REQUISITOS PARA ENTRAR AL SEMINARIO Hay una serie de requisitos indispensables para ser sacerdote, algunos son de carácter disciplinar, otros son exigencias propias de este sacramento que Cristo instituyó. Los que son de carácter disciplinar tienen que ver, por ejemplo, con los estudios, la edad, la formación intelectual y moral. Así, la edad mínima para ser ordenado sacerdote, según el código de derecho canónico, es de 25 años de edad. Hace falta haber recorrido un camino formativo de filosofía y teología que establece cada diócesis o cada conferencia episcopal, según la normativa que ha dado la Santa Sede. Si el sacerdote pertenece a una congregación u orden religiosa, ahí también tiene una serie de requisitos. También se requiere estar "incardinado", es decir, pertenecer a, una diócesis o a un instituto religioso de derecho pontificio o prelatura. Hay otros requisitos que provienen del sacramento mismo, como el hecho de ser varón, de estar bautizado, etc. Además se requiere la vocación: nadie puede exigir esta dignidad sacerdotal, sino que sólo deben acercarse a este sacramento quienes son llamados. Aquí juega un papel determinante la Iglesia, que discierne y ayuda a discernir quiénes son los verdaderamente llamados. Por otra parte, como el sacerdote representa a Cristo esposo de la Iglesia, el hombre que quiere recibir este sacramento debe procurar tener una vida acorde a su ser sacerdotal y a su misión. Requiere de buena salud, de una psicología sana y equilibrada, de una integración de su personalidad e identidad masculina, de hábitos de virtudes que den ciertas garantías de que será un buen ministro de Cristo, Señor. Además, debe también ser capaz de vivir durante toda su vida el
celibato por el Reino de los cielos. 1. NORMAS PARA LA ADMISION: El aspirante al sacerdocio debe: - Proceder de una familia bien constituida. - Haber recibido los sacramentos de la iniciación cristiana: Bautismo, Confirmación y Primera Comunión. - Tener concluido la Enseñanza Secundaria. - Ser menor de 25 años. - Poseer las cualidades humanas y espirituales, físicas y síquicas junto con la recta intención que la Iglesia exige. - Proceder del Seminario Menor, o haber sido orientado por el párroco o un sacerdote. - Asistir al cursillo de admisión y aprobar el examen de ingreso. 2. DOCUMENTOS A PRESENTAR: - Partidas de Bautismo y Confirmación. - Certificado de Matrimonio católico de los padres. - Certificado de estudios secundarios. - Testimonio del Párroco u otro sacerdote acerca de la vida cristiana del candidato. 3. ARTICULOS DE USO PERSONAL: - Ropa de vestir (a ser posible traer también un terno) y de deporte. - Ropa de dormir (pijama) y útiles de higiene. - Cuadernos y lapiceros. - Una Biblia y el Catecismo de la Iglesia Católica.
4. PENSION: - Inscripción y examen de ingreso: SI. 10 (soles). - Pensión del mes: SI. 90 (soles). 5. CURSILLO DE ADMISION: - Los candidatos han de ser inscritos a más tardar una semana antes del ingreso. - Día de ingreso: 1 de Marzo antes de las 6 p.m. - El segundo día del cursillo tendrá lugar el examen previo para el cual se adjunta un temario que deben preparar. - Los que aprueben el examen previo permanecerán en el cursillo hasta la evaluación y selección definitiva. - Durante el cursillo se efectuará el correspondiente examen médico. 6. PROGRAMA PARA EL EXAMEN PREVIO: - Religión: Catecismo elemental (catecismo pequeño "rojo" de Mons. Enrique Pélach). - Lengua castellana: ortografía: dictado (caligrafía). Clases de palabras: Nombres, adjetivos, artículos, pronombres, verbos, adverbios, preposiciones y conjunciones. Partes de la oración: Sujeto y Predicado. - Matemáticas: operaciones: sumar, restar, multiplicar y dividir. Decimales y fracciones: suma, resta, multiplicación y división. - Geografía: Descripción elemental de los continentes: cordilleras, ríos, penínsulas, países y capitales. - Ciencias Naturales: Descripción elemental de biología: animales vertebrados e invertebrados, el cuerpo humano.
