SUMARIO – Febrero 09
“De la provocación a la vocación” (II). Jesús Sanz Montes, ofm. Obispo de Huesca y de Jaca. Presidente de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada de la Conferencia Episcopal Española……………………………………………………… 22 Santa Sede: "Jesús, después de hacer un ayuno durante cuarenta días y cuarenta noches, al fin sintió hambre" (Mt 4, 2). Mensaje del Papa Benedicto XVI para la Cuaresma 2009 ………………………………………………… 23 Benedicto XVI a los consagrados: Homilía en la XIII Jornada de la Vida Consagrada….. 26 Iglesia: "Señor has puesto en mi corazón más alegría que si abundara en trigo y en vino" (Salmo 4). Palabras de Alejandro Fernández Barrajón, OM, Presidente de CONFER, con motivo de la Jornada de la Vida Consagrada…………28 Circular de Cuaresma del P. General…………………..30 Secretaría General…………………………………………………… 32 Delegación de Brasil………………………………………………….. 35 Historial………………………………………………………………… 38 Aniversarios……………………………………………………………. 39 AÑO XCIV (Tomo XLIX) – nº 598 – Barcelona, Febrero de 2009 * Escultura de San José Manyanet, obra de Francesc Carulla (Capilla de Ntra. Sra. del Pilar de la catedral de Barcelona).
DE LA PROVOCACIÓN A LA VOCACIÓN (II) Jesús Sanz Montes, ofm. Obispo de Huesca y de Jaca. Presidente de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada (de la Conferencia Episcopal Española). Es algo gratamente sobrecogedor esa lluvia de adhesiones por parte de jóvenes en medio de la sequía vocacional que nos levante interrogantes y oraciones. Tanto Benedicto XVI ahora, como antes Juan Pablo II, al invitarles a una vida cristiana sin tapujos que fingen ni préstamos de otros lares culturales o religiosos, conectaban con los chicos y chicas que sin esfuerzo se reconocían en esas palabras, en esa presencia. Y se despertaba en ellos la divina aventura de decir Sí a quien empezaban a conocer y a amar: Jesucristo.¿Cuántas historias vocacionales han tenido en esta Jornadas Mundiales de la Juventud un precioso y preciso punto de partida!. Nos enseñó a leer literatura que hablaba de la vida y sus requiebros, y lo mismo hacía con la buenas películas que acertaba a presentarnos, incluso hacía alguna incursión en las músicas en boga reparando nuestros ritmos distraídos al subrayarnos con interés la letra de alguna canción. Nuestro cura no era un coleguilla, ni él lo pretendía. Era sin más un cura de cuerpo entero y a tiempo pleno, para hablarnos de Dios y repartirnos su gracia, mientras acompañaba nuestra vida y sabía crecer con nuestra edad. Tanto es así que un grupo de nosotros nos sentimos conmovidos por nuestro cura, y nos sentimos movidos a preguntarnos si así nos quería Dios. No todos descubrimos ahí nuestro camino, pero los que sí lo reconocimos como tal, pudimos decir después: Dios da la vocación, pero nos la sugiere a través de alguien que ya la vive con gozo, con serenidad, con pasión. Dios es quien da la vocación, sí, pero deja en las manos de los que ya ha llamado el ser para los otros una provocación. Sin duda que nuestro mundo, tantas veces opulento e insolidario, que se empeña en construir su particular torre de babel prescindiendo calculadamente de Dios, tiene una sed infinita de esta renovación sincera y real. Como ha apuntado Benedicto XVI “en muchas de nuestras sociedades, junto a la prosperidad material, se está expandiendo el desierto espiritual: un vacío interior, un miedo in definible, un larvado sentido de desesperación”. Para esta aventura divina, el Papa quiere contar una vez más con esa juventud que no es el incierto futuro de la humanidad y de la Iglesia, sino un precioso presente. Frente a las cultura de de la muerte en las que se cifra un mendaz y engañoso progreso, aparece “el don grande y liberador que el Evangelio lleva consigo: revela nuestra dignidad de hombres y mujeres creados a imagen y semejanza de Dios. Revela la llamada sublime de la humanidad, que es la de encontrar la propia plenitud en el amor. Revela la verdad sobre el hombre, la verdad sobre la vida”.
