Genesis 0109

1 PALABRAS PRELIMINARES

Presentar el contenido que sigue a esta introducción persigue guiar al lector en un acercamiento a su mensaje. Para ello se precisa una mente abierta y cultivada, que no se arredre fácilmente ante lo incognoscible. Una voluntad por penetrar en el misterio que se oculta más allá de lo humano y de sus elaboraciones mentales. Si bien no soy el autor, el texto se ofrece como un inicio. Un punto de partida que, tal vez, llevará a los buscadores de la Verdad a espacios que se encuentran más allá de los tradicionalmente apuntados y fuera de su alcance por inimaginados. La Sabiduría Perenne, a través de la tradición sagrada de la humanidad, ha adoptado diferentes apariencias, adaptándose a los desarrollos que esa misma humanidad ha sido capaz de realizar en cada momento. La doctrina esotérica, revelada directamente en la consciencia del iniciado a través del simbolismo y la transmisión, se ha convertido en nuestros días en un conocimiento al alcance de un público diverso. El hombre moderno, con su desarrollo intelectual ha llegado a un estadio de su evolución en el que se haya cualificado para superar las palabras, penetrar en los conceptos y progresar más allá de la mera razón, hacia los dominios de lo que hasta nuestros días se ha llamado intuición. Aquellos de vosotros que habéis aprendido el arte de la concentración meditativa podréis aprehender los símbolos con los que vais a entrar en contacto de una manera más directa, pero ello no es obstáculo para que todos los sinceros buscadores de la Verdad hallen en sus líneas motivo de reflexión y nuevas líneas directrices para abordar antiguas cuestiones aún veladas al intelecto moderno. Las palabras son símbolos que velan procesos eléctricos y las ideas superiores son vehículos de la Consciencia. Como todo saber que se plasma en un tratado y cuyo origen es precipitado desde los confines arquetípicos, su lectura no puede limitarse a ser lineal. El lector debe hacer un esfuerzo de concentración y prestar especial atención al proceso que tiene lugar en su mente, observando los contenidos que se manifiestan en ella tras el esfuerzo de abstracción que el orden de las palabras induce a realizar. Nadie espere encontrar en este breve, pero muy significativo tratado, un mero entretenimiento intelectual, susceptible de ser valorado o comparado. No es esa la pretensión del mismo. Los interesados en su divulgación y difusión masiva saben que muy pocas almas responderán adecuadamente a su contenido, pero las que lo hagan, resplandecerán de tal modo allí donde solo pueden hacerlo, que sus efectos resonarán lejos del ruido mundano que sofoca el conocimiento del Espíritu. Adelante pues, paciencia, perseverancia, concentración y potencial intuición o sensibilidad mental son necesarias. El trabajo aguarda ser realizado. El fruto del tesón de aquellos que intuyen la Vida que se oculta tras sus líneas, madurará inevitablemente; pues tal es la naturaleza humana y el destino del hombre.

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INMORTALIDAD CIENTÍFICA

Mientras no entendamos cómo surge la Vida y la Consciencia, previamente a toda evolución biológica, no seremos capaces de hacer las correspondencias entre lo que sucede energéticamente y a lo que da lugar biológica y psicológicamente en un ser humano. -GÉNESIS29.junio.2009

Hay grandes diferencias en la Humanidad a nivel de consciencia. Darse cuenta no es ser consciente. Y ser consciente no es ser consciente de uno mismo. Ser consciente de algo no quiere decir que seamos conscientes de nosotros mismos. En todos los estamentos sociales hay personas que no son conscientes de sí mismas. Los individuos que no son conscientes de sí mismos no pueden ser conscientes de los demás, ni de sus necesidades. Consciente de sí mismo es cuando somos capaces de sentirnos independientemente de cualquier otra cosa y relación. Yo soy yo, no la persona que trabaja, hijo, padre, pareja, amigo. Este sentir-se independientemente es la base de una percepción a otra frecuencia, en la que la consciencia de uno mismo, si bien empieza con una autopercepción diferenciada, progresa hacia la autopercepción como efecto, como consecuencia. La convicción no fundamentada es del mismo rango que la fe. Un razonamiento mental puede conducir a la misma conclusión a la que llegará otra persona por pre‘sentirla’. Lo importante es que haya una serie de experiencias que conduzcan a esa convicción, una comprobación experimentada. Por eso la evolución, en todos los ámbitos, es, ante todo, científica. Primero, establece hipótesis sobre bases coherentes y lógicas que, luego, debe corroborar experimentalmente. Todo lo que no sea probado puede, o no, ser. Por eso la continuidad de conciencia se alcanza en plena consciencia vigílica y el acceso al ‘otro lado’ se realiza en encarnación física. La verificación de la permanencia en otro espacio no vinculado a cuerpo biológico es la razón de ser de la evolución del cuarto reino, la meta del grupo y el triunfo de cada ser humano. Sin esa verificación no hay consciencia real de uno mismo en ese ‘otro espacio’. Esto implica un desarrollo específico en cada individuo para salir de lo concreto, llegar a lo abstracto y trascenderlo. De realizar este trabajo dependerá que otros lo puedan también hacer. Sin embargo, cuando se afirma que la puerta está en la mente, la mayoría de las personas se sienten confundidas porque utilizan su mente (que no la Mente) para satisfacer deseos o necesidades, y la Mente no tiene que ver con nada de ello; ni siquiera con los pensamientos. Al realizar este trabajo, facilitamos que otros lo puedan hacer porque trabajamos con la ventaja de la experiencia a tiempo presente. Desde donde parten las personas para acceder a ese umbral y traspasarlo, es desde la ventaja que les proporciona aprender de la experiencia viviente de otra persona en cuanto a [email protected]

