Y Ahora Hacia Adelante

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CAPITULO # 01 LA SALVACIÓN DEL ALMA TEXTO BÍBLICO DEL CAMBIO: JUAN Capítulos 1, 2 y 3 Cuando una persona invita a Jesucristo a venir a su vida sucede algo maravilloso. Esta oración sencilla la hizo solo o quizás alguien le ayudó, pudo suceder en su propia casa, en una iglesia, o en cualquier otro sitio, lo importante es que un cambio glorioso se ha iniciado en su vida. Han sucedido tres cosas: 1- Cristo es ahora su Salvador. 2- Usted es ahora un hijo (a) de Dios. 3- Usted es ahora una persona lavada en la Sangre de Cristo y su nombre está escrito en el Llibro de la Vida. * Esto es lo que la Biblia llama Salvación. ¿De qué salva Dios al hombre? Hay tres razones por las cuales nadie puede ser salvo sin haber recibido a Cristo como Salvador y Señor: 1.- Todos somos pecadores. 2.- No podemos salvarnos a nosotros mismos. 3.- Solo Cristo puede salvarnos.

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En Romanos 3:23 la Biblia dice que, “Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios” y en Romanos 6:23 dice que “La paga del pecado es la muerte”. Esto nos incluye a todos; la consecuencia que produce el pecado, es la muerte espiritual y eterna. No podemos salvarnos por las obras que hagamos aunque sean buenas. La única forma es quitando el pecado de en medio. Leamos Juan 1: 29 “El siguiente día vió Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo”. El único que quitó el pecado fue Jesucristo, porque Él se hizo cargo del pecado y sufrió el castigo que merecíamos. Murió en la Cruz y nos hizo aceptos a Dios (Isaías 53:3-6), por medio de Cristo podemos ser adoptados como Hijos de Dios y nuestros pecados son perdonados. Jesucristo es el Único Salvador. Ahora que usted lo ha recibido, se ha convertido en un hijo de Dios. Él le trajo a una Nueva Vida, esa vida es espiritual y proviene de Dios. La Biblia lo llama el “ Nuevo Nacimiento” Juan 3:3 dice; “Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo no puede ver el reino de Dios”. Por el primer nacimiento, usted es hijo de sus padres terrenales, por ellos recibimos la vida natural, de ellos heredamos muchas de sus características de orden genético, pero en el segundo nacimiento (la Regeneración) usted se convierte en hijo de Dios por el Pacto de la Sangre de Cristo (1ª Juan 1.

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Efesios 1:5 dice: “...en amor habiéndonos predestinados para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad...”. Ahora tenemos dos naturalezas: 1.- La que heredamos de nuestros padres 2.- La naturaleza de la vida de Cristo, porque Él ya está viviendo en nosotros por el Espíritu Santo. Leamos Juan capítulo 16, versos 13 y 14. Esa nueva vida se inicia cuando recibimos a Cristo o sea, usted es un niñito espiritual, Jesús quiere que crezca y se convierta en un discípulo fuerte y fiel. La Biblia dice: “Desead como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación” 1ª Pedro 2:2 . Existen cuatro cosas indispensables para el crecimiento: 1.- Alimento: - El alimento espiritual es la Palabra de Dios. 2.- Respiración: - La respiración es una figura de la oración. 3.- Ejercicio: - El ejercicio espiritual es ayudar a otros, dar tiempo y energía a la obra de Dios y dar testimonio de lo que ha sucedido en su vida. 4.- Descanso: - El descanso espiritual es la adoración. A

continuación ampliaremos

estos

aspectos

para crecimiento

espiritual. Si sigue estos pasos llegará a ser un cristiano feliz y fructífero.

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CAPITULO # 02 LA BIBLIA 1ª Pedro 2:2 dice que debemos: “...desead, como niños recién nacidos,

la leche espiritual no adulterada, para que por ella

crezcáis para salvación”. Ahora que ha iniciado la Nueva Vida (1ª Juan 5:11-12) necesita alimento adecuado para que esa vida se desarrolle normalmente. El alimento espiritual lo encontrará en las Sagradas Escrituras. Jesús dijo: “Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna y ellas son las que dan testimonio de mi. (Juan 5:39). Cinco maneras para entender la Biblia: 1.- Escuche la Palabra de Dios. - Cuando oramos hablamos con Dios; cuando nos Congregamos, asistimos al Grupo Familiar, o recibimos un estudio individual y nos exponen la Palabra de Dios, Él nos habla. Es importantísimo que nos enseñen las Escrituras. La Biblia dice: Así que la fe es por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios” Romanos 10:17. Cuando esté escuchando un mensaje de la Palabra de Dios: - No se distraiga - Lleve siempre su Biblia

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- Busque los pasajes que el predicador cite - Tome notas para que pueda recordar

los puntos más

importantes. Jesús cuando era niño se sentó en medio de los doctores de la ley para escuchar la Palabra y hacer preguntas (Lucas 2:46) 2.- Lea la Palabra de Dios. Jesús dijo: “ Escudriñad las Escrituras porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mi. (Juan 5:39). El leer la Biblia con regularidad, debe convertirse en un hábito, en un estilo de vida. Es

una disciplina y como tal debe de practicarse

siempre. Se recomienda empezar leyendo el Nuevo Testamento, juntamente con los Libros de Salmos y Proverbios. Use una Biblia en que pueda subrayar los versículos que más le llamen la atención y aquellos que no comprenda, para preguntar a su líder o al Pastor. 3.- Estudie la Palabra de Dios. El estudio de las Sagradas Escrituras va más allá de simplemente leer. Es analizar más profundamente un : - Texto - Capítulo - Libro - Personaje - Tema, etc.

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El C.E.C.A.M.I. es el Centro de Capacitación Ministerial de la Congregación. Es un Instituto Bíblico donde preparamos a las personas nuevas para que le sirvan al Señor.

Estos Estudios

Teológicos son casi gratuitos y muy necesarios,

son el requisito

indispensable para que pueda ministrar a la gente en los Grupos Familiares o personalmente. No hay nada que le ayude más a crecer que cuando empieza a trabajar para el Señor (ayudar y aconsejar a otras personas). Pregunte todo lo que usted necesite saber acerca de la Visión y que es lo que se practica y está haciendo la Iglesia, a la cual usted está asistiendo ahora; puede consultarle al líder del grupo o al Pastor de la Zona donde usted se reúne o la los Pastores que ministran en la Congregación. Todos los asuntos los analizamos a través de su Líder inmediato del Grupo Familiar o de su Pastor Coordinador. Para que usted pueda recibir una transferencia de la vida de Dios, y pueda transmitir el gozo del Señor a otras personas, le invitamos a que lea los libros Doctrinales y de Discipulado que usamos en las reuniones de los Grupos Familiares, en los Seminarios y en el C.E.C.A.M.I. Cuando lea algún libro cristiano o reciba algún consejo, por bueno que parezca,

consúltelo con la Biblia (La Palabra de Dios). Le

recomendamos que su Biblia sea: Versión Reina Valera. Revisión del año 1960. 4.- Medite y Comprenda la Palabra de Dios. Para comprender un pasaje bíblico hágase las siguientes preguntas: ¿Qué dice este pasaje o versículo?

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¿Cuál es su tema central? ¿De que personajes habla? ¿Tiene promesas que puedo reclamar? ¿Hay advertencias que debo considerar? ¿Qué mandamientos establece que yo deba obedecer? ¿Qué bendiciones o ayudas establece o implica? ¿Qué es lo que este pasaje o versículo dice que usted no entiende? (Escriba el problema y encuentre la solución por su propio estudio o preguntando a otros cristianos, como sus Líderes y Pastores de su Zona). 5.- Memorice la Palabra de Dios. - Memorizar la Biblia nos capacita para ser fortalecidos y alimentados por Dios. (Leamos esta Palabra: Deuteronomio 6:5-9 / Proverbios 7:1-3 / Mateo 4:4. - Escriba versículos y léalos hasta memorizarlos. “En mi corazón he guardado tus dichos para no pecar contra ti”. (Salmos 119-11). NOTAS:

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CAPITULO # 03 LA ORACIÓN Orar es hablar con Dios. La Biblia es el alimento del cristiano, la oración es semejante a la respiración. Nos acercamos a Dios orando y Él nos responde, la Biblia dice que debemos orar sin cesar (1ª Tesalonicenses 5:17). 1.- ¿Cómo debemos Orar? - La Oración es dirigida al Padre en el nombre de Jesús “Todo lo que pidieres al Padre en mi nombre, lo haré para que el Padre sea glorificado en el Hijo” . Juan 14:13 - Se debe hacer con Fe (Hebreos 11:1 y 6 / Santiago 1:6). - Se debe tener comunión con el Espíritu Santo para que Él nos diriga a hacerla correctamente (Romanos 8:26-27). 2.- ¿Cómo desarrollar una Oración efectiva? Jesús enseñó a sus discípulos a orar (Mateo 6.5-8). Les dijo que oraran así: a.- Reconozca la grandeza del Padre Celestial (Mateo 6:8) - Debemos humillarnos en su presencia. b.- Santifique y Glorifique su nombre (Mateo 6:8 / Salmos 100) - Tome un tiempo para la Alabanza y la Acción de Gracias, si le es posible en forma privada.