SANTA SEDE Benedicto XVI a los consagrados: Homilía en la XIII Jornada de la Vida Consagrada Publicamos la homilía que pronunció Benedicto XVI el 2 de febrero, fiesta de la Presentación del Señor, XIII Jornada de la Vida Consagrada, tras la misa celebrada poco antes en la Basílica Vaticana. Señor cardenal;
venerados hermanos en el episcopado y en el sacerdocio;
queridos hermanos y hermanas: Con gran alegría me encuentro con vosotros al final del santo sacrificio de la misa, en esta fiesta litúrgica que, ya desde hace trece años, reúne a religiosos y religiosas para la Jornada de la vida consagrada. Saludo cordialmente al cardenal Franc Rodé, expresando de modo especial mi agradecimiento a él y a sus colaboradores de la Congregación para los institutos de vida consagrada y las sociedades de vida apostólica por el servicio que prestan a la Santa Sede y a lo que llamaría el "cosmos" de la vida consagrada. Saludo con afecto a los superiores y las superioras generales aquí presentes y a todos vosotros, hermanos y hermanas, que, siguiendo el modelo de la Virgen María, lleváis en la Iglesia y en el mundo la luz de Cristo con vuestro testimonio de personas consagradas. En este Año paulino hago mías las palabras del Apóstol: "Doy gracias a mi Dios cada vez que me acuerdo de vosotros, rogando siempre y en todas mis oraciones con alegría por todos vosotros a causa de la colaboración que habéis prestado al Evangelio, desde el primer día hasta hoy" (Flp 1, 3-5). Con este saludo, dirigido a la comunidad cristiana de Filipos, san Pablo expresa el recuerdo afectuoso que conserva de quienes viven personalmente el Evangelio y se comprometen a transmitirlo, uniendo el cuidado de la vida interior con el empeño de la misión apostólica. En la tradición de la Iglesia, san Pablo siempre ha sido reconocido como padre y maestro de quienes, llamados por el Señor, han hecho la opción de una entrega incondicional a él y a su Evangelio. Diversos institutos religiosos toman de san Pablo el nombre y también una inspiración carismática específica. Se puede decir que a todos los consagrados y las consagradas él repite una invitación clara y afectuosa: "Sed imitadores míos, como yo lo soy de Cristo" (1 Co 11, 1). En efecto, ¿qué es la vida consagrada sino una imitación radical de Jesús, un "seguimiento" total de él? (cf. Mt 19, 27-28). Pues bien, en todo ello san Pablo representa una mediación pedagógica segura: imitarlo siguiendo a Jesús, amadísimos hermanos, es el camino privilegiado para corresponder a fondo a vuestra vocación de especial consagración en la Iglesia. Más aún, de su misma voz podemos conocer un estilo de vida que expresa lo esencial de la vida consagrada inspirada en los consejos evangélicos de pobreza, castidad y obediencia. En la vida de pobreza él ve la garantía de un anuncio del Evangelio realizado con total gratuidad (cf. 1 Co 9, 1-23), mientras expresa, al mismo tiempo, la solidaridad concreta con los hermanos necesitados. Al respecto, todos conocemos la decisión de san Pablo de mantenerse con el trabajo de sus manos y su compromiso por la colecta en favor de los pobres de Jerusalén (cf. 1 Ts 2, 9; 2 Co 8-9). San Pablo es también un apóstol que, acogiendo la llamada de Dios a la castidad, entregó su corazón al Señor de manera indivisa, para poder servir con una libertad y una dedicación aún mayores a sus hermanos (cf. 1 Co 7, 7; 2 Co 11,
1-2). Además, en un mundo en el que se apreciaban poco los valores de la castidad cristiana (cf. 1 Co 6, 12-20), ofrece una referencia de conducta segura. Y, por lo que se refiere a la obediencia, baste notar que el cumplimiento de la voluntad de Dios y la "responsabilidad diaria: la preocupación por todas las Iglesias" (2 Co 11, 28) animaron, plasmaron y consumaron su existencia, convertida en sacrificio agradable a Dios. Todo esto lo lleva a proclamar, como escribe a los Filipenses: "Para mí la vida es Cristo, y la muerte, una ganancia" (Flp 1, 21). Otro aspecto fundamental de la vida consagrada de san Pablo es la misión. Él es todo de Jesús a fin de ser, como Jesús, de todos; más aún, a fin de ser Jesús para todos: "Me he hecho todo a todos para salvar a toda costa a algunos" (1 Co 9, 22). A él, tan estrechamente unido a la persona de Cristo, le reconocemos una profunda capacidad de conjugar vida espiritual y actividad misionera; en él esas dos dimensiones van juntas. Así, podemos decir que pertenece a la legión de "místicos constructores", cuya existencia es a la vez contemplativa y activa, abierta a Dios y a los hermanos, para prestar un servicio eficaz al Evangelio. En esta tensión místico-apostólica me complace destacarla valentía del Apóstol ante el sacrificio al afrontar pruebas terribles, hasta el martirio (cf. 2 Co 11, 16-33), la confianza inquebrantable basada en las palabras de su Señor: "Te basta mi gracia, pues mi fuerza se muestra perfecta en la flaqueza" (2 Co 12, 9). Así, su experiencia espiritual se nos muestra como una traducción viva del misterio pascual, que investigó intensamente y anunció como forma de vida del cristiano. San Pablo vive para, con y en Cristo. "Estoy crucificado con Cristo, y no vivo yo, sino que es Cristo quien vive en mí" (Ga 2, 19-20); y también: "Para mí la vida es Cristo, y la muerte, una ganancia" (Flp 1, 21). Esto explica por qué no se cansa de exhortar a hacer que la palabra de Cristo habite en nosotros con toda su riqueza (cf. Col 3, 16). Esto hace pensar en la invitación que os dirigió recientemente la instrucción sobre "El servicio de la autoridad y la obediencia" a buscar "cada mañana el contacto vivo y constante con la Palabra que se proclama ese día, meditándola y guardándola en el corazón como un tesoro, convirtiéndola en la raíz de todos sus actos y el primer criterio de sus elecciones" (n. 7: L'Osservatore Romano, edición en lengua española, 13 de junio de 2008, p. 10). Por tanto, espero que el Año paulino alimente aún más en vosotros el propósito de acoger el testimonio de san Pablo, meditando cada día la Palabra de Dios con la práctica fiel de la lectio divina, orando "con salmos, himnos y cánticos inspirados, con gratitud" (Col 3, 16). Que él os ayude, además, a realizar vuestro servicio apostólico en la Iglesia y con la Iglesia con un espíritu de comunión sin reservas, comunicando a los demás vuestros carismas (cf. 1 Co 14, 12) y testimoniando en primer lugar el carisma mayor, que es la caridad (cf. 1 Co 13). Queridos hermanos y hermanas, la liturgia de hoy nos exhorta a mirar a la Virgen María, la "consagrada" por excelencia. San Pablo habla de ella con una fórmula concisa pero eficaz, que pondera su grandeza y su misión: es la "mujer", de la que, en la plenitud de los tiempos, nació el Hijo de Dios (cf. Ga 4, 4). María es la madre que hoy en el templo presenta el Hijo al Padre, dando continuación, también con este acto, al "sí" pronunciado en el momento de la Anunciación. Que ella sea también la madre que nos acompañe y sostenga a nosotros, hijos de Dios e hijos suyos, en el cumplimiento de un servicio generoso a Dios y a los hermanos. Con este fin, invoco su celestial intercesión, mientras de corazón os imparto la bendición apostólica a todos vosotros y a vuestras respectivas familias religiosas.
