El día cuatro de septiembre de 2009, partimos de Madrid cuatro compañeros de armas con un destino maravilloso, recorrer parte del Camino de Santiago (una distancia de ciento cincuenta kilómetros, aproximadamente). Éstos son los compañeros: José Pérez Blesa, andarín y administrador. Pedro Pérez Blesa, mentor del camino y andarín. Rafael Nalda Morant, andarín, además como a él le gusta decir, paquete de viaje. Por último, José David Pérez Iturralde, conductor del coche de apoyo y maletero. Nuestro primer destino, la bonita ciudad de León; Llegamos de noche y degustamos una serie de raciones, regadas con vino y cerveza; Terminado el ágape, nos alojamos en el hotel, situado en el casco viejo, fin de nuestra primera jornada. 2ª jornada, día cinco Iniciamos el día con un gran desayuno, (clásico en esta tierra) finalizado el mismo, dirigimos nuestros pasos hacia la puerta de correos, obra del insigne arquitecto Gaudí, cita geográfica para encontrarnos con otro compañero de armas, nuestro buen Rubio Huerto y su esposa, Angelines. Los cuales se habían desplazado desde Zaragoza, sólo para vernos, gracias familia RUBIO). Ya, todos juntos y ver algunas joyas arquitectónicas de la ciudad como la Catedral, casa de los Botines…., encaminamos nuestros pasos hacia el Palacio de San Marcos, habilitado como parador nacional y después de tomar unas cervezas, retrocedemos en busca de restaurante. Lo encontramos en un pequeño pasaje y situado en el sótano; Se divisaba poca clientela y sospechamos baja calidad, resultó tener una buena carta, digerimos las viandas con sumo placer y regadas con un buen vino del Bierzo. A la salida del restaurante, nos acomodamos en una terraza, tomando café, contando algunos chascarrillos y dando rienda suelta al buen humor. Decidimos partir hacia Astorga con el fin de girar visita cultural y acercarnos al punto de partida. Conocida Astorga por su cocido maragato y sus mantecadas, dicho sea de paso y para salir de dudas, compramos unos lotes de repostería. Giramos visita al Palacio de Gaudí, iniciada su construcción para ser sede episcopal así como la catedral, después como he mencionado ultimamos las compras y aproximadamente a las nueve de la tarde/noche decíamos adiós a nuestros José Ángel y Angelines ¡¡Que bello ha sido el encuentro y que dura la despedida!! El resto del grupo continuamos el camino marcado por el mentor Pedro y destino a la primera población donde se va a iniciar nuestra aventura………. TRIACASTELA. Nos dieron de cenar en un pequeño bar, dado la hora de llegada y cerca de nuestra mesa, están cenando dos buenas mozas o dos mozas buenas, como queramos decir, tienen un pequeño apuro y nosotros que somos buenos peregrinos nos brindamos a ayudarlas en todo lo posible(sanamente se entiende)sus nombres MARIA ENGRACIA y CARMEN, deseando las buenas noches, nosotros a nuestro hotel y ellas al albergue, quedando en vernos al día siguiente.
3ª jornada, día seis Nos deleitamos con un buen desayuno, a las ocho partieron RAFA, PEPE y PEDRO para recorrer la primera etapa entre TRIACASTELA y SARRIA, acto seguido CARMEN y MARIA ENGRACIA, quien relata, me quedo recogiendo lo innecesario para la etapa y teniendo a mano la cartilla del peregrino para su posterior sellado. Antes de iniciar mi trayecto me encuentro con una familia con algún que otro apuro, nada que no podamos arreglar; El padre resulta ser también compañero de armas, detallo sus nombres: CONCHI (la madre) PEDRO (el padre) y sus hijos SUSANA Y JAVI. La ayuda que les debo prestar, consiste en una vez llegado a destino PEDRO, regresar al punto de partida a recoger su vehículo para volver a la ruta. Dirección SARRIA y conduciendo mi coche, admiro las bellezas naturales y de construcción, apreciando una que parece muy antigua, resultando ser el Monasterio de Samos, pensando…… hay que visitar su interior por la tarde. Ya en la localidad y en el hotel Roma, la impresión que me causa es agradable, se le ve cómodo a pesar de la categoría, espero a los caminantes nos dirigimos a la feria del pulpo, sestear un ratito y a eso de las seis nos encaminamos hacia el monasterio; Mala suerte, cerraban a las siete y no pudimos acceder al interior, así que nos conformamos con los alrededores, mereció la pena. Alrededor de las nueve, esperábamos a las mozas para cenar, comentaron de que ya lo habían hecho, nosotros tomamos un picnic en la habitación y bajamos a la terraza del hotel a tomar café, charla amigable un ratito y a descansar. 