Foto: Carolina Morales
En los bosques de la Patagonia habitan varias especies de polinizadores nativos, entre ellas un abejorro llamado "Mangangá" o "Moscardón" (nombre cientifico Bombus dahlbomii). Éste es el único abejorro nativo del sur de Sudamérica. El Nido de Mangangá o Moscardón Mangangá es una especie colonial, que forma su nido (Foto) en cavidades bajo tierra, huecos de troncos caídos, o al ras del suelo bajo montículos de hojarasca. La colonia es fundada a principios de la primavera por una “reina” de cuyos huevos nacerán las “obreras” que son las que llevan el polen y néctar de las flores al resto de la colonia. Al final del verano nacen los “zánganos” y las jóvenes “reinas”. Estas últimas, luego de ser fecundadas por los zánganos sobrevivirán durante el invierno hibernando bajo tierra, y en la próxima primavera fundarán una nueva colonia reiniciando el ciclo. Todos los abejorros son pacíficos y no agreden a las personas. Sin embargo pueden “picar” si, por ejemplo, accidentalmente se pisa un nido.
Identificación El abejorro nativo se identifica por su “pelaje” homogéneo color naranja intenso. Por el contrario el pelaje de los abejorros exóticos se caracteriza por diferentes combinaciones de franjas amarillas, negras y blancas. (ver esquema).
Exóticos
Nativo
Bombus ruderatus
Bombus terrestris
Para mayor información, dirigirse a Laboratorio ECOTONO, Pje. Gutiérrez 1125 (8400) Bariloche. Tel.: (02944) 423374 int. 508 o por mail a:
[email protected]
El Mangangá es un importante polinizador de una gran diversidad de especies nativas que habitan en nuestros bosques. Entre ellas se encuentran hierbas como el amancay (Alstroemeria aurea), y la arvejilla (Vicia nigricans), arbustos como el chilco (Fuchsia magellanica, foto), el michay (Berberis darwinii) y el calafate (Berberis buxifolia), enredaderas como la reina mora (Mutisia spinosa) y la mutisia (Mutisia decurrens) e incluso árboles como el arrayán (Luma apiculata) y la patagua (Amomyrtus luma). Además, este abejorro poliniza cultivos de la zona como las frambuesas, frutillas y arvejas. Tal es la importancia que su disminución puede tener un efecto negativo sobre el resto del ecosistema.
Foto: Vanina Chalcoff
¿Qué podemos hacer?
Amenazas al Abejorro Nativo En las zonas más alteradas por el hombre, el Abejorro Nativo está disminuyendo, y parte de esta declinación poblacional está relacionada con la invasión de dos especies de abejorros exóticos de origen europeo: Bombus ruderatus y Bombus terrestris, introducidos en Chile para polinizar cultivos. Un estudio realizado en la Universidad del Comahue demostró que el abejorro exótico Bombus ruderatus está desplazando al nativo en algunas áreas del Parque Nacional Nahuel Huapi, entre ellas el Valle del Challhuaco.
La importancia del Abejorro Nativo
Foto: Carolina Morales
La polinización es un proceso ecológico que consiste en el transporte de granos de polen de unas flores a otras de la misma especie de planta. Estos granos de polen fecundan a los óvulos presentes en el ovario de la flor, formando la semilla, la cual, al germinar, dará lugar a un nueva plantita. Este transporte de polen, en la mayoría de las plantas, es realizado por animales llamados “polinizadores” (insectos o aves) que visitan las flores en busca de néctar y/o polen para alimentarse. Así, los polinizadores cumplen un papel clave en la reproducción de las plantas y, por lo tanto, en el mantenimiento de la biodiversidad.
Foto: Néstor Vidal
Y la polinización de las plantas de nuestros bosques
Un habitante de los bosques
Foto: Juan Karlanián
El Abejorro Nativo
¿Qué es la polinización?
Bombus dahlbomii
✔ Lo más importante es preservar los bosques de lenga, ciprés y coihue, así como los matorrales de ñire, que son el hábitat natural de esta especie. Las áreas protegidas y Parques Nacionales cumplen una función muy importante en la conservación de estos hábitats. ✔ Mantener o “reintroducir” las especies nativas de plantas en nuestros jardines y espacios públicos, que proveen alimento (néctar y polen) a los polinizadores. ✔ Preservar algunos rincones naturales o agrestes (por ejemplo, sin parquizar o desmontar) en nuestros jardines, parques o huertas para que el Mangangá pueda hacer su nido o hibernar. ✔ No destruir sus nidos y avisar si se encuentra uno (ver dirección más abajo) ✔ Evitar el uso de herbicidas y pesticidas sistémicos y no fumigar cuando los cultivos están en flor, especialmente en los horarios de mayor actividad de los abejorros (entre las 10 y las 18 hs. aproximadamente). ✔ Apoyar iniciativas tendientes a evitar la importación o introducción de especies exóticas.
Idea y Textos: Carolina Laura Morales.