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c.- Hay que reconocerlo como Rey y Señor - Por lo tanto hay que pedir que “Venga su reino sobre nosotros” (Mateo 6:10), al aceptar su Soberanía, le otorgamos el derecho de realizar su propósito en nuestras vidas, de acuerdo a su voluntad perfecta. d.- Cuando decimos “el pan nuestro de cada día dánoslo hoy” - Tenemos oportunidad en este tiempo de Oración, de poner ante Él todas nuestras peticiones. Escriba esas necesidades para que sean oraciones específicas (Mateo 6:11). e.- “Perdónanos nuestras ofensas” (Mateo 6:12). - Es esta parte de la Oración, debemos tomar un tiempo para limpiar nuestro corazón, pidiendo perdón por nuestras ofensas y perdonando a aquellos que nos han ofendido. Proverbios 4:23 dice: “Sobre toda guardada guarda tu corazón porque de él mana la vida” d.- “Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal” (Mateo 6:13) - En este tiempo, debemos atar, en el nombre de Jesús, toda fuerza del mal que se quiera levantar contra nosotros (Mateo 17:19). Esto se conoce también como guerra espiritual (Efesios 6:10-13).

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El período de Oración debe terminar como inicio, con Acción de Gracias, Alabanza y Adoración. “Porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria por los siglos de los siglos” (Mateo 6:13). El anterior es un modelo y una guía de Oración. En la medida que practiquemos

la

Oración,

aprenderemos

a

comunicarnos

adecuadamente con Dios. 3.- Dos clases de Oración a- La Oración íntima y personal: - Es la oración de Mateo 6:6. “Más tu cuando ores entra en tu aposento y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público”. b- La Oración Congregacional: - Es cuando dos o más personas se ponen de acuerdo para orar (Mateo 18:18-20). Esta oración la practicamos en los Grupos Familiares y en la Congregación, especialmente en los Ayunos y Vigilias (Hechos 1:14/Hechos 2:42/Hechos 4:24 y 31). NOTAS:

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CAPITULO # 04 EL AYUNO

1.- ¿Qué es Ayunar? - Abtenerse de consumir alimento por un tiempo para dedicarse sosegadamente a la oración y la meditación de la Palabra de Dios. Se debe de hacer lo más frecuentemente posible casi siempre se hace de un día entregándolo hasta la hora que Dios le dirija. Hay ocasiones en que el ayuno se hace de varios días conforme a la voluntad de Dios y a la dirección del Espíritu Santo. Desde el Antiguo Testamento se ha practicado ésta disciplina y Jesús en el Nuevo Testamento lo da por un hecho cuando dice; “...Pero vendrán días cuando el esposo le será quitado, y entonces ayunarán”: Mateo 9:15. El Ayuno en sí, no es un fin, sino un “medio”, para tener una relación más directa con Dios. Por eso debe de hacerse con una buena actitud, no por vanagloria para que otros vean que somos más espirituales que ellos, ni para buscar reconocimiento o virtud. Isaías 58:3-4 / Mateo 6:16-18. El ayuno no es ni un sacrificio ni una penitencia para borrar pecados ya que el precio de la salvación fue pagado por Cristo en la cruz. 1ª Pedro 1:18-20: dice: “Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros

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padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros...”. 2.- Beneficios del Ayuno: a.- Produce el quebrantamiento del hombre natural. - “Por eso pues ahora, dice Jehová, convertíos a mi con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. ¿Quién sabe si volverá y se arrepentirá y dejará bendición tras de él, esto es, ofrenda y libación para Jehová vuestro Dios? Joel 2:12-14. - “Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no los puede entender porque se han de discernir espiritualmente”. 1ª Corintios 2:14 Cuando usted recibió a Cristo se produjo un nuevo nacimiento en su vida. Una persona fue engendrada dentro de usted, este ser es espiritual:

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1ª Pedro 1:23 dice: “Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la Palabra de Dios que vive y permanece para siempre”.

Tenemos dos naturalezas: - La que recibimos de nuestros padres o la naturaleza carnal - La que hemos recibido de Cristo, la naturaleza espiritual. Leamos 2ª Corintios capítulo 5, verso 17. Estas dos naturalezas compiten entre si para tomar el control y dominio de nuestra vida. la voluntad del hombre está en medio de los dos y decide finalmente quien va a tener el señorío. Leamos Gálatas 5:16-17 “ Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis”. En Romanos 6:16 dice la Biblia; “¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Tenemos que fortalecer y alimentar al hombre espiritual. Una de las dietas básicas de este hombre es el ayuno. Cuando ayunamos le negamos al hombre carnal uno de sus mayores deleites “comer”, este hombre se debilita y da lugar a que se levante el hombre espiritual

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para vencer y predominar juntamente con el Espíritu Santo. Cuando se anda en el Espíritu se puede agradar a Dios. Romanos 8:7 “Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, si tampoco pueden”. La ley del pecado y de la muerte no tienen poder sobre nosotros: Leamos Romanos 8:2 “Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte”. Por lo tanto las obras de la carne no nos van a esclavizar: Gálatas 5:16-25. El Ayuno es indispensable para mantener despierto y dominando al hombre natural. Una persona que practica el ayuno manifiesta las siguientes cualidades: -

Tiene una visión más clara de su trabajo en la obra de Dios: Cuando Pedro recibió el mandato de predicarle a los gentiles tuvo una visión estando en ayuno (Hechos 10:1-4).

-

Se hace mas sensible a la presencia de Dios: El andar en el Espíritu nos hace conscientes de la realidad de la presencia de Dios; Apocalipsis 1:10 dice; Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mi una gran voz como de trompeta.

-

Recibe una completa liberación de ataduras y enfermedades. Isaías 58:6 dice ; ¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de

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opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo? Existen enfermedades y ataduras que solo con ayuno se quitan. -

Tiene más autoridad para echar fuera demonios, Jesús dijo cuando libertó a un muchacho endemoniado que el género de demonios que lo poseían solo se iban en ayuno: Leamos Marcos 9:14-29.

-

Se aclara el discernimiento espiritual. Pedro tenía discernimiento, y detectó que Simón el mago era un hombre falso, porque Pedro era un siervo de Dios que ayunaba: Leamos Hechos 8:18-23.

-

Se recibe fuerza para rechazar el pecado. Jesús fue tentado por el diablo, pudo vencer esta tentación porque se preparó de antemano en cuarenta días de ayuno: Mateo 4:2 dice; Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches tuvo hambre.

“Y Cristo en los días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas al que le podría librar de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente. Y aunque era Hijo, por lo que

padeció

aprendió

la

obediencia;

y

habiendo

sido

perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen; y fue declarado por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec”. Hebreos 5:7-10.

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b.- El ayuno detiene los juicios de Dios: Cuando Dios iba a destruir a Nínive, todo el pueblo entró en el ayuno y esto trajo el perdón y la misericordia de Dios a este pueblo (Jonás 3:4-10). Cuando Daniel entendió que el tiempo de castigo para Israel se había cumplido ayunó y pidió que le levantara el juicio de Dios (Daniel 9:1-3). c.- El ayuno destruye los planes del enemigo: Cuando Amán había tramado la destrucción de los judios, la reina Ester y todo el pueblo ayunaron y el designio del malvado Amán contra ellos fue desecho: Ester 9:24-25. d.- El ayuno aclara la mente y los corazones de los líderes de la Iglesia para preparar y enviar los ministerios: Cuando Pablo y Silas fueron comisionados para hacer la obra Apostólica, la Iglesia en Antioquia estaba en ayuno: Hechos 13:1-3 dice: “Había entonces en la Iglesia que estaba en Antioquia, profetas y maestros: Bernabé, Simón el que se llamaba Níger, Lucio de Cirene, Manaén el que se había criado junto con Herodes el tetrarca, y Saulo. Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado. Entonces, habiendo ayunado y orado, les impusieron las manos y los despidieron”. Nehemías para entender lo que debía hacer respecto a la ciudad de Jerusalén que estaba destruida se metió en el ayuno y recibió la dirección de Dios para restaurar: Nehemías 1:1-11. e.- El Ayuno es una fuente de salud: Se ha comprobado científicamente que el ayuno es una manera de mantener sano el cuerpo. Cuando se ayuna el mismo sistema

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comienza a consumir las toxinas que se acumulan e intoxican el organismo. Una persona que ayuna es una persona sana. 3.- Consejos que se deben seguir al Ayunar: a.- Cuando iniciamos el ejercicio del ayuno, se nos hace un poco difícil porque no estamos acostumbrados, pero en la medida que perseveramos en ésta practica se va convirtiendo en una necesidad y un estilo de vida. Así que tenga paciencia y persevere. b.- No lo haga por vanagloria. Jesús dijo en Mateo 6:16-18; “Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. c.- Tome mucho agua. Es saludable en el ayuno (sobre todo para sus riñones). d.- Ore todo lo que pueda. e.- Lea bastante las Sagradas Escrituras y medite en ellas. f.- Cuando entregue el ayuno, hágalo con una comida suave, mayormente cuando es de varios días.

