Nacionalizar Para Tener Un Comercio Justo

Mundo Hispano, Mayo de 2006

12 / Latinoamérica

Decreto Supremo 28.701 sobre hidrocarburos

Nacionalizar para tener un comercio justo La codicia de Petrobras y el fraude de la española Repsol

El 60% del gas boliviano es exportado a Brasil, que está interesado en desarrollar el centro-oeste, el cual sólo representa un 2% de su PIB. Lula, quien apoyó a Morales en su ascenso al poder, declaró no sin cierta decepción que “fue un error estratégico de Brasil quedar dependiente de una única fuente de energía que no era nuestra”. Sin embargo, cabría preguntarse si no ha sido la ambición carioca la que rompió el saco: Petrobras quería aumentar las exportaciones desde los 30 millones de pies cúbicos diarios a los 68 m.p.c.d., obviamente, pagando el mismo precio. El 20% del gas boliviano ingresa al mercado argentino, donde representa apenas el 5% de su mercado total. No obstante, la nueva tarifa que se habría negociado de US$5,50 dólares por millar de BTU, implica un alza de un 64% que se dejará sentir en la economía, toda vez que ingresan 6 millones de metros cúbicos diarios por el Gasoducto del Norte. El anuncio de la nacionalización de los hidrocarburos bolivianos hizo que las acciones de Repsol cayeran un 2,2%, una cifra bastante menor al -4,7% de cuando Evo Morales ganó las elecciones y del 7,7% de cuando anunció la disminución de sus reservas. Este último hecho se debió al fraude contable de Repsol, que ante la United State Securities Exchange Commission inscribió como propias reservas que no le pertenecían ubicadas un 52,5% en Bolivia, 40,6% en Argentina, 4,7% en Venezuela y 2,2% en el resto del mundo (principalmente Argelia).

Repsol-YPF, Total, Pan American Energy, y British Petroleum disponen de seis meses para adecuar sus contratos a la nueva legislación o retirar sus inversiones. La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) asumió el control de la producción y de la comercialización. Evo Morales busca mejorar el precio y las regalías del Estado, que hasta la fecha sólo alcanzaron el 31%. Cabe preguntarse si, de abandonar Bolivia las actuales compañías petroleras, ¿entrará China en escena? Basándose en fuentes extraoficiales, El Hispano publicó en su edición de enero de 2006 que Evo Morales nacionalizaría los hidrocarburos para cumplir con la única exigencia realizada por China al comprometer inversiones en Bolivia, pagando incluso mejores precios por sus recursos.

Con el control de los precios y la comercialización, el Estado boliviano obtendrá unos US$320 millones adicionales. Por José-Christian Páez

L

a nacionalización de los hidrocarburos bolivianos ha sido más que un golpe de efecto y nada tiene que ver con el populismo. Bolivia posee un volumen de gas natural estimado en 48,8 trillones de pies cúbicos. Sin embargo, el precio del gas boliviano a boca de pozo de US$0,98 dólares por millar de BTU (unidad térmica británica), está bastante lejano de los US$12 dólares que tiene la comercialización en el hemisferio norte. Brasil y Argentina, quienes tienen contratos por US$3,23 y 3,25 respectivamente, también compiten por pagar menos. Por el Decreto Supremo 28.701 el “Estado recupera la propiedad, la posesión y el control total y absoluto de estos recursos”, el cual tendrá la potestad de la “comercialización, definiendo las condiciones, volúmenes y precios tanto para el mercado interno como para la exportación y la industrialización”. Al mismo tiempo, las

empresas cuya producción sobrepase los “100 millones de pies cúbicos diarios” se someterán a una distribución de la producción que determina el “82% para el Estado (18% de regalías y participaciones, 32% de Impuesto Directo a los Hidrocarburos IDH y 32% a través de una participación adicional para YPFB), y 18% para las compañías (que cubre costos de operación, amortización de inversiones y utilidades).” Con el control de los precios y la comercialización, el Estado boliviano obtendrá unos US$320 millones de dólares adicionales, los cuales podrá destinar a mejorar las condiciones de vida de sus habitantes. El vicepresidente García Linera expresó que este 82% se refiere con claridad a los dos mayores campos gasíferos: el de San Alberto, descubierto por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y el de Sábalo “que generan el 70% del gas natural de Bolivia”. Con anterioridad, en dos oportunidades Bolivia nacionalizó los hidrocar-

buros y luego abandonó ese camino, por eso el vicepresidente del Gobierno, Álvaro García Linera, al anunciar el decreto destacó que “el gobierno boliviano lleva a cabo la primera nacionalización del siglo XXI”. Las compañías disponen de seis meses de plazo para adecuar sus contratos a la nueva legislación o recoger sus inversiones e irse. Una jugada que parece temeraria para un país que ya en 2005 tuvo una bajísima inversión extranjera. No obstante, todo pareciera indicar que Evo Morales ya tiene nuevo inversor: China. El gigante asiático mantiene reservas que a febrero de 2006 alcanzaron a los US$924.846 millones de dólares, desplazando con esta cantidad a Japón, país que desde hace años mantenía el liderazgo a nivel mundial. Tal superávit requiere ser invertido para que no pierda su valor, y la colocación de estos recursos en las crecientes materias primas que China necesita para su desarrollo es una prioridad para su economía.