HONDURAS DESCONOCE A LA OEA Honduras anunció que desconoce a la Organización de Estados Americanos (OEA) por pretender imponerle "resoluciones unilaterales e indignas'' para restituir al depuesto presidente Manuel Zelaya y destituyó a una decena de embajadores. La determinación del desconocimiento significa que el gobierno del designado presidente Roberto Micheletti se retira de la organización continental para que la OEA no le aplique ninguna sanción por derrocar a Zelaya. "La OEA es una organización política, no un tribunal, y no puede juzgarnos'', dijo Micheletti en una nota enviada al secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, poco después que éste visitó Tegucigalpa en una gestión directa de siete horas orientada a devolver en el cargo a Zelaya. El documento fue leído anoche por la vicecanciller Martha Lorena Alvarado en una cadena nacional de radio y televisión. "El gobierno repudia las pretensiones de la OEA de imponerle medidas unilaterales, reafirma la plenitud de su soberanía y el ejercicio de sus competencias internas de acuerdo a su Constitución, que define su forma de gobierno democrático, republicano y representativo'', dijo la funcionaria. "Si la OEA cree que en su seno ya no existe patio para Honduras y los estados que aman su libertad y defienden su soberanía, le comunicamos a usted (a Insulza) que Honduras denuncia la Carta de la organización y que eso es de aplicación inmediata'', manifestó en la lectura del texto. El gobierno afirmó en la nota que la Organización de los Estados Unidos intenta imponer "resoluciones unilaterales e indignas sin que el gobierno legítimamente constituido sea escuchado''. Señaló que la Carta de la ONU debe regir la "finalidad política de la OEA'' para mantener la paz y la seguridad regionales. "Pero hemos visto con sorpresa cómo la OEA, a la luz de amenazas del uso de la fuerza de algunos estados miembros, contra Honduras ... no ha dicho nada y se ha llamado a un sepulcral silencio ante estas amenazas, en franca violación del derecho internacional'', dijo en alusión aparente a Venezuela, cuyo presidente Hugo Chávez anunció esta semana que enviaría tropas a suelo hondureño para restituir a su amigo Zelaya. "La carta de la ONU obliga a los estados a comportarse civilizadamente, a renunciar al uso y a la amenaza de la fuerza en sus relaciones internacionales, pero la OEA se comporta tolerante con los desplantes a Honduras del SICA (Sistema de Integración Centroamericana) y de algunos gobiernos'', dijo la vicecanciller Alvarado. El SICA, integrado por los países del área, adoptó presiones contra Honduras para que este país permitiera el retorno de Zelaya al poder. "Porque vivimos en un Estado de derecho y por querer continuar viviendo en paz y democracia nos amenazan algunos gobiernos, con vocación autoritaria e intolerancia antidemocrática, e intentan irrespetar nuestro sagrado principio jurídico de la igualdad soberana de los Estados, pero con todo lo insólito que estamos presenciando, el pueblo y su gobierno se mantienen firmes'', indicó la funcionaria.