Parroquia San Pedro de Atico Prelatura de Caravelí
INTRODUCCION VIA CRUCIS DE LOS JOVENES Caminar es un símbolo y un resumen de nuestra vida de creyentes. Participar en el Vía Crucis supone de esfuerzo y sacrificio; pero también de ilusión y esperanza. Para la reflexión, en este Via Crucis nos sirve de guía: las imágenes que contemplamos en cada estación, la palabra de Dios que nos revela el sentido de los hechos, el ejemplo y las palabras del Papa Francisco que, contundentemente hace un llamado a tomar conciencia a la iglesia a ocuparse de los jóvenes sobre todo aquellos jóvenes que viven en un contexto de guerra y predican la violencia, en una innumerable variedad de formas: secuestro, extorsiones, crimen organizado, trata de persona, esclavitud, explotación sexual, estupor de guerra, etc.; jóvenes que son víctimas de diversos tipos de persecuciones incluso la muerte. (Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional n°41). Son tantas las cruces que la sociedad y nuestros padres han impuesto a los jóvenes, que los alejan de la verdadera Cruz que es Vida, que es Cristo resucitado. Ahora honremos plenamente a Cristo y contribuyamos dentro de la iglesia a la salvación del mundo como los santos, quienes fueron iluminados por la sabiduría de la cruz. Ritos iníciales P. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espirito Santo R. Amén. Oremos: Oh Dios, que has redimido al hombre con la sangre preciosa de tu Hijo Unigénito, concede a todos nosotros la sabiduría de la cruz para celebrar con fe los misterios de la pasión de tu hijo y gustar la dulzura de tu perdón. Por nuestro Señor Jesucristo tu Hijo… 1. Primera estación JESUS ES CONDENADO A MUERTE. P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos: R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “Pilatos pregunto a los sumos sacerdotes y al pueblo: Que hago con Jesús, llamado el Mesías? Contestaron todos:
Que lo crucifiquen. Al ver Pilatos que todo era inútil…les soltó a Barrabas; y a Jesús después de azotarlo, lo entregó para que lo crucificaran”. L2. Ha llegado la hora y Jesús se entrega libremente, por nuestra redención, cumpliendo la Voluntad del Padre. Todos lo han abandonado. Estas solo y es condenado. En la soledad y los abandonos, en las injusticias, y sin sentidos de que son víctimas tantos de nuestros hermanos hoy, Jesús sigue siendo abandonado y condenado. L3. Reflexión del Papa Francisco Los jóvenes desean ser escuchados Los jóvenes están llamados continuamente a tomar decisiones que orientan su existencia; expresan el deseo de ser escuchados, reconocidos y acompañados. Muchos sienten que su voz no es considerada interesante ni útil en el contexto social y eclesial. En varios ámbitos se observa una escasa atención a su grito, en particular al de los más pobres y explotados, así como la carencia de adultos dispuestos a escuchar y ser capaces de hacerlo. P. Oremos: Por los que sufren condenas injustas. Para que aprendamos a nunca condenar. Señor Jesucristo, que fuiste conducido al suplicio de la cruz por la rendición del mundo; haz que, asociados a tu pasión, amemos a Dios, haciendo el bien a nuestros hermanos. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. Canto: Perdón, oh Dios mío (popular) juntos como hermanos o Padre nuestro. 2. Segunda estación JESUS CARGA CON LA CRUZ P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos: R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “El soporto nuestro sufrimiento y aguanto nuestros dolores; fue traspasado por nuestras rebeliones, triturado por nuestros crímenes. Nuestro castigo saludable cayó sobre él, sus cicatrices nos curaron”. L2. Sobre los hombros de Jesús cae el peso de la cruz infamante. Es el peso de los sufrimientos, las humillaciones y los pecados de todos los hombres, de todos nosotros. Pero la cruz será, por obra del amor, el instrumento de nuestra redención.
