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Once profesores de la UNED abandonan su puesto por falta de organización Los tutores del centro pontevedrés piden que cese el actual director en funciones, Camilo Quintas Nieves D. Amil 11/12/2008

El goteo de profesores que abandonaron la UNED por la desorganización y la falta de un equipo directivo que asuma la gestión del centro es constante en Pontevedra. Desde mediados del curso pasado, ya son 11 las dimisiones que se presentaron sobre la mesa, pero el número se seguirá incrementando si la junta rectora no toma cartas en el asunto y designa al sustituto de Gerino Calvo. Fuentes próximas a la universidad a distancia aseguran que las excusas para no nombrar al director de la UNED en Pontevedra solo pretenden ganar tiempo. En un documento oficial, supeditan el nombramiento a la aprobación del borrador del reglamento interno. Sin embargo, desde la plataforma de profesores señalan que este texto no varía en nada sobre el actual y califican de «excusa» el retraso de la decisión. «No cambia ningún punto de la antigua normativa con el decreto que se está gestando Es una disculpa y cortina de humo para retrasar la decisión de quien es el nuevo director», señalan fuentes de la plataforma. Para la formación del órgano directivo, la junta rectora es la encargada de tomar la decisión, pero muchos la acusan de ser un colectivo muy politizado. «Si nos metemos en terrenos políticos se agrava la situación», señalan. El 51% de la representación de la junta es de la UNED, en Madrid, pero el 49% pertenece a los patronos, formado por un conglomerado de instituciones públicas (Diputación, Concello y la Xunta, a través de la delegación de Educación), el rector, Caixanova, Fenosa y representantes de profesores. En este colectivo, el mayor peso lo tiene el departamento que preside Rafael Louzán. Menos salarios Unido a la falta de un órgano directivo para el centro pontevedrés, los tutores denuncian que el pasado año se redujo un 17% su salario y lo sitúa en 440 euros mensuales. Acusan a la anterior directiva de la mala gestión y la culpan de no saber cuadrar los presupuestos y llevar la universidad a una situación que la hace muy vulnerable. La reivindicación económica y la organización centran las demanda un colectivo que se ha decidido convocar una huelga para hacer más presión sobre los órganos dirigentes. Además, piden el cese del actual director en funciones, Camilo Quintas, por haber sido nombrado por Gerino Calvo «y encontrarse estrechamente ligado a su controvertida gestión». Quintas asume actualmente no solo la dirección, sino que también es secretario y coordinador académico