IGLESIA
"Señor has puesto en mi corazón más alegría que si abundara en trigo y en vino" (Salmo 4) Palabras de Alejandro Fernández Barrajón, OM, Presidente de CONFER, con motivo de la Jornada de la Vida Consegrada
Como cada año, el día 2 de febrero, la Iglesia nos recuerda el valor de la vida consagrada y nos invita a reflexionar sobre el regalo que supone para la vida del mundo la realidad interpelante de hombres y mujeres consagrados. En la historia ha surgido una multitud inacabable de testigos que han narrado en primera persona su experiencia de Dios y se han entregado sin límite -hasta el martirio- a la causa de la justicia. Dios y la justicia de la mano en la confesión de la fe. En el año 2008 veinte nuevos mártires muchos de ellos consagrados- han depositado su vida y su sangre en los surcos de nuestra vieja tierra para que pueda surgir esa nueva cosecha que anhelamos. Este año el lema escogido quiere subrayar esta convicción siempre joven que acompaña los mejores momentos de la vida consagrada: "Si tu vida es Cristo, manifiéstalo". El lema de CONFER para el curso que ha terminado iba en la misma dirección: Queremos ser testigos de Dios aquí y ahora. En un mundo de tantas palabras y la mayoría tan desgastadas y decepcionantes, necesitamos decir en primera persona que Dios nos ha amado mucho y que esta seguridad nos arrastra hacia el amor incondicional a todos los hombres. Estamos convencidos de que una nueva tierra tiene que labrarse para que nazca llena de colorido la justicia y haya pan abundante para todos. Al margen de las sombras grises que nos acechan por el camino: falta de respeto a la vida, autobuses ateos, violencia y sufrimiento, guerras fratricidas, la vida consagrada reafirma su deseo de vivir con fidelidad a su Señor y de estar muy cerca de esta humanidad sufriente y desorientada para animarla en la esperanza. Nuestras comunidades de consagradas y consagrados encienden, en este día 2 de febrero, su candil de aceite, para elevar a las alturas su oración como incienso al caer la tarde. Rezad con nosotros. Ahí estamos todos. Los cientos y cientos de consagrados y consagradas arrugados por el peso de la vida, enfermos y ancianos, que mantienen encendida su lámpara porque saben que su consagración se mantiene viva en su corazón. Los cientos y cientos de consagrados y consagradas que cada mañana abren su ventana a la vida, después de haber tratado de amistad con Dios, para mirar y escuchar los gemidos de esta dolorida humanidad. Los cientos y cientos de consagrados y consagradas jóvenes con la sangre caliente que han decidido apostar por lo eterno, por lo sustancial, por el amor que nunca se acaba; que han declarado la batalla a lo superficial, a lo pasajero, a lo aparente para escalar alguna cima y contemplar el horizonte iluminado con la cara radiante. Su vida es Cristo y lo manifiestan porque no pueden callarlo. La vida consagrada se sabe invitada a atravesar las sendas martiriales del sufrimiento porque el amor le quema por dentro y no puede detener sus pies. Ahí está como ejemplo vivo la hermana Presentación López Vivar, que aparece en el cartel de la Jornada, como
icono real de esta encarnación a la que la vida consagrada está convocada. Ella, desde una inmensa sencillez, ha regalado su servicio a los más pobres en la misión del Congo y ha asumido el sufrimiento martirial de su vocación consagrada y misionera. Ha perdido sus piernas y ha ganado para nosotros un océano de coherencia que roza la santidad. Estamos en deuda con ella; el mundo entero está en deuda con ella. Cuando avanzan las sombras de la tarde porque el sol declina, la vida consagrada se arrodilla en la penumbra del rincón y canta agradecida: ¿Cómo te pagaré, oh Señor, todo el bien que me has hecho? Un agradecimiento asombrado llena nuestra boca de risas y nuestra garganta de cantares porque el Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres. En estos tiempos recios, de crisis y cambios impresionantes que nos están tocando vivir, no nos sentimos perseguidos, ni marginados; nos sentimos convocados a colaborar con todos los hombres y mujeres a construir el Reino de Dios que avanza entre nosotros y quiere llegar a todos, a todos. No queremos sentirnos víctimas sino testigos. No buscamos grandezas ni números sino entrega y gozo en el Señor Jesús para acompañar a los más pequeños y olvidados. No queremos sentirnos una casta religiosa especial sino unos hermanos pequeños y pobres que han puesto su grandeza en la entrega por amor. No buscamos privilegios ni rentas sino arrimar el hombro desde nuestras capacidades para que la dignidad del ser humano se eleve hasta las cumbres de la filiación divina. Podéis contar con nosotros para celebrar lo humano y bendecir lo divino. Dios es nuestra mayor alegría, la mejor manera que tenemos de disfrutar de la vida y de sentirnos hombres y mujeres en plenitud. Nunca iremos contra nadie y nos tendréis siempre a vuestro lado allí donde estéis. Sabemos que no podemos solos pero contamos con la ayuda de Dios y con vuestra ayuda si nos tenéis como hermanos. Porque nuestra vida es Cristo y así lo queremos manifestar.
