UNEFA, NUCLEO PUERTO CABELLO Dentro de las instalaciones de DIANCA funciona el núcleo de la UNEFA sección Puerto Cabello, siendo uno de sus, objetivos “formar al personal calificado para la Docencia, la Investigación, la Administración y el desarrollo de las distintas áreas de la tecnología”, se imparten en este núcleo, las carreras Ingeniería Naval e Ingeniería de Sistemas, entre otras, Diques y Astilleros les brinda la oportunidad de realizar sus pasantías en sus proyectos por lo cual el personal que egresa de esta institución sale familiarizado con los trabajos que ofrece DIANCA al país y al exterior, convirtiéndose en baluarte de la formación de personal calificado para las existencias de la industria naval venezolana y por ello ser mas competitiva en el mercado internacional. Simultáneamente, el núcleo ofrece al personal militar de la Fuerza Armada Nacional la alternativa de prepararse como futuros ingenieros navales y mecánicos que serán de gran valor para el desarrollo de la industria naval del país.
ESCUELA PRÁCTICA DE CONSTRUCCIONES NAVALES Y DE MECANICA APLICADA A LAS MISMAS El Gobierno Nacional en 1914 dicto a favor de la juventud venezolana, un decreto de creación de una Escuela Practica de Construcciones Navales y de Mecánica, debido a la escasez de Ingenieros Constructores navales en el país. En noviembre de 1912 se selecciono a un grupo de jóvenes y los mismos fueron trasladados al Faro de Punta Brava (Puerto Cabello, Edo. Carabobo), donde se realizo la instalación del curso. El edificio del Faro había sido acondicionado con todos los elementos necesarios, tanto de personal administrativo, docente y programa de enseñanza; siendo la teoría dictada en el edificio del Faro y la practica en los talleres de Astillero Nacional. El gobierno también contemplaba el envió de los estudiantes a establecimientos similares en el extranjero, una vez que los alumnos culminasen sus estudios con el fin de perfeccionar los conocimientos adquiridos.
El Mosquito y El Quijote Marino Fastuoso desfile Naval, una vez mas, como de costumbre, la Armada se viste de gala con motivo de la celebración de su día y realiza una interesante y hermosa presentación en la dársena de Puerto Cabello, esta vez no se trata de un veinticuatro (24) de Julio como comenzó a ocurrir a partir de 1946, hablando de un veinticuatro (24) de Junio de 1944 “Día del Ejercito Venezolano”, que para la época era la referencia obligada de celebración como día de las Fuerzas Armadas Venezolanas. Transcurre entonces la mencionada fecha, cuando ante tan motivo acto irrumpe el MOSQUITO con su Quijote a bordo, un submarino monoplaza, del nombre anteriormente mencionado, construido personalmente por quien cincuenta y cuatro años después me atrevo a llamar “El Quijote Marino” y primer submarinista venezolano: Teniente de Navío FAUSTO CRÍSPULO PALMIERI CUELLO. El Mosquito como personalmente su creador denomino al submarino en cuestión, tuvo como madrina a la señorita Elba Gherzy Suarez y zarpó desde las actuales instalaciones del Puerto autónomo de Puerto Cabello, dándose a conocer ante Venezuela cuando se incorpora al desfile antes señalado, causando tal revuelo y admiración entre la multitud que fue reseñado por la prensa nacional de la época, como es el caso, entre otros, de “El Nacional” y el “Heraldo”, los cuales destacaron el hecho con fotos y grandes titulares. Posteriormente a ello nuestro pequeño y primer pez de acero nunca volvió a navegar, ¿Las causas?, aun se encuentran por corroborar, lo cierto es que el
constructor recibió instrucciones precisas de destruirlo por ser considerado inseguro y no cumplir con las normas certificadas de seguridad para la época.
Los Peces de Acero ¿Historia o Fabula? Este hecho de significativa trascendencia para la Armada de Venezuela y en especial para los peces de acero es historia viva que permanece presente en el recuerdo de importantes personalidades venezolanas entre ellos el Vicealmirante WOLFANG LARRAZABAL UGUETO, Ex presidente de la Junta de Gobierno del año 1958 y el Ciudadano Don ELIAS DAO, Cronista de la Ciudad de Puerto cabello, a quienes personalmente entreviste y guardo su testimonio como fuentes de primer orden el acontecimiento mencionado, sin contar a demás con innumerables testigos presenciales que aun hoy pueden dar fe del hecho, tales como su viuda y algunos familiares y amigos con quien he tenido el gusto de conversar. Así mismo, el Vicealmirante JÉSUS BERTORELLI MORENO, ex -comandante General de la Armada y primer Comandante del Escuadrón de Submarinos, aun cuando no fue testigo presencial de los acontecimientos, conoce al detalle el presente hecho y en entrevista realizada personalmente corrobora todo lo aquí mencionado, de igual forma, este es el caso del Contralmirante ENRIQUE DOMINGUEZ GARCIA y el Capitán de Navío CARLOS ALBERTO TAYLHARDAT, quienes igualmente me han manifestado tener conocimiento certero de lo acontecido, el primero por haber trabajado personalmente con el mencionado Teniente de Navío en los inicios de su carrera y el segundo por haber tenido una sólida amistad con Eduardo Palmieri, hermano de nuestro ingenioso marino. De acuerdo a versión suministrada por el Vicealmirante W. LARRAZABAL, quien además fue amigo personal y compadre del constructor, este le efectuó pruebas al submarino por mas de un año, sin conseguir autorización para hacerlo oficialmente, hasta aquel día de la Armada (día del Ejercito para la época) cuando dio a conocer su creación en ese crucial momento. El Vicealmirante J. BERTORELLI, le entrega la insignea de Submarinista Honorario a nuestro Quijote Marino en el año de 1968, llamándolo para ello, veintidós (22) años después de su retiro. El nos cuenta que le costo mucho trabajo en aquella época ubicar al Teniente de Navio F. PALMIERI, a quien logro conocer personalmente y hacerle el reconocimiento mencionado, sin embargo, este por la edad que poseía para el momento y su situación de salud, no dejo en esa oportunidad mayores aportes sobre su obra que los ya conocidos por ellos al momento de decidir homenajearlo.
