Estas listo, esta listo, para empezar creyendo lo que él cree en ti, Listo para escuchar lo que él a soñado para ti, Listo para hablar de su, siguiente paso. No hay nada mejor que conocerlo No solo como lo platique, sino conocerlo. Íntimamente. estar con él 24 horas del día de los 7 días de la semana, estas listo. Ahora es el tiempo. OH Dios, tú eres mi Dios, Yo te busco intensamente, Mi alma tiene sed de ti; Todo mi ser te anhela, Cual tierra seca, extenuada y sedienta. Te he visto en el santuario Y he contemplado tu poder y tu gloria. Tu amor es mejor que la vida; Por eso mis labios te alabaran. Te bendeciré mientras viva, Y alzando mis manos te invocaré. (salmo 63:1-4) Empecemos buscándole: yo te busco, con el fuego de mi corazón, yo te busco, mi deseo eres tu. Te anhelo, te necesito, te amo mas que a mi ser. Dile que aquí estas: aquí estoy otra vez con el corazón rendido y sentado a tus pies Aquí estoy ante ti, esperando que tu gracia se derrame sobre mí, te adoro, no hay más palabras que me ayuden a describir mi devoción, yo te amo cuán limitada es mi expresión para declarar mi admiración, recibe ahora esta canción que sale de mi corazón, ya son muchas veces que no encuentro las palabras que describan lo que siento en mi interior solo sé que siempre escuchas cuando intento expresarte mi amor. Dale las gracias : OH gracias, tú eres mi alegría, gracias, encontré la vida en ti, No tengo algo en mis manos que entregarte, mi ofrenda es solamente gratitud, No tengo dinero ni manera para repagarte la vida en abundancia que me has dado en plenitud; al estar aquí con agradecimiento es tu sangre que me ha dado ese lugar tu amor sobrepasa entendimiento y expresar mi gratitud nunca lo podrá callar. Nadie me ha protegido, nadie me ha sostenido, nadie me ha cuidado como tú, Es por eso que me rindo, es por eso que me entrego, es por eso que mi vida te pertenece a ti. Que presentéis vuestro cuerpo en sacrificio vivo, santo ,agradable que es Vuestro verdadero culto: mi vida pongo en el altar del sacrificio señor aquí yo sé que moriré para que vivas en mí, mi corazón ofrezco a ti vivifícame, Vivifícame, has de mi vida una ofrenda agradable señor, un sacrificio aceptable que te honre mi Dios, mi vida entera entrego ti, vivifícame.
Necesitamos ser lavados diariamente, la palabra es agua purificadora que quita toda suciedad que la sociedad derrama en nuestros pensamientos: Yo quiero ser un espejo de ti señor, yo quiero ser un reflejo de tu amor, fórmame, cámbiame, has lo que tengas que hacer en mi, un reflejo de los cielos yo quiero ser, lávame, en las aguas de tu perdón, purifícame, limpia mi vida y corazón una y otra vez como ésta vez, necesito ser lavado por ti, toma mi corazón y lávame. Yo quiero ser el reflejo de tu santidad y permanecer abrazado de tu amor, tómame, renuévame, has lo que tenga que hacer en mi un reflejo de los cielos yo quiero ser. Sólo por tu sangre: sólo por tu sangre, puedo estar contigo, sólo por tu muerte tu me diste vida, cuando resucitaste tu victoria también fue mía. Puedo entrar tu santo lugar, todos mis pecados clavaste en la cruz por siempre y siempre. Solo por tu sangre. En Jesús podemos ver el santo lugar ; él es mi pan , mi luz, y mi oración: al entrar a tu santo lugar me asombre que me pueda acercar para ver tu gloria y tu belleza y adorarte en intimidad, en confianza yo me puedo acerca, de tu mesa quiero participar, todo lo que puedo hacer es postrarme y con mis labios proclamar: mi pan, mi luz, mi oración eres tu Jesús, mi Dios, mi amor y mi canción eres tú Jesús sólo tú. Me cuidas, me abrazas, me cantas, me amas. Debemos amarlo: adorarte quiero hoy, entregarme a tu amor, llenarme del calor de tu presencia amarte es un placer, conocerte es mi querer, descansar en el saber que tu me amas. Amarte más y darte más mi corazón, mi amado Dios, es mi oración rendirme a ti de corazón, nadie es igual a ti, por eso canto así, de tu amor por mí y de mi dulce amor por ti. Tenemos un Dios que cumple sus promesas, es un DIOS DE PACTOS: Dios de pactos que guardas tus promesas, que cumples tu palabra, que guías mi destino, Dios de pactos confió en tus promesas, descanso en tu palabra, por tu gracia estoy aquí. En la intimidad, al abrigo de tu gloria puedo estar junto a ti, al ver tu santidad, estoy maravillado ante ti y tu amor, nunca seré igual al salir de este santísimo lugar. Tengo redención, por la sangre que descansa en tu altar para mi, la gracia y el perdón, son los frutos de vivir en comunión y adoración nunca seré igual al salir de este santísimo lugar. Jesús salió vencedor, conquistador, victorioso sobre el pecado, la muerte y de la destrucción. Para nosotros el sacrificio de Jesús significa una eternidad de perdón y de misericordias nuevas cada mañana, una vida en abundancia, regocijos, fiestas, alegría y celebración: OH celebraré, Me alegraré, tengo perdón, tengo salvación, redención, justificación. Fue por Jesús que murió en la cruz, me compró, él me trajo luz. Tengo su amor, su aceptación, tengo su favor. No temeré lo que pueda haber porque su poder he podido ver.
Puedo cantar, puedo celebrar, alabar, puedo yo gritar, su libertad me ha dado paz me libró de la maldición. Puedo andar, puedo caminar en su verdad yo me sostendré, no pararé, me alegraré, le daré todo el corazón. Él me dio un manto de alegría y cambió mi noche a día. Dile al rey: al rey hosanna, al rey aleluya. Me ha enseñado su grandeza, me ha mostrado su belleza, me vistió de su realeza, de su salvación yo cantaré. Ha cambiado mi tristeza, ha ungido mi cabeza, me cubrió de su belleza, de su redención yo cantaré. Yo me asombro, me maravillo, y derramo mi canto en honor al rey, no hay nadie más glorioso tan hermoso como mi rey. Hola hermanos y hermanas, todo esto que escrito es para un propósito, que conozcamos que tengamos un encuentro intimo. Las 24 horas del día los 7 de la semana. Con Dios. Todo lo que escrito lo podéis entonar una melodía y cantarla como alabanza o adoración o como una oración. Todo esto para mí ha sido para que me acerque mas aun a Dios. Y lo quiero compartir con vosotros, y que meditéis. Todo esto es para la gloria de Dios, el merecedor de todo. Me despido con un fuerte abrazo en el amor de cristo. Y que el señor os bendiga.