CIRCULAR DEL P. GENERAL “Completo en mi carne lo que le falta a la pasión de Cristo en favor de su cuerpo que es la Iglesia” (Col 1-2) A la Pascua de Cristo le falta que sea también Pascua nuestra: que nos configuremos a Él en su camino pascual con todas las consecuencias de una “metanoia” personal. Apreciados Hermanos: El Santo Padre en su mensaje de Cuaresma para este año, nos invita de una manera especial durante este tiempo de reflexión y purificación, a hacer experiencia del poder de Dios mediante las prácticas penitenciales a las que la tradición bíblica cristiana confiere un gran valor, para poder celebrar mejor la Pascua. Este año se detiene a meditar sobre el valor y el sentido del ayuno. Comenta que el verdadero ayuno, como dice el Maestro, consiste más bien en cumplir la voluntad del Padre celestial. Si en nuestros días, parece que la práctica del ayuno ha perdido un poco su valor espiritual y ha adquirido más bien, en una cultura marcada por la búsqueda del bienestar material, el valor de una medida terapéutica para el cuidado del propio cuerpo, estando claro que es bueno para el bien físico, para los creyentes es, en primer lugar, una terapia para curar todo lo que les impide conformarse a la voluntad de Dios, esto es: a ayudarnos a mortificar nuestro egoísmo y nuestro ego, y a abrir el corazón al amor de Dios y del prójimo, primer y sumo mandamiento de la nueva ley y compendio de todo el evangelio. El Papa invita a cada familia y a cada comunidad cristiana a valorar la Cuaresma para alejar todo lo que distrae el espíritu y para santificar lo que alimenta el alma y la abre al amor. En la Pascua, Dios nos quiere comunicar su vida con mayor plenitud, por eso somos invitados durante esta preparación, a una mayor oración, a una escucha más atenta a su palabra, a recordar nuestro bautismo y a celebrar también nuestra reconciliación con Él. Se nos dice en la Instrucción "El servicio de la autoridad y la obediencia” para los Institutos de Vida Consagrada, que nuestra vida es un testimonio de la búsqueda de Dios, esto es: la búsqueda del rostro de Dios y del camino que a Él conduce. Esto supondrá sacrificio y renuncia, pues Dios se nos manifiesta para nosotros dentro de la comunidad de hermanos con papeles diversos pero con un mismo objetivo y una misma pasión, basados en el servicio a Dios a través del servicio a los hermanos y a la misión encomendada. En este servicio y entrega, nacidos de nuestra propia libertad y generosidad, encontramos el camino de liberación que se manifiesta en el gozo interior de servir a Dios. Ciertamente, nos recuerda esta Instrucción, que el deseo de autorealizarse que parte del influjo cultural en el que vivimos, puede entrar a veces en colisión con los proyectos comunitarios, y que la búsqueda del bienestar personal, sea éste espiritual o material, puede hacer dificultosa la entrega personal al servicio de la misión común. Estas visiones excesivamente subjetivas del carisma y del servicio apostólico pueden debilitar la colaboración, el trabajo y la comunión fraterna. Es importante pues preguntarse, sobre todo en este tiempo tan especial de reflexión espiritual como el de Jesús en el desierto: ¿Qué busca tu corazón? ¿Por qué cosas te afanas? ¿Te estás buscando a ti mismo, o buscas al Señor tu Dios? ¿Sigues tus
propios deseos o el deseo del Señor que ha hecho tu corazón y lo quiere realizar como Él quiere y conoce? ¿Qué
testimonio das de tu vida consagrada? ¿Persigues cosas que pasan o buscas a Aquel que no pasa? ¿A quién estás buscando? La obediencia a Dios es camino de crecimiento porque permite acoger un proyecto o una voluntad distinta de la propia. Esta obediencia exige reconocerse como hijos y disfrutar siéndolo, porque sólo un hijo puede entregarse libremente en las manos del Padre, igual que Jesús, que se abandonó completamente a la voluntad y deseos de su Padre “haciéndose obediente hasta la muerte y una muerte de cruz” Flp 2,8 En la vida consagrada, cada uno debe buscar con sinceridad la voluntad del Padre, porque de otra forma perdería sentido este género de vida. Y es de gran importancia que esta búsqueda se haga en unión con los hermanos; esto es lo que une y hace familia unida a Cristo. El que se pone a la escucha de lo que le dicen los demás para su propio bien, de las orientaciones de las Constituciones profesadas, de la Palabra de Dios meditada con asiduidad y personalizada en su quehacer diario y de la propia conciencia que nos hace reflexionar y autoevaluar, éste estará en camino de encontrar la verdadera voluntad de Dios. Ojalá que estas reflexiones nos ayuden en este tiempo santo para que podamos gozar espiritualmente y con intensidad interior de la Palabra que nos invita a dar nuevamente y a renovar el SÍ que ofrecimos generosamente el día de nuestra profesión. Éste es el camino a la santidad a la que estamos llamados y a la que el Capítulo en su primera prioridad nos invita a profundizar. Preguntémonos: ¿De qué me he de convertir? La Pascua está cerca. ¡Santa Cuaresma!