En este mundo nuestro, que no entiende la cruz, sigue habiendo hombres y mujeres fuertes, que cargan con la cruz de las pruebas y sufrimientos y caminan unidos a Cristo, testimoniando y haciendo resplandecer las esperanzas. L3. La reflexión del Papa Francisco Los emigrantes como paradigma de nuestro tiempo Las migraciones pueden tener lugar dentro del mismo país o bien entre países distintos. La preocupación de la iglesia atañe en particular aquellos que huyen de la guerra, de la violencia, de la persecución política o religiosa, de los desastres naturales-debidos, entre otras cosas, a los cambios climáticos-y de la pobreza extrema: muchos de ellos son jóvenes. En general, buscan oportunidades para ellos y para sus familias. Sueñan con un futuro mejor y desean creas las condiciones para que se haga realidad. P. OREMOS: Por los obligados a soportar pesadas cruces. Para que sepamos llevar el peso de nuestras responsabilidades y trabajos. Escucha, oh Dios, nuestras oraciones y danos la gracia de imitar la pasión de tu hijo, para llevar con serena y fortaleza nuestra cruz de cada día. Por Jesucristo nuestro señor. Amén. 3.- Tercera estación JESUS CAE POR PRIERA VEZ P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos: R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “Ofrecí la espalda a los que me apaleaban, las mejillas a los mesaban mi barba; no me tape el rostro ante ultrajes y salivazos. El señor me ayuda, por eso no sentía ultrajes”. L2. Jesús, caído bajo el peso de la cruz, nos hace ver bien claro que asume radicalmente la experiencia de nuestra debilidad humana. Jesús se identifica con todos los que caen, con los que se equivoca, con los que no pueden o no saben estar de pie; con los que sufren por los fracasos, las desilusiones, los olvidos, el cansancio. Así da sentido a nuestra vida. L.3 Reflexión del Papa Francisco Familia y relaciones entre generaciones La familia sigue siendo el principal punto de referencia para los jóvenes. Los hijos aprecian el amor y el cuidado de los padres, dan importancia a los vínculos familiares,
y esperan lograr a su vez una familia. Sin duda, el aumento de separaciones, divorcios, segundas uniones y familias mono parentales pueden causar en los jóvenes grandes sufrimientos y crisis de identidad. A veces deben hacerse cargo de responsabilidades desproporcionadas para su edad, que les obligan a ser adultos antes de tiempo. Los abuelos, con frecuencia, son una ayuda decisiva en el afecto y la educación religiosa: con su sabiduría son un eslabón decisivo en la relación entre generaciones. P. Oremos Señor con tu anonadamiento, has elevado al mundo caído. Haz que nos acordemos de ti en nuestras pruebas y desfallecimientos para que nunca falle nuestra fidelidad a Tí. Tú que vives por los siglos de los siglos. Amén Canto: Sí, me levantaré…o danos un corazón grande para amar… 4.- Cuarta estación JESUS ENCUENTRA A SU SANTISIMA MADRE P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “María y José llevaron a Jerusalén para presentarlo al Señor. Simeón los bendijo diciendo a María su madre: Mira, éste está puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; será como una bandera discutida. Y a ti, una espada te trapazará el alma”. (Lc 2,34-35). L2. María, la esclava del Señor, sale al encuentro a Jesús, que hace la Voluntad del Padre. El uno frente al otro y en redoblarse su dolor, pero también se renueva su entrega a la Voluntad de Dios. A todos los que queremos unirnos a Jesús en el sufrimiento, María nos sale al encuentro y nos da fortaleza y esperanza. L3. Reflexión del Papa Francisco La importancia de la maternidad y la paternidad Madres y padres tienen roles distintos pero igualmente importantes como puntos de referencia a la hora de formar a los hijos y trasmitirles la fe. La figura materna sigue teniendo un papel que los jóvenes consideran especial para su crecimiento, aunque no es suficientemente reconocido bajo el perfil cultural, político y laboral. Muchos padres desempeñan su papel con dedicación, pero no podemos esconder que, en algunos contextos, la figura paterna resulta ausente o evanescente, y en otros opresiva o autoritaria. Estas ambigüedades también se reflejan en los ejercicios de la paternidad espiritual.
