EN UN INSTANTE En un instante me sentí grande y diminuto, perdí toda la noción exacta de mi ser y capté la belleza de la creación. Me sentí como célula sigilosa, como pez que nada en el mar, como delfín, como león, como volcán, que ruge bravío, como minúscula parte del Cosmo. Y atónito me levanté, miré al sol. Pude sentirme una parte integrante de este mundo unido y enlazado por la multiplicidad de lo uno. En todo está la unidad, en todo está la creación, en todo está Dios.