Sara Carreira
4/12/2008
Una empresa de Internet contacta con Oriente para que los niños reciban una misiva personalizada antes del día 6. Un sobre gigante recién llegado de Oriente en el buzón, el nombre del niño en el destinatario y dentro... toda la ilusión del mundo en unas pocas frases: «Hemos recibido tu carta, Fulanito», «empezaremos a repartir regalos por tu ciudad, así que acuéstate pronto el día 5», «recuerda que tienes que compartir los juguetes que te dejemos con Mengano y Citranita»... Eso es lo que dice una carta mágica que pueden recibir los niños españoles si sus padres la encargan en una dirección de Internet (www.cartadelosreyesmagos.es). La versión 24 de diciembre tiene otra web: www.cartadepapanoel.es Allí los padres pueden encargar la carta de sus majestades a los hijos. Ponen nombres, buenas acciones y hasta una frase completa que hará de la misiva algo irrepetible. Los pedidos a Santa Claus tienen que realizarse antes del 10 de diciembre, y los de los tres magos, como muy tarde, el día 20. Correos no garantiza el servicio si el encargo se hace pasada esa fecha. La idea, que parecía que ya estaba inventada, es nueva y la firma para toda Europa un coruñés, Jorge Baspino Varela. Según él, las cosas no les pueden ir mejor: «Es el primer año -explica-, pero tenemos muchos pedido de toda España, aunque muchísimos de Italia. Es increíble». En cambio, Alemania y Francia son menos participativas, «y eso que tenemos la suerte de que nuestras páginas aparecen enseguida en Google al teclear ''carta a papá noel'' o a los magos». Porque Jorge descubrió que su idea no era ninguna rareza: «Cuando empecé con esto, en mi propia familia había quien realizaba estas cartas, algo mucho más sencillo, pero con el mismo espíritu». También Correos envía una contestación a los niños que remiten correctamente a Oriente su carta, pero lógicamente es estándar, igual para todos. Baspino Varela recalca precisamente este detalle: «Nuestras cartas son únicas, y de hecho al final se incorpora una frase realizada por quien la encarga, de una forma absolutamente personal». La carta prototipo termina con un «dile a tu padre que no trabaje tanto los fines de semana». Para rizar el rizo, en la web también se pueden encargar certificados de buena conducta que garantizan los juguetes más deseados. El precio de este invento es asequible: 8,95 euros y uno más. Este último es voluntario pero muy interesante, ya que va a parar a una fundación que atiende a niños hospitalizados, CurArte (que recibe por cada carta otro euro de la empresa de Baspino, llamada GrupoSolnet).