La Primera Revolución Industrial
La Revolución Industrial es un proceso que se inició en Inglaterra, alrededor de 1750, y trajo como consecuencia fundamental el pasaje de una sociedad de tipo agrícola tradicional a otra que se caracterizó por la producción mecanizada y a gran escala. Desde el campo Antes de que la industria se pusiera en marcha, hubo un gran progreso agrícola. Un largo período de precios bajos de los cereales llevó a algunos propietarios a pensar nuevas técnicas para pasar la crisis. Cercaron los campos, fertilizaron la tierra y adquirieron un mayor control sobre los cultivos. Eso llevó el aumento de las cosechas, lo que estimuló a las industrias que utilizaban materias primas agrícolas. Además aparecieron nuevas herramientas que permitieron aprovechar mejor la tierra, por ejemplo el arado de hierro. Las nuevas energías El carbón y el hierro fueron dos grandes motores de los que se alimentó la Revolución. Las nuevas máquinas a vapor y las locomotoras eran de hierro. El carbón avivaba el fuego de los grandes hornos de fundición, que hacían un hierro más fuerte. Ambos minerales eran abundantes en Inglaterra. Nueva forma de producir El cambio fundamental fue el paso del trabajo en el taller familiar a la fábrica, de la producción manual a la utilización de la máquina. Muchos campesinos tuvieron que abandonar sus tierras e instalarse en la ciudad, convirtiéndose en obreros. => Los niños eran utilizados para trabajar en las minas o para limpiar las chimeneas, debido a que con su pequeño tamaño podían realizar estas tareas. Recién en 1891 el Parlamento Inglés estableció que la edad mínima para trabajar era 10 años. Importante: ¿Sabías qué los nuevos inventos aumentaron la producción y facilitaban el trabajo? La máquina a vapor Fue la gran protagonista de la Revolución Industrial y el mayor logro tecnológico de la época Permitió extender el uso de la energía a muchas máquinas que aceleraron la producción. Uno de los usos más prácticos que se le dio fue colocarla dentro de una locomotora, lo que dio nacimiento al tren. Por primera vez en la historia, un transporte terrestre podía ir a mayor velocidad que el galope de un caballo. Gracias a esto se acercaron grandes distancias. Sociedad industrial En esta época surgieron las clases sociales, que se diferenciaban según la riqueza, el poder y el conocimiento que tenía cada grupo. La burguesía era dueña de las fábricas y del capital para invertir. Los obreros eran quienes trabajaban a cambio de un salario. La otra cara de la revolución Mientras crecía el número de fábricas y aumentaba la producción, empeoraba la calidad de vida de los obreros. Hombres, mujeres y niños fueron explotados. Debían trabajar muchas horas (entre 14 y 16) en las peores condiciones, recibiendo salarios muy bajos.