La Primera Femme Fatale

La primera femme fatale. Lou Andreas-Salome es una de las mujeres más brillantes de la historia universal. Puede ser considera una de las primeras feministas y definitivamente la femme fatale del mundo de la literatura del siglo XX. Lou fue una mujer adelantada a su época, en un siglo donde la mujer era considerada una musa Lou logró delinear la figura de una fémina involucrada en el arte pero no como inspiración sino como creadora. Escritora fructífera, poeta y psicoanalista Andreas Salome decidió ser ante todo libre. Rompió con los estereotipos de madre, compañera abnegada y dócil para elegir el amor libre, defensora de la poligamia y atea. ¿Pero quién era realmente está mujer que logró encantar a las más grandes mentes del siglo XX como Nietzsche, Rilke y Freud? Lou Andreas Salome 1861-1937 Los Salome son originarios de la Francia meridional sin embargo tienen que emigrar a San Petersburgo en 1810 tras la expulsión de los Hugonotes, es en Rusia donde el padre de Lou obtiene títulos nobiliarios luego de pelear en el ejercito fiel al Zar Nicolás I. Casado con Louis Wilm el padre de Lou procrea seis hijos de donde nace el 12 de febrero de 1861 una niña a la que dan por nombre: Lou Andreas Salome Wilm. Criada en un ambiente masculino e intelectual la niña es educada bajo los principios de libertad y está es una de las razones por las que toda su vida permaneció alejada de los credos religiosos y los dogmas. Eterna autodidacta Lou recibió su primera educación bajo el cuidado de Hendrick Guillot, un pastor holandés catalogado como: brillante orador, de personalidad encantadora, brillante, culo y escéptico. Guillot la educa en historia de las religiones, metafísica, lógica, sociedades primitivas y simbolismos. Es gracias a este hombre 25 años mayor que ella que Lou adquiere las bases de una educación erudita en esa época exclusiva del genero masculino. Y es también Hendrick Guillot la primer victima del encanto casi místico que Lou poseía sobre los hombres.