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CAPITULO # 05 LA IMPORTANCIA DE CONGREGARSE La Congregación es el lugar que Dios ha asignado al cristiano, para que reciba todo lo que se necesita para su crecimiento en su nueva vida en Cristo (Salmos 133 / Hebreos 10:25). 1.- ¿Qué es la Iglesia? En la Biblia la palabra Iglesia se usa para referirse a todos los creyentes en forma universal, y también al grupo de cristianos de una zona o región en particular. La Iglesia es el cuerpo de Cristo, compuesto por cada persona que ha recibido al Señor como su Salvador personal y se mantiene fiel a él. Leamos Juan capítulo 1 versos 11 y 12. En el Antiguo Testamento era considerado como pueblo de Dios, únicamente a los Israelitas; pero en el Nuevo Testamento, todas las personas, no importa de que nacionalidad o raza procedan pueden formar parte de la Iglesia,

después del

Arrepentimiento y Conversión. El misterio de la conformación de la Iglesia ha sido revelado por el Espíritu Santo a sus Apóstoles y a sus Profetas (Efesios 3:5-6). 2.- ¿Por qué es necesario Congregarse? a.- Para ser capacitados por los Ministerios dados a la Iglesia del Señor. - Dentro de la congregación Dios ha colocado a sus siervos para ministrarnos el conocimiento para permanecer en el cuerpo de

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Cristo y a través de ellos somos formados para hacer la obra de Dios (Efesios 4:11-14). Una persona que no se Congrega no puede crecer y llegar a la estatura de Cristo (Hebreos 10:25). b.- Para mantener la unidad del cuerpo de Cristo - La Iglesia no es un solo creyente, sino un conjunto de cristianos que necesitan crecer en Conocimiento y en Obras (Efesios 2:19-22). Cuando el cuerpo de Cristo está unido, Dios envía una bendición especial (Salmos 133 / Hechos 2:1-2). “Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡hay del solo! Que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; más ¿Cómo se calentará uno solo?. Si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto” (Eclesiastés 4:9-12). La Biblia dice en Efesios 4:3 que debemos ser solícitos en guardar la unidad del Espíritu. Todos los miembros del cuerpo son importantes y no pueden operar separados. Leamos 1ª Corintios 12:12 al 31 Cuando hablamos de guardar la Unidad del Espíritu, es importante considerar que la gente que se congrega en la Iglesia no son personas perfectas. Dios está tratando de desarrollar y perfeccionar su carácter en ellos, para hacerlos semejante a Cristo, es lo mismo que esta realizando con usted. Hay personas que son fáciles de amar por su forma dulce de ser, mientras que hay otras que no nos

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parecen tan accesibles. No los juzgue, recuerde que sin duda hay en nosotros cosas que no le parecen agradables a otros. El Don más preciado que hemos recibido de Dios es el amor Romanos 5:5 dice; “Y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”. Ese amor le ayudará a ser considerado con los demás (Gálatas 6:1). Tenemos que aprender a perdonar (Marcos 11:25-26) y a soportarnos los unos a los otros (Colosenses 3:12-15 / Efesios 5:31-32). Debemos poner nuestros ojos en Cristo Jesús, solo Él es perfecto (Hebreos 12:1-2). c.- En la congregación hay oportunidad de ejercer los dones y talentos a favor de toda la Iglesia del Señor. - Cada persona puede convertirse en una bendición para la Congregación, cuando usa sus dones y talentos para ministrar (1ª Corintios 12:4-7/ 1ª Corintios 12:31). La Iglesia Local es el primer campo de entrenamiento, es el lugar donde se inicia el trabajo del ministerio (Lucas 24:49). Es la Jerusalén de todo creyente “Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra” Hechos 1:8. misionera,

Antes de llamar a Pablo a la obra

Dios lo formó en la Congregación de Antioquía

(Hechos 13:1-3).

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d.- En la Congregación, el creyente tiene la oportunidad de ministrar el amor del Señor y los demás Dones que Dios le ha dado (1ª Corintios 12:7). - Solo en comunión con el resto del Cuerpo de Cristo, es que aprendemos a amarnos unos a otros como hermanos y también a preocuparnos por los demás creyentes, colaborando en su crecimiento y supliendo aún en sus necesidades económicas cuando sea posible. Hebreos 10:24-25 dice: “...que tenemos que considerarnos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuando veáis que aquel día se acerca”.

El Congregarse es una

Ordenanza de Dios y debe de cumplirse. Leamos de nuevo Hebreos 10:25 e.- Congregarse da oportunidad al creyente de ofrendar y diezmar - La Biblia dice que debemos de traer nuestras

Ofrendas y

Diezmos a la Casa de Dios (Malaquías 3:10-12). Esto traerá gran bendición, prosperidad y protección en el área económica del creyente. Deuteronomio 12:5 al 7 dice “... en el lugar que Jehová vuestro Dios escogiere para poner allí su nombre para su habitación, ese buscaréis, y allí iréis. Y allí llevaréis vuestros holocaustos, vuestros diezmos, vuestras ofrendas voluntarias y las primicias... y os alegraréis vosotros y vuestras familias”. Una persona que no se congrega, no goza de estos privilegios.

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f.- En la Congregación tenemos la oportunidad de Alabar y Adorar a Dios como un solo cuerpo. - A Dios le agrada que se le rinda Culto en forma unánime. El libro de los Salmos hace alusión a la Alabanza Unida (Salmos 148:1/Salmo 150 / Salmos 117:1). “Dios se goza en la parte habitable de la tierra y su delicia es con los hijos de los hombres” Proverbios 8:31. g.- Es necesario congregarse para estar preparados y listos, para ir con la Iglesia cuando Cristo vuelva por ella. - El vuelve por una Iglesia unida, su oración fue siempre que sus hijos fueran uno (Juan 17:20-22). 3.- ¿Cuántas veces debo asistir a la Congregación? Las veces que sean posibles. En el Libro de los Hechos de los Apóstoles, el Espíritu Santo nos revela la forma de cómo Él guiaba a la Iglesia. Los hermanos no solo se reunían en Grupos Familiares por las casas, sino también en el Templo para participar de varias actividades que se celebraban,

en comunión unos con otros

(Hechos 2:46). La Iglesia primitiva se reunía para participar en el partimiento del pan (Santa Cena), para adorar a Dios y entregar sus ofrendas, según Hechos 20:7. En nuestra Congregación,

funciona el Sistema de Transporte de

Buses para traer a los hermanos de los Grupos Familiares al templo.

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CAPITULO # 06 LA ALABANZA Y LA ADORACIÓN Ahora que usted es un hijo de Dios, tiene la bendición de poder entrar confiadamente a la presencia de Dios (Hebreos 4:16), y esto lo podemos hacer mediante la Alabanza y la Adoración. 1 .- La Alabanza Alabar es glorificar a Dios, ensalzarlo y bendecirlo especialmente con himnos, cánticos y música “Alabad a Jehová, porque es bueno cantar salmos a nuestro Dios; porque suave y hermosa es la alabanza” Salmo 147:1 (Efesios 5:19.20 / Apocalipsis 19:5/ 2ª Crónicas 7:6 / Salmos 28:7 / Salmo 40:3 / Salmo 95:1-2 / Salmo 149:1-3 / Salmo 150), como vemos, todo el Salmo es de alabanza y Adoración. - Se debe alabar a Dios siempre (Hebreos 13:15). - Debe de hacerse bien (Mateo 21:16). Beneficios de la Alabanza: a.- Es olor fragante, Dios se agrada: - El poder de la alabanza dentro de la Iglesia, en el Nuevo Testamento es algo sumamente indispensable, no solo para la presencia del Espíritu Santo, dentro del pueblo de Dios; sino que la alabanza viene a ser de olor fragante para Dios, es una de las formas de cómo Dios se agrada de que sus hijos le alaben;

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porque está escrito, que el pueblo de Dios es para la alabanza y gloria de su Santo Nombre. (Efesios 1:12). b.- Produce gozo y alegría: - En la carta del apóstol Santiago en el capítulo 5, verso 13; dice: “¿Está alguno alegre? Cante alabanzas”. En este pasaje nos habla claramente sobre la importancia de cantar alabanzas al Señor. 2.- La Adoración La Adoración al Único y Sabio Dios, es algo más profundo y privado que la alabanza. El pueblo de Israel adoraba a Dios constantemente, y era una práctica muy común de los del antiguo pacto. En estos tiempos el Adorar a Dios, tiene más vigencia dentro del pueblo redimido y ungido del Señor, aunque esta es una manera de humillarse ante el Dios Todopoderoso, también la adoración es la forma de exaltar y glorificar al Señor que habita en el corazón del creyente. (Salmo 66:4 / Juan 9:38 / Apocalipsis 19:4 / Hebreos 1:6). Requisitos del Adorador: a.- La adoración se debe hacer en Espíritu y en verdad (Juan 4:23 al 24: - Uno de los requisitos para la adoración, es que el creyente tiene que estar dentro del mover del Espíritu Santo, porque la adoración se manifiesta dentro del alma y el espíritu, por ser algo meramente espiritual. La adoración es para la persona ungida con el Espíritu Santo. b.- Debe hacerse en el temor de Señor (Salmo 5:7 / Salmo 96:9):

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CAPITULO # 07 COMO ENFRENTAR LAS TENTACIONES El Nuevo Convertido debe aprender como enfrentar la Tentación para llegar a ser un cristiano firme y maduro. 1.- ¿Qué es la Tentación? Es la presión inicial que siente una persona para cometer pecado. La tentación NO es pecado. Jesús fue tentado en todo pero no cometió pecado (Mateo 4:1-11 / Hebreos 4:15). Si no enfrentamos correctamente la tentación, puede llegar a convertirse en pecado. 2.- ¿De donde proviene la tentación? Dios NO envía la Tentación. Santiago 1:13 dice; “... cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie...”. Existen tres fuentes de donde vienen las tentaciones: a.- Satanás: - Este fue el primer tentador. El árbol de la ciencia del bien y del mal no eran en si una tentación, fue hasta el momento en que apareció Satanás, que Adán y Eva sucumbieron a la tentación y vino el pecado (Génesis 3:1-7). Desde Génesis hasta el Apocalipsis Satanás continúa su obra,

incitando a todos los

seres humanos a rebelarse contra Dios. La Biblia dice que el diablo es el tentador. “Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres

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Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan” Mateo 4:3. b.- La Carne (naturaleza humana): - Esta es la fuente de mayor peligro, porque es parte de nosotros. “Cuando uno es tentado no diga que es tentado por Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni el tienta a nadie; sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia

es

atraído

y

seducido.

