Como quien espera cada aniversario, lo ansié Y te pedí en él presente, te pedí a primera hora Y a modo de gula hasta la última. No me importaría si llegaras con las manos vacías Se agradece su presencia. Es cierto… sin ella deberé festejar cumpleaños ajenos. Serán esenciales los regalos pues yo careceré de toda gracia Sumándole el resentimiento de jamás haber recibido rosas Calas, pensamientos ni verbenas; Las tarjetas se equivocan y los floristas no cuentan con flores de mi agrado. y mi agrado jamás me regaló flores. Talvez por eso las odie o las espere. Acomodaría el mantel, quitaría el polvo de los muebles, iría por un nuevo vestido; Vestido que cubrirá cada marca Que descubrirá cada falta, cada superficie virgen y cada santa puerta… A tu goce. Ahora bien y sin embargo el invierno me encuentra más arrepentida Sin mantel, sin cena, sin muebles…cómo en el suelo sobras en sueños diáfanos Desvestida y sin propósito de hacerlo, sin tener con que Más marcas, más faltas; Mas faltas, mas virgen, mas valles y espejismos y mas…ventanas Porque tu goce vive en la vereda del frente y el Mio es una utopia. Ya no agradezco esta noche tu presencia, la exijo. Siguen sin importar tus manos vacías…por costumbre y porque ahora me conforma cualquier ensayo, como cualquier ademán tuyo. Y una vez más no hace falta acomodar el mantel, Es inútil negar que como de tus manos. Solo y si el invierno me encuentra con mas años, con años nuevos y un nuevo rechazo . Y volveré a pedirlo, y volveré a exigirte y volveré a esquivarlo. Porque cada noche muero más de frío, entre calores febriles e inciensos de páginas viejas. Entre reyes de porcelana y dioses de cartón. Entre prostitutas de almíbar y esclavos de sal. Yo sigo estertando todo un invierno y todo el sueño de recibir… de primavera de tu risa Congelarme… Pero con el calor del casi beso y el arrebol de tu casi descuido y tu entera perdición. Lurian
30 de mayo de 2009
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