Tebasland.docx

Caracas, 18 de diciembre 2018.

Escrito por Manuel Carranza

Profesora: Rossana Hernández

EL TEATRO Y LA MASCARA

TEBASLAND

El Trasnocho Cultura de Caracas se ha vuelto una tribuna donde muchos artistas y dramaturgos venezolanos han presentado sus más icónicas piezas teatrales, un lugar donde se respira arte donde grandes y chicos asisten para despejar su mente y escapar de la agitada y congestionada ciudad capital.

Hace unas semanas atrás, un sábado, buscando distraerme recordé una obra que mi profesora de actuación me recomendó ver para luego ser discutida en clases, ese día fui a ver TEBASLAND del escritor uruguayo Sergio Blanco, al entrar a la sala me encuentro con un escenario completamente distinto a lo que uno no está acostumbrado a ver en obras teatrales en Venezuela, una cancha de baskett, allí se desarrollaría toda la trama de la historia durante las próximas horas.

Me senté en la parte izquierda del teatro, los minutos pasaban y la hora pautada para dar inicio a la función se retrasaba un poco más, luego uno de los actores principales se dirige al público y comenta que por problemas técnicos la obra iniciará un poco más tarde de lo habitual, acto seguido el mismo actor comienza a dialogar con los presentes para hacer algo de tiempo, en ese instante comenzó todo, en ese instante inició la magia, en donde no sabía realmente que era real

y que era ficción, porque vaya en cualquier obra teatral como en cualquier película de cine uno está claro que lo expuesto allí no es 100 % real, aunque se asemeje a la realidad en cualquiera de las cosas, en fin, la función comenzó, de repente me topé con dos muy buenos actores en escena, uno ya lo había visto en algunas obras teatrales ( Kevin Jorges), el otro nunca lo había visto actuar (Elvis Chaveinte) pero ambos demostraban ser excelentes y la química que desbordaban conforme pasaba las horas era fenomenal.

La historia en resumida cuenta va de un dramaturgo que quiere abordar la historia de un parricida (Martin Santos) confeso desde la cárcel para posteriormente llevar dicha historia a las tablas para ellos se entrevista en varias ocasiones con él para saber todo los motivos que lo llevaron al asesinato de su padre, a su vez estudia todo lo concerniente a su personalidad y comportamiento etc. La trama te va llevando a diferentes climas durante la historia desde lo pasional, emocional y trágico que junto a la música, el juego de luces y la escenografía jugaron un papel fundamental con la construcción de la pieza y, conjugado con las actuaciones de los actores y los desplazamientos escénicos hacían una maravilla visual.

Dentro del desarrollo de la historia los hechos que más me conectaron y me pusieron a pensar y analizar fue el motivo que llevó al protagonista de la trama a asesinar a su padre, ya sabemos las motivaciones que llevaron a Martin Santos a cometer terrible acto, pero viéndolo desde mi punto de vista como espectador no me puedo imaginar hacer algo así, ya que para cualquier persona apegada a su progenitor presenciar esa escena donde se cuenta cómo sucedieron los hechos resulta un poco fuerte, ya que soy apegado a mi papá y aunque tengo más de un año que no lo veo porque se fue del país, eso pudo mover varias fibras en mí.

Otros aspectos importantes que captaron mi atención dentro de la historia fue ese sentimiento homosexual reprimido que sentía el parricida Martin Santos, sentimientos que pudimos observar que salieron a flote en algún momento comentando sentir cierta atracción hacia el dramaturgo, también en momentos donde comentó que llegó a prostituirse, el caso es que me puse a pesar cómo será estar encerrado en una cárcel y no poder expresar libremente tu orientación sexual, eso para cualquier ser humano debe ser fuerte, independientemente de lo grave de los hechos que tu hayas cometido, eso significa reprimir tus sentimientos por el tiempo que dures allí preso que pueden ser meses, días o años.

Pero el aspecto que más me movió fue ese sentimiento que sentía él hacia su madre, ese amor que todo ser humano puede llegar a sentir por el ser que nos da la vida, que nos cría, que está en las buenas y en las malas, creo que fue una de las cosas que más me conectó y me hizo emocionar mucho porque todos sentimos ese amor desmedido hacia nuestra progenitora y el solo hecho de pensar de estar en una cárcel sin tener a nadie que me vaya a visitar , sin tener el apoyo emocional de una madre resulta ser algo conmovedor y más el saber que esa persona no está viva, que nunca podrá ir a verte eso le parte el corazón a más de uno. Para finalizar debo confesar que al principio la historia se me hizo un poco larga, un poco densa, no sabía si me había gustado o no, pero conforme pasaban los días y las semanas y observando comentarios que hacían otros compañeros y amigos de estudios o de trabajo de lo genial que le parecía la obra, mi mente comenzó a entrar en una confusión y recordé una clases donde mi profesora de actuación comentó que el venezolano está acostumbrado a ver obras comerciales, obras poco profunda que buscan hacer reír y allí pensé claro!!! Mi mente tal vez está adaptada a ese tipo de obras, ya que son las que suelo ver porque bueno uno como venezolano busca reírse en medio de tanto estrés que se vive a diario. Es por ello que analicé la obra desde lo artístico, desde lo estético, desde las interpretaciones actorales y fue cambiando mi concepto al respecto y pude ver y apreciar un poco más del trabajo que se hizo, que aunque me gustó en un principio no estaba tan seguro del todo, espero que mis gustos teatrales puedan ir cambiando conforme pase el tiempo.