18 de agosto de 2007 En horas de la madrugada después de meditar sueño que me encuentro en un lugar que no conozco, había un pasillo largo y en el piso había una alfombra muy linda de tipo oriental en colores pasteles, en ella había un loto grande con pétalos muy suaves de color rosa pálido, blanco y amarillo muy tenue. Más adelante había un antebrazo tan fino que parecía de mujer, con un color y una piel muy fina, este antebrazo estaba palma hacia arriba. Luego miré hacia mi derecha y había un turbante hermoso color blanco perlado y tenía un velo hecho de cuentas de cristal muy fino de color tornasol y transparente. Más abajo había un vestido del mismo color y material que el turbante todo trabajado con finos cristales. El vestido parecía colgado en el aire.
19 de agosto de 2007-08-21 En esta madrugada después de la meditación soñé que estaba en la India visitando a Baba, pero lloraba desconsoladamente pues ya que era el último día que pasaría en la India y no había podido ver a Baba. En lo que estoy llorando desconsolada sentada en la fila frente a mi veo unos pies y miro mejor y era una túnica naranja, sin duda era Baba, levanto la mirada y me pregunta que por qué lloro, mientras me adelanta un pañuelo blanco el cual acepté. Le dije que lloraba porque ya tenía que viajar de regreso mañana y no le había visto. El sonrió e instruyo al seba para que pudiera ir a una entrevista privada. Cuando llegué al salón había otras personas, incluyendo a Mario, que también tenia un pañuelo blando en su mano. En esta ocasión Baba se sentó en su silla y Mario y yo quedamos frente a Baba, de pie, mandó que trajeran dos guirnaldas
blancas y entrego una a cada uno para colocarla el uno al otro. Al colocarle la guirnalda a Mario le dije que ante Baba lo aceptaba como mi compañero, Mario hizo lo mismo colocando la guirnalda en mi cuello. Luego de esto pedí a Baba si podía darle un beso el me dijo que si y bese su mejilla y luego me incliné a sus pies y los bese y puse mi mejilla en ellos, luego estaba sentada junto a él conversando en inglés, a veces en español y Baba me pregunta que quiere? Y le dije a ti Baba. El pregunta nuevamente qué quiere y le conteste a ti Baba. Me dijo entonces que no que en realidad en esta vida que quería y conteste a Ti Baba qué mas puedo yo querer si lo que necesito lo tengo y le conté la historia de la joven en la fiesta que daba un rey en donde cada uno podía tomar el objeto que mas le gustara pero solo uno, y la joven escogió al Rey sabiendo que al escogerlo todo lo que fuera del rey seria suyo. Baba rió y me pregunto que quien me había enseñado esta historia y le conteste alegre , mi maestro el Sr. Ramesch, seguimos conversando y recuerdo que le pedí a Baba que quería hablar ingles fluido , luego le dije que a pesar de la ceremonia con Mario lo cual me hacia muy feliz me faltaba algo , Baba pregunto que te hace falta, yo respondí , mi maestro el Sr. Ramesch, a lo que el respondió aquí esta y al decir esto El había movido su mano de arriba hacia abajo y allí al lado mío apareció el Sr. Ramesch, sonriendo. Recuerdo que Mario y yo permanecimos frente a Baba, fue entonces cuando Baba le pregunto a Mario si sabia como caminar conmigo de aquí en adelante a lo cual Mario no respondió y Baba le mostró con su mano como hacerlo ,Tal cual como el Sr. Ramesch me había enseñado, luego le explique a Mario que significado tenia la explicación que Baba le dio con sus manos. Baba le indico que yo seria su compañera en esta vida, dando a entender que en la otra no y Mario pregunto por que no. Baba le dijo que esta seria mi ultima vida y Mario le pregunto que por que no seria igual con él a lo que Baba contesto, porque tendrías que caminar igual que ella. Luego Baba beso mi frente y luego Baba puso la palma de su mano sobre la frente de Mario. Mario entonces pregunto que por que a mi el beso en la frente y a él la palma de la mano, por qué no era igual, Baba contesto, pero ya no
puedo recordar que contesto. Recuerdo que hice una broma a Baba diciéndole que ahora no querría bañarme para no perder ni el beso ni su contacto, comentario con el que él se rió. También comentamos Mario y yo que como cada uno tenía un pañuelo de Baba los pondríamos en la silla que colocaríamos en el altar de nuestra casa. Luego recuerdo que estaba nuevamente cerca de Baba y puse mi cabeza en su regazo, no me quería ir y comencé a llorar nuevamente desconsolada y desperté llorando.