El conocer como será el desarrollo de nuestros negocios es, sin demasiadas dudas, una de las herramientas mas poderosas con las que podemos contar en el momento de tomar las decisiones que nos lleven al éxito empresarial. Y para poder lograrlo, la utilización de la numerología es una gran ayuda.
Numerología y negocios La numerología es una ciencia que nos permite conocer como serán los ciclos de nuestra vida, como se desarrollarán y que configuraciones presentarán. Es un forma de conseguir un mayor conocimiento de nuestras características, de ser capaces de sacarle un mayor valor a lo que hacemos, gracias al conocimiento previo que poseeremos. Esto se logra mediante la aplicación de una serie de aplicaciones de operaciones matemáticas que, cuando son utilizadas de la forma correcta sobre nuestra carta astral, nos permiten dar un vistazo en nuestro futuro, por decirlo de alguna manera. A través de este tipo de trabajo se determinan ciertos ciclos que afectan a toda nuestra vida a lo largo de la misma. Estos ciclos son básicamente momentos de cambio en la energía y en la forma en que esta se manifiesta y puede ser utilizada, con lo cual el conocimiento de los ciclos nos habilita a seguir los ciclos y aprovecharnos de ellos. Los ciclos (que luego explicaremos, en mayor detalle, como son determinados y como nos afectan) son calculados teniendo en cuenta nuestra año de nacimiento. Pero, ¿es posible aplicar este misma lógica, esta misma forma de trabajo, a un negocio, para ser capaces de sacar un mayor provecho de este y que los ciclos nos beneficien y nos ayuden a llegar al éxito? ¿Cuál y como se hace la aplicación de esto que es tan simple en los seres humanos? ¿Cómo se determina una fecha de nacimiento? La respuesta a la primer pregunta es que si, que podemos utilizar la numerología para como una forma de potenciar todo lo bueno que tiene nuestro negocio, que los ciclos afectan tanto al campo personal como al de los negocios, si sabemos como usarlos y como seguirlos. O, mejor dicho, que afectan en cualquier caso, pero que lo hagan en forma constante y positiva pasa por nosotros y por nuestra capacidad de beneficiarnos de ellos. Es cuestión de tener el conocimiento necesario para esta empresa. Tal vez lo más complicado de ser capaces de aplicar la numerología a la empresa es calcular la fecha de “nacimiento” y como esta nos afectara. Muchas veces, el tener en cuenta la numerología antes del comienzo de actividades laborales nos permitirá que nuestra empresa sea más exitosa con mucho menos trabajo del que podría requerir si no lo tomásemos en cuenta. Esto también lo veremos con más detalles a lo largo de esta nota. Todo esto y algunas cosas más veremos, de forma básica, a lo largo de esta nota, junto con algunos ejemplos para ser capaces de calcular nuestros ciclos personales, tanto para nuestra vida como para la de nuestro negocio. Si leemos atentamente y lo tenemos en cuenta, no deberíamos tener problemas en empezar a aprovecharnos de los ciclos anuales.
Los ciclos Ahora hagamos un pequeño repaso a los ciclos, cuales son sus características y como es que nos afectan en lo laboral. Lo primero que debemos decir es que, en realidad, no hay demasiadas diferencias entre el ciclo de nuestro negocio y el ciclo de nuestra vida, ni en la forma de calcularlo ni en la forma de utilizarlo. Por supuesto, este no será el mismo que nuestro ciclo de vida, ya que podemos decir que lo que calculamos son los ciclos personales de la “vida” del negocio. Pero la forma de actuar sobre la realidad y la forma de entenderlos es la misma. Los ciclos de los que estamos hablando son nueve. Cuando uno nace, comienza el primero de los nueve ciclos, los cuales son anuales (o sea que cada año tiene una característica de ciclo particular, una energía que se aplica a determinadas áreas por sobre otras y que es propia del ese ciclo). Cada año es un ciclo y luego de nueve se vuelven a repetir. Cada año tiene una particular resonancia en su energía, lo cual hace que sea especialmente apto para determinado tipo de actividades. O sea que, un año en particular puede ser desastroso para los negocios, con una energía totalmente opuesta que hace que cualquier intento de iniciar un emprendimiento en ese ciclo este destinado al fracaso; mientras que ese mismo emprendimiento en el año siguiente puede ser un gran éxito, gracias a que la energía de ese periodo en particular es positiva para los negocios. El progreso se hace a través de los nueve años, y luego se vuelve al comienzo, al año uno y los cambios en los tipos de energía (cada una identificada con un número correspondiente al momento dentro del ciclo de uno a nueve) y en la forma en que afectan nuestras actividades. Por lo tanto, es lógico darnos cuenta que el conocer estos ciclos personales nos permite solo comenzar o, al menos, darle mayor empuje a aquellas actividades que se ven favorecidas por el tipo de energía predominante durante ese año. Los años “personales” son establecidos por la fecha de nacimiento, como ya habíamos comentado antes. Calculando el ciclo de negocios Como podemos entender a partir de lo que estamos diciendo, no es demasiado complicado ser capaces de determinar el ciclo de nuestros negocios. Es simplemente una cuestión matemática y que de lo único que necesita es de el conocimiento de la fecha de nacimiento de nuestro negocio. Como hacerlo es algo que veremos un poco más adelante, así también como cuales son las dificultades que surgen para poder determinar el nacimiento. A partir de la fecha de comienzo de las actividades de nuestro negocio es que calculamos como se irán desarrollando los ciclos. Y en base a esto calcularemos cuales de estos ciclos coincidirán con el momento en que tomemos las decisiones que tomemos. Lo que es una buena idea es hacer una aplicación inversa (por llamarla de alguna forma) de los principios de la numerología. A lo que nos referimos es que, a diferencia del nacimiento de una persona (que no puede ser previsto ni