P. Oremos Por las madres que sufren por la vida y por la madre que sufren por la muerte de sus hijos. Para que hagamos siempre la voluntad de Dios. Señor, Tú has querido que tu Madre compartiera contigo los sufrimientos de la cruz. Concédenos que, al recordar los dolores de la Virgen María, completemos en nosotros, a favor de tu Iglesia, lo que falta a tu pasión. Tú que vives i reninas por los siglos de los siglos. Amén. Canto: Madre de todos los hombres enséñanos…. O Dios te Salve María… 5. Quinta estación EL CIRINEO AYUDA A JESUS P/ Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “Mientras la conducían, echaron mano de un cierto Simón de Cirene, que volvía del campo, y le cargaron de la cruz para que la llevase detrás de Jesús”. (LC 23,26). “Ayudaos mutuamente a llevar vuestras cargas y cumplid así la ley de Cristo.” (Gal 6,2). L2. El evangelio a conservado su nombre: Simón; un hombre que <pasaba por allí> y que, sin saberlo, se encontró de pronto sirviendo al propio Dios, que realizaba en Jesucristo la salvación del mundo. Su gesto es el del cristiano que se compromete con sus hermanos, que comparte su dolor, que los ayuda y los acompaña con la cruz de cada día. Sabemos que Jesús dice a quienes si obran: “conmigo lo hicisteis”. L.3 Reflexión del Papa Francisco Amistad y relaciones entre pares La amistad y las relaciones, a menudo también en grupos más o menos estructurados, ofrece la oportunidad de reforzar competencias sociales y relacionales en un contexto en que no se evalúa ni se juzga a la persona.la experiencia de grupo constituye a su vez un recurso para compartir la fe y para ayudase mutuamente en el testimonio a su vez un recurso para compartir la fe y para ayudarse mutuamente en el testimonio. Los jóvenes son capaces de guiar a otros jóvenes y de vivir un verdadero apostolado entre sus amigos. P. Oremos Por los indiferentes. Para que ayudemos a los demás a llevar sus cruces.
Señor, con que amor llevaste miraste a aquel hombre que llevó tu cruz … Ayúdame a llevar la cruz de los que sufren física o moralmente, viviendo en ellos un signo privilegiado de tu presencia en el mundo. Tú que vives por los siglos de los siglos. Amén. Canto: a ti levanto mis ojos… o un mandamiento nuevo nos dio el Señor… 6.- Sexta estación. LA VERONICA LIMPIA EL ROSTRO DE JESUS P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L.1 “No hay en el parecer, no hay hermosura que atraiga las miradas, ni belleza que agrade. Despreciado, desecho de los hombres, varón de dolores, conocedor de todos los quebrantos, ante quien se vuelve el rostro menospreciado, estimado en nada”. L.2 El rostro desfigurado de Jesús, el Siervo de Dios paciente, que contemplamos en esta estación, nos remite a los rostros de tantos hermanos nuestros, marcados por el sufrimiento. Verónica significa “verdadera imagen”. Su gesto nos invita a descubrir su imagen de Dios en nuestros hermanos que sufren y a servirlos de tal manera que quede grabada en nosotros la verdadera imagen de Jesús. L.3 Reflexión del Papa Francisco. Formas de vulnerabilidad: el mundo del trabajo El mundo del trabajo sigue siendo un ámbito en el que los jóvenes expresan su creatividad y la capacidad de innovar. Al mismo tiempo experimentan formas de exclusión y marginación. La primera y la más grave es el desempleo juvenil, que en algunos países alcanza niveles exorbitados. Además de empobrecerlos, la falta de trabajo cercena en los jóvenes la capacidad de soñar y de esperar, y los priva de la posibilidad de contribuir al desarrollo de la sociedad. En muchos países