3 progresión interna en no-tiempo, otra que, por otra parte, ha realizado el proceso partiendo del mismo tiempo presente que ellos, lo que es muy importante para los que están aprendiendo ya que quien transmite la ruta y el que está en vías de transitarla saben, por igual, lo que cuesta hacer ese viaje y el precio final que hay que pagar. No confundamos el cuerpo biológico con la naturaleza de lo que se ha dado en llamar Alma, energéticamente asociada a él, y que da lugar, como efecto colateral, a la evolución en el plano físico. Antes no fue así y no será así después. Seguiré utilizando, también, el término Alma aún sabiendo que, con la idea que se tiene de ella, es imposible un acercamiento adecuado a lo que trato de transmitir. El Alma es una parte del CEI –centro energético intermedio. Este centro es un todo formado por interacciones energéticas entrantes y emergentes. Se llaman emergentes a las energías procedentes del cuerpo o vehículo energético receptor, ya se encuentre éste asociado a un sistema de planetas o a un sistema humano. Se denominan entrantes a las energías procedentes del cuerpo o vehículo energético emisor, ya estén estas asociadas a un sistema de planetas o a un sistema humano. Lleva su proceso (¿Cómo llamarlo tiempo si estamos hablando de energías?) conseguir que este entramado energético logre un equilibrio entre lo entrante y lo emergente. A tal entramado energético en algunas tradiciones y líneas de pensamiento se le da el nombre de Loto Egoico –L.E.- (nada que ver con el ego, sea lo que sea que cada cual entienda por tal) que, como cuanto existe, nace, crece, expande su radio de influencia y lo trasciende (evoluciona). La fase Alma del CEI es la relacionada con la recepción de las energías procedentes del L.E. y su adaptación a las energías emergentes del sistema humano. Esta relación es dual por cuanto afecta la vida de la forma y la progresión de la consciencia, lo que involucra dos evoluciones claramente diferenciadas que friccionarán y lucharán entre ellas hasta alcanzar un equilibrio que permita su desarrollo síncrono y fusión. A las energías procedentes de un sistema, ya sea planetario, humano, etc…, se le ha dado diversos nombres según las tradiciones y escuelas de pensamiento, así: Al llamado cuerpo (también vehículo/plano/esfera/átomo, cada uno actuando como una unidad) mental se le conoce asimismo por Vital 1, átomos de 5º orden, plano de respuesta y, por consiguiente, materia atómica capaz de responder a una energía. Al llamado cuerpo astral por Vital 2, átomos de 6º orden, plano de adaptabilidad y, por consiguiente, materia atómica cuya sensibilidad le permite iniciar la adaptación a un impulso energético. Al llamado cuerpo vital por Vital 3, átomos de 7º orden, plano de organización y, por consiguiente, materia atómica capaz de reordenarse según la energía. Sin embargo, todos y cada uno de estos vitales, en su medida y modo, responde, se adaptan y organizan.

