Pueden las personas malas ser buenos escribanos públicos? Desde mi punto de vista particular no, por la sencilla razón que las malas personas muchas veces carecen de ética y de moral, que como hemos estudiado en nuestra materia y analizado en el presente trabajo es fundamental para desarrollar una buena vida profesional, muchas veces estas personas violan principios éticos fundamentales tanto contra los intervinientes así como en su vida personal misma y lo más triste dañan la profesión por el mal desempeño de la función que le ha sido encomendada actuando muchas veces con mala fe dañando los intereses de las personas.
Decálogo de notario El decálogo del notario nos responde muchas preguntas del porque las personas malas no pueden ser buenos escribanos públicos, esta profesión es una de las profesiones más nobles y respetadas por todos y todas, un buen escribano debe ser celoso del trabajo y la función que le ha sido encomendada, así también en el presente trabajo nos habla de la capacitación del escribano, esto está ligado con los decálogos, el notario debe estudiar con pasión para tener la capacidad de asesorar con lealtad a las partes intervinientes, actuado siempre con la verdad y dando forma legal a los actos jurídicos que se formalicen ciñéndose siempre a la ley, algo muy importante es actuar con prudencia, esto nos quiere decir que el notario debe de actuar con total cuidado en lo actuado para evitar ciertas circunstancias de riegos, ser discreto y guardar secreto profesional de todos los actos que ante él se formalicen.