Entonces

la

concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado siendo consumado, da a luz la muerte” Santiago 1:13-15. Como cristianos debemos entender que nuestra naturaleza pecaminosa es una fuente de pecado, la cual puede ser regulada solo por el Poder de Cristo, esta ley de pecado en nosotros es combatida por la ley de la vida de Dios. (Romanos 8:2-3). La única manera de vencer los deseos de la carne es negándose a ceder a la tentación, hay que rechazar esos deseos. En el libro a los Gálatas se nos da una lista de los frutos de la carne, para que podamos reconocerlos y resistirlos cada vez que sobrevengan (Gálatas 6:19-21). c.- El mundo: - Cuando se menciona la palabra “mundo” se refiere “a un sistema de cosas”, aplicadas por el diablo, donde él es su líder. En Juan 14:30 Jesús dijo: “No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí”. Cuando se ama al mundo y su forma de pensamiento, se

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deja de amar a Dios y se pierde la comunión con Él. No se le puede servir a dos señores (Mateo 6:24) En Santiago 4:4 se lee: “¡Oh almas adulteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? cualquiera pues que quisiera ser amigo del mundo se constituye enemigo de Dios”. En 1ª Juan 2:15-17 leemos: “No améis al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en el. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre”. 3.- ¿Cómo vencer la Tentación? a.- Conozca su lado débil: - Si tiene dificultades con su carácter o temperamento, o alguna otra debilidad humana, pida a un siervo (a) de Dios que ore por usted, y que le ministre liberación, sanidad interior o consejería. Esto es muy importante para no caer en pecado. b.- Ríndase a Dios: - Confíe en Cristo como su ayuda para vencer. Cristo vive en su corazón por medio del Espíritu Santo, a quien se le llama el “Consolador” que significa “Uno que permanece a nuestro lado para ser ayudador”. El producirá los frutos de Gálatas 5:22-23,

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que constituye el carácter de Cristo. Una actitud obediente ayudará bastante. Obedezca al Señor cuando Él le sugiera algo que hacer. Escuche el consejo de su Pastor y otros líderes maduros. c.- Mantenga una vida de Oración: - Debemos saber que una forma de vencer la tentación es teniendo comunión con Dios en una forma más íntima. La Oración es una arma poderosísima. Al orar abundantemente los deseos de la carne pierden intensidad, lo que nos ayuda en nuestra voluntad para poder expresar un “NO” rotundo. Leamos Jeremías capítulo 33, verso 3 y Hebreos 5 verso 7. d.- El ayuno: - Debemos ayunar con la mayor frecuencia posible. El Ayuno fortalece al hombre espiritual y controla los deseos de la carne, que es el medio que utiliza Satanás para tentar. Leamos Hechos 13:3/Joel 1: 14/ Joel 2:15 y Lucas 4: 1 y 2. e.- La renovación de la mente: - La mente capta las fuentes del pecado, los cuales influyen sobre la voluntad, a fin de que escojamos hacer lo malo, por tanto la mente debe ser fortalecida por medio de la Palabra de Dios. Al principio

los

pensamientos

impuros

vienen

con

mucha

intensidad, debido a los desordenes y vicios que se practicaban cuando no conocíamos a Cristo (Efesios 4:22-24). Tenemos que renovarnos en el Espíritu de nuestra mente, permitiendo que la

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Palabra de Dios la llene completamente y la controle. “Por lo demás hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si algo digno de

alabanza,

en

esto

pensad:

Filipenses

4:8.

Los

pensamientos incorrectos deben cambiarse, debemos desviar nuestra mente hacía la Palabra de Dios, que nos dice lo contrario a lo que estamos pensando, en el momento que nos ha venido la tentación. La tentación debe ser enfrentada de inmediato,

debe ser rechazada al principio, cuando es más

débil, el hecho de retenerla implica fortalecerla, y esta puede ser nuestra caída. Nunca medite en la tentación que venga a tu mente, no la acaricies, porque lo que se haría es alimentar su crecimiento y no se detendría hasta convertirse en pecado (Santiago 1:13-15). Jesús siempre fue rápido, nunca esperó ni un momento para rechazar la tentación y la reprendió (Mateo 4:1-11 / Mateo 6:22-23). Cada vez que se vence una tentación, nos fortalecemos en esa área, porque de lo contrario nos debilitamos. La promesa de Dios es que Él no nos dejará ser tentados más de que podamos resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podamos soportar (1ª Corintios 10:13/Mateo 4:1 al 11) 4.- ¿Qué es lo que debemos evitar? 1ª Corintios 10:12 dice “... si alguno piensa estar firme mire que no caiga”. Pablo dijo a Timoteo “Ten cuidado de ti mismo...”

1ª

Timoteo 4:16 y también dice el Salmo 37:8 “No te excites en

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manera alguna a hacer lo malo”. Hay que huir del pecado como lo hizo José en (Génesis 39:12). Debemos evitar: a.- Malas conversaciones, chistes, criticas, murmuraciones etc (1ª Corintios 15:33) b.- Cuídese de la literatura, ilustraciones, pornografía en periódicos, revistas y de programas nocivos para su salud espiritual. c.- La televisión es un buen medio, por el cual podemos ser seducidos en muchas áreas como el sexo, la vanidad, avaricia, enojo, truhanerías, violencia, etc. Trate de ver programas que le edifiquen y eduquen. d.- Cuando escuche la radio procure que sean programaciones cristianas o algo que sea sano, que le enseñe y le edifique. e.- No vaya a lugares que ofrecen tentación como: fiestas mundanas, juegos, bailes, etc (Los juegos de azar y la lotería o rifas, no deben ser practicados por el Pueblo del Señor). “Baste ya el tiempo pasado para haber hecho lo que agrada a los

gentiles,

andando

en

lascivias,

concupiscencias,

embriagueces orgías, disipación y abominables idolatrías. A estos les parece cosa extraña que vosotros no corráis con ellos en el mismo desenfreno de disolución y os ultrajan; pero ellos darán cuenta al que está preparado para juzgar a los vivos y los muertos: 1ª Pedro 4:3-5.

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5.- No se Desanime No tiene porque rendirse al enemigo y no debe hacerlo. Aún cuando una persona cae en pecado, debe levantarse, pedir perdón al Señor y seguir adelante en la firme decisión de no volver atrás. 1ª Juan 2:1 dice; “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo”. Involúcrese a trabajar en los Grupos Familiares y sométase a un discipulado y sera fuerte, libre de temores, enfermedades y tristezas. Cuando una persona está ocupada en la Obra de Dios, el diablo tendrá menos oportunidad de atacar su mente. Alguien dijo que una mente desocupada es un taller de Satanás. Leamos 1ª Corintios capítulo 2, verso 16. NOTAS:

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CAPITULO # 08 EL BAUTISMO EN AGUAS Inmediatamente después de la conversión, el creyente debe de bautizarse en las aguas. A través de este acto, el cristiano confirma su compromiso como discípulo de Jesús y manifiesta públicamente lo que sucedió en su vida espiritual. 1.- ¿Por qué Jesús ordenó el Bautismo en Aguas? “Jesús dijo que el que creyere y fuere bautizado será salvo” Marcos 16:16 Un discípulo de Cristo inicia el proceso de su crecimiento, cuando se Bautiza en Agua, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo (Mateo 28:19). La conversión es algo que ocurre dentro del corazón de la persona cuando Cristo entró, lavó sus pecados y le dio una nueva vida. Cuando se bautiza exterioriza y demuestra este milagro, al hacerlo públicamente manifiesta el compromiso con Jesús y con la misión de llevar el Evangelio a todas partes del mundo. Jesús puso el ejemplo al bautizarse en las aguas: Mateo 3:13-17. 2.- ¿Qué significa el Bautismo en Agua? La palabra “bautizar” significa “sumergir o cubrir un cuerpo”, en este caso “sumergir en agua”, representa a un persona que ha muerto y es sepultada. Al salir del agua hace alusión a una persona

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que resucita a una nueva vida. Es lo que dice Romanos 6:3-4, cuando Pablo describe el significado del Bautismo en Aguas. Al bautizarse una persona toma la decisión de vivir una vida santa; al considerarse muerta al pecado pero viva para Dios (Romanos 6:11). El Bautismo es una forma de decirle al diablo, al pecado y al mundo que ya no les pertenecemos. El ejemplo más claro lo encontramos en el paso de Israel por el Mar Rojo. Dios los había libertado de la esclavitud de Egipto y de Faraón, que representa al diablo y al mundo. Mientras estaban en el territorio de Egipto, Faraón creía tener derecho sobre ellos y los persiguió; fue allí cuando Dios abrió el Mar Rojo y pasaron en seco, cuando Faraón y su ejercito trataron de hacer lo mismo, el mar los destruyó. El Mar Rojo era lo que dividía definitivamente al pueblo de Israel del dominio de Egipto. La Biblia dice que todos en Moisés fueron bautizados en la nube y en el mar (1ª Corintios 10:1-2). Mientras no se haya ejecutado el paso del bautismo, el diablo cree tener derecho sobre la vida del nuevo convertido. Por eso el enemigo lucha para que una persona no se bautice. 3.- ¿Cuándo debe bautizarse una persona? Inmediatamente después de su conversión. “El que creyere y fuere bautizado será salvo”: Marcos 16:15. Cuando el eunuco etíope oyó el evangelio y creyó dijo; ¿Qué impide que yo sea bautizado? Felipe le dijo: “Si crees de todo corazón bien

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puedes”. Enseguida descendiendo ambos al agua y Felipe le bautizó (Hechos 8:35-39). Cuando Saulo de Tarso se convirtió se bautizó inmediatamente

(Hechos 9:18). También Cornelio y su

familia (Hechos 10:47-48). 4.- El Bautismo es una ordenanza de Dios, pero NO limpia el pecado: Sólo confirma que la persona es completamente salva, por el Pacto de la Sangre de Cristo y la obediencia a la Palabra de Dios. Lo único que limpia el pecado es la sangre de Cristo (1ª Juan 1:7 / Apocalipsis 1:5; 5:9). El ladrón que se convirtió junto a Cristo en el calvario no tubo tiempo de bautizarse en las aguas porque él estaba a punto de morir, no obstante fue salvo. Jesús le dijo: “De cierto, de cierto de digo que hoy estarás conmigo en el paraíso” (Lucas 23:42-43). El Bautismo dice 1ª Pedro 3:21, no quita las inmundicias de la carne, pero es la aspiración de una buena consciencia hacia Dios. Cuando se obedece a Dios se recibe paz y una convicción de pureza y santidad que son en realidad esa buena conciencia hacia Dios. 5.- ¿Es Bíblico el Bautismo de Niños? Cuando Jesús nació no fue bautizado por sus padres, sino que lo llevaron al templo y lo presentaron al Señor, según estaba escrito en el Antiguo Testamento de que se consagrara al Señor todo varón (niño). (Lucas 2:21-23).