esta situación se debe a que unas franjas de población juvenil se encuentran desprovistas de las capacidades profesionales adecuadas, también debido a las deficiencias del sistema educativo y formativo. Con frecuencia la precariedad ocupacional que aflige a los jóvenes responde a la explotación laboral por intereses económicos. P. Oremos Por los rechazados, los despreciados, los excluidos. Para que demos siempre la cara como verdaderos creyentes. Señor concédenos una gran valentía para que podamos dar testimonio de Tú e las dificultades. Imprime tu imagen en nosotros para que
sepamos revelarte ante los hombres. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. Canto: Perdona a tu pueblo Señor o: Padre Nuestro. 7.- Séptima estación JESUS CAE POR SEGUNDA VEZ P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L. 1. “Cristo padeció su pasión por ustedes dejándoles un ejemplo para que sigáis su huellas… Cargando con nuestros pecados subió al leño, para que, muertos al pecado, vivamos para la justicia. Sus heridas nos han curado”. (1Pe 2,23-34) L. 2. Con la segundo caída Jesús nos ayuda a sentir más presentes y actuales su dolor, su soledad, y su cercanía junto a nosotros. El se hace plenamente solidario de nuestras flaquezas y desfallecimientos y sufre en los tropiezos y caídas de los hombres y mujeres de hoy. Y para que nadie desespere vuelve a levantarse abrazado a su cruz. L.3 Reflexión del Papa Francesco Violencias y persecuciones “Muchos jóvenes viven en contextos de guerra y padecen la violencia en una innumerable variedad de formas: secuestros, extorsiones, crimen organizado, trata de seres humanos, esclavitud y explotación sexual, estupro de guerra, etc. A otros jóvenes, a causa de su fe, les cuesta encontrar un lugar en sus sociedades y son víctimas de diversos tipos de persecuciones, e incluso de la muerte. Son muchos los jóvenes que, por constricción o falta de alternativas, viven perpetrando delitos y violencia: niños soldados, bandas armadas y criminales, tráfico de drogas, terrorismo, etc. Esta violencia trunca muchas vidas jóvenes. Abusos adicciones, así como violencias y comportamientos negativos son algunas de las razones que llevan a los jóvenes a la cárcel, con una especial incidencia en algunos grupos étnicos y sociales. Todas estas situaciones plantean preguntas e interpelan a la iglesia. P. Oremos Por los que protestan, se quejan y se lamentan inútilmente. Para que demos frutos de conversión. Concédenos, Señor, ser conscientes del mal que nos aprisiona y que esclaviza a nuestro mundo 8.- Octava Estación JESUS ENCUENTRA A LAS MUJERES DE JERUSALEN
P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “Lo seguía un gran gentío del pueblo, y de mujeres que se daban de golpes y lanzaban lamentos por el. Jesús se volvió hacia ellas y les dijo: - Hijas de Jerusalén, no lloréis por mi llorad por vosotras y por vuestros hijos; porque asa tratan al leño verde. Que pasara con el seco? L2. Las palabras de Jesús a las mujeres son, a la vez, un reproche y una exhortación; para ellas y para nosotros. Jesús deja bien claro que la compasión que se queda en lágrimas es estéril. Llorar no es suficiente. A nuestros pecados y a sus consecuencias debemos aplicarles todos los remedios a nuestro alcance. Jesús quiere de nosotros lágrimas de conversión, que transformen nuestra vida. L.3 Reflexión del Papa Francisco Marginación y malestar social Son todavía más numerosos en el mundo los jóvenes que padecen de formas de marginación y exclusión social por razones religiosas, étnicas o