Vuestro hermano en JMJ,
P. Lluís Picazo, S.F. Superior General
Barcelona, 25 de febrero de 2009 Miércoles de Ceniza
SECRETARIA GENERAL – Febrero 09 * “La Pinya” – Colegio P. Manyanet de Reus En el número de diciembre del Boletín Informativo de la APASAFA se recogen, entre otras noticias relacionadas con la actividades del colegio, un reconocimiento al P. Joaquim Alqueza, con entrega de la Insignia de oro y brillantes de la Banda y Músico honorífico, por la labor realizada al frente de los músicos de la Banda y Cobla del colegio. También hay una amplia relación del Encuentro de Pastoralitas celebrado en Molins de Rei así como de las actividades de pastoral, catequesis, Manyanet solidario y FEAC-Escuela y Familia acción compartida que se realizan en el ámbito de la escuela. * “Vivencias”-Revista del seminario P. Manyanet de Medellín, septiembrediciembre 08 En el artículo “En camino hacia la profesión”, el hermano novicio Carlos Alfonso Garzón López, escribe: “La emoción que se siente y se vive en este tiempo es muy especial, además de variada, pues se conjuga la alegría, la expectativa y el miedo, ya que cada una de ellas nos hace tomar matices, en nuestra forma de ver las cosas: la alegría de la petición, la expectativa por la respuesta, el miedo por no saber qué nos depara el futuro y nuevamente la alegría por realizar la profesión. Pero encontramos algo que nos motiva, el llamado de Dios así expresado en la fórmula de profesión: “Oh Dios de misericordia, que me has llamado a mí…”, que nos llama a vivir una vida consagrada, con sus luchas, sus alegrías y dando lo mejor de nosotros mismos, que por eso estamos dispuestos a seguir su modelo de vida, utilizando la ayuda de los votos de castidad, pobreza y obediencia. Lo más emocionante de este paso es empezar esta nueva etapa, agradecidos por lo aprendido, confiados en la voluntad de Dios y enamorados de la Congregación y de la Sagrada Familia, eso es, lo que creo yo, más importante en este camino que llevamos (…) Finalmente y para terminar como concluye la fórmula de profesión: “Que me asistan Jesús, María y José” y, no solo a mi, sino también a todos ustedes”. * Full dominical-Diòcesi d´Urgell, n. 52 – “La familia, comunidad educadora”, Mn. Joan Antoni Mateo, delegado diocesano para la pastoral de la Familia y la Vida “La celebración de la fiesta de la Sagrada Familia se sitúa este año a las puertas del Encuentro Mundial de las Familias en México, que se celebrará a comienzos de 2009. La temática que centrará esta importante reunió versa sobre la dimensión educadora de la familia: la familia, transmisora de valores humanos y cristianos. Un tema bien actual y urgente. Aquello que no se aprende en la familia, difícilmente se adquiere fuera de ella. Un gran educador de los tiempos modernos, Luigi Giusani, decía que las cosas más importantes y dignas de ser aprendidas en la vida, difícilmente pueden ser enseñadas. Son realidades que han de ser transmitidas por la vivencia y el testimonio habitual de las mismas, y esto es lo que ha de ocurrir en la familia: la transmisión de los valores fundamentales, la introducción de la persona en una vida vivida desde el sentido. San José Manyanet, apóstol y profeta de la familia, hijo ilustre de nuestro obispado, de la ciudad de Tremp, contemplando el ejemplo de la Sagrada Familia, captó admirablemente esta dimensión de la familia en el designio creador y salvador de Dios. En una de sus obras afirmaba: “La Casa de la Sagrada Familia de Nazaret, es la
Casa Santa por excelencia, donde se aprende a servir y a amar a Dios en espíritu y a ser útiles a nuestros prójimos, a corregir nuestros defectos, a refrenar los malos deseos y a obrar con pureza de intención”. Manyanet era profundamente realista. ¿Dónde aprenderán, si no es en la familia, nuestros niños y jóvenes a amar a Dios y al prójimo?. ¿Quién les enseñará respeto y disciplina, espíritu de sacrificio, amor verdadero, en definitiva, si no es la comunidad familiar? ¿Quién les trasmitirá las virtudes humanas imprescindibles para una vida plenamente vivida? ¿Quién les dará el testimonio de una vida de fe plena e iluminadora? ¿Cómo podrían crecer en la vida de la fe los niños si sus padres no les acompañaran?. En unos momentos históricos agitados en que muchos proyectos pretenden suplantar o pasar por alto la misión educadora de la familia es más urgente que nunca que los padres y madres cristianas se pongan ha hacer sus deberes con toda diligencia y responsabilidad. Lo que está en juego es inmenso. En el ejemplo de la Sagrada Familia de Nazaret encontrarán luz e inspiración y en la intercesión de Jesús, María y José obtendrán fuerza para cumplir su importante misión”. * “Prayers and Devotions to the Holy Family, Jesus, Mary and Joseph”, Prayers and life, n. 1, A Nazareth in Each Home Se trata de un librito de 54 páginas, hermosamente editado, en el que se alternan oraciones, textos devocionales, fotografías… con la finalidad de ayudar a las familias que reciben en su casa la Visita Mensual domiciliaria a vivir la fe en el hogar. La Consagración de la familia, renovación de las promesas matrimoniales, el Rosario de la Sagrada Familia contemplando los misterios gozosos, la Novena a la Sagrada Familia Jesús, María y José, la oración de Laudes y Vísperas… todo al servicio de la familia cristiana desde la convicción profunda de que “No hay espiritualidad sin oración…”. El P. Julio González, responsable y animador de la Asociación de la Sagrada Familia, escribe en la presentación que “el propósito de estas oraciones es ofrecer un tiempo de contemplación de la vida de Jesús, María y José en Nazaret”. Tras subrayar el amor sin límites de Jesús para todos, especialmente los más necesitados, recuerda que el Señor empezó en Nazaret, junto a María y José, su aprendizaje de la oración y del amor descubriendo que el amor se realiza en la capacidad de perdonar, olvidar y saber pedir perdón. La mejor manera de aprender a amar como Dios ama a cada uno de nosotros es vivir esta experiencia de mutuo amor en el hogar. Termina la reflexión con la “esperanza que cada una de las personas