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4 Es absolutamente importante, diferenciar: •

la inteligencia que responde del Vital 1, la inteligencia que adapta del Vital 2, y la inteligencia que organiza del Vital 3, de

• la materia o masa atómica que se moviliza en cada vital, cada uno con sus diferentes características, porque es sobre esas inteligencias –en una u otra etapa de coordinación, coordinadas o sintetizadas-, que actúa la energía entrante procedente del CEI y donde el Alma encontrará su lugar, mientras se requiera su función; por lo que es imprescindible conocer (sin especulación ni asertos no verificados ni demostrados) los detalles de la conexión entre: • las energías entrantes del CEI y las inteligencias de los tres vitales y sus respectivas masas atómicas, así como • la conexión entre estos tres vitales y la energía autóctona, interactiva y sintética de la CO.EN o contraparte eléctrica neuronal. El efecto de la radiación entrante en los campos atómicos vital, astral y mental evoca en ellos tan lenta respuesta a su estímulo (por el bajo voltaje de las energías sobre las que actúa la radiación), que no permite el desarrollo consciente. Previo a la consciencia está el darse cuenta de las cosas, la adquisición de información y su empleo inteligente, por lo que las vivencias que se experimentan en y durante la progresión interna en el no-tiempo y a niveles vital, astral y mental, tienen tan escasa posibilidad de aportar información válida para el Ego (no el L.E., que es su vehículo) que éste no registra ni se incorpora nada… Durante el proceso evolutivo, el contacto astral llega a coordinarse con el vital, e incluirlo. Tiene, por consiguiente, mucha más información. El contacto en el mental permite registrar muchísimas más cosas que los anteriores, a los que abarca. Tiene ahora más campo experimental. Maneja más materia atómica. El contacto tiene que afectar mayor masa, efectúa más asociaciones y disociaciones. Adquiere más información. Lo que surge de ese triple contacto, como efecto del estímulo de las inteligencias de los vitales por la energía entrante procedente del CEI, tiene el registro de todas las asociaciones y disociaciones efectuadas y recurre a ellas para administrar y transformar la masa atómica. Es una forma de recuerdo. Está aprendiendo a útilizar las analogías acumuladas. Esa ‘memoria’ atómica ‘reconoce’ cuándo determinadas asociaciones no van a resultar y ‘aprende’ a eludirlas. Tiene registros de las asociaciones y disociaciones que no son convenientes. Pero también los tiene de las asociaciones que son más útiles, y se sirve de toda esta información para adquirir (inteligencia) muchos más datos…, atraer más masa atómica (crecer), causar efectos en ella, incorporarla…, sumar más energía (expandirse)…, siempre con un propósito, una finalidad. Cuando esta triple inteligencia desarrolla la facultad de utilizar, automáticamente, las experiencias acumuladas sin necesidad de reconocimiento ni verificación previa, es porque ha llegado a un punto en que las tiene incorporadas. Y cuando esta triple inteligencia, vital, astral y mental, se coordina, empieza a formarse un [email protected]

5 centro de respuesta coherente desde el que se controlará y gestionará la ‘base de datos’. Surge el Gestor (coordinador) de la Memoria, de la Inteligencia y de la Información vinculadas a materia atómica. Este centro gestor inteligente está en su memoria, la utiliza y actualiza incesantemente. Este centro gestor inteligente es inteligencia que se expande y, mientras progresa en no-tiempo, transmuta la materia atómica que lo vehicula cualificándola con su atributo, lo que le permite expansionarse a mayor ‘velocidad’ y afectación. El Centro Gestor Inteligente emplea ahora, a plena potencia, su capacidad de utilizar la información, mientras se desarrolla. Ello genera tal voltaje ‘diferenciado’ de la energía atómica, por un lado, y de la energía que fluye a través del Gestor, por otro, que concuerda con la energía de la materia atómica del Cosmos que vehicula Consciencia, LO QUE FACULTA EL VÍNCULO ENTRE AMBOS, DOTANDO AL CENTRO GESTOR INTELIGENTE DE POTENCIAL DESARROLLO CONSCIENTE. Existe una materia en el cosmos cuyo principal atributo es que vehicula energía consciente, pero dicho atributo sólo se manifiesta cuando aquello con lo que entra en contacto es capaz de generar el voltaje necesario y suficiente ‘en que’ tenga lugar la conexión y se establezca el contacto. Esta memoria e inteligencia que se expanden, mientras el propio Centro Gestor progresa en no-tiempo, generan, inevitablemente, tal voltaje ‘diferenciado’ (de la energía atómica, por un lado, y de la energía que fluye a través del Gestor, por otro), que ‘propicia’ que se articule con ella la materia atómica cósmica que vehicula energía consciente. CUANDO ESTO SUCEDE Y ESTÁ ASOCIADO A UNA INDIVIDUALIDAD BIOLÓGICA, en ésta se inicia el proceso que LA LLEVARÁ A DARSE CUENTA de las cosas, a darse cuenta de sí misma, de su Inteligencia y del hecho DE QUE ES CONSCIENTE… ES CONSCIENCIA…, INDEPENDIENTE DE SER VEHICULADA POR UN CUERPO BIOLÓGICO O ENERGÉTICO. La coalición de: • La aceleración implacable del voltaje generado por y en el Centro Gestor Inteligente cuando emplea, a plena potencia, su capacidad de utilizar la información, mientras desarrolla su progresión interna en no-tiempo, • La agregación sistemática de la masa energética, que vehicula al Gestor, (crece, respondiendo esta adición, sólo colateralmente, a una necesidad de éste), • El sostenido incremento del volumen de la masa energética que él controla, y • La energía de la materia atómica cósmica que vehicula energía consciente,