económicas. Recordamos la difícil situación de adolecentes y jóvenes que quedan embarazadas y la plaga del aborto, así como la difusión del VIH, las varias formas de adicción (drogas, juegos de azar, pornografía, etc.) y la situación de los niños y jóvenes de la calle, que no tienen casa ni familia ni recursos económicos; merecen atención especial los jóvenes presos. P. Oremos Por los que protestan, se quejan y se lamentan inútilmente. Para que demos frutos de conversión. Concédenos Señor, ser conscientes del mal que nos aprisiona y que nos esclaviza a nuestro mundo. En tu misericordia, líbranos de todo mal y llévanos a la salvación que Cristo nos alcanzó. Él que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén. Canto. Perdona a tu Pueblo, Señor… o: Ven, ven Señor no tardes… o Padre nuestro. 9. Novena estación JESUS CAE POR TERCERA VEZ P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L.1 “Venid a mi todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviare cargad con mi yugo y aprended de mi que soy manso y humilde de corazón, y encontráis vuestro descanso. Por mi yugo es llevadero y mi carga ligera.”(Mt 11, 28.30)
L.2 La insistencia de la devoción popular en las caídas de Jesús camino del Calvario, siendo así que el Evangelio no las menciona, nace, sin duda de la conciencia de nuestra debilidad y de nuestras recaídas. Esta tercera caída no previene contra el miedo, contra la angustia, y nos asegura que no existe el fracaso definitivo; que existen la vida, la esperanza, la felicidad… L.3 Reflexión del Papa Francisco La experiencia del sufrimiento Contrariamente a un estereotipo generalizado, el mundo juvenil también está profundamente marcado por la experiencia de la vulnerabilidad, de la discapacidad, de la enfermedad y del dolor. En muchos países crecen, sobre todo en los jóvenes, las formas de malestar psicológico, depresión, enfermedad mental y desordenes alimentarios, vinculados a experiencias de infelicidad profunda o a la incapacidad de encontrar su lugar en la sociedad, por último, no hay que olvidar el trágico fenómeno de los suicidios. Los jóvenes que viven estas diversas condiciones de malestar y sus familias cuentan con el apoyo de comunidades cristianas, aunque no siempre tienen los medios adecuados para acogerlos. P. Oremos Por los cansados de tantas caídas en su vida. Para que no caigamos en la tentación. Oh Dios, que das fuerzas a los débiles y constancia a los creyentes, Has que, reconociendo nuestras limitaciones, nos apoyemos en ti y perseveremos en la fe, en la esperanza y el amor. Por Jesucristo nuestro señor. Amén. Canto: Levanto mis ojos a los montes ¿de dónde …o: Padre nuestro… 10.- DECIMA ESTACION JESUS ES DESPOJADO DE SUS VESTIDURAS P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “Los soldados, cuando crucifican a Jesús, cogieron su ropa, haciendo cuatro partes, una para cada soldado, y apartaron la túnica. Era una túnica sin costura, tejida toda de una pieza de arriba abajo. Y se dijeron: -No la rasgamos, si no echemos a suerte, a ver a quien le toca. Así se cumplió la Escritura: se repartieron mis ropas y echaron a suerte su túnica.”Mt 11,28.30) L2. Es el expolio, la humillación, la pobreza absoluta. Nada le queda al señor, mas que un madero. Cristo es el camino para llegar a Dios; pero Cristo está en la Cruz, y para llegar hasta. Él hay que tener el corazón libre, desasido de las cosas de la tierra. Desde la desnudez total de Cristo podemos entender mejor porque él llama bienaventurados a los pobres, y porque vestir al desnudo es garantía de salvación.