ETAPAS DE FORMACION
ETAPA PROPEDÉUTICO Esta etapa se inicia al ingresar al Seminario y se le conoce también como la etapa del “llamado”. Es una “etapa puente” entre la vida laical y la nueva vida seminaristica. Los candidatos viven en casa aparte del resto de los seminaristas y tienen formadores que los acompañan a tiempo completo. Al mismo tiempo hay algunas actividades que realizan con los demás seminaristas, manifestándose así la unidad del Seminario. Algunos de los objetivos más relevantes de esta etapa son:
Conquistar un adecuado conocimiento de sí mismo y de las características de su personalidad. Iniciar el proceso de identificación con Jesucristo profundizar en su discernimiento vocacional para saber si el sacerdocio puede ser el camino de su vida.
El proceso formativo que se inicia en esta etapa se vive durante toda la vida; pero se cristaliza de un modo particular en los diversos “pasos” que el candidato va dando hasta llegar a su Ordenación Sacerdotal. Es así que en esta etapa la recepción de la cruz y la investidura del alba son signos visibles de este proceso de identificación con Cristo.
ETAPA DE FILOSOFÍA En esta etapa el seminarista debe cultivar una amistad profunda con el Señor, discernir su voluntad y seguirlo. A este periodo de la formación corresponde la pregunta que Jesús le hace a Pedro al concluir el Evangelio de Juan: ¿me amas? El seminarista realiza los estudios de filosofía, donde se encuentran la verdad humana y la verdad divina que le ayudarán posteriormente para realizar los estudios de teología. Uno de los objetivos que el seminarista debe alcanzar es la integración de los diversos aspectos de la persona: fe y razón, intelecto y afectividad, éxitos y fracasos, manteniendo el deseo de crecer. También debe adquirir un hábito de oración personal, valoración de los sacramentos, por la Eucaristía y la Palabra de Dios.
Al finalizar los estudios de filosofía hay pasos que son importantes dentro del camino formativo: Universa de Filosofía: consiste en un examen que recoge los conocimientos adquiridos en esta etapa y relacionarlos entre sí con la propia vida. b) Retiro ignaciano: está la posibilidad de que el seminarista al finalizar esta etapa pueda realizar durante un mes los ejercicios espirituales de San Ignacio, generalmente es el mes de enero. c) Año Pastoral: el seminarista está en condiciones de vivir una experiencia pastoral más fuerte, se va a vivir durante un año a una parroquia. Asiste una vez a la semana al seminario para estudiar algunas áreas.
ETAPA DE TEOLOGÍA Esta es la última etapa de la formación en el Seminario. Ella comienza con el año pastoral, que es un período de un año donde los seminaristas residen en una parroquia junto a un equipo sacerdotal. Mantienen conversaciones mensuales con el prefecto de Teología y una dirección espiritual frecuente. Al terminar este período el seminarista se reintegra a la casa de Teología e inicia su primer año académico en esta casa. Si en la etapa de Filosofía el seminarista fue destinado a una pastoral parroquial, en esta etapa de Teología se abren otros destinos pastorales. Se privilegia en especial la pastoral universitaria y la pastoral vocacional. Los que siguen destinados a la pastoral parroquial pueden, desde el segundo año de Teología, alojar en la parroquia asignada. En la etapa de Teología se reciben distintos ritos. Así los ritos de admisión y los ministerios de acolitado y lectorado preparan al seminarista para acceder, al final de esta etapa, al diaconado y luego al presbiterado. Los ramos en esta etapa son los propios de un estudiante de teología. Al principio del cuarto año de teología los seminaristas empiezan a preparar el examen final de teología, llamada “Universa Teológica” allí la parte académica de esta etapa está finalizada.