establecido en una fecha determinada, no de forma natural, al menos), el “nacimiento” de un negocio puede ser fácilmente forzado en un ciclo que nos convenga. Es simplemente cuestión de saber que día nos conviene como comienzo de actividades y ese día hacer los tramites pertinentes para que la fundación de nuestra empresa tenga desde los ciclos los mejores augurios posibles. Esta simple preparación nos puede hacer la vida mucho mas simple y con menos trabajo conseguiremos mayores beneficios. Lograr que la fecha de fundación de nuestra empresa sea una que hayamos pensado de antemano puede generarnos algunos problemas y un poco más de trabajo, pero a la larga nos convendrá. Como determinar la fecha de nacimiento Por supuesto, nos referimos a la fecha de nacimiento de la empresa, ya que la de un ser humano no necesita ser determinada, es algo bastante claro. La complicación de determinar el nacimiento de la empresa es especialmente marcada en aquellas empresas que podríamos denominar caseras, en las que no hay un papeleo fechado que nos diga exactamente cuando comenzaron las actividades. Si nosotros estamos empezando una empresa en nuestro hogar, ¿cuál es el inicio de actividades? ¿El momento en que se nos ocurrió que es lo que íbamos a hacer, en que campo de actividades nos íbamos a desempeñar? ¿Cuándo hicimos la primer venta? ¿El momento en que terminamos de equiparnos con todo lo que necesitamos? ¿Cuándo por primera vez se nos ocurrió que podíamos tener un negocio en nuestra propia casa? ¿Cuál de todas estas posibilidades? ¿O alguna otra? Como podemos apreciar, en este caso se vuelve más complicado encontrar una fecha correcta. Y utilizar una incorrecta arruina todo el proceso. ¿Cómo determinar la fecha correcta? En realidad, cuando la empresa es fuera de nuestra casa y tiene hecho todo el papeleo necesario, la fecha se determina fácilmente. Es aquella fecha se aprueba su creación de forma legal, cuando todos los papeles ya están listos y todo esta a punto, en que se puede comenzar las actividades (mas allá de que luego tardemos más en comenzarlas por causa de falta materiales o de personal o por cualquier otra causa). Así que no hay grandes dudas en este lugar. Pero la empresa hogareña nos hace todo mas difícil. ¿Cuánto tiempo pasó desde que pensamos en empezar el negocio y hasta el momento en que empezamos a trabajar seriamente? El periodo de planeamiento, de buscar consejos y ganar experiencia, ¿cuenta como parte de las actividades? No es una respuesta fácil y sin riesgo de error. Pero hay una solución. Lo que debemos hacer es tomar como fecha de inicio de las actividades, como fecha de “nacimiento” de la empresa, algún hecho significativo para el discurrir de nuestro negocio. Esta fecha debe ser una realmente importante, pero determinada por nosotros mismos. No hay una regla que nos diga cual es la fecha significativa que debemos utilizar. Podemos elegir la fecha en que finalmente obtuvimos todo el dinero que necesitábamos para ponernos en movimiento, el momento en que nos decidimos y realmente empezamos a trabajar en búsqueda de lograr que el
negocio funcionase o la fecha en que realizamos nuestra primera venta o publicamos nuestro primer aviso. Todo sirve, todo puede funcionar. De allí en más, siempre utilizaremos esta fecha como nuestra fecha de fundación y no tendremos que cambiarla nunca más. Y ya no habrá forma de cambiar nuestros ciclos, salvo que empecemos un negocio totalmente distinto, desde cero y con todas fechas nuevas. Efectos La elección de un ciclo puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso. Esto es así y hay que tenerlo en cuenta cuando ponemos en actividad nuestro negocio. El ciclo de negocios debe ser compatible con nuestro ciclo personal, sino será muy difícil compatibilizar los dos y muy prontamente nos sentiremos molestos con el negocio, hasta poder llegar al punto de odiarlo y colaborar de forma activa (si bien no consciente) con su destrucción. Comenzar un negocio cerca de un periodo de energía alta para los negocios y de cima financiera, es la mejor forma de hacerlo. Determinando el año personal Esto es muy simple de hacer. Simplemente tomamos el año de nacimiento y aplicamos la siguiente formula: Día + mes + total de los dígitos del año corriente = la simplificación de todos los dígitos que nos de la operación, hasta llegar a uno solo Veamos un par de ejemplos: Ejemplo 1: 23/10/2003 23 + 10 + (2+0+0+3)= 23 + 10 + 5= 38=> 3+8= 11 => 1+1=2 Por lo tanto, para una persona nacida el veintitrés de Octubre, el año 2003 es siempre su año 2 del ciclo. Ejemplo 2: 3/12/1998 3 + 12 + (1+9+9+8) = 3 + 12 + 27 = 42 => 4+2 = 6 Por lo tanto, para una persona nacida el tres de Diciembre, el años 1998 fue el año número seis del ciclo.
El año personal no esta afectado por el año de nacimiento, sino por la fecha, por lo tanto todas las personas nacidas el mismo día tienen el mismo ciclo personal. Para deducir el ciclo del negocio, solo necesitamos hacer el mismo procedimiento matemático que acabamos de mostrar.