Domingo 3 De Adviento 2008-antonio J

Para la oración y la vida PARROQUIA NTRA SRA DEL ROSARIO—TORRE PACHECO

Oye, Señor….. Tú nos alegras el alma, nos haces fecundos, nos alivias las enfermedades, ensanchas nuestro corazón, nos quitas los miedos, impulsas nuestros sueños, catapultas nuestras acciones, haces fecunda nuestra tarea, llenas de humor el vivir diario, quitas importancia al ridículo, magnificas las pequeñas ternuras, nos invitas a amar cada día más, nos vuelves creativos y osados, nos das alas de valentía, nos vas sugiriendo el modo y la manera de acoger al otro,

DOMINGO III DE ADVIENTO– 14 de diciembre de 2008

nos haces familia de la gente nos conviertes en sanadores, nos das sabiduría de padres, nos regalas tus ternuras, nos vuelves la vida una fiesta Y nos despiertas de adormilamientos. Gracias Señor, porque siempre estamos envueltos en tu misericordia y en tu paz. (a partir de Isaías 54, 1-10)

La campaña de la Luz de la Paz de Belén la organizaba originalmente la televisión pública austriaca, formaba parte de un gran programa benéfico denominado "Luz en la Oscuridad", dedicado a niños y niñas necesitados en Austria y en el extranjero. Cada año, desde 1986 un niño del norte de Austria recoge la luz de la gruta donde Jesús nació y la lleva a Europa desde donde se distribuye, en una ceremonia ecuménica en Viena, semanas antes de Navidad. El Movimiento Scout Católico participa en este proyecto desde 1999 con el propósito de llevar la “Luz de Paz” y el mensaje de la Navidad a tantas personas como sea posible, a participar activamente en el trabajo por la paz. Recibiremos la “Luz de la Paz” el VIERNES 19 a las 9:30 de la noche en el Templo Parroquial. Traed vuestra vela, farolillo, faro de tormentas para llevarla a casa y que alumbre vuestro hogar durante toda la Navidad.

En esta tercera semana de ADVIENTO, más próxima a la gran fiesta, vamos a intentar hacer un verdadero ejercicio de alegría, en nosotros y para los demás. Los cristianos tenemos una razón poderosa para la alegría en tiempos en que brillan por su ausencia motivos para estar alegres, sobre todo en la realidad social y comunitaria. La causa de nuestra alegría es que al final no nos espera un puerto más, una promesa más, sino DIOS mismo.

Seamos gente contenta, que desborde la alegría de nuestro corazón, porque la amistad que vivimos con Dios, nos mantiene en contacto con lo mejor de nosotros mismos, y en un talante agradecido. En nuestros adentros arde la llama del Espíritu, que nos mantiene cálidos, encendidos y vivos, para transmitir vida, calor y color alrededor, al tiempo que gozamos de una vida plena e interesante.

DOMINGO GAUDETE La Iglesia siempre ha llamado a este tercer domingo de Adviento el domingo de la alegría o “Gaudete” y se debe a que toda la celebración nos anuncia a Jesucristo como la causa de nuestra alegría. Esta alegría, este regocijo, deriva del gozo de dos alumbramientos: el que festeja la primera venida del Señor en navidad y el que se producirá en la segunda venida de Cristo. El Adviento nos trae la Buena Nueva de la Salvación, nos trae a Jesús. Nuestro gozo se debe volver testimonio, como hizo María.

CINCO PALABRAS DE ADVIENTO Enmanuel: Es una expresión hebrea que significa: “Dios con nosotros”. Aparece en una profecía de Isaías 7, 10-14, en la que se habla de un rey que va a nacer y que será signo de la presencia salvadora de Dios en medio de su pueblo. Marana-tha: Es una expresión en arameo (la lengua materna de Jesús) que significa ¡Señor Nuestro, ven! Es la expresión del retorno de Jesús, como nuestro “¡Ven, Señor Jesús!” Mesías: Es una palabra hebrea que significa “Ungido” En la antigüedad cuando un rey, sacerdote o profeta iniciaba su misión era ungido con aceite como signo de fuerza de Dios. El “Mesías”, el “Ungido” es el enviado que el pueblo de Israel esperaba como liberador. La traducción griega de “Ungido” es “Cristo”, y así llama el Nuevo Testamento a Jesús.

Isaías 61, 1-2a, 10-11 El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido. Me ha enviado para dar la buena noticia a los pobres….. Desbordo de gozo con el Señor, y me alegro con mi Dios. Tesalonicenses 5, 16 –24 Estad siempre alegres, sed constantes en el orar… No apaguéis el espíritu …. Que todo vuestro ser, alma y cuerpo, sea custodiado sin reproches hasta la venida de Nuestro Señor. Juan 1, 6-8, 19-20 Yo soy la voz que grita en el desierto: “Allanad el camino al Señor” como dijo el profeta Isaías. …. Yo bautizo con agua; en medio de vosotros hay uno que no conocéis, el que viene detrás de mí, y al que no soy digno de desatar la correa de la sandalia ---------Las lecturas de hoy invitan a la alegría y a la confianza. La presencia del Señor rebaja cualquier dolor, levanta cualquier tristeza, aclara toda zozobra, compensa toda pérdida y es capaz de poner alegría en el alma y en la vida de todo aquel que se fía de su Promesa y espera su venida. Hay más razones para el gozo que para el lamento y más argumentos para la alegría que para el miedo o la tristeza. El Señor que viene– que vino y que vendrá– es la mejor razón para el hombre feliz. El Señor llega y es nuestra mejor razón para vivir y sentir la alegría en el corazón mismo de cada día.

Precursor: es el que anuncia o prepara algún acontecimiento a la venida de alguna persona. Se aplica a Juan Bautista, que anunció y preparó la venida del Mesías. Profeta: significa mensajero de Dios, el que habla en nombre de Dios. Los profetas llaman al pueblo a la fidelidad, anuncian las promesas de Dios y a veces también sus castigos. El profeta más significativo en el tiempo de Adviento es Isaías.

La presencia de Jesús no pasa inadvertida. Se trasparenta en la paz y la alegría de quienes invocan a Dios Padre, conscientes de ser sus hijos y herederos de su Reino