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Un niño no debe ser bautizado porque el bautismo es un acto absolutamente voluntario, es para personas que tengan uso de razón. Un niño recién nacido no puede decidir y además no puede creer. Recuerde que el creer es un requisito previo. “ El que creyere y fuere bautizado será salvo”: Marcos 16:15. Los niños deben ser presentados al Señor (Lucas 18:16),

e

instruidos en la Palabra de Dios (Proverbios 22:6). La decisión de seguir a Cristo y bautizarse, la tomará él o ella cuando esté en plena facultad de creer y decidir. 6.- ¿Cómo debe de ser el Bautismo en Aguas? La Biblia nos enseña que el bautismo debe ser ministrado al introducir a la persona totalmente en el agua, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Mateo 28:19-20 nos aclara mejor este tema. En Mateo 3:16, leemos de la siguiente manera: “Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él” . Vemos que el Bautismo en Aguas es totalmente Bíblico, como esta escrito en Marcos 16:16 “El que creyere y fuere bautizado, será salvo...” Algo muy importante de notar en la Palabra de Dios, es que siempre se hará por inmersión (sumersión), para más detalles y figuras bíblicas léase Romanos 6:3 al 7; y siempre se hará como lo hemos escrito arriba en Mateo 18:19 y 20 “En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”.

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CAPITULO # 09 EL BAUTISMO CON EL ESPÍRITU SANTO

Es la unión del Espíritu Santo con el creyente cuando entra a su vida y lo llena completamente, capacitándolo para hacer la voluntad de Dios y ser discípulo verdadero de nuestro Señor Jesucristo. 1.- La Promesa del Bautismo con el Espíritu Santo: Jesús dijo a sus discípulos antes de este bautismo, que el Espíritu Santo moraba con ellos, pero estaría en ellos. Ese “estará en vosotros” es el bautismo del Espíritu Santo. Es una promesa solo para los cristianos, el mundo no lo puede recibir, porque no le ve ni le conoce (Juan 14:16-18). El cumplimiento de la promesa de Mateo 3:11 / Juan 20:22 / Lucas 24:49 y Hechos 1:4-5, sucedió cuando vino el Espíritu Santo sobre ellos y los bautizó (Hechos 2:1-4). 2.- Cómo recibir la Promesa del Espíritu Santo: a.- Debe haber recibido a Cristo como Salvador y Señor (Hechos 2:38). Después del arrepentimiento se recibe el don del Espíritu Santo (Hechos 5:32/Hechos 10:45/Hechos 11:17/Hechos 15:8). b.- Hay que pedirlo (Lucas 11:13).

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c.- Se recibe por fe, se tiene que creer (Gálatas 3:13-14

Juan

7:39/Efesios 1:13/Efesios 3:16-17 / Gálatas 3:2/Gálatas 3:5/Gálatas 4:4-7). d.- Se recibe cuando hay obediencia (Hechos 5:32). 3.- Cómo viene la Promesa: a.- Por el nombre de Jesús (Marcos 16:17). b.- Por la imposición de manos (Hechos 8:14-17/Hechos 19:6). 4.- La señal del Bautismo del Espíritu Santo es HABLAR en otras LENGUAS: Hechos 2:1-11 dice: “Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen...” El hablar en otras lenguas (que no son géneros de lenguas) ya que géneros de lenguas es un don del Espíritu Santo, leamos 1ª Corintios 12:10,

es una señal de que el creyente ha sido bautizado con el

Espíritu Santo.

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1ª Corintios 14:2 dice: “Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende; aunque por el Espíritu habla misterios”. La evidencia de esa unción, vino a ser el acontecimiento que se suscitó en el Aposento alto, cuando ellos hablaron en nuevas lenguas y en otros idiomas, esto vino a ser de testimonio para todos los oyentes que estaban en ese culto, pero en sí, muchas de las lenguas que se hablan en momentos de alabanza, adoración, o en oración, no son idiomas. Este acontecimiento fue algo muy especial y único, porque fue la primera vez que se derramó el Espíritu Santo sobre todos los creyentes, y vino a ser el cumplimiento fiel de su promesa de enviar al Consolador. Hechos 19:1-6 dice: “...Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas y profetizaban. 5.- Beneficios del Bautismo con el Espíritu Santo: Nos da poder: Lucas 24:49 dice: “He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos del poder de lo alto”. a.- Nos capacita para ser más efectivos en la predicación del Evangelio:

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- Hechos 1:7-8 la Biblia dice: “... no os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en Judea, en Samaria y hasta lo último de la Tierra”. b.- Poder para echar fuera demonios (Mateo 12:28). c.- Poder para hablar como Dios quería que hablemos (Marcos 13:11). d.- Posibilita que el amor de Dios sea derramado en nuestro corazón (Romanos 5:5). e.- Da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios (Romanos 8:16). f.- Nos ayuda en nuestra debilidad (Romanos 8:26). g.- Habilita la justicia y paz en nosotros (Romanos 14:17). h.- Nos ayuda para abundar en esperanza (Romanos 15:13). i.- Nos santifica (Romanos 15:16). j.- Genera gozo en nosotros (1ª Tesalonicenses 1:6). k.- Nos da nuevos dones (Es la puerta). El bautismo con el Espíritu Santo genera nuevos dones (incluyendo un don que se llama “géneros de lenguas”, que no es una evidencia, sino un don del Espíritu Santo” (1ª Corintios 12:14). l.- Trae mucha libertad (2ª Corintios 3:17). m.- Produce los frutos del Espíritu Santo (Gálatas 5:22-23).

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CAPITULO # 10 PODER PARA VIVIR La vida cristiana no se puede vivir en nuestras propias fuerzas, es necesario que sea el Señor quien nos fortalezca, pero nosotros debemos de cumplir con los requisitos para tener una vida llena del Espíritu Santo. Esta vida llena del Espíritu Santo nos ayuda a obtener victoria en Cristo Jesús y tener efectividad espiritual,

y así recibir las

promesas que tiene la Palabra de Dios: Hebreos 6:12-13. Para ser llenos del Espíritu Santo,

necesitamos oración, dedicación y

disciplina, por eso el autor de los Hebreos nos dice que no seamos perezosos, debemos sacar tiempo para orar, ayunar y escudriñar las Sagradas Escrituras, para que de esa manera, Cristo pueda manifestar su vida en nosotros. Leamos Efesios 4:22 al 32 ¿Cómo alcanzar la llenura constante del Espíritu Santo? 1.- Deseo: - Una persona debe desear realmente que Cristo controle su vida. Mateo 5:6 dice: Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados. 2.- Rendirse a su control:

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- Una persona debe permitir que el Señor tome el control de su vida (Gálatas 2:20). 3.- Vida de obediencia: - Nuestra entrega al señorío de Cristo, implica una entrega de nuestra voluntad, para ser obedientes a El en todas las cosas (1ª Juan 2:13). 4.- Limpieza: - La Consagración es la entrega que el cristiano hace a Dios de todas las áreas de su vida, permitiendo que Él lo limpie; dentro de la Consagración está la confesión de todo lo que somos a Dios.

1ª Juan 1:9 “Si confesamos nuestros pecados, él es

fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad”. NOTAS:

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CAPITULO # 11 PAUTAS PARA NO APAGAR AL ESPÍRITU SANTO EN NUESTRAS VIDAS 1ª Tesalonicenses 5:19. a.- Debemos amarnos: - Los pleitos, odios y las iras apagan el gozo del Espíritu Santo, por lo tanto, limita en nosotros su poder (1ª Tesalonicenses 5:19). b.- Estar siempre gozosos: - 1ª Tesalonicenses 5:16. El gozo es una señal de la llenura del Espíritu Santo y no debemos dejar que se apague

por los

problemas de cada día, al final el Señor nos dará la salida de ellos. c.- Orar sin cesar: - 1ª

Tesalonicenses5:17.

Nuestros

pensamientos

deben

perseverar en la oración, y esto lo podemos hacer siempre, en la casa, en el bus, en el trabajo, en la escuela, etc. d.- Dar gracias a Dios en todo: - 1ª Tesalonicenses 5:18. El murmurar por las adversidades no es del agrado de Dios, lo mejor es dar gracias al Señor por todas las cosas. e.- Abstenerse de toda especie de mal: - 1ª Tesalonicenses 5:21-22. f.- Guardarse en santidad en todas las áreas de nuestra vida: - 1ª Tesalonicenses 5:23.

