La Caperucita Roja
Caperucita Roja vivía con su
mamá en un pueblo, cerca
del bosque. La llamaban así
porque llevaba una capa roja.
Un día, su mamá dijo:
-La abuelita está enferma, llévale
esta cesta de comida. Y
no hables con desconocidos.
Por el camino del bosque
se encontró con un lobo.
- ¿Dónde vas tan contenta, Caperucita?
Voy a cuidar a mi
abuelita—contestó.—Te propongo una
carrera—le dijo el astuto
lobo. El lobo fue por
un camino más corto y
llegó antes. Llamó a la
puerta: ¡toc, toc! - ¿Quién es?
Preguntó desde dentro la abuelita.
-Soy tu nietecita– dijo, imitando
la voz de Caperucita. Ella
se dio cuenta del engaño
y escapó. Cuando llegó Caperucita
el lobo estaba en la
cama con un camisón de
la abuela.—Abuelita, abuelita, ¡qué
Ojos más grandes tienes! - Son
Para verte mejor.—Abuelita, abuelita,
¡qué manos más grandes tienes!
- Son para acariciarte mejor!
.—Abuelita, abuelita, ¡qué dientes más
grandes tienes! -¡Son para comerte
mejoor!- gritó el lobo feroz
En ese instante, se abrió
la puerta: eran la abuelita
y unos leñadores. El lobo
Al verlos, escapó asustado. La
abuelita y la nieta se
abrazaron muy fuerte y se
dieron muchos besos. El peligro
pasó y todos lo celebraron.