Obama pide un acuerdo mundial contra el CO2 sin precisar medidas concretas
play (Vídeo: Atlas) Agencias | Nueva York Actualizado martes 22/09/2009 19:33 horas • •
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El presidente estadounidense, Barack Obama, ha apelado a la acción mundial conjunta para combatir el cambio climático, señalando que la incapacidad de solucionar el problema podría llevar a una catástrofe "irreversible" en los próximos años. Obama ha afirmado el martes en la sede de Naciones Unidas que estaba "decidido" a actuar contra el calentamiento global, pero reconoció que "lo más difícil" queda por hacer en la cumbre de Copenhague en diciembre de este año. En un discurso que fue acogido con aplausos pero no entusiasmo por los líderes presentes, Obama instó a la colaboración de cara a la cumbre de Copenhague en diciembre y subrayó el cambio de posición de su país desde su llegada a la Casa Blanca. Sin embargo, conocedor de que tiene las manos atadas por el Congreso de EEUU en este asunto, apenas ofreció propuestas concretas que puedan ayudar a conducir a un avance en las conversaciones hacia un nuevo acuerdo internacional para combatir el calentamiento global.
Ampliar foto Emisiones de CO2 por países. | EL MUNDO No obstante, el presidente estadounidense subrayó que su administración "ha hecho más por promover una energía limpia en los últimos ocho meses que en cualquier otro momento de nuestra historia". "La amenaza que plantea el cambio climático es grave, es urgente, y creciente", ha dicho Obama, ante decenas de dirigentes mundiales que se han reunido en Nueva York para tratar de romper el estancamiento de las negociaciones sobre el calentamiento global. Las futuras generaciones caminan hacia el desastre si la comunidad internacional no actúa con "audacia, rapidez y unidad", advirtió. "Somos conscientes de la gravedad de la amenaza del cambio climático. Estamos decididos a actuar y vamos a asumir nuestras responsabilidades para con las generaciones futuras", prometió. Sin embargo, en un momento en que las conversaciones internacionales parecen estancadas reconoció que "no debemos engañarnos a nosotros mismos, el trabajo real aún debe hacerse", en relación a la conferencia de Copenhague el próximo diciembre. También señaló la responsabilidad de los países ricos, que deben dar ejemplo. Reiteró su objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de EE.UU a los niveles de 1990 antes de 2020. En la misma línea dijo que trabajaría en la eliminación de subsidios gubernamentales a los combustibles fósiles cuando se reunirá con los líderes del G-20 el jueves y viernes en Pittsburgh (Este de los EE.UU). "Pero los países de rápido crecimiento también deben hacer su parte", ha declarado. "Tendrán que comprometerse a adoptar medidas más firmes en su territorio y acordar el respeto de sus compromisos, como también deben hacer los países desarrollados", afirmó el presidente estadounidense. "La respuesta de nuestra generación a este desafío será juzgada por la historia, ya que si no cumplimos con ella - con audacia, rapidez, y unidad - corremos el riesgo de relegar las generaciones futuras a una catástrofe irreversible", concluyó Obama.
No llegar a un acuerdo sería "moralmente inexcusable" El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha afirmado que sería "moralmente inexcusable, corto de miras en el plano
económico e imprudente políticamente" no llegar a un acuerdo en la cumbre de Copenhague. Ban ha criticado en la conferencia sobre el cambio climático, el ritmo "glacial" al que se desarrollan las negociaciones para reducir las emisiones de gases contaminantes. Las discusiones para reducir las emisiones de dióxido de carbono se han estancado porque los países ricos no acceden a reducirlas lo suficiente mientras que los que están en vías de desarrollo se resisten a poner límites vinculantes a sus emisiones porque temen que esto impida el desarrollo de su economía. Por eso, ha hecho hincapié en que todos los países "deben hacer más" y deben hacerlo "ahora" y ha exhortado a los aproximadamente 100 dirigentes mundiales que participan en el encuentro a valorar las necesidades de sus ciudadanos "a largo plazo". También ha advertido a los representantes de los distintos países de que sus decisiones tendrán "consecuencias trascendentales". "El futuro de las próximas generaciones y las esperanzas y el sustento de miles de millones (de personas) depende, literalmente, de ustedes", ha añadido. En este sentido, ha rechazado la idea de que hacer frente al calentamiento global implica un precio muy alto. Quienes piensan eso "se equivocan" y "lo cierto es lo contrario", que "pagaremos un precio inaceptable si no actuamos ahora", ha asegurado. Ban Ki Moon espera que el nuevo pacto mundial que sustituirá al Protocolo de Kioto tenga el potencial de fomentar el crecimiento de una economía "verde" y sacar de la pobreza a miles de millones de personas, además de potenciar el comercio, la energía, la seguridad y los asuntos sanitarios.