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LOS MUSEOS DE VETERINARIA SON YA UNA REALIDAD CULTURAL Y VIRTUAL

Vista parcial de una de las salas del Museo de Veterinaria Militar.

a profesión veterinaria está en transformación y creo que en expansión, como así se constata por el número de Facultades, la afluencia de alumnos y la clara y progresiva incorporación de la mujer a los estudios y su posterior incorporación al mundo laboral. De “metamorfosis” podemos considerar lo que sucede en los estudios de esta carrera si lo comparamos con el panorama de hace cien años e incluso menos. Estamos ante un claro cambio generacional, de ahí el interés progresivo de los estudiantes por conocer los orígenes y evolución de la carrera en la que empeñan sus esfuerzos juveniles. El ejercicio de la medicina animal y por consecuente la Ciencia y Profesión veterinarias tiene una vertiente cultural y humanista. Enmarcar el ejercicio de la medicina animal en el contexto de la actividad los museos es una de las recientes preocupaciones que tiene la Asociación matritense de historia de la veterinaria (AMHV), y también las diferentes asociaciones de historia que conforman la “Asociación Española de Historia de la Veterinaria”. Recuperar, difundir y acertar en la presentación de los materiales ante la sociedad es uno de los retos que empieza a asumir la veterinaria del presente siglo XXI, cuyos antecedentes hemos de hallarlos a lo largo del siglo XX. Es en este siglo cuando se producen en el seno de la Veterinaria notables cambios estructurales, organi-

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zativos y académicos que van a tener importantes consecuencias en la consolidación de las ciencias veterinarias. Los logros obtenidos han sido enormes si lo comparamos con los conseguidos en el siglo precedente. En lo académico, profesional y social la veterinaria, (aunque con más propiedad habría que hablar de las ciencias veterinarias), ha conseguido cotas jamás soñadas por la veterinaria decimonónica. Incluso podemos decir que como rama aplicada de las ciencias biológicas está en fase de expansión. Cuando una profesión logra celebrar centenarios, (y estamos en el siglo de los Centenarios de las organizaciones colegiales) quiere decir que está viva, que rueda y fluye con normalidad. En estas celebraciones hemos de ver, más que la fecha del acontecimiento, el significado de una situación y el porqué de su celebración, lo que nos debe mover a realizar un examen de conciencia. El tiempo transcurrido desde que se iniciaron de una forma regular y normalizada los estudios de veterinaria en España y el imparable camino hacia la especialización es una circunstancia que nos tiene que hacer pensar y repensar, meditar y actuar. Asumir nuestro pasado y proyectarlo hacia el futuro es un deber de gratitud y sobre todo de justicia histórica para quienes nos han precedido. Creemos y así lo venimos manifestando desde hace unos años, que la existencia y consolidación de unos

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Equipo de sulfuración modelo Clayton, sobre ruedas, para desparasitaciones externas de équidos (1921).

museos de las ciencias veterinarias contribuirían a proyectar esta parcela del saber, no sólo dentro de la corriente del pensamiento científico español, sino, y esto es lo más importante, a darla a conocer a la sociedad. Ya ha pasado tiempo más que suficiente para que se pueda hablar que en la profesión veterinaria existe un patrimonio que hay que preservar para las generaciones venideras; y digo esto porque mi asistencia al XXI Congreso de AMVAC me ha dejado sorprendido, por las cotas de nivel científico alcanzado y sobre todo por la perfecta organización conseguida. Numerosísimos han sido los asuntos estudiados, todos ellos desde la perspectiva de la medicina del animal de compañía y de los la compleja tecnología de los medios instrumentales de diagnóstico. Pero también tengo que decir que gracias a la sensibilidad de la Junta Directiva y Comité Organizador del Congreso, por primera vez la “Asociación Madrileña de Historia de la Veterinaria” ha tenido su lugar y espacio en un Congreso tan importante para celebrar sus “III Encuentros de la veterinaria matritense”. La exposición de material técnico, quirúrgico, farmacológico, de laboratorio, bibliográfico y otros ya alcanza cotas de notable perfección, y ello porque mis colegas que se dedican a curar, sanar y aliviar los padecimientos de nuestras mascotas (y por extensión a prestar un servicio a nuestros semejantes), han adquirido una notable preparación académica. Pero al lado de la técnica, nuestra Asociación de historia quiere contribuir a mostrar a los congresistas la parte humanista, cultural, artística y patrimonial que tiene nuestra profesión. Mostrar nuestro patrimonio es hablar de lugares especiales a los que llamamos museos y no debemos tener ningún temor a denominar con la palabra museo a un lugar modesto que cumple con esta función. Ya ha llegado la hora de que la profesión veterinaria española se dote de uno o varios museos, que de forma permanente exponga el devenir de la ciencia y profesión. Nos gustaría poder decir que la enseñanza universitaria se debería cimentar sobre tres pilares que ofrecen una sólida base de sustentación, nos referimos a los que

proporciona la cátedra, la biblioteca y el museo, considerando a este último como un eficacísimo instrumento de aprendizaje, difusión y comunicación; en definitiva, una preciosa herramienta para ser utilizada por los educadores como ya apuntamos en otro artículo nuestro publicado en la revista del Colegio madrileño. Los museos deben salir de sus recintos e incorporarlos a la actividad profesional. Cada vez que exista un acontecimiento científico allí deberíamos ofrecer para deleite de todos los asistentes nuestro acervo histórico.

