El Milagro Del Amor
Hace mucho tiempo, existió un reino de elfos llamado Penrril, el cual era muy singular por su belleza y su magia, y como en todos los reinos, había unos reyes muy queridos por sus súbditos, tanto que nadie tenia ninguna queja de ellos, pues eran humildes y sencillos con su pueblo. Al poco tiempo de su matrimonio tuvieron una niña a la que llamaron Falon, nombre elfico que significaba gloriosa por su belleza. Los reyes estaban felices por el nacimiento de su niña, pero aquel bebe que nació hermoso con cabellos rubios como el sol y ojos grandes y azules como el mar, por muy extraño que parezca se convirtió en el hazmerreir de todo príncipe que iba a visitarla. Aquella princesa elfa de gran belleza, sin saber porque razón se transformo en algo horrible a los ojos de todo pretendiente. Su boca estaba torcida y seca, sus ojos se veían pequeños, caídos y opacos, su nariz era grande y deformada, pero aquella verruga que tenia en la mejilla, aun la hacia ver mucho mas fea. Pero no todo en ella era fealdad, pues poseía una voz muy hermosa, era tan dulce y bella su voz, que los príncipes al escucharla sentían una gran ternura y emoción. Falon solía cubrir su rostro para que solo escucharan su voz, pero cuando se le pedía que se destapara para observar de donde venia tan hermosa voz, se quedaban impactados y se burlaban de la pobre princesa, cosa que le rompía su corazón. Los padres de Falon estaban muy apenados ante la infelicidad de su hija, la querían demasiado para verla tan llena de tristeza y melancolía, hacían todo lo que podían para contemplar una pequeña sonrisa en aquel rostro que por algún extraño misterio se había deformado. Pero un día llegaron unos reyes de un país lejano llamado Draculia con su hijo que nació ciego y su nombre era Yagari que significa valiente y noble, esta familia viene de la raza de los vampiros, iban en camino a casa porque venían de visitar a unos parientes lejanos, pero por cortesía visitaron el reino de los elfos. Mientras se saludaban entre ellos, el joven esperaba en el jardín porque no se sentía bien frente a gente desconocida, cuando Yagari estaba sumido en sus pensamientos, escuchando el leve canto de los pájaros, se percato de alguien que estaba a su lado, era la princesa Falon, que a pesar de sus temores, era curiosa y quería saber quien era aquel desconocido, se sentó tímidamente a su lado y como siempre con su rostro cubierto por el velo. Yagari algo receloso pregunto quien era, ella le respondió soy la princesa de este reino y mi nombre es Falon, también con algo de temor le pregunto si no había oído hablar de ella, ante tal pregunta, Yagari le respondió con sinceridad que no solía acudir a festejos y que tampoco se relacionaba con mucha gente, Falon le pregunta su nombre y de donde venia, el le respondió, mi nombre es Yagari y vengo de un reino llamado Draculia. Ella le pregunta el porque no iba a esos festejos, Yagari le responde que el estaba seguro que ninguna princesa se fijaría en el. A Falon aquello le extraño, pues era un príncipe muy apuesto, pero en ese momento se percato de que la
mirada de Yagari se mantenía fija, y no miraba a ningún sitio dándose cuenta de su ceguera, ante aquel descubrimiento se destapo el rostro y hablo con el durante largo rato, y entre mas se hablaban mas se gustaban. Yagari quedo hechizado ante aquella voz tan dulce, porque nunca había escuchado una voz tan agradable y bella. En tan solo unos momentos se hicieron grandes amigos, para Yagari aquella princesa era la mas hermosa, aun sin saber como era su rostro, pues el la veía con su corazón. El príncipe pidió a sus padres pasar algo más de tiempo en aquel reino, a lo que accedieron gustosos al ver a su hijo tan feliz. Así día a día entre Yagari y Falon creció algo muy bonito, en sus corazones rebosaba un gran amor, pero ninguno tenía el valor suficiente para declarar su querer. Pero un día llego a los oídos de Yagari que Falon era un ser horrible, a lo que no daba crédito, pues para el era la mujer mas bella, y por mucho que le contaron no creyó en nada. Falon al saber que Yagari había escuchado eso, le conto la verdad y le pidió que le tocase el rostro para demostrárselo, aunque ella sabia que significaría el rechazo de su amado. Estaban sentados en la fuente del jardín donde se conocieron, cuando Yagari sin dilación empezó a tocar la cara de la princesa, aunque el no necesitaba pruebas porque para el ,ella era hermosa, pero ante la insistencia de Falon empezó tocándole los ojos ,los que por algún extraño motivo, empezaron a adquirir una forma bonita, abriéndose como dos grandes zafiros resaltando un hermoso color azul, entonces bajo hasta la nariz, la que se transformo en una nariz perfecta, luego rozo sus labios que en un instante se volvieron carnosos, rojos y bellos, y cuando toco aquella horrible verruga desapareció. Falon noto que había ocurrido algo y sin pensarlo se miro en la fuente y contemplo un rostro increíblemente hermoso y perfecto, ella de la felicidad abrazo al príncipe y le dio un gran beso y le dijo que lo quería, en ese momento el príncipe sintió una sensación extraña, empezó a ver colores y lo primero que vio fue un rostro que parecía al de un ángel y el con duda le pregunto si era la mujer de la que el se enamoro, Falon con una sonrisa le responde si. El sin pensarlo le pide su mano en matrimonio, Falon acepta casarse con el y los dos salen corriendo al castillo para comunicarles la buena nueva. Los padres al ver la felicidad de sus hijos se quedaron sin palabras, no podían explicarse el motivo del cambio de los dos jóvenes en sus rostros, se hacían miles de preguntas sin llegar a ninguna conclusión pero ante aquel feliz acontecimiento dejaron de pensar en lo que había sucedido y deciden celebrar la boda de sus hijos, a la cual invitaron a todos los príncipes que se burlaron de Falon teniendo celos de Yagari. En ese momento una mujer hermosa sale gritando de la multitud, los invitados la rodearon dejándola en un círculo, ella dice: no puedo creer lo que ven mis ojos, esto no debería estar pasando. Tu deberías ser un monstruo Falon y tu deberías ser mío Yagari, los padres de los príncipes asombrados con lo que oían hacen que los soldados arresten a la bruja, la cual se convierte en un ser horrible desapareciendo al mismo tiempo en forma de humo sin que nadie supiera nada de ella. Lo que rompió el hechizo de la bruja, fue el AMOR puro y verdadero de los dos jóvenes. Después de la boda Falon y Yagari se retiraron a su nuevo castillo y vivieron bellos y felices por siempre. Nombre: Jennie Paola Díaz Bustos Curso: 1102 Código: 9