L.3 Reflexión del Papa Francisco Cambios es curso Los jóvenes reconocen que el cuerpo y la sexualidad tienen una importancia esencial para su vida y en el camino del crecimiento de su identidad, ya que son imprescindibles para vivir la amistad y la efectividad. En el mudo contemporáneo, sin embargo, se observan fenómenos en rápida evolución al respecto. Ante todo, los avances de la ciencia y de las tecnologías biomédicas inciden sobre la percepción del cuerpo, induciendo a la idea de que se puede modificar sin límite. Además, en algunos contextos juveniles, se difunden un cierto atractivo por comportamientos de riesgos como instrumento para explorarse a sí mismos, buscando emociones fueres y obtener un reconocimiento. Junto a fenómenos antiguos que permanecen, como la sexualidad precoz, la promiscuidad, el turismo sexual, el culto exagerado del aspecto físico, hoy se constata una gran difusión propio cuerpo en la red. Estos fenómenos, a los que expuestas las nuevas generaciones, constituyen un obstáculo para una maduración serena. Indican dinámicas sociales inéditas, que influyen en las experiencias y las decisiones personales, que son así el terreno para una especie de colonización ideológica. P. OREMOS Por los que despojan y humillan a los demás. Para que creamos en la bienaventuranza de la pobreza. Danos, Señor, el espíritu de una constante conversión: que la austeridad y desprendimiento nos lleven a servirnos de tal modo de los bienes pasajeros, que estemos siempre adheridos a los bienes eternos. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. Canto: libertador de Nazareth …o: Padre Nuestro … 11.- UNDECIMA ESTACION JESUS ES CLAVADO EN LA CRUZ P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “Conducían también a otros dos malhechores para ajusticiarlos con él. Y cuando llegaron al lugar llamado.” La Calavera, “lo crucificaron allí, a él y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Jesús decía: -Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. El pueblo estaba mirando.”(Lc23, 32-35) L2. El amor hasta el extremo has llevado a Jesús al Calvario. Clavado en la Cruz, abre sus brazos en ademan de ofrenda a Dios y de amor supremo a todos los hombres, a cada uno de nosotros.
Ante este gesto de Jesús, debemos entender que creer en el crucificado es abrir los brazos al hermano, es entender la vida como don gratuito de Dios, que debemos compartir con los demás. L.3 Reflexión del Papa Francisco El recuso valioso de la vulnerabilidad La <cultura del descarte>: los jóvenes son sus primeras víctimas. Sin embargo, esta cultura puede impregnar tanto a los jóvenes como a las comunidades cristianas y a sus responsables, contribuyendo de este modo a la degradación humana, social y medio ambiental que aflige nuestro mundo. Para la iglesia se trata de una llamada a la conversación, a la solidaridad y a una renovada acción educativa, para hacerse presente de modo particular en estos contextos de dificultad. Los jóvenes que viven en estas situaciones también tienen recursos valiosos que compartir con la comunidad y nos enseña a afrontar el límite, ayudándonos a crecer en humanidad. Es inagotable la creatividad con la comunidad animada por la alegría del Evangelio puede llegar a ser una alternativa al malestar y a las situaciones de dificultad. De este modo, la sociedad puede hacer experiencia de que la piedra que desecharon los arquitectos puede convertirse en piedra angular (cf. Sal 118,22; Lc 20,17; Hch 4,11; 1P 2,4). P. OREMOS Oremos por los que tienen su cuerpo roto, clavado y traspasado. Para que reavive en nosotros el sentido del pecado del pecado. Señor Jesucristo, que por la salvación de todos los hombres extendiste tus brazos en la Cruz: acoge la ofrenda de nuestras acciones y haz que toda nuestra vida sea signo y testimonio de tu redención. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. Canto: Victoria, tú reinarás…o: Padre nuestro 12.- DUODECIMA ESTACION JESUS MUERE EN LA CRUZ P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. Junto a la Cruz esta su Madre, María, con otras santas mujeres. Jesús la mira, y mira después al discípulo que EL ama, y dice a su Madre: -Mujer, ahí tienes a tu hijo. Luego, dice al discípulo: -Ahí tienes a tu madre.(Jn19,26-27) La tierra sumida en tinieblas. Son cerca de las tres, cuando Jesús exclama: -Dios mío, Dios mío por qué me has abandonado? (Mt 27,46) Después, sabiendo que todas las cosas están a punto de ser consumadas, para que se cumpla la Escritura, dice: -Tengo sed. (Jn 19,28)
