Conservas Koldo Royo Hemos aprendido a hacer conservas, los diferentes tipos que existen, dependiendo de los ingredientes que utilizamos y de su textura, hemos hablado también de los mejores tipos de frascos que tenemos que utilizar, cómo conservarlas, etc.; pero ¿qué es en realidad una conserva? Repasemos un poco su historia.
Antiguamente ya se conocían y utilizaban diferentes tipos para conservar y mantener las propiedades de los alimentos, seguramente uno de los más antiguos era ponerlos en sitios oscuros y protegidos de la luz, cubrirlos con nieve y hielo, etc. Poco a poco se fueron encontrando y perfeccionando nuevos métodos de conservación como los ahumados y las salazones. Cubrir los alimentos con aceite o grasa en tinajas de arcilla, también era una solución, sobre todo con las carnes y pescados. El azúcar y la miel son buenos conservantes naturales. En 1803, Nicolás Appert investigó para obtener la recompensa que Napoleón ofrecía a aquel que fuese capaz de “encontrar un método para mantener los alimentos largo tiempo y en buen estado”. No olvidemos que las tropas de Napoleón estaban en guerra con media Europa y necesitaba trasportar alimentos a sus soldados. Appert descubrió que si se colocaban los alimentos frescos en recipientes de cristal o barro, se tapaban herméticamente y se sumergían unos minutos en agua hirviendo, estos se conservaban un poco más de tiempo. Poco después descubre que el vapor era más eficaz para esterilizar los recipientes y mantener sus propiedades. En 1810 aparecen los primeros envases de hojalata dotando a las conservas de mayor resistencia y las protegía de la luz. Aunque a nadie se le ocurrió “inventar” el abrelatas hasta muchos años después (las latas fáciles de abrir que encontramos en las tiendas, con la anilla, son un invento muy moderno). Hoy en día han evolucionado los materiales de los recipientes, son más ligeros, fáciles de transportar y de abrir, los sistemas de esterilización son mucho más eficaces, lo que permite no perder sabor, ni nutrientes en el proceso.
Ingredientes para 4-6 personas: 3 latas grandes de maíz dulce 1 pimiento verde mediano 1 pimiento rojo grande 1 cebolla grande 200 gr. de azúcar moreno 600 ml. de vinagre de sidra 2 cucharadas de mostaza en polvo 2 cucharaditas pequeñas de sal de apio 1 cucharadita de cúrcuma molida 2 cucharaditas de maicena Elaboración: Limpia y corta los pimientos en daditos pequeños, pela la cebolla y córtala también en dados pequeños. Abre las latas de maíz y ponlo a escurrir. En una cazuela grande, pon los dados de pimiento, la cebolla y el maíz. Añade el vinagre, el azúcar y las diferentes especies, menos la maicena, remuévelo bien hasta que el azúcar se disuelva. Lo dejamos cocer a fuego lento unos 50 minutos, ten la precaución de ir removiendo de vez en cuando para que no se enganche al fondo de la cazuela. Disuelve la maicena en 2 cucharadas de agua y añade la mezcla a la cazuela, remuévelo bien durante unos minutos, tiene que volver a hervir y espesar. Cuando esté listo, pon la mezcla en botes (a poder ser de los que cierran herméticamente), bien limpios y que estén un poco calientes. Ciérralos bien y ponlos boca abajo de 2 a 3 minutos, para quitar las posibles burbujas de aire, después vuélvelos a poner de pie. Una vez fríos, lo puedes guardar en un lugar fresco y oscuro alrededor de 6 meses. Pero piensa que una vez abiertos los tienes que guardar en la nevera.
Cebollitas en vinagre Ingredientes para 4-6 personas: 500 gr. de cebollitas pequeñas 10 granos de pimienta blanca 1 ramita de estragón fresco vinagre blanco de buena calidad sal Elaboración: Esta receta es muy fácil de preparar, pero tiene un inconveniente y es pelar las cebollas. (Tranquilos, con un poco de suerte no os harán llorar). Pela con mucho cuidado las cebollitas, procura que queden bien peladas y enteras, ponlas en un tarro de vidrio y espolvoréalas con una pizca de sal, añade los granos de pimienta y la ramita de estragón. Cúbrelas con el vinagre y cierra el tarro herméticamente. Déjalas que reposen en un sitio fresco durantes unos 20-25 días antes de comértelas. Una vez abierto el frasco, guárdalo en la nevera.
Tomates en aceite Ingredientes para 4 personas: 800 gr. de tomates tipo cereza ½ litro de aceite de oliva 3 dientes de ajo
1 ramita de tomillo 1 ramita de perejil sal Elaboración: Pon una olla con agua y un poco de sal al fuego. Cuando hierva, añade los tomatitos y déjalos cocer 30 segundos. Pasado este tiempo, ponlos en un recipiente con agua bien fría, así evitarás que sigan cociéndose y los podrás pelar más fácilmente. Una vez tengas los tomates pelados, ponlos en un recipiente de cristal, añade los dientes de ajo cortados por la mitad, la ramita de tomillo y la de perejil, espolvoréalo con un poco de sal y cúbrelo con el aceite de oliva. Déjalo que repose un día para que todos los sabores se mezclen. Si quieres puedes sustituir el tomillo por unas hojas de albahaca. (Tienes que guardarlos en la nevera). Estos tomatitos los puedes utilizar tanto de guarnición para carnes y pescados, como de aperitivo.
Aceitunas aliñadas con naranja Ingredientes para 4 personas: 300 gr. de aceitunas 1 naranja la piel rallada de 1 limón 3 dientes de ajo 2 cucharadas de vinagre 7 cucharadas de aceite de oliva 2 ramitas de tomillo sal Elaboración: En un bol, mezcla el aceite y el vinagre, añade la piel rallada del limón, una pizca de sal y los dientes de ajo, pelados y cortados en 4 trozos.
Con la ayuda de un rallador, ralla la piel de la naranja, con cuidado de no rallar la parte blanca que es muy amarga, añade la piel a la mezcla anterior. Exprime la naranja y añade el zumo al bol. Mezcla bien todos los ingredientes, pon las aceitunas en un tarro de vidrio y añade la mezcla y las ramitas de tomillo, remuévelo bien para que se mezclen todos los sabores. Deja marinar las aceitunas cómo mínimo 4-5 días para que cojan todo el sabor. Para esta receta, puedes utilizar las aceitunas que te gusten más, negras, verdes o incluso una mezcla de las dos