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CAPITULO # 12 LA OBEDIENCIA La vida cristiana será victoriosa y significativa cuando se hace lo que Dios dice, aunque sea un mandamiento que parezca insignificante (1ª Samuel 15:22). 1.- ¿Qué quiere decir obediencia? Estado o acto de estar sometido a la voluntad de otro, en una actitud de sumisión y determinación con un corazón dispuesto. 2.- ¿Por qué debemos ser obedientes a Dios? 1.- Porque Dios nos ama. La máxima gratitud y agradecimiento a Dios se puede demostrar al hacer su voluntad; porque no podemos darle algo para pagar lo que el ha hecho por nosotros, el amor entonces hacia Dios se demuestra por el agrado de obediencia que manifestamos: 1ª Juan 4:16 / 1ª Juan 2:4. 3.- La obediencia produce seguridad A veces el obedecer al Señor, produce una sensación de dolor, pero los resultados de la obediencia son de gran bendición (Deuteronomio 28:1-2). Cuando Dios ordenó a Abraham a

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sacrificar a su hijo único, el corazón de Abraham se quebrantó, pero él se dispuso a cumplir, por haberlo hecho logró dos grandes bendiciones, una de las cuales alcanzó a la humanidad entera (Génesis 22:15-19). En buen discípulo es obediente a la voz de Dios, con la cual, no solo bendecirá su vida, sino también a muchos de los que no conocen aún al Señor. 4.- La obediencia produce revelación y una alta comunión con Dios El Señor Jesús dijo que si guardábamos sus mandamientos, llegaríamos a ser sus amigos. (Juan 15:14). Los hijos obedientes transfieren su actitud de obediencia a otros y Dios los bendice grandemente: Génesis 18:16-19. 5.- ¿Cómo llegar a ser Obediente? Paso 1= Conozca la voluntad de Dios La voluntad de Dios está escrito en su Palabra, escudríñela, medite en ella y practíquela (Santiago 1:22-25). Paso 2= Desarrolle su vida de oración Pídale a Dios que le enseñe a guardar sus mandamientos, y que le muestre el camino para poder ponerlos por obra, como lo hacía el salmista (Salmos 119:33 y 1:4).

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Paso 3= Desarrolle actitudes correctas Hay que sujetarse a las autoridades que Dios ha puesto sobre nosotros, Pastores, líderes, y hermanos maduros (Romanos 13:12). Antes de conocer a Cristo estábamos extraviados y hacíamos lo que bien nos parecía, ahora tenemos que aprender a ser humildes y permitir que nos guíen y nos enseñen (Efesios 2:1-3 / Juan 21:18/Jueces 21:25). La obediencia a las autoridades que están a nuestro cuidado, son seguridad, vida y traen bendición. En Hebreos 13:17

dice: “Obedecer a vuestros pastores, y

sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso. NOTAS

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CAPITULO # 13 COMO SE PUEDE CONOCER LA VOLUNTAD DE DIOS PARA NUESTRAS VIDAS Cuando recibimos a Cristo como el Señor de nuestra vida,

le

estamos diciendo que nos disponemos a obedecerle. Jesús dijo “No todo el que me dice Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” Mateo 7:21. Para obedecer al Señor necesitamos saber que es lo que El quiere que hagamos. 1.- Lo que hagamos debe de estar de acuerdo con la palabra de Dios. a.- La Biblia es la regla infalible de fe y de conducta: (Salmos 19:7-14 / Isaías 8:20). b.- La Biblia contiene principios que deben seguirse en cualquier tiempo y en cualquier lugar del mundo. Cuando los seguimos no nos vamos a equivocar en las cosas que hacemos. 2.- Todo lo que hagamos debe ser para glorificar a Dios. Pregúntese si lo que va hacer o decir, da gloria a Dios y es de su agrado. No debe hacer nada que traiga vergüenza o reproche a su Señor y su Obra (Hebreos 11:16). Si amamos al Señor le vamos a complacer (Juan 14:15). El que haga esto no resbalará jamás (Salmos 91:14-16).

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3.- Lo que hagamos no debe de perjudicar a los demás. Algunas cosas que para nosotros son aceptables pueden ser causa de tropiezo para otro cristiano. Pablo dijo que si el actuar en cierta forma le era tropiezo a alguien más, él está dispuesto a jamás volver hacerlo, a pesar de que no vea nada malo en ello: 1ª Corintios 8:9-13. El amor no hace mal al prójimo, la Biblia dice que si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto. ¿Cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? Y nosotros tenemos este mandamiento de él. El que ama a Dios, ame también a su hermano: 1ª Juan 4:20-21. El amor no hace nada indebido: 1ª Corintios 13:5. Cuando tenga que tomar una decisión: 1.- Ore al Padre en el nombre de Jesús y presente el asunto al Señor en oración. “Todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré... Juan 14:13-14. 2.- Pida consejo. Consulte con sus líderes y pastores para que le aconsejen y oren también por usted (Proverbios 1:5/Proverbios 8:33/Proverbios 19:20/Proverbios 20:5/Proverbios 27:9 / Hechos 20:27). Hay que evitar la soledad (Eclesiastés 4:9-12).

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CAPITULO # 14 LA MAYORDOMIA No podemos hablar de Mayordomía si primero no hablamos de lo que quiere hacer Dios nuestro Padre y Creador, con nosotros, ahora que somos sus hijos, nacidos de nuevo, por la preciosa Sangre de Cristo. Según 3ª Juan, verso 2, el anciano le escribe a su discípulo Gayo, que el deseo del Señor y de él, es que como creyentes en Cristo, seamos prosperados en todas las cosas, incluyendo las finanzas. Es de aquí de donde partimos para hablar de la Mayordomía. 1.- La Administración y la Mayordomía: Los términos “Administrador” y “Mayordomo” se refieren a lo que tenemos que hacer para cuidar y poner a producir los bienes que le pertenecen a otro, y de la forma más exacta que su dueño lo quiere. Como cristianos somos administradores y mayordomos de lo que Cristo nos ha dado: Es a saber, la vida espiritual y la vida material. 2.- Debemos tener dos principios bien claros: a.- Dios es dueño de todo:
Él creó todo, aún nosotros nos debemos a Él; nos compró con su Sangre (1ª Corintios 6:20), acupa el lugar de amo y Señor de nuestras vidas, todo lo referente a nuestro ser (vida, tiempo, logros, familia, bienes materiales), son de Él, de

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manera que ya no vivimos para nosotros mismos (Salmo 24:1/Colosenses

1:16/1ª

Pedro

1:18-19/Hechos

1:36/

2ª Corintios 5:15). b.- La Fidelidad:
Es

una

actitud

indispensable.

Dios

nos

exige

que

administremos sus bienes y talentos con “Fidelidad”, de este modo evitamos el juicio,

la mala conciencia y la jactancia

(1ª Corintios 4:1-4 y 7). Para ser responsables a la hora de administrar, debemos ser diligentes, entendidos y hacer buen uso de los recursos y deberes que nos han sido entregados (Efesios 5:15 al 17/Romanos 12:6-8). 3.- ¿Por qué es tan necesario conocer sobre el Tema de los DIEZMOS y las OFRENDAS? Por una buena razón, la Biblia nos enseña en Juan 10:10 “El ladrón no viene sino para hurtar, matar y destruir...”. Una de las grandes mentiras del enemigo es que trasmite a la mente y al corazón de muchos cristianos, que el Diezmo perteneció a los tiempos de la Ley, y que regía para los judíos de esos tiempos; pero si observamos con detenimiento, nos daremos cuenta que Abraham y Jacob diezmaron y esto se dio antes de que fuera instituida la Ley. La idea de no ofrendar, ni diezmar para Dios, ha sido tan común en nuestros días; esto no es otra cosa que un engaño de Satanás, para empobrecer y derrotar al Pueblo de Dios y mantenerlo en una vida de miseria.

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En el Nuevo Testamento, Jesús personalmente endozó el Diezmo, y también la Ofrenda, dándole el sello de aprobación, ya que Él dijo a los Escribas y Fariseos que de seguro deberían pagar sus Diezmos. “¡Ay de ustedes, maestros de la ley y fariseos, hipócritas!, que separan para Dios la décima parte de la menta, del anís y del comino, pero no hacen caso de las enseñanzas más importantes de la Ley que son la justicia, la misericordia y la fidelidad. Esto es lo que deben hacer, sin dejar de hacer lo otro.” (Versión: Dios habla hoy). 4.- Razones por las que debemos los creyentes Diezmar y Ofrendar: a.-

Porque el pago de los Diezmos continuó en los tiempos de Jesús (Lucas 11:42/Lucas 18:12).

b.-

La Iglesia Primitiva del Nuevo Testamento diezmaba y ofrendaba, aun repartían hasta sus bienes y propiedades. El autor del Libro de Hebreos escribió este versículo, treinta y cinco años después de la muerte de Cristo (Hebreos 7:8). Esto pone al Diezmo en la era de la Iglesia Primitiva.

c.-

Porque bajo la economía de la gracia se espera de todo creyente, que aporte con corazón bien dispuesto (2ª Corintios 9:7). Como creyentes somos exhortados a dar, no por obligación, sino porque el ejemplo lo puso el Señor Jesucristo “...que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico” (2ª Corintios 8:9).

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d.-

No es solo el Diezmo del cristiano que le corresponde al Señor; todo nuestro ser le pertenece (1ª Corintios 6:20/

1ª

Corintios 7:23), dice “Porque habeis sido comprados por precio...” e.-

El no Diezmar y Ofrendar afecta a los cristianos, NO a Dios. No importa lo santo que sea, los ayunos que haga o los versículos que memorice. La Biblia dice que a los cristianos que no diezman no se les permite que caminen bajo cielos abiertos. Dios es claro al respecto: “ Diezmas, o las ventanas de los cielos se le cierran (Malaquías 3:10). El enemigo sabe que el hecho de poner ataduras en las finanzas de los creyentes, abstaculiza el desarrollo de la Obra del Señor, por esta razón él lucha fuertemente para que los creyentes en Cristo “No Diezmen, ni Ofrenden” (Hechos 5:1-3). Continuamos diciendo que el cristiano para recoger tiene que sembrar primero, esto es la Ley de la siembra y la cosecha (Éxodo 34:26/1ª Corintios 9:7 al 14/2ªCorintios 9:6/Gálatas 6:7-8).