atraídas por la espiritualidad de la Sagrada Familia de Nazaret pueda vivir plenamente la vida sin temor y con amor”. * Brotes-Boletín Trimestral Informativo del colegio P. Manyanet de Alcobendas, año 26, número 97, diciembre 2008 Elena López Sánchez, alumna de 2º de Bachillerato, recuerda la experiencia del Encuentro de pastoralistas en Molins de Rei: “Este fin de semana ha estado lleno de experiencias y sensaciones, de momentos de risas, de oración, de reflexión, de aprender etc. (…) Si tuviera que quedarme con una palabra del viaje sería compartir. Hemos compartido comida, anécdotas, tiempo, ideas, inquietudes, risas… Creo que la riqueza de este encuentro se ha dado sobre todo por formar comunidad. Una comunidad que tiene algo en común: la educación. Todos los allí presentes, de alguna forma u otra nos dedicamos a ella, y la consideramos fundamental para la formación de una persona. Compartimos el mismo fin, el d educar a través de unos valores que consideramos que permiten alcanzar la felicidad. Ha sido una experiencia muy positiva el que nos hayamos podido juntar un grupo de personas que trabajamos en ámbitos diversos del
centro (profesores, monitores, padres o madres de alumnos del centro, sacerdotes etc) pues sólo de algo diferente se pueden aprender cosas nuevas”. * Proyecto Escuela-Familia. Reflexiones para crecer en familia, nº 6, colección Lazos, Colegio P. Manyanet, Medellín, 2008, 232 páginas El P. Antonio Pérez Cuadrado, en la Presentación del volumen sexto del Proyecto Escuela Famita del Colegio P. Manyanet de Medellín, escribe: “Es el fruto de muchas reuniones en las que se ha dado una gran disposición por parte de directivas, profesores, padres de familia y alumnos. Ello nos ha permitido, como dice el título de esta publicación, reflexionar para crecer en familia. Luego, lógicamente, se han necesitado muchas horas para recoger, ordenar y preparar debidamente todo el material extraído de dichas reuniones. Les ofrecemos, además, algunas pinceladas de san José Manyanet que, en definitiva, es nuestro inspirador, y la Iglesia lo ha querido llamar profeta de la familia, por su compromiso y entrega, inspirado por el Espíritu Santo, para anunciar el mensaje de Dios acerca de lo que Él espera de la Iglesia doméstica. Por eso, dedicó toda su vida al servicio de la familia y se apoyó en la familia de Nazaret, que fue para él inspiración, modelo e intercesora de toda su obra. Su ideal era y es “hacer de cada hogar un Nazaret”, o lo que es lo mismo, en cada familia, los padres sean con San José, las madres como la Virgen María, y os hijos como Jesús. Él era consciente de esta utopía, como también lo es el hecho de que Jesús nos pida que nos amemos los unos a los otros como Él nos ha amado, pero los ideales son para tender hacia ellos, conscientes de que no llegaremos a alcanzarlos plenamente, pero también de que así siempre tendremos una dirección hacia la que apuntar nuestro caminar. (…) Un libro no basta para superar todas las dificultades, pero puede servir de herramienta a todas las personas de buena voluntad que deseen unirse a este ideal, para consagrar a su famita a este modelo nazareno o, al menos, aspirar a que crezca en valores humanos y cristianos; y, además, pueden hacer partícipes a otras familias y comunidades para que trabajen en este mismo ideal”. El libro dedica quince páginas al P. Fundador, desarrollando diferentes aspectos de su vida y apostolado y trata, en continuidad con las publicaciones anteriores, del tema 68 (“La importancia de la familia”) al tema 101 (“El sida”), tratados de forma pedagógica y favorecedora del diálogo y los compromisos educativos prácticos. Termina con una serie de Conclusiones generales y fuentes biográficas interesantes para la ampliación de los temas.
DELEGACIÓN DE BRASIL ¡Alabada sea la Sagrada Familia! Mis queridos hermanos en Jesús, María y José: es con gran gozo me dirijo a todos al iniciar este servicio que la Congregación me encomienda. Conozco mis limitaciones, pero confío profundamente en la gracia de Dios. Cuento con la colaboración de todos para que fraternalmente unidos trabajemos para el bien de nuestra amada Congregación. Agradezco la confianza depositada en mi y confío en vuestras oraciones y la intercesión de la Sagrada Familia y de nuestro Santo Padre Fundador. Fallecimiento del P. Marquinho Los primeros días del año nos traían la triste noticia del fallecimiento del P. Marcos Aurélio, nuestro querido P. Marquinho, en su ciudad natal de Taiobeiras-MG., tras una larga y sufrida enfermedad, rodeado de sus familiares. El Padre, sintiéndose un poco más animado, fue a pasar las vacaciones de Navidad con sus padres, pero, estando allí, le sobrevino un empeoramiento de la salud y el día 11 de enero partió hacia en Nazaret del cielo. Para el entierro, el P. Evton fue representándonos a todos y acompañó, en esta hora de dolor, a su familia. Presidió la Misa corpore presente y acompañó hasta la sepultura al amigo y compañero de tantas horas y hermano de congregación. Yo, junto con el diácono Edimilson, participamos en la Misa del séptimo día en Taiobeiras. Es el primer Hijo de la Sagrada Familia que como simiente de esperanza es depositado en la tierra brasileña para fecundar como fuerza de resurrección nuestra Delegación. Esta es la fe que nos anima y fortalece. Aniversario de los Primeros Votos del Padre Fundador. Hoy, fiesta de la Presentación del Señor, somos invitados a revivir aquella mañana fría en la capilla del colegio San José de Tremp, donde nuestro Padre Fundador, junto con sus primeros compañeros, inauguraban la vida consagrada en nuestro instituto. Podemos decir que celebramos la Navidad de nuestra Congregación y en este clima festivo renovamos nuestra consagración al Señor como Hijos de la Sagrada Familia; con ánimo agradecido vemos el amor que el Padre tiene por nosotros al llamarnos a esta su familia y enriquecernos con el título de Hijos, ya que lo somos, por la herencia espiritual de nuestro Fundador que nos engendró en la familia de Jesús, María y José para hacernos testigos y apóstoles de este misterio de salvación. Al iniciar un nuevo año y un nuevo trienio, la celebración de hoy nos anima a renovar nuestro sentido de pertenencia y, sobretodo nuestra llamada a la santidad. Esta es nuestra vocación primera como cristianos y nuestro desafío diario. Es verdad que nuestro trabajo pastoral es muy importante y también es parte fundamental de nuestra misión como consagrados, pero no olvidamos que Jesús nos escogió, en primer lugar, para estar con Él, para SER, y, en segundo lugar, como fruto de la experiencia vital del encuentro con el Maestro, ser enviados, para HACER. No podremos ser misioneros si antes no nos volvemos discípulos. Propongo para todos un esfuerzo en la vivencia comunitaria, en la oración común, la vida de familia, el compartir experiencias...... en esta línea tendremos nuestro encuentro anual de Formación Permanente la semana de la
