BUENAS NOCHES María del Rosario López Torres (M. R. L. T.) Julio 2009
**/**/**** – “…Es una catástrofe la ciudad está completamente destruida, se esperan sobrevivientes…” ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------Es un buen día, todas las personas de la ciudad **** se despiertan temprano para ir a sus trabajos o hacer labores del hogar. Los niños se levantan para seguirle a la jornada como estudiantes. En una casa por las calles ********** y ***********, junto a un estacionamiento, un niño se levanta, se prepara para ir a la escuela. Rato después, el niño se va caminando rumbo a la escuela, ya que el lugar se encontraba cercas y no tenía motivo de tomar el autobús. Por el camino, como todos los días, pasa por la tienda de aparatos electrodomésticos de Jonás, un viejillo amable amigo de su papá. - ¡Buen día…! - le dice alegre Jonás cuando ve pasar al niño. Afuera de ahí, siempre los hombres se reúnen para ver el futbol. - Pero qué… ¡Jonás, tus aparatos no sirven arréglalos! – dice molesto ya que las televisiones del aparador no se ven, solo mala frecuencia. El niño no le toma importancia y sigue su camino… Otro de los lugares que le agrada pasar es por la carnicería de don Aurelio, pues siempre lo cuando tiene problemas el lo saca de líos. En eso un gato sale corriendo de la carnicería con una chuleta en el hocico, don Aurelio sale gritando y muy molesto del lugar. Más al rato llega a la escuela, saluda a unos cuantos amigos y luego se va a clases. Nada fuera de lo común, bueno así parecía; pues en la esquina del fondo entre las sombras un hombre de gabardina los observa. Por fin es hora de salir, los niños corren alegres. El niño va caminando derecho a su casa, las calles están solas. No, mentira, en la esquina del cruce de la calle, el hombre de gabardina no deja de observar al niño. Al hombre se le notaba en sus ojos serenidad y tristeza. Al llegar a su casa, el niño saluda a sus padres que están en la sala. Luego, sube a su habitación. El día ya mero acaba, Terminar la tarea y a dormir; es lo que se propone para despertar temprano y seguir con la rutina de siempre. Es hora de dormir, su mamá lo arropa con su cobija favorita, le da un beso en la frente mientras que su papá lo mira desde la puerta… pero antes de oír las buenas noches de sus padres el se queda dormido, no sabe cómo pero cae rendido.
Es un buen día, todas las personas de la ciudad prenden camino para llegar a sus trabajos o hacer algunas labores del hogar. Los niños se preparan para el duro estudio. En la casa, junto a un estacionamiento, el niño se prepara para ir a la escuela. Después, el niño se va caminando a la escuela. Por el camino, como el día anterior y los anteriores, pasa por la tienda de aparatos electrodomésticos del viejillo Jonás. - ¡Buen día…! - le dice alegre Jonás cuando ve pasar al niño. Hoy solo dos hombres están afuera de su tienda. - ¡Oye, Jonás, tus aparatos no sirven, arréglalos! – dice molesto ya que las televisiones del aparador siguen sin verse. El niño no le toma importancia y sigue su camino… Pasa por la carnicería de don Aurelio, en eso el gato sale corriendo de la carnicería con una chuleta en el hocico, don Aurelio sale de nuevo gritando y muy molesto del lugar. Sigue su camino, Al llegar a la escuela, saluda a sus amigos y luego se va a clases. Esto era extraño, pues no ve por ningún lado a su mejor amigo, él siempre llega temprano. En la salida, Pocos niños salen, ellos van gritando alegres. El niño va caminando lento a su casa, las calles están solas, inquietamente solas. Otra vez mentira, en la misma esquina del cruce de la calle, el hombre de gabardina no deja de observar al niño. El niño siente su mirada y en un acto de reflejo voltea a verlo; no hay nadie… Al llegar a su casa, el niño saluda a sus padres igual que el día anterior. Luego, sube a su habitación. El día se acaba, Hace su tarea con calma. Después de eso se va a dormir, su mamá lo arropa, le da un beso en la frente mientras que su papá lo mira desde la puerta… pero antes de oír las buenas noches de sus padres, otra vez el se queda dormido. Es un buen día, todas las personas de la ciudad se despiertan temprano para ir a sus trabajos, bla, bla, bla… El niño se despierta temprano, tratándose de explicar por qué se duerme antes de oir las buenas noches de sus padres. Rato después, se va caminando hacía a la escuela. Por el camino, como todos los días, sin falta alguna, pasa por la tienda de Jonás, el amigo de su papá. - ¡Buen día…! - le dice alegre Jonás cuando ve pasar al niño. El niño no saluda y pasa derecho, pero se detiene al oír al hombre que se encontraba afuera de la tienda. - Pero qué… ¡Jonás, tus aparatos no sirven arréglalos! – dice molesto pues las televisiones del aparador no se ven. El niño corre y sigue su camino… En la carnicería de don Aurelio, se detiene y se va caminando. En eso un gato sale corriendo de la carnicería con nada en el hocico, don Aurelio sale gritando y muy molesto del lugar. Es la misma escena de ayer, con excepción de la chuleta. Más al rato llega a la escuela, esta vez no saluda a sus amigos pues no han llegado. Se va a clases. Esta vez si era fuera de lo común, solo hay pocos alumnos. Es hora de salir, los pocos niños corren alegres.
