DSM-IV
Es el sistema de diagnóstico psiquiátrico que se utiliza actualmente en Estados Unidos y que usan clínicos e investigadores de todo el mundo. Es la última clasificación aceptada internacionalmente de enfermedades psiquiátricas, y data de 1994. Consta de 5 ejes
El
eje I y el eje II comprenden la clasificacion completa de los trastornos mentales, con 17 categorías principales y mas de 300 trastornos específicos EL EJE 1 define los trastornos clínicos y otros problemas que pueden ser objeto de atención clínica EL EJE II define los trastornos de la personalidad y el retraso mental, el uso habitual de un mecanismo de defensa en particular puede ser reflejado en el eje II
EJE
III define cualquier trastorno físico o enfermedad medica que se presente acompañado a un trastorno mental. EJE IV se emplea para codificar los problemas psicosociales y ambientales que contribuyen significativamente al desarrollo o la exacerbación del trastorno actual EJE V incluye la escala de evaluación de la actividad global, en la que el clínico juzga el nivel general de funcionamiento del paciente
GRAVEDAD DEL TRANSTORNO
Dependiendo
del cuadro clínico, de la presencia o ausencia de signos y síntomas y de la intensidad de estos, la magnitud de un trastorno puede ser leve, moderado o grave y el trastorno puede estar en remisión parcial o total en el DSM-IV se siguen las siguientes directrices:
LEVE:
son pocos o ninguno, los sintomas que exceden los requeridos para formular el diagnostico. Los síntomas no dan lugar si no a un ligero deterioro de la actividad social o laboral. MODERADO: los síntomas o deterioro funcional se sitúan entre leve y grave GRAVE:
se detectan varios síntomas que exceden los requeridos para formular el diagnostico, o distintos síntomas que son particularmente graves.
EN
REMISION PARCIAL: con anterioridad se cumplían todos los criterios diagnósticos del trastorno, pero en la actualidad solo permanecen algunos de sus síntomas o signos.
EN
REMISION TOTAL: ya no existe ningún síntoma o signo del trastorno, pero todavía es relevante desde un punto de vista clínico tener en cuenta dicho trastorno.