MUSEOS DE VETERINARIA ESPAÑOLES ¿Pero de verdad existen museos de veterinaria en España? Pues la respuesta es afirmativa. Más de 50 museos veterinarios existen en el mundo, y de ellos dos en nuestro país, con posibilidad real de verse incrementados. Estos museos los hallamos en Madrid y Murcia:

En Madrid: El Museo de Veterinaria Militar, verdadero museo de las Ciencias Veterinarias de España nace en 1945 para conmemorar el 150 Aniversario de la creación del Cuerpo de Veterinaria Militar. Este museo se constituyó sobre la base de tres colecciones como son: los instrumentos quirúrgicos veterinarios fabricados en la antigua Fábrica de Armas de Toledo; la colección de maquetas veterinarias, escala 1/18 y el botamen de farmacia veterinaria, compuesto por más de cien botes y albarelos que muestran las recetas magistrales de uso veterinario. El museo ha participado en numerosas exposiciones temporales con motivo de conmemoraciones y centenarios de instituciones sanitarias y corporaciones oficiales. Durante el pasado año participó en la conmemoración del Centenario del Colegio madrileño con una exposición titulada “Cien años de vida colegial” y otra para conmemorar el sesquicentenario del nacimiento de Eusebio Molina Serrano, ilustre figura y Marzo-Abril 2004

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promotor de la moderna veterinaria. Su fondo se incrementa continuamente gracias a las donaciones de numerosas personas, verdaderos bienhechores del mundo de la cultura. Quien desee visitar el museo lo puede hacer en la siguiente dirección: C/ Darío Gazapo, 3 28024. Madrid. Las visitas requieren ser concertadas. En Murcia: Museo Anatómico. Facultad de Veterinaria. Universidad de Murcia. Este museo posee una bellísima colección de piezas plastinadas, muy apreciadas por el mundo científico y cultural. Realiza periódicamente exposiciones temporales dentro y extramuros de la Universidad. La última exposición se realizó entre los meses de junio-octubre del año pasado en el Museo de la Universidad de Murcia, ubicado en la antigua Casona- Palacio del Cuartel de Artillería. La exposición denominada “Anatomía: Ciencia y Arte” tuvo un notable éxito por el número de visitantes.

CAMINANDO HACIA EL FUTURO Otras Universidades y Facultades de Veterinaria (cuyos fondos históricos son muy interesantes) están sentando las bases para agrupar y ordenar su patrimonio. Su objetivo es mostrar a la sociedad y a los visitantes e investigadores de otros países la evolución de la medicina animal hispana. Estoy convencido de que en los próximos años asistiremos al nacimiento de salas de recuerdos y museos en diferentes Instituciones de otras tantas comunidades autónomas, con ello contribuiremos a enriquecer el patrimonio veterinario español siendo una magnífica tarjeta de visita para quienes visiten esos Centros, como

Cestón de medicamentos, modelo italiano, para caballos gaseados (1914). “Cafanetto medicinali. Uso veterinario. Cura quadrupedi gassati. Exercito italiano” 56

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así sucede ya en los países de nuestro entorno. Las periódicas jornadas de puertas abiertas de las Universidades, la semana de la Ciencia (cada vez más consolidada) y la participación con exposiciones temporales en Convenciones, Congresos y Simposios, serán actividades que a no tardar mucho figurarán dentro los programas científicos y lúdicos de los veterinarios y de sus acompañantes. Y para no alargarme en exceso amigo lector de AMVAC, podemos concluir diciendo que existe un verdadero movimiento cultural para salvaguardar nuestro patrimonio y que la existencia en los planes de estudio de asignaturas como la “Historia de la Veterinaria”, contribuyen a garantizar el futuro de nuestro arte científico, noble y liberal.

CONSOLIDACIÓN DE LA HISTORIA VETERINARIA Para los amantes de las estadísticas les diré que nuestras asociaciones desde el año 1995 han organizado nueve Congresos nacionales de historia, un Congreso mundial y tres iberoamericanos. En el plano territorial son numerosas las reuniones y con respecto a la Asociación matritense les diré que se han organizado tres Encuentros de historia, se ha colaborado en dos exposiciones temporales y en dos Jornadas de historia de la veterinaria castrense, todas ellas con numerosa asistencia de historiadores, estudiosos, personas amantes de la cultura y, lo que es más importante, con la presencia de estudiantes. En próximos artículos me gustaría abrirles mucho más la puerta para mostrarles un mundo apasionante de nuestra profesión, me refiero al patrimonio y la museología veterinarias.

LOS MUSEOS EN INTERNET Para los navegantes amantes de las curiosidades les diremos que la AMHV dispone de página web alojada en la página del ICOVM (colvema.com/colegio/asociaciones.htm). Estamos muy agradecidos a la Junta de Gobierno del Colegio la sensibilidad que ha tenido al acoger en su seno a nuestra Asociación y además en el año de su Centenario. La página además tiene enlace con el Museo de Veterinaria Militar si tecleamos: (http://www.ejercito.mde.es/organizacion/index.html). Si deseamos visitar el Museo Anatómico de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Murcia lo tenemos muy fácil si “cliqueamos” http://www.um.es/~veterina/¥ Dr. Luis Moreno Fernández-Caparrós Veterinario Militar Diplomado en dirección y gestión de museos