Don ELIAS DAO, Cronista de la Ciudad de Puerto Cabello, manifiesta entre otras cosas no haber borrado de su memoria el hecho de la navegación de aquel submarino un día de la armada y recuerda con claridad, como fue indicado anteriormente, que fue publicado y reseñado en la prensa de la época. Así mismo, desde un punto de vista mas objetivo y formal, existen dos (2) documentos que dan testimonio directa o indirecta de la existencia del submarino, el primero de estos firmado por el Capitán de Fragata CARLOS SOCRATES TOVAR TOVAR el 26 de Mayo de 1964, quien como Comandante del Submarino ARV “CARITE” (S-11) elabora una esquela dirigida al Teniente de Navío F. PALMIERI, donde textualmente le dice: “Recordamos el Submarino que usted construyo aquí en Puerto Cabello”… “Es Ud. En realidad l primer submarinista venezolano y así se lo hice ver al Contralmirante JESUS CARBONELL IZQUIERDO, Comandante de la Escuadra, al mismo tiempo proponiéndole nombrarlo submarinista honorario, con la correspondiente imposición de los delfines venezolanos. El segundo de estos documentos es un oficio Nro. 0264 del 29MAY68 enviado por el Comandante del Submarino ARV “CARITE” (S-11), donde el para la época Capitán de Fragata J. BERTORELLI dice libremente: “Tengo el grado de dirigirme a Ud. En la oportunidad de participarle que le ha sido conferida la Insignia de Submarinista Honorario, en reconocimiento a su labor precursora de Submarinos en Venezuela”. Además de los dos (2) documentos mencionados anteriormente he logrado ubicar en la hemeroteca nacional dos (2) artículos de periódico que reseña el acontecimiento, el primer de El Nacional del 26 de Junio de 1944, pagina once (11) y el segundo en El Heraldo de la misma fecha pagina ocho (08). Con estos cuatro (4) testimonios documentales se corrobora objetivamente la construcción del submarino mencionado, se prueba lo que ya sabíamos por medio de los testigos presenciales, el submarino existió, no hay la menor duda al respecto, pero quedan lamentablemente muchos cabos por atar, con sus dimensiones, lugar exacto de construcción, características técnicas y demás pormenores de los cuales poseo actualmente diferentes versiones por confirmar, ya que las mismas varían en cierto grado de acuerdo a l origen de la fuente, tales como, la edad, lucidez mental, profesión u oficio, nivel intelectual, afinidad con el constructor, prismas personal y otras tantas variables a considerar que añaden subjetividad a la información, no obstante, lo que si podemos decir objetivamente con certeza y orgullo es que el TNF. PALMIERI fue el constructor del ¡MOSQUITO, PRIMER SUBMARINO HECHO EN VENEZUELA!
El primer Submarinista Venezolano El Teniente de Navío FAUSTO CRISPULO PALMIERI CUELLO, nació en Puerto Cabello el 10 de Junio de 1889, C. I. 61.821, hijo de Galileo Palmieri Raetali y María Felicinda Cuello. Curso estudios de primeria en el “San José de Tarbes”, “El Providencia” y hasta el tercer año en el colegio “San Luis”, en su ciudad natal, efectuó estudios profesionales en la Escuela Naval situada en el faro de Punta Brava en Puerto Cabello y obtuvo a su vez el titulo de maquinista de la marina mercante Nro. M43AGS1 y titulo de perito Nro. 2245. Presto servicio entre el año 1920 y 1945 en los buques de nuestra Armada con el Grado de Guardiamarina, Teniente de Fragata y Teniente de Navío, este ultimo con despacho presidencial del 23 de Marzo de 1930, en una época donde el Jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas apenas alcanzaba al grado Teniente Coronel. En el año de 1944 construye el Mosquito, primer submarino hecho en Venezuela, labor que lo acredita como primer submarinista venezolano, precursor y padre de los mismos en Venezuela. Pasa a retiro en el año de 1946 según resuelto Nro. 27590 del 13 Agosto de 1946, firmado por el Teniente Coronel Marcos Pérez Jiménez, Jefe del Estado Mayor General, de conformidad con la letra b) del articulo 1 del decreto Nro. 267 de la Junta Revolucionaria de Gobierno de los Estados Unidos de Venezuela.
BIBLIOGRAFÍA.
Libro Peces de Acero “Mas de Cien Años de Historia”. Autor: Eladio J. Jiménez G. Registro: Derecho Autor N# 2808. 19 noviembre de 1999.
Libro: Diques y Astilleros Nacionales C.A (DIANCA) Puerto Cabello. “Cien Años de la Industria Venezolana. Editorial: Tecnocolor.