4ª jornada, día siete 7,30 de la mañana, diana, desayuno y partida de los tres compañeros para realizar el recorrido programado, seguidamente MARÍA y CARMEN, yo soy el último. Me dirijo hacia PORTO MARIN y observamos un pequeño pueblo medieval. Una pequeña historia, quedó inundado al construir una presa. Los habitantes de la población pidieron rescatar la iglesia, la cual fué desmontada piedra a piedra como así lo atestiguan sillares numerados y trasladándola a una colina. En PORTO MARIN, se une al grupo otro peregrino, PEDRO que viene de MURCIA, el cual no podría terminar el camino por problemas en los pies, total dejamos de ser diez y pasar a ser once. Con gran armonía y regocijo decidimos cenar todos juntos, ocupamos una mesa en el mesón y disfrutamos de una inolvidable cena, terminada la cual y ya en la terraza nos tomamos unos alpistes (copas en castellano) y siguiendo la buena camaradería comienza la hora musical, nos prestaron una guitarra y entonamos canciones de toda España, nuestra amiga CARMEN, voz de bajo y yo de alto, salieron tonos casi de profesionales los cuales todavía recuerdo. Con estas canciones y algunas cosas más hemos unido lazos que poco a poco hemos ido tejiendo. Alrededor de los dos de la madrugada nos retiramos a descansar.
UN PENSAMIENTO Esa noche no pude dormir
había pasado una estrella fugaz y con su brillo me había desvelado. Al dormirme por el cansancio venía hacia mí y desaparecía. Me dí cuenta que nunca se quedaría a mi lado. Si un día la encuentras amigo…… dile que un lucero olvidado la estará esperando.
5ª jornada, día ocho Es visible el cansancio en las caras de mis compañeros, el amigo RAFA por fin se ha desprendido de su mochila, aparición de alguna lesión, inicia la etapa con más lentitud que los hermanos BLESA, no ceja en su empeño, su amor propio le impide sucumbir y saca su raza de buen ‘paraca’. En CALA DEL REY, nos acomodamos en un pequeño y coqueto hotel(BELINDA) Por la tarde regreso a PORTO MARIN con la intención ya comentada de recoger el coche de los ‘pedros’; Al pasar por una cantina toda decorada en madera antigua, vino a mi recuerdo una poesía la cual aunque un poquito larga, la relato: ¡Chaval……..ponme un vasito de tinto que tengo seco el gaznate Puaggg……. qué malo es el condenao. Escúcheme usted compare, si me paga este vasito…….le canto unas soleares. ¡Aquí no se puede cantar…… los borrachos a la calle! ¡dile que se marche ya, echar de aquí a ese borracho! No me dieron tiempo a más, me cogieron por los brazos y muy pronto fui a parar en un charco de la calle. Pero……… escuchar desgraciaos!! éste que tenéis delante con la barba de tres días y más borracho que nadie, ha sido el número uno, el dueño y señor del cante,ha vivido en los hoteles, ha cantado en los palacios, le han brindao la faena los toreros de más clase y las mujeres más guapas se han vuelto para mirarle. ¿Que quién soy yo, se me olvidó aquella tarde que cantando para ella, no quiso escucharme. Que el aire lleva mentira el que diga que no miente que diga que no respira. Ni una palabra bonita de sus labios escuché, ya no cantas me dijiste ya nadie te puede ver, tú por un lado y yo por aquél. Hasta que un día feliz, mi Dios me lleve con él. En la citada población y rematada la jornada del camino, recorrimos las rutas de las iglesias de techo bajo (tascas) escuchamos música y a descansar.