octava de Pascua en Juiz de Fora. Envío para vosotros un resumen de las orientaciones del último Capítulo General para la elaboración del Proyecto de la Delegación para que sea trabajado en las comunidades y que dará la base para la elaboración de nuestro Proyecto para este nuevo Trienio. Compromiso por las vocaciones. El pasado día 18 de enero en Medellín nuestros hermanos Helder Patrício de Ávila y Douglas Vinicius Mequelin dieron inicio el año del Noviciado. También acompañábamos a nuestros hermanos Paulo Henrique Borges, André Elias Pires, Jefferson Falcão Cruz, Hugo Milciades Ruiz Riberos, Warley Silva Prado, Diego Ferreira Moreno, Renato Ferreira da Silva y Vagner Roberto Simino en la renovación de sus votos. También damos la bienvenida a los nuevos aspirantes que iniciarán su formación en el seminario Sagrada Familia junto con el P. Edvanio. En los próximos días los hermanos Paulo e Vagner viajarán a Roma para continuar sus estudios teológicos en el Seminario Internacional recientemente reabierto de nuevo. Es motivo de alegría ver crecer a la Delegación brasileña, pero también motivo de preocupación y empeño de todos en al obra de las vocaciones. Continúa siendo una prioridad para nosotros, y nuestro compromiso empieza con el testimonio alegre de nuestra vida consagrada al Señor. Cada uno debe ser la mejor propaganda vocacional del Instituto. A nuestra disponibilidad para asistir a las casas de formación con retiros, formaciones o simple presencia es más importante de lo que podemos imaginar. Por eso me gustaría agradecer a todos el esfuerzo que cada uno está realizando, en primer lugar a los formadores y promotores vocacionales, que se entregan de cuerpo y alma a esta difícil tarea. No nos desanimemos cuando la perseverancia no sea la que esperamos; no nos cansemos de sembrar, de llamar, de animar, Dios continúa convocando jóvenes de nuestras comunidades para vivir en el hogar de Nazaret. Oremos por la perseverancia de todos. Cambio del P. Manuel Escribano. El próximo domingo día 8 de febrero haremos la despedida del P. Manuel Escribano que, tras más de 25 años de servicio en la Delegación, la mayoría de ellos como Delegado, respondiendo a la llamada de la obediencia, ha sido transferido a la viceprovincia italiana, para formar parte de la comunidad de Palmoli. Me gustaría, en nombre de toda la Delegación, manifestar nuestro agradecimiento por todos estos años en los cuales puso las bases de la Congregación en Brasil siendo, junto al Siervo de Dios, P. Magín Morera y al P. Gabriele Perazzetti, pionero en esta tierra de Santa Cruz, dejando el nombre de la Congregación muy alto ante obispos y el pueblo de Dios, como en las aulas de la PUC, sus retiros y cursos preparados con tanta atención, contribuyendo a la Pastoral Familiar y a la promoción de la devoción a la Sagrada Familia. Tenemos que agradecer su preocupación por la vocaciones y por la formación, por la expansión del Instituto en las varias fundaciones de Paraná y Minas. Por todo ello y, sobre todo, por su persona, su disponibilidad, apertura y cariño queremos agradecer al buen Dios y pedir que le acompañe en su nueva misión. Ordenación Presbiteral del P. Edimilson. Nos alegramos por la próxima ordenación sacerdotal del P. Edimilson Luiz Ribeiro el día 14 de febrero en su ciudad natal de Caxambu, celebrando su primera
misa en la parroquia Nuestra Señora de los Remedios el día 15. Unamos nuestras oraciones por el P. Edimilson para que sea un mensajero del amor de Dios manifestado en Nazaret a través de su ministerio sacerdotal. El nuevo sacerdote programará con cada comunidad sus primeras misas. Jubileo de Oro del P. Ettore di Risio. El próximo 28 de febrero celebraremos las Bodas de oro sacerdotales del P. Ettore en la parroquia Santa Maria Goretti de Curitiba, en la misa de las 19h. Es una fiesta de alabanza al Señor y de agradecimiento a nuestro querido P. Ettore por esos 50 años de servicio al Altar y de entrega eucarística por el bien de nuestra amada Congregación, en estos últimos años como Delegado de Brasil. Como gesto concreto de agradecimiento les pediría que el mayor número de posible de padres estuviese presente en este día para la concelebración. Comprendo las dificultades y los varios compromisos que todos tenemos, pero si hacemos un esfuerzo tengo la certeza que podremos estar junto al P. Ettore para el agradecimiento a Dios. Alegria por los Formandos. El pasado día 30 de enero tuvimos la alegría de acompañar a nuestro hermanos P. Marcos Flavio, P. Josenildo y P. Edvanio en su Licenciatura en el curso de Teología de la PUC, y al hermano Vagner en el Curso de Filosofía da UEL en Londrina. Esta conquista nos honra a todos por eso queremos felicitarles y alegrarnos con nuestros hermanos. Que el esfuerzo realizado por ellos nos sirve de incentivo para todos y nos ayude a crecer. Agenda para el año 2009: - 13 a 17 de abril: Encuentro de Formación Permanente en Juiz de Fora-MG (mas adelante informaremos del lugar y de otros detalles para el encuentro). Durante este encuentro tendremos también la reunión de Superiores y Ecónomos, así como de Pastoral. - 05 a 09 de octubre: Ejercicios Espirituales. Maringá/PR Centro de Espiritualidade Rainha da Paz, rua Distrito Federal, 1089. Fone: (44) 3029-3343.
