políticas económicas neoliberales son las responsables del aumento del paro, la pérdida de poder adquisitivo y la privatización de los servicios públicos. Lo que ocurre aquí y en el mundo pone de relieve la actualidad de la lucha de clases. A diferencia de la política defendida por el PSOE, el PP y CiU, los comunistas tomamos como prioridad la defensa de una alternativa económica centrada en la lucha contra el paro, el aumento de la protección social y la defensa del carácter público de los servicios sociales. Durante los últimos quince años, los distintos gobiernos de PSOE, PP y CiU han llevado a cabo una política económica similar. Han defendido y aplicado un modelo económico basado en el sector financiero y el inmobiliario, a través de políticas fiscales regresivas y reformas laborales que han precarizado sin precedentes el empleo. Esta política económica ha sido la responsable de la pérdida de nuestra industria, de la creación de una burbuja inmobiliaria que ha disparado los precios de la vivienda y que ha hecho dependiente a nuestra economía del sector financiero internacional. La actual crisis económica desautoriza y hace inviavle la continuación de este modelo. Las consecuencias son claras: La destrucción desorbitada de empleos, la existencia de cien mil familias donde todos sus miembros han perdido su trabajo, la existencia de miles de trabajadores que se van a quedar sin prestación por desempleo, la recesión de la economía española y un cada vez más desigual reparto de la riqueza con un desproporcionado aumento de los beneficios empresariales frente a los salarios.
POR EL REPARTO DEL TRABAJO Y LA RIQUEZA Desde el PSUC-viu insistimos en que es necesario que se garantice el empleo de manera que la Generalitat de Catalunya no apruebe ningún ERE más, que se avance hacia la jornada laboral de 35 horas semanales por ley y sin reducción salarial para que podamos trabajar todos y todas, acometer una serie de medidas en el corto plazo de carácter estructural (papel principal del ICO y creación de una banca pública) y una reforma fiscal que haga pagar más impuestos directos los que tengan rentas más altas, que aumente la progresividad de los impuestos directos (Impuesto de Sociedades y el IRPF), que haga disminuir los indirectos (IVA) y poner de nuevo en marcha el Impuesto de Patrimonio. Junto a estas medidas, el Gobierno debe exigir la devolución de las ayudas a la banca, como forma complementaria de la reforma fiscal para financiar una banca pública y unas subvenciones a parados dignas, así como realizar una política económica de verdad, dirigiendo los sectores estratégicos con criterios democráticos y de reparto de la riqueza. Los y las comunistas de Terrassa consideramos que la salida de la crisis ha de ser una salida progresista y por la izquierda, protegiendo los sectores más débiles con coberturas sociales suficientes, creando ocupación pública que garantice mayores y mejores servicios sociales, apostando por un cambio radical del modelo productivo y subiendo los impuestos a las rentas más altas para aumentar los ingresos públicos. Es necesaria la movilización en defensa del empleo y la dignidad del trabajo, el aumento de la protección social (aumentando el salario mínimo y las pensiones y asegurando el subsidio de desempleo a todos los parados), la defensa de los servicios públicos y el rechazo a privatizaciones de la sanidad y la educación.