5.- ¿Por qué el creyente debe de Diezmar y Ofrendar? 1.-

La Biblia dice que: “...Más bienaventurada cosa es dar que recibir” (Hechos 20, verso 35). Cuando ya hemos Nacido de Nuevo (Nacidos del Agua y del Espíritu (Juan 3 versos 3 al 5), aprendemos a dar para el sostenimiento de la obra del Señor y sus siervos, porque Dios ha cambiado nuestro corazón y en vez

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de buscar para nosotros, buscamos el bien de los demás y Dios nos bendice abundantemente. 2.-

Algo acerca de la Ley de la Siembra y la Cosecha”: En Proverbios capítulo 11 y el verso 25, dice así: “El alma generosa será prosperada; y el que saciare, él también será saciado” y Proverbios 3 versos 9 y 10 “Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia y tus lagares rebosarán de mosto”

Las Sagradas Escrituras son muy claros acerca de esta ley que es inmutable pues “No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará” Gálatas 6:17. El Señor Jesús, cuando habló acerca del dar dijo en Mateo 10:42 “Y cualquiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no perderá su recompensa”. En el Nuevo Testamento se ha acostumbrado, desde los tiempos de la Iglesia primitiva, que todo creyente que recibe algún ingreso lleve sus Diezmos a la Iglesia Local, y no solo sus Diezmos, sino ofrendas especiales para los siervos del Señor y para extender el Reino de Dios sobre la tierra.

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Leamos el capítulo 5 del Libro de los Hechos de los Apóstoles, versos 1 al 11. Hay algo muy especial en el dar y darse para Dios y su obra. Pablo el apóstol del Señor en 2ª Corintios 12:15 escribió “Y yo con el mayor placer gastaré lo mío, y aún yo mismo me gastaré del todo por amor de vuestras almas, aunque amándoos más, sea amado menos”. También otras Escrituras Sagradas nos confirman y nos exhortan a ser libres de los espíritus de codicia y avaricia 1ª Corintios 9 , verso 3 al 14. El propósito de Dios al traernos al Reino de Cristo, según Juan 8:32 “...y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”, lo hizo con el deseo de que fueramos felices, sanos, salvos y también que pudieramos disfrutar de las cosas materiales. Leamos

1ª

Timoteo 6:17. Recordemos que los Diezmos, las Ofrendas y las ayudas (todo esto está dentro de la Palabra de Dios), se trae al Templo, a la Casa de Dios, donde nos reunimos (Deuteronomio 12:17 al 19/Malaquías 3:10). Para evacuar todas las dudas respecto a los Diezmos y a las Ofrendas (que no son nuestras, sino que le pertenecen al Señor para la extensión de su Reino, aquí en la tierra, lea: Mateo 23:23

Hebreos 7:4 al 9

Génesis 28:20 al 22

Génesis 14:17 al 20

2ª Corintios 9:6 al 11, dice: “Pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra...”

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Cuando hay gozo y alegría en el dar, Dios se alegra y devuelve mucho más de lo que hemos dado. Hebreos 11:4, dice: “Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella.” Lucas 6:38, dice: “Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir” NOTAS:

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CAPITULO # 15 ¿POR QUÉ ES NECESARIA LA COBERTURA ESPIRITUAL? Una cobertura espiritual se refiere a un ministerio, que por la gracia de Dios, ha sido comisionado por El, para la formación, preparación y cuidado del pueblo del Señor. Para tener un crecimiento normal en cualquier carrera profesional u oficio que se quiera aprender, se requiere sujetarse a normas de aprendizaje para llegar a la formación y madurez. Para la vida espiritual también encontramos en la Palabra de Dios, que Él ha establecido en la Iglesia ministerios, autoridades y personas delegadas, para que podamos llegar al conocimiento y la madurez espiritual, y así poder ministrar también a otras personas.

1ª

Timoteo 2:2 dice: “Por los reyes y por los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad”. Dentro del orden divino (La Palabra de Dios) encontramos diversos ministerios,

Efesios capítulo 4:11-13 “Y él mismo constituyó a

unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros. A fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del

cuerpo de Cristo.

Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”.

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También encontramos algunos tipos de ministerios que Dios ha dotado y a quienes se les ha revelado en una manera especial por su gracia, como los son los Ministerios Apostólicos y Proféticos según: Efesios 2:20 “Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y los profetas, siendo la principal piedra del

ángulo Jesucristo

mismo”. Llamados también Ministerios Pioneros, para establecer Iglesias y Fundamentos Doctrinales para los creyentes en Cristo. ¿Por qué es necesario someternos a la Iglesia y a las autoridades puestas por Dios? 1.- Las autoridades fueron puestas por Dios (Romanos 13:1-5 / Efesios 4:11). 2.- Porqué

nadie es capaz de

dirigir su vida sin el consejo y la

cobertura de otra persona más madura Colosenses 1:28 “A quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar

perfecto en Cristo

Jesús a todo hombre”. Proverbios 11:14: dice; Donde no hay dirección sabia, caerá el pueblo; Mas en la multitud de consejeros está la seguridad. Moisés tenía un llamado genuino de parte de Dios: Éxodo 3:12 y lo dirigía una columna de nube en el día y una columna de fuego en la noche: Éxodo 40:34-38. Sin embargo le rogó a Hobab que no lo dejara solo en el desierto, porque este hombre tenía conocimiento de muchos detalles de ese territorio, que Moisés desconocía Números

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10:29-32. Aceptó con humildad el consejo y las recomendaciones de su suegro Jetro (Éxodo 18:13-27). 3.- Los ministerios fueron puestos por Dios y ellos darán cuenta al Señor por cada persona que está a su cuidado (1ª Pedro 5:1-5 / Juan 17:12). El deber nuestro es sujetarnos a ellos y obedecerles (Hebreos 13 y versos 7 y 17). El otro aspecto muy importante en cuanto someterse a Dios y a la Iglesia, para la formación y la madurez del creyente, estriba en lo conveniente que es para la persona que permite una cobertura ministerial que lo proteja y lo aconseje. Nos encontramos una serie de buenos y grandes ministerios en la Palabra de Dios, que permitieron cobertura ministerial, como el caso de Moisés que ya citamos, pero en el caso de nuestro amado Señor Jesucristo, Él estaba sujeto al Padre (Juan 7:28/Juan 6:45 y verso 57). Miremos también dentro de este mismo contexto el caso de Timoteo con Pablo, lo toma en Hechos capítulo 16 para la formación de un gran ministerio. Leamos Hechos 16 verso 1 al 3 “Después llegó a Derbe y a Listra; y he aquí, había allí cierto discípulo llamado Timoteo, hijo de una mujer judía creyente, pero de padre griego. Y daban buen testimonio de él los hermanos que estaban en Listra y en Iconio. Quiso Pablo que éste fuese con él; y tomándole, le circuncidó por causa de los judíos que había en aquellos lugares; porque todos sabían que su Padre era griego”.

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Otro caso muy notario de sujeción y sumisión a un ministerio puesto por Dios, lo encontramos en la Palabra del Señor en 1ª Reyes capítulo 19 desde los versos 19 hasta el 21, allí dice que Eliseo fue tras el ministerio de Elías y le servia; los historiadores que han escrito acerca del ministerio del gran profeta Eliseo dicen que aproximadamente por 20 años le sirvió; hasta que Elías fue llevado al cielo por un carro de fuego junto al Río Jordán. Esto lo encontramos en 2ª Reyes capítulo 2 verso 1 y versos 9 al 15. Bendiciones y beneficios al estar bajo una cobertura ministerial. Encontramos en la Palabra del Señor, los problemas y fracasos del pueblo de Israel, después que rechazaron el reino teocrático (Gobierno de Dios) y pidieron un rey. Lógicamente que estar bajo el gobierno de Dios no iba a ser igual que estar bajo cobertura de un reinado como el de Saúl (El reinado de Saúl representa el gobierno humano). Las bendiciones y la cobertura departe de Dios ya no serían los mismo; 1ª Samuel capítulo 8 versículo 7 “Y dijo Jehová a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo te digan; porque no te han desechado a ti, sino a mi me han desechado, para que no reine sobre ellos”. Este fue el tiempo en que Israel empezó a perder la guianza y la dirección de Dios.

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Un punto sumamente importante en cuanto a nosotros los creyentes para no perder la guianza, dirección y bendición de Dios, la encontramos en Efesios capítulo 4 verso 1 al 6 y Efesios capítulo 5 verso 21. Vemos en la Iglesia de Corinto el gravísimo problema, porque ellos tenían todos los dones en operación, pero les era casi imposible practicar la unidad del Espíritu, por cuanto era gente con mucho

conocimiento

teológico

(tenían

ataduras

mentales)

y

obviamente muy endurecidos (eran griegos); leemos en 1ª Corintios capítulo 1 versos 10 al 13, las terribles divisiones causados por la falta de quebrantamiento del hombre interior. Pablo les hace una pregunta en 1ª Corintios 1:13 ¿Acaso está dividido Cristo? ¿Fue crucificado Pablo? También en la carta a los Romanos en el capítulo 16 y en los versos 17 al 18, Pablo les exhorta a que se aparten de los que causan divisiones y tropiezos, personas que no aceptaban la autoridad de ningún ministerio sobre ellos, sino que se autonombraban siervos de Dios sin haber llegado a la madurez y sin desear estar bajo ninguna cobertura ministerial; más información sobre este tema lo encontramos en 2ª Timoteo capítulo 3 versos 1 al 8, donde en el verso 7 Pablo afirma que “Están siempre aprendiendo y nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad”;

por eso

conocemos el proverbio tan popular, pero que lo podemos también aplicar a la vida espiritual y su crecimiento: “Nadie puede ejercer autoridad, sino está bajo autoridad”. En el Antiguo Testamento el sacerdocio Levítico era establecido por Dios, en el orden Divino: Escogencia de Dios (Éxodo 29: 19-37), pero

