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LA ALMUDAINA
Domingo, 15 de enero de 2006 / Diario de Mallorca
CASAS DE PALMA – Urbanismo cotidiano
Carlos Garrido
Homenaje a Josep Ferragut veces parece que lo monumental sólo se refiere a la ciudad antigua. Pero hay elementos de interés también en las partes más contemporáneas. Por ejemplo, Jaume III. Todo el mundo tiene la impresión de que esta moderna avenida está allí y ya está. Pero detrás de su realización hay una historia interesante. Y su propia configuración resulta casi una clase de historia del arte. En 1940 se ponía en marcha el Plan de Reforma Interior de Palma. Los objetivos eran dos: por un lado habilitar el espacio urbano a las nuevas necesidades del tráfico rodado, para el cual se había quedado obsoleta, y también dar trabajo a un gran contingente de soldados que permanecían desocupados. El concurso lo ganó el plan del arquitecto y urbanista Gabriel Alomar, ayudado por Josep Ferragut. Se trataba de una plaEl edificio está en la confluencia entre Jaume III y Bonaire. Fotos: Carlos Garrido nificación rupturista y ambiciosa. Establecer grandes vías de comunicación abriendo nuevos espacios en la trama antigua. La reforma se aprobó en 1947 y no comenzó a aplicarse hasta 1950. Entre otras cosas por la alarma que despertó la posibilidad de muchas expropiaciones forzosas, y también por la falta de financiación privada. Cambiado con la DEMO CAD-KAS Alomar cuenta enVERSION sus memoriasde que todo fue po-PDF-Editor (http://www.cadkas.com). sible gracias a Juan March, y que al final casi todo se resolvió por acuerdos pactados con los propietarios. Sin embargo, la gran reforma sólo se llevó a cabo en casos como el de Jaume III, una avenida abierta en lo que antes era una trama de calles estrechas, y el Olivar. Jaume III es así una especie de exposición de esa voluntad urbanística. Pero, al mismo tiempo, revela la peripecia arquitectónica que la reforma supuso. Si un paseante se coloca en la zona de números pares, verá una transición muy brusca. Del 2 al 6 se advierte el estilo de Gabriel Alomar. Elementos clásicos y edificios muy proporcionados y barrocos. El propio arquitecto reconoció que era un estilo “absurdo pero inevitable”. El aislamiento de la época hacía que no fuera posible emplear materiales nuevos como el La esquina resulta espectacular.
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➜ Dirección: Jaume III, 14. ➜ Interés: Obra del arquitecto Josep Ferragut. ➜ Uso actual: Viviendas.
portland, el hierro o el aluminio. “El arquitecto mallorquín se veía obligado a construir con materiales de las épocas preindustriales: piedra, cal y cemento natural”. Ello y el rechazo al “urbanismo cubista” hizo que la primera parte de Jaume III sea un remedo italianizante. El propio Alomar se lamentaba de ello. Pero conforme avanzan los números de Jaume III aparecen edificios ya mucho menos definidos, como los de los números 8, 10 y 12. Se pierde aquella primera voluntad de estilo. Llegamos entonces al bloque que motiva hoy nuestro interés. Mientras los anteriores responden a unas pautas bastante ambiguas, la esquina de Jaume III con Bonaire es una de las obras de Josep Ferragut (1912-1968). Un edificio destacable. Aquí demostró su maestría en dos aspectos fundamentales. En primer lugar al resolver la esquina, con un balcón volado muy espectacular. Y en segundo término al establecer un diálogo entre lo clásico y lo moderno, como ocurre con las balaustradas de hierro o la utilización de líneas de placas. Es muy necesario un homenaje a Josep Ferragut, que fue el introductor de esos nuevos materiales de la época en Mallorca. Un arquitecto avanzado, cuya obra sólo ha salido a la luz por la desafortunada decisión de derribar el edificio singular de Gesa, quizás su construcción más conocida.
CINE
Myriam Alvarez/dpa
Una historia para Orlando Bloom ltimamente parece que a las jóvenes estrellas de Hollywood les cuesta cada vez más mantenerse en la cima, ante los crecientes costes multimillonarios de las superproducciones y la dificultad de recuperar las ganancias en la taquilla. En la actualidad, pocos corren la suerte de Tom Cruise, Julia Roberts o Leonardo DiCaprio, quienes alcanzaron la fama, el estrellato y los salarios multimillonarios a una edad muy temprana y se han mantenido luego en ese nivel. Un ejemplo de esto es la carrera del británico Orlando Bloom, quien gracias a la trilogía de El Señor de los Anillos se convirtió de la noche al día en el héroe predilecto de las adolescentes y en una de las figuras más prometedoras del cine. A esto le siguió el éxito inesperado de la película Piratas del Caribe, en la que Bloom interpreta un papel más bien secundario junto a Johnny Depp. Sin embargo, dos costosas producciones posteriores no resultaron tener el impacto que se esperaba en la carrera del artista. La primera fue Troya, protagonizada por Brad Pitt, mientras que la segunda fue El reino de los cielos, dirigida por Ridley Scott. Más recientemente, su último proyecto, Elizabethtown, de Cameron Crowe, también resultó una desilusión. Pese a ello, el actor de 28 años afirmó a la prensa que el
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El actor británico Orlando Bloom. Foto: dpa/Hubert Boesl
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éxito en la taquilla de sus proyectos es secundario para él y que la experiencia que ganó bajo la dirección de cineastas como Scott o Crowe hizo valer la pena su trabajo en dichos proyectos, pese a no haber recaudado lo esperado. Nacido en Catenbury, Inglaterra, en 1977, Bloom sufrió dislexia durante su infancia, por lo que se sintió más atraído por el arte y la poesía en sus años escolares. A los 16 años se mudó a Londres y se unió al National Youth Theatre, donde recibió una beca para estudiar arte dramático. Poco después consiguió varios papeles pequeños en televisión y debutó en 1997 en una película sobre Oscar Wilde titulada Wilde. Su suerte cambió en 1998 cuando el cineasta Peter Jackson le vio actuar en una obra teatral y le propuso participar en El Señor de los Anillos. De inmediato, Bloom se convirtió en un ídolo de las adolescentes y en 2002 fue elegido por la revista Teen People como una de las 25 estrellas más sensuales menores de 25 años. Muchos estaban convencidos de que el actor se convertiría en el próximo Tom Cruise. Pero ahora surgen muchas voces en contra de esta idea. De momento, ahora Bloom se encuentra ocupado en las playas del Caribe filmando dos secuelas de Piratas... junto a Depp. Por este trabajo, recibirá once millones de dólares, nada mal para un actor de su edad.