LA PLAZA ENCANTADA HABÍA
UNA VEZ
UNA PLAZA TAN GRANDE Y
REDONDA COMO MISTERIOSA Y
ARBOLADA.
CELESTE LLEVÓ A PASEAR A SU GATO GAUDIO Y LAUTARO A SU PERRO PEDRO.
GAUDIO SE ESCAPÓ Y PEDRO LO CORRIÓ POR TODA LA PLAZA, HASTA QUE SE CANSÓ. EL GATO GAUDIO SE PERDIÓ Y CELESTE LE DIJO: _ ¿QUERÉS QUE TE AYUDE A BUSCAR EL GATO? _ BUENO, ME ENCANTARIA LE RESPONDIÓ PEDRO CON ENTUSIASMO.
JUNTOS COMENZARON A BUSCAR EL GATO GAUDIO POR LA ARBOLADA PLAZA, CUANDO EL PERRO PEDRO DE LAUTARO SE PUSO A LADRAR. LADRABA CADA VEZ MAS FUERTE JUNTO AL ÁRBOL, EL GATO GAUDIO ASUSTADO SE ESCONDÍA ENTRE LAS RAMAS Y CELESTE Y LAUTARO SE MIRARON MUY CONTENTOS POR HABER ENCONTRADO AL GATO GAUDIO. MARIA DE LOS ANGLES PANELLA