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hubo un sacerdote llamado Abiatar que no guardó su dignidad, ni cuidó su investidura al unirse con los enemigos de David y tuvo que ser desechado por el rey Salomón y confinado al destierro en la región de Anatot, todo el problema del sacerdote Abiatar era la falta de fidelidad y sumisión al reinado de David (1ª Reyes capítulo 2 versos 12 al 27). Que Dios nos de gracia y nos ayude para poder aprender y practicar las palabras que salieron de la boca de nuestro amado Señor Jesucristo. Mateo 11:29 al 30 NOTAS:

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CAPITULO # 16 LA IMPORTANCIA DE COMPARTIR NUESTRO TESTIMONIO Lo que Dios ha hecho con nosotros y la manera en que hemos sido transformados, es el mejor testimonio del poder de Dios. El que escucha nuestro testimonio puede también experimentar esa transformación. 1.- ¿Qué es un testimonio personal? - Es una presentación oral de los hechos que rodean un suceso determinado. El testimonio consiste en los hechos que rodean una conversión, estos acontecimientos son un instrumento muy útil en el evangelismo, cuando se narran claramente. 2.- ¿Por qué es necesario compartir el testimonio de la conversión? - Cuando Jesús llegó a Gadara le salió al encuentro un hombre poseído por demonios. Fue completamente libertado y quería quedarse con Jesús, como Jesús tuvo que retirarse de aquella región, encomendó a este hombre a que diera testimonio de su liberación y conversión. Aquel mensaje fue el arma que usó Dios para evangelizar Decápolis y todos allí se maravillaban (Marcos 5:1-20). Otro caso donde se ve el impacto de un testimonio es en Juan 4:39, fue la mujer samaritana la que llegó a anunciar su encuentro con Jesús, y muchos creyeron en el Señor. Hay

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personas que no están dispuestas a recibir un mensaje bíblico, pero estarán prestos para escuchar un mensaje de Dios, por medio de un testimonio, preferentemente si es el nuestro. Otras veces nuestro testimonio servirá de consuelo, al exponerlo puede que otra persona encuentre la respuesta que busca, y aumente la fe de lo que Dios puede hacer en su vida. La persona que cuente su testimonio transmitirá una esperanza a otra gente que está pasando por la misma situación en la que él o ella se encontraba. 3.- ¿Cómo exponer el testimonio? Use un bosquejo sencillo de tres partes y escríbalo. a.- Cómo era su vida antes de conocer a Cristo: - Relate las circunstancias que le impulsaron a convertirse, como era su estilo de vida, si estaba enfermo, que problemas tenía. Sea especifico, no exalte partes del testimonio que puedan dar una mala imagen suya. En casos de que haya cometido asesinatos o haya experimentado extravíos sexuales u otra situación fuerte, y Dios le guía a contar algo de esto para edificación de alguien, menciónelo en forma general sin dar muchos detalles.

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b.- Relate como conoció a Cristo: - Describa qué circunstancias le impulsaron a buscar al Señor. Quien le predicó, como escuchó el mensaje de salvación y que sintió en su interior y que fue lo que más le impactó. c.- Que sucedió después de la conversión: - Narre que cambios vinieron luego de recibir a Cristo. Transformaciones en su vida, en su hogar, en su trabajo. Cómo cambió su vocabulario, sus pensamientos etc. Relate cómo va creciendo en su vida devocional y su conocimiento de Dios. Nabucodonosor era un rey pagano, Dios trató con él y se convirtió; él dijo: “Conviene que yo declare las señales y milagros que Dios Altísimo ha hecho conmigo” Daniel 4:1-3. Cuando se deje usar por el Señor para llevar a otros a los pies de Cristo, su vida cristiana se fortalecerá más y siempre mantendrá el gozo de su salvación y su amor por Cristo y por los demás. NOTAS:

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CAPITULO # 17 LO QUE SOMOS AHORA EN CRISTO Cuando recibimos a Cristo como nuestro Señor y Salvador, no solo obtenemos la promesa de la vida eterna, sino también heredamos grandes y preciosísimas promesas, que vamos a ir descubriendo a medida que escudriñamos las Sagradas Escrituras (1ª Pedro 1:3-4 / 2ª Pedro 1:3-4) y crezcamos en el Señor (Efesios 1:4-23). 1.- ¿Qué somos ahora que estamos en Cristo? a.- Somos escogidos (Efesios 1:4). - Desde antes de la fundación del mundo, Dios ya nos conocía y nos amaba, a pesar de nuestros defectos y pecados. El vio lo que podía hacer con cada uno de nosotros, cuando nos transformara a la imagen y semejanza de Cristo. A Jeremías le dijo: “Antes que nacieses te santifiqué, y te di por profeta a las naciones” Jeremías 1:5. b.- Somos santos: (Efesios 1:4-5). - Por medio del lavamiento de la Sangre de Cristo, hemos sido santificados y constituidos en Hijos de Dios. c.- Somos sin mancha:

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- Este proceso de purificación es tan perfecto que los rastros y manchas del pecado son borrados. Dios se ha presentado a si mismo, una Iglesia que no tiene mancha, ni arruga, ni cosa semejante (Efesios 5:25-27). La sangre de Cristo limpia nuestras conciencias de obras muertas para servir al Dios vivo”. Hebreos 9:14. d.- Somos predestinados (Efesios 1:5). - Dios sabía de antemano quienes iban a creer en Él y quienes lo iban a rechazar. La voluntad de Dios es que todos los hombres sean salvos (1ª Timoteo 2:4). “El es paciente para con todos, no queriendo que nadie perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”

(2ª

Pedro 3:9). Sin embargo la decisión de aceptar o rechazar es responsabilidad absoluta del hombre (Deuteronomio 30:19). El hombre decide por su salvación. Cuando Dios ve que una persona abrirá su corazón para recibirlo, lo guarda y lo preserva aún antes de conocerle a Él (Gálatas 4:1-7). e.- Somos aceptos en Cristo (Efesios 1:6) - Su gracia permitió a aquellos que habían pecado y a quienes se les debía castigar con la muerte, que su juicio recayera en su substituto, Jesucristo y llegar a declarar justos a los que fueron aceptados como perfectos ante Dios.

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f.- Somos herencia de Cristo (Efesios 1:11). - Somos partícipes de su herencia eterna. Al ser aceptados en el Amado, también se nos ha hecho partícipes de su victoria, de sus riquezas, de su gobierno (reyes), como dice el libro de Romanos, coherederos con Cristo de la herencia que Dios dio a su Hijo (Romanos 8:7). g.- Somos para la alabanza de su gloria (Efesios 1:12). - El propósito al escogernos y hacernos sus herederos, era que su nombre fuera glorificado por la vida de sus escogidos; que los hombres hablen bien de Dios por causa de sus hijos y que la hermosura de la santidad de Él, se refleje en cada uno de ellos. h.- Somos Sellados: (Efesios 1:13). - En el Nuevo Pacto se promete al Espíritu Santo dentro de cada creyente, con el fin de que los guiará y santiifcará. Jesús mismo nos dijo que Él nos recordaría todas las cosas, y nos revelaría esa gloria de Dios, la cual debemos manifestar. Pero también el Espíritu Santo, es la señal de que Dios tomó a una persona para su propiedad; el sello significa que algo no puede ser abierto, y puede ser tomado solo por su dueño, esto da una amplia seguridad al creyente para que no desmaye en la fe. i.- Somos propiedad de Dios (Efesios 1:14). - La Redención o compra ya fue efectuada por Cristo, por medio de su sangre preciosa. Ahora somos de Dios, por derecho legal. Cuando Melquisedec bendijo a Abraham claramente lo nombró

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propiedad exclusiva del Dios Altísimo “ Bendito sea Abraham del Dios Altísimo” Génesis 14:19. Se debe entender que todo le pertenece a Dios, pero la mayordomía sobre alguna criatura depende de su escogencia a Dios, si rechaza o acepta a Cristo (Juan 3:19).

j.- Somos su cuerpo: (Efesios 1:23). - Un cuerpo es algo vivo y además dirigido por una cabeza. El cuerpo de Cristo, la Iglesia es un ente vivo, por la vida que el Espíritu Santo de Dios le ministra. Es un cuerpo que debe hacer lo que la cabeza le indique, por lo tanto es santo, camina y hace lo que se le indica. El ser el cuerpo de Cristo, nos hace la manifestación física de lo que Cristo es en el Espíritu. k.- Somos su plenitud: (Efesios 1:23). - En potencia, todo lo que Jesús llegó a ser, está en nosotros, lo cual,

se

va

desarrollando

hasta

que

nosotros

también

alcancemos el grado de madurez que Él alcanzó, somos en verdad la plenitud de lo que Él fue como hombre. l.- Estamos sentadosen Lugares Celestiales con Cristo: (Efesios 2:6).

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m.- Somos herederos del cielo:( Efesios 2:19) - Abraham esperaba una ciudad cuyo arquitecto y constructor es Dios (Hebreos 11:9-10), de esta ciudadanía hemos sido hechos conciudadanos juntamente con Abraham, Isaac y Jacob. n.- Miembros de la Familia de Dios: (Efesios 2:19). - Hemos recibido la adopción de parte de Dios y esto nos coloca como los más cercanos a Dios y como linaje suyo. Esto también va acompañado de los beneficios de tan grande posición, desde la cual hasta los ángeles nos sirven (Hebreos 1:14). o.- Coherederos con Cristo: (Romanos 8:17). - Al vencer Jesús, recibió todas las cosas por herencia de Dios; al recibirlo nosotros como Salvador, nos hace sus hijos y participamos con Él de sus riquezas. NOTAS:

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