Los soldados empapan en vinagre una esponja, y poniéndola en una caña de hisopo se le acercan a la boca. Jesús sorbe el vinagre, y exclama: -Todo está cumplido. (Jn 19,30) El velo del templo se rasga, y tiembla la tierra cuando clama el Señor con una gran voz: -Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. (Lc 23,46) Y expira. L3. Permanecemos en silencio meditado la muerte de Cristo…. 13. Decimotercera estación JESUS ES BAJADO DE LA CRUZ P/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos. R/. Pues por tu Santa Cruz redimiste al mundo. L1. “Fueron los soldados, y viendo que ya había muerto, uno de ellos, con la lanza, le traspasó el costado al punto que salió sangre y agua. Después de esto, José de Arimatea pidió a Pilatos que le dejara llevarse el cuerpo de Jesús”. (Jn 19, 32-34. 38). L2. José y Nicodemo toman el cuerpo de Jesús, bajándolo de la cruz, y lo dejan en brazos de su Santísima Madre. María, Madre de la Iglesia. A partir de esta hora, todos los que van a hacer de la muerte y resurrección de su Hijo, la tendrán siempre por madre. L3. Reflexión del Papa Francisco Es indispensable prestar atención para estar cerca de nuevas formas de pobreza y fragilidad donde estamos llamados a reconocer a Cristo sufriente, aunque esos aparentemente no nos aporte beneficios tangibles e inmediatos: los sin techo, los toxico dependientes, los refugiados, los pueblos indígenas, los ancianos cada vez más solos y abandonados, etc. Los migrantes me plantean un desafío particular por ser Pastor de una Iglesia sin fronteras que se siente madre de todos. Por eso exhorto a los países a una generosa apertura, que en lugar de temer la destrucción de identidad local sea capaz de crear nuevas síntesis culturales. P. OREMOS Por los que se han quedado solos en la vida. Para que seamos fieles hasta el final. Bajo tu protección nos acogemos, santa madre de Dios; no deseches las súplicas que te dirigimos en nuestras necesidades antes bien, líbranos siempre de todo peligro, oh Virgen gloriosa y bendita. Canto: Madre de todos los hombres, enséñanos a decir… o oh María, Madre mía , oh consuelo del mortal…
14. Decimocuarta estación JESUS ES COLOCADO EN EL SEPULCRO
L1. “José de Arimatea, tomando el cuerpo de Jesús, lo envolvió en una sabana limpia, lo puso en el sepulcro nuevo que se había excavado en la roca, rodó una piedra grande a la entrad del sepulcro y se marchó. María Magdalena y la otra María se quedaron allí enfrente del sepulcro” ( Mt 27, 59- 61) L2. Del grano de trigo que se entierra nacerá la espiga. Los que mataron el cuerpo de Jesús no pudieron arrebatarle su intima unión con el Dios de la vida. Y Dios tiene siempre la última palabra, la palabra de Vida. Hemos de hacer nuestra la vida y la muerte de Cristo. Morir a nosotros mismos, para que la vida y el amor de Cristo estén en nosotros. L3. Reflexión del Papa Francisco Algunos desafíos del mundo actual. La humanidad vive en estos momentos un giro histórico, que podemos ver en los adelantos que se produce en diversos campos. Son de alabar los avances que contribuyen al bienestar de la gente, como, por ejemplo, en el ámbito de la salud, de la salud, de la educación y de la comunicación. Sin embargo la mayoría, no podemos olvidar que la mayoría de los hombre y mujeres de nuestro tiempo precariamente el día a día con consecuencias funestas. Algunas patologías van en aumento. El miedo y la desesperación se apoderan del corazón de numerosas personas, inclusive en los llamados países ricos. La alegría de vivir frecuentemente se apaga, la falta de respeto y la violencia crecen, la inequidad es cada vez más patente. Hay que luchar para vivir y, a menudo para vivir con poca dignidad. P. OREMOS Por el descanso eterno de todos los difuntos. Para que pongamos nuestras vidas en las manos del Padre. Danos, oh Padre, la gracia de unirnos en la fe a la muerte y sepultura de tu hijo, para resucitar con él a la vida nueva. Él que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén. Canto. Acuérdate de Jesucristo resucitado… Rito de conclusión Descienda, Señor, tu bendición sobre nosotros ya que nos has rescatado con la muerte de tu Hijo; venga el perdón y la consolación, se acreciente la fe, se refuerce la certeza de la redención eterna. Por Cristo nuestro Señor. Amén. Bendición Con la Cruz el sacerdote bendice a la asamblea…