Pe. José Luís Nieto, SF Delegado do Brasil Curitiba, 02 de febrero de 2009
HISTORIAL –FEBRERO 09 Día 1.- BARCELONA: Llega el P. General procedente de Colombia. Día 2.- BARCELONA: Junto a otros religiosos de la comunidad y de la archidiócesis de Barcelona, el P. General participa en la Eucaristía, presidida por el Sr. Cardenal de la Barcelona, de la Jornada de la Vida Consagrada. Aniversario de la primera profesión del P. Fundador en la capilla del colegio San José de Tremp y aceptación de los votos de los primeros religiosos (02/02/1870). Día 6.- BARCELONA: En la sede de la Curia, el P. General preside la cuadragésimo tercera sesión del Consejo General. Día 11.- VILAFRANCA: Los PP. General y Ecónomo General visitan la comunidad del colegio San Ramón. Día 12.- BARCELONA: El P. Pedro Mas preside la reunión de los responsables de pastoral de los centros de la viceprovincia española Día 14.- BEGUES: En el Centro de Espiritualidad se reúnen, para la Jornada de Formación, los superiores de las comunidades de la viceprovincia española. CAXAMBU: El P. José Luís Nieto, Delegado de Brasil, asiste en la parroquia Ntra. Sra. de los Remedios de Caxambú (Minas Gerais-Brasil), a la ordenación sacerdotal del P. Edimilson L. Ribeiro, por la imposición de manos de Monseñor Diamantino Prata de Carvalho. Día 18.- BARCELONA: El P. Josep M. Taulats preside la Primera Jornada de trabajo de Equipos Directivos de los colegios de España. Por la tarde reunión de los Directores de los centros de la viceprovincia española Día 21.- VILAFRANCA: Jornada de Formación Permanente de los religiosos de la viceprovincia española en el colegio San Ramón. Día 25.- BARCELONA: El P. General preside la Eucaristía del Miércoles de Ceniza en la capilla Sagrada Familia. Día 27.- BARCELONA: En la sede de la Curia, el P. General preside la cuadragésimo cuarta sesión del Consejo General. Día 28.- TREMP: Los PP. General y Subdirector General visitan la comunidad de Tremp. Celebran la Eucaristía en la parroquia-basílica de Nuestra Sra. de Valldeflors. CURITIBA. El P. José Luís Nieto, Delegado de Brasil, participa en la celebración de los 50 años de sacerdocio del P. Ettore di Risio en la parroquia Santa María Goretti.
ANIVERSARIOS DEL MES DE MARZO 2008 * CUMPLEAÑOS.- Día 2: H. Jordi Belenguer (1972); día 3: PP. Luis Figuera (1939) y Evton Bezerra (1965); día 4: P. Wilson A. Marciano (1968); día 6: P. Sebastian Lee (1969); día 7: P. Emili Berbel (1970); día 8: P. Ronald Carrillo (1949); día 12: P. José L. Rea (1966); día 17: P. José Alex. Díaz (1980); día 21: P. José L. López (1946); día 22: P. Sergio Cimignoli (1946); día 23: PP. Serafín Bosch (1937) y Domenico Zuchegna (1953); P. Jobany Restrepo (1979); día 26: P. Joan Pallarols (1935); día 30: P. Josep Roca (1938). * ONOMÁSTICAS.- Día 1: PP. Ángel López y Muñoz; día 4: P. Casimiro Roca; día 19: PP. Josep M. Blanch, Blanquet, Batlle, Roca, Sentís, García G., Yuba, De Diego, Taulats, Sanuy, López S., Llort, Nieto, Rea, Juanpere, J.A. Hidalgo, J. Dias. * PRIMERAS PROFESIONES.- Día 3: Franklin Efraín Becerra, Luís Eduardo Albarracín; día 4: P. Elías Pérez (1990); día 8: PP. Evton Bezerra y Marco A. Freitas (1992); día 10: P. Wilson Marciano (1991); día 15: P. Hernán Díaz (1987). * ORDENACIONES SACERDOTALES.- Día 1: P. Javier Aragonés (1958), PP. Lázaro Cuesta, Pedro Mas, Julián Novella (1969); día 2: PP. Ángel Muñoz (1968); día 4: P. José Mª Blanch (1951); día 5: PP. Vicente Santágueda, Justo García, Juan Castro (1961); día 9: PP. Crispín Funes, José Mª Sentís (1963) y P. Hernando Cortés (1991); día 11: P. Gabriele Perazzetti (1967); día 12: P. Josep M. Blanquet (1960); día 14: P. Antonio González (1970); día 17: P. Daniel A. Báez Brizueña (2006); día 18: P. Hernán Díaz (1995); día 19: P. Faustino Sánchez (1964); día 23: P. Juan Sierra (1940); día 27: P. José Yuba (1971); * DIFUNTOS.- Día 1: Fidel Fons Noguer (1893-1938), sacerdote; día 4: Ramón Altimiras Vila (1871-1944) y Gumersindo Aguilar Ferrer (1888-1985), sacerdotes; día 5: Ramón Ravés Preyxems (1913-1932), coadjutor; José Llauradó Martí (1908-1954), sacerdote; día 13: Saturnino Mas Riu (1896-1958), sacerdote; día 14: José Estrada Mascaró (1881-1908), sacerdote; día 16: Jaime Bartra Urpí (1894-1914), aspirante; día 22: Juan Doménech Juncosa (1892-1977), sacerdote; día 27: Ramón Jordá Guilera (1905-1979), coadjutor; día 29: Buenaventura Mullol Baulíes (1853-1935), sacerdote; día 30: Francisco Mascaró Lavad (18731939), sacerdote. NB. Si observa algún error u omisión, se agradecerá lo comunique a la Secretaría General.