El niño camina derecho a su casa, las calles están solas, como siempre. Esta vez si están solas y silenciosas. Al llegar a su casa, el niño ya no saluda a sus padres, ellos están en la sala. El día está por acabar. Abre su libreta para hacer su tarea, pero se da cuenta de que ya había hecho una tarea igual ayer. A la hora de dormir, su mamá lo arropa con su cobija favorita, le da un beso en la frente mientras que su papá lo mira desde la puerta… Esta vez quería escucharlos decir buenas noches, pero no puede, no sabe cómo... él se duerme. …………………………. El niño se levanta veloz, y poco después se pone en marcha a la escuela. Por el camino, en la tienda de Jonás… No está Jonás, El hombre afuera de ahí está molesto por la mala frecuencia. El niño solo lo mira… En la carnicería de don Aurelio, el gato sale corriendo de la carnicería don Aurelio esta vez no sale. Al rato llega a la escuela, Ya no hay ningún niño a quien saludar. Al llegar a su aula, solo está la maestra escribiendo en el pizarrón, va y se sienta extrañado. El niño sale temprano. El niño va corriendo derecho a su casa, las calles no están solas. El hombre de gabardina se encuentra en el ultimo cruce de calles que está por la casa del niño, los ojos del hombre se reflejaba lo mismo, serenidad y tristeza. - No queda tiempo… El niño al oírlo se sentía aterrado, corre hacía su casa pasándole por un lado al hombre. Llega a su casa, sus padres no están en la sala. El hombre entra a la casa, el niño lo ve y asustado sube corriendo a su habitación. Está anocheciendo, el hombre sube a la habitación sin ningún apuro. Ve el lugar, el niño se encuentra en la cama bajo su cobija acostado, temblando de miedo. - No tengas miedo, no te aré nada malo – se acerca al niño, le quita la cobija y entonces… -----------------------------------------------------------------------------------------------------------------Helicópteros de rescate, reporteros y ambulancias, hay por todas partes. La ciudad está toda destruida. A lo lejos, por el estacionamiento todo destruido, en una casa por las calles ************* y *************, se oía… - ¡Un sobreviviente, se ha encontrado un sobreviviente! – dice en voz alta un rescatista que ayudaba a sacar al sobreviviente. Paramédicos llegan rápido y lo atienden de volada… Es el niño, Había perdido un brazo y parte de su pierna, sus huesos están todos quebrados. Con una lágrima en sus ojos comienza a recordar lo que pasó ese día… ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------- Es hora de dormir – Dice una voz de mujer muy alegre.
Es su mamá, lo arropa con su cobija favorita, le da su beso de buenas noches en la frente mientras que su papá lo mira con cariño desde la puerta de la habitación… pero… antes de oír las buenas noches de sus padres… Oye un silencio estremecedor, y luego una luz intensa cubre por completo su habitación; después de eso, no siente nada… --------------------------------------------------------------------------------------------------------------Lloraba el niño, ahora sabía el por qué no pudo escuchar las voces de sus padres dándole las Buenas noches. - Haremos lo que podamos, pero no nos dejes – le dice alterado el paramédico que lo atendía. Por los escombros de un lugar sombrío llega el hombre de la gabardina con su triste mirar. El niño lo ve llorando. - Lo lamento… - dice triste el hombre de la gabardina. El niño solo lloraba, el hombre se le acerca de poco a poco. Los paramédicos lo atendían sin resultado alguno. La paz llega al niño como en un beso de lo que le daba su mamá. - Es hora de dormir – dice calmado el hombre. -----------------------------------------------------------------------------------------------------------------Está en su habitación. - Es hora de dormir – Dice la dulce voz de su mamá. Lo arropa con su cobija favorita, con suavidad, le da su beso en la frente mientras que su papá lo mira desde la puerta de la habitación… pero… Esta vez… por última vez… los escucha decir… - Buenas noches… -----------------------------------------------------------------------------------------------------------------
**/**/**** – “…No ha terminado, Esto es solo el principio… que el cielo nos ampare…” *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** ************************** FUERA DE SERVICIO ******************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** *************************************************************************** ***************************************************************************