Dario De Reflexion

DARIO DE REFLEXION LUISA LISQUEILA VALDEZ VILLÁN Hoy lunes 28 de enero se entregó la carta al hogar Wilpia Flores de Centeno, para recibir el permiso de realizar la actividad del compartir; con las niñas de la casa hogar, y así aplicar algunos valores que les dejaremos como enseñanza. La respuesta a nuestra solicitud del permiso, fue positiva; dejándonos asistir el día miércoles 30, para realizar cómodamente la actividad. Hoy miércoles 30 de enero a las 2:30 pm, llegamos a la casa hogar y nos recibieron gustosamente, el coordinador nos guío a un salón donde se podía llevar a cabo cómodamente la actividad, al entrar al salón lo primero que hicimos fue acondicionarlo, para que cuando llegaran las niñas encontraran un ambiente agradable y así su desenvolvimiento fuera mejor dentro del grupo, el siguiente paso fue ordenarlas en grupos de 5, en una mesa que había en el salón colocamos un pequeño compartir que era la torta y el refresco, y un presente para elevar la motivación como los cotillones que les entregaríamos a las niñas. Luego que terminamos de arreglar el salón entraron las niñas y se sentaron, nos presentamos preguntándoles los nombres de cada una de ellas para conocerlas y al mismo tiempo les dimos los nuestros. A mí me tocó el grupo de Erika, Roselyn y Mayra Alejandra, que son niñas que no sabían leer ni escribir, lo cual me conmovió sabiendo que ya eran adolescentes; pues sus edades eran de 12,14 y 15 y no habían tenido la oportunidad de estudiar. Comenzamos la actividad con una dinámica que tenia por nombre el autógrafo (donde se trata de buscar a la persona que coincida con los mismos gustos de uno, y hacer que le firmara la hoja), entre las preguntas de la dinámica se destacan: ¿Qué quieres ser cuando seas grande?, ¿te gusta bailar salsa?, ¿te gusta el futbol?, ¿te gusta ver películas de Disney?, ¿te gusta leer cuentos?, al final mi sorpresa fue, que cuando todas leímos, lo que queríamos ser cuando fuéramos grandes; yo coincidí con casi todas las niñas, porque a la mayoría les gustaría ser profesoras y bailarinas profesionales. En el transcurso de la dinámica le pregunte a Roselyn que como se sentía ella en la casa hogar y me respondió que ella quería escaparse pero que no lo hacía porque le faltaba pocos días para salir de permiso y que cuando ella saliera no iba a volver porque se iría a vivir con el novio que vive en una finca y que ella se iba a esconder allá luego le pregunte qué edad tenía el novio de ella y me dijo que era un viejo que tenía como para que le diera solo platica. Luego de terminar la dinámica realizamos la escala de estimación en el cual nos daríamos cuenta si las niñas ponen en práctica los valores. En el cual nos arrojo a que estas niñas carecen de muchos valores. Otro paso que hicimos fue la realización de la lectura de unos cuentos en donde le leeríamos algunos valores como la generosidad, el respeto y la solidaridad; a cada grupo le toco un cuento diferente. A mi grupo le toco el respeto y el cuento se llamaba cucufato el revoltoso (el cual se trataba de un niño que se burlaba de la gente), Al terminar el cuento le preguntamos a las niñas cual era la moraleja y ellas respondieron “que no hay que desearle mal a nadie porque las cosas se pueden devolver y que debemos respetar a las personas”. Luego al terminar los cuentos les repartimos los

cotillones, la torta y los refrescos que les habíamos llevado para compartir con ellas, al terminar la actividad las niñas se nos acercaron y nos dieron las gracias por el tiempo que le dedicamos y por el detalle que tuvimos hacia ellas, se notaba que estaban contentas porque había un ambiente de alegría, al despedirse nos dieron besos el cual me lleno mucho como persona. Al salir de la casa hogar, yo les dije a mis compañeros que tenía ganas de llorar, al ver las niñas en ese estado y no poder hacer nada, pero que fue agradable darles unas horas de alegría y que teníamos mucho que agradecer a nuestros padres y nos prometimos en volver con una nueva sorpresa. Cuando llegue a mi casa le conté a mi papá lo que hice en el hogar y le dije: que al ver, en el estado en que esas niñas estaban me daban ganas de llorar, porque las niñas de mi grupo no sabían leer y a cada rato me preguntaban que decía en las hojas que les dimos. Y yo le dije a mi papá que me siento muy afortunada de tener unos padres tan responsables como ellos, también le dije que a mi hijo le voy a dar todo el amor del mundo porque ya sé lo que es el dolor de madre y no me gustaría que el algúndía el este en esa situación. Hoy viernes 08 de febrero, hicimos cumplir nuestra promesa de volver y darles una nueva sorpresa a las niñas, esta vez no solo fuimos el grupo de la universidad, sino también llevamos algunos de los jugadores del Deportivo Táchira, llegamos a la casa hogar para volver a compartir con las niñas, al entrar fuimos directamente hacia la cancha, y notamos la cara de felicidad del coordinador, las niñas y de algunas personas que estaban en ese momento que empezamos a presentar a los jugadores, hoy no fuimos por un trabajo sino por darles un día mas de alegría y felicidad a las niñas de la casa hogar, hicimos tantas cosas como jugar futbol, reír, hablar con los jugadores, compartir un rato ameno y dimos un pequeño refrigerio, al finalizar el encuentro, nos despedimos llevándonos recuerdos bonitos de las horas que pasamos con las niñas de la cada hogar. Reflexión: pienso que soy muy afortunada por tener padres tan responsables que con mucho esfuerzo nos me han criado a mí y a mis hermana y nos han inculcado mucho los valores ya que se nota que en estas niñas no hay nada de eso sino todo lo contrario carecen de valores y lo que expresan en sus caras es tristeza y mucho odio hacia sus familiares y pues eso es algo muy triste porque siendo tan jovencitas no tienen el cariño de una madre o un padre.