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6 y su interacción conjunta, GENERAN EL VOLTAJE ESPECÍFICO QUE PRECISA LA MATERIA ENERGÉTICA DEL COSMOS (cuyo principal atributo es vehicular una energía capaz de cualificar a aquello con lo que entra en contacto con la posibilidad de desarrollo consciente), PARA ESTABLECER CONTACTO CON ESE CONJUNTO INTERACTIVO DE ENERGÍAS RECEPTORAS, DEBIDO A QUE ÉSTAS HAN GENERADO EL VOLTAJE (tener en cuenta sus diferentes características) ‘EN QUE’ SE ESTABLECE CONTACTO, SE DA LA CONEXIÓN Y ‘REVELA’ (LO QUE PUEDE ENTIFICARSE), iniciando el ‘despliegue’ de una Inteligencia Consciente de alcance y potencial inimaginables, en todo sistema. También en el sistema humano. Debéis reflexionar sobre LA NATURALEZA DE esta ENTIFICACION…, así como sobre LA ‘REALIDAD’ EN QUE TIENE LUGAR SU EXISTENCIA, al margen de una de sus manifestaciones, en este caso, la vehiculada por la coalición de los factores integrantes que he citado, en un sistema. También aplicable a un sistema humano. Mientras no entendamos cómo surge la Vida y la Consciencia, previamente a toda evolución biológica, no seremos capaces de hacer las correspondencias entre lo que sucede energéticamente y a lo que da lugar biológica y psicológicamente en un ser humano. Este proceso requiere una gran capacidad de abstracción y percepción en planos internos. La energía consciente es el medio y la energía atómica capaz de registrar y responder, el umbral. Son contados con los dedos de una mano los que, en este tiempo, conocen el eslabonamiento entre la consciencia viviente y la inteligencia de la materia. La humanidad no ha alcanzado el desarrollo mental que le permita hacer la secuencia y participar en el proceso. Pero las cosas cambian. Estamos considerando la actividad de una energía atómica (materia) cuyo principal atributo es vehicular energía consciente y que, como cualidad sólo puede manifestarse a través del contacto, la conexión y la ‘revelación’ en la citada conexión. Ahora consideraremos los efectos colaterales a qué lo anterior da lugar cuando el proceso está asociado a una individualidad biológica. Todo pende de que LO QUE SE ENTIFICA (consciencia viviente, vida consciente, etc…, según la Tradición), afecte al voltaje energético receptor y produzca tal efecto en la capacidad de registrar y responder del ente energético (espiritual, en las Tradiciones) que éste devenga un punto emergente de percepción indiferenciada, de progresión interna en no-tiempo. Cuando el ente energético (no confundirlo con Lo que se entifica), además, está asociado a cuerpo biológico, tienen lugar las siguientes secuencias: • Se inicia, mediante conexiones (de estructura análoga a las que han tenido lugar en la fase anterior, correspondiéndose con ellas) con su energía electroquímica neuronal (autóctona, interactiva y sintética), el desarrollo biológico necesario para optimizar la adaptación de su energía electroquímica a la energía procedente del punto emergente de percepción interna en no-tiempo. En el proceso, el cuerpo físico denso se [email protected]

7 perfeccionará mientras se adapta a la energía receptora de la contraparte energética neuronal; • La CO.EN, se especializará generando, a partir de la energía autóctona, interactiva y sintética, lo que se conoce como vitales 1, 2 y 3 (mental, astral y vital, átomos de 5º, 6º y 7º orden, etc…, según las líneas de pensamiento). Estos vitales se expandirán y especializarán, afectando (y acumulando) más masa atómica y energía; • El Gestor (coordinador) de la Memoria, de la Inteligencia y de la Información vinculadas a materia atómica, desarrollará Inteligencia, se hará consciente, autoconsciente, devendrá Consciencia y se unificará, a través de ella, con LO QUE SE ENTIFICÓ en el ente energético receptor. Muchos son los caminos que conducen a un río pero, llegados a él, sólo un cauce. Esta es la primera de una serie de instrucciones de las que mucho depende. De la respuesta que evoque, dependerá la continuidad. -GÉ[email protected]

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