6ª jornada, día nueve
Aciago día, dirección a ARZUA. Llegaron los peregrinos sobre las nueve de la noche, además el hotel no disponía de habitaciones libres para todos, pero prevaleciendo el espíritu de sacrificio el acomodo se realizó. Cena y a descansar. 7ª jornada, día diez Puntuales a la cita los hermanos BLESA, han iniciado la etapa, el resto, mas tardíos por el cansancio acumulado. Alrededor de las cuatro de la tarde, debo volver al puerto de Santa Irene para localizar a los rezagados, es decir CARMEN, MARÍA Y RAFA, los encontré en el alto del puerto en un bar y visiblemente cansados, llenos los pies de ‘mordeduras’ por los calcetines; Me comentan su deseo de llegar al siguiente pueblo y que los espere allí. Yo me dirijo a Vila Mayor, me encargo del hospedaje, se encuentra en un pequeño pueblo de sierra, tipo casa rural, patio central y cenador cubierto. La comida la hemos realizado los hermanos BLESA y yo. Acto seguido debo salir para llevar a los conductores a recoger sus vehículos, aprovechando el viaje de vuelta recojo a MARÍA, CARMEN y RAFA para trasladarlos a la casa rural. Una vez aseados, aún siendo una hora muy tardía, decidimos ir a cenar a Santiago, localizamos un restaurante con terraza exterior en un polígono industrial. Cuando volvimos a la casa rural, alrededor de la una de la madrugada, la noche estaba tan apacible y cálida que invitaba a pasear y escuchar buena música, así lo hice, entré en mi coche y me quedé dormido hasta las seis. UN NUEVO PENSAMIENTO Como juega la vida con los sentimientos la estrella que en mis sueños brilló días atrás se ha apagado, cambiando el brillo por oscuridad y amargura. Quiero seguir soñando, quiero seguir sintiéndome vivo si en verdad como dicen soy un sentimental, quiero seguir así aunque el dolor que te cause sea tan profundo que me cale el alma. Hoy la estrella brillará sola, pero en mi sueño no veré su destello aunque su recuerdo siempre vivirá en mí por el resto de mis días. 8ª jornada, día once Por fin llegó el gran día de la etapa final, PEPE y PEDRO, salieron hacia Monte do Gozo, sólo quedaban diez/once kilómetros para llegar, a RAFA, CARMEN y MARÍA, los trasladé al pueblo donde los había recogido el día anterior a ellos les quedaban alrededor de veinte kilómetros, de ellos la mitad de terreno ascendente, yo con la carga me fui hacia Santiago en busca del hotel México, reservé las habitaciones, aparqué el coche en el garaje y dirigí mis pasos al encuentro de PEDRO y PEPE. Localizados en la plaza de los Caballos, comimos, yo un arroz con bogavante y ellos marisco. No esperamos mucho tiempo y apareció CARMEN, todavía la veo, fatigada, y sin haber ingerido alimento, en su cara pude ver lágrimas de alegría por haber podido finalizar.
La primera dirección que tomó, hacia la catedral y a la salida nos fuimos a una terraza para que tomara alimento, RAFA y MARÍA, llegaron más tarde imagino con la misma emoción. Alrededor de las diez de la noche no reunimos todos, es decir los once para cenar en un típico restaurante en la calle San Pedro nº 16, no nos pueden acomodar a todos y nos
trasladamos a otro en las cercanías, una agradable cena que se prolongó hasta las dos de la madrugada; Despedida a PEDRO y familia así como a LUIS el ‘murciano’, dirigiéndonos acto seguido al hotel a descansar. 9ª jornada, día doce Despedida a CARMEN y MARÍA, nuestras buenas compañeras y amigas del camino, con tristeza los cuatro amigos iniciamos el viaje de regreso a MADRID, en el trayecto hacemos balance de los días pasados, resultando positivo para todos. Quiero pensar que este viaje ha afianzado más los lazos que nos unían en la vida militar y además hemos captado a un nuevo amigo, PEDRO BLESA, ocasión que tengamos contaremos con él. Quiero además darle un gran abrazo a nuestro cuarto paracaidista, el amigo RUBIO HUERTO, así como a cada una de las esposas ANNA, ANA, ANGELINES y SONSOLES. Como puse en mi mensaje, ha sido para mí un orgullo caminar con vosotros este tramo de la vida. Un afectuoso recuerdo para el matrimonio de la casa rural, JUAN CARLOS y AGUSTINA, así como a las cuatro niñas maravillosas que les acompañaban en el camino. PENSAMIENTO FINAL Tú me dijiste ¡vete¡ no quiero volver a llorar quiero volar libre como la gaviota anidar en mi camino como la cigüeña viajar como la golondrina que nadie me ponga frenos ni fronteras que nadie se fije en mí y pasar desapercibido. A mis amigos, RAFA, PEDRO, PEPE y JOSÉ ÁNGEL, a sus esposas y las dos guapas mozas que pasaron el valle con nosotros.
FIRMADO, JOSÉ DAVID PÉREZ ITURRALDE.