Con el actual frenesí de iuzsar a los grandes genoci{as del mündo,& la piegunta es ¿cy|les crímenes están dejando impunes?S
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uc Llu incspel'¿rclo c irrcleseado nrourcr.rto cliniático. Aclcnrás, fue dcsconcertantc. Chliouh Natli había cscuch¿rdo cómo rlc narraban su historia por'20 rninutos. No l-rabl¿r inglés pclo la h:r lcpctido t¿lrtrs vcces a tr'¿rvtís dc traductorcs clr.rc va sólo asicntc plla confir'nr¿rr. Y sonr'íc. Cu¿rnclo lnc r-ncncionaclo cl rrolrbre dc Lv Rirr, cl más clilcctci ¡ret'pctt'irclol clc su tlagcdia, cl cllre denunció f¿rlsantclrte a sus paclles pala cluc los ascsinala cl Khrtrct' Rouge, cl cluc rtrató I srr hclrrln:t a s¿'urgl-c h'í:r, cl c¡-re lo hilió crr la pielna cluc clcslrués clebiclon arlputallc, Clrhoul< sólo sonrió. Y hacc un momcnto, cLlaÍlclo ulr hourbl'c clio vr,rcltn:r la escllrina, caminó dcspacio,
lrrsó fi'cntc scntados cn l¿r cscalcra dcl pcc¡uerio tcnclajór'r clc la alclca- v srlucki. Chl-rouk clcvoli'ió la coltesí:i cor.l Lrnn sol.tlisa. Qtrc lralccc lrr nrisllr¡r. Pelo no. Noto algo ral'o en lnis clos intcllocutol'cs... ¿c¡uci cs? ¿lis c1r-rc se tl'ata clc Lv Rin? ¿liive toclar,ía? ¿Ac1uí? "Y sc ven toclos los clías clc toclas las sc'r.uan¿rs", resporrclc rri guía.
r llosottos -los tlcs
"llu 1as cultul'ns ¿rsiátic¿rs es urLl\/ impoltante 'salval la cala"', nrc hlbía cxplicrclo ¿rntcs Kilte l"igarcclo, cl obispo c¿rtólico de Blttembang, cl.r cl ocstc clc Car.nbor,¿r. "Si sc dcmucstr¿r inconroclicl¿rcl o nrolcstil, 'piclclcu cara' t¡nto cl cprc la exhibc conro cl c¡re l¿r
lecibc, llol cso toclo son sonlisas. A nrcnos qlle llcgues a terrer'
lnuch¿r confianz¿r con cllos, ntrnc¿r tc
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clc lo cluc real-
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dc aurnistía. Augusto Pinochet
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v sus generales chilenos se la
INIERNAII0NAL dtr [a Haga tieppla atribución parqpgar crÍmenes contra la ñUfttanidad.
autootolgalon, ¿pxl'Íl qué esperar la llegada de los civiles? Pelo éstos no se sintieron sal isfechos v derrrrrrdalon que, si no había justicia, ltol lo r-nenos
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verdad: en 1990 sc estaltleció qrrc cn el clmino l in lccollciliación las r¡íctimas poclrían hacel priblicas sus tl'tgcdias \ los victimarios deberían confesar sns atrocidadcs.
Éste fue el modelo no sólo para América Central, donde la oposiciór-r tenía capacidacl rnilitar'1, dc prcsió¡, siuo para mnchos otlos países del mur-rclo. Dcspués dt'Clrilc. conrisiones de vcldad )¡ l'ccouciliaciólt fneron creaclas en El Sah'aclor.. Chad, Haití, Sr-rdáfrica (aunclue
algunos piensan cluc ésta fue la prirnera, se instaló hasta 1995),
Gunlcnlrla, Ecuaclor'. Nigelia.
De todos n-rodos, Lt'Rin palticipó er-r la elin'rir-ración de n'rás de la mitad clc la gente cle csta aldea, Ttrol Ta Ek. Y vive eu ella, aparentel-llente trrr-rc1uilo. Los que perdieron palientes y antigos por
sll callsa ticr.rcn clue convivir con é1. ¿Es quc r-ro perdió la guerra el Khmcr Rouge, tlas la caída de su rógintcn genocida clue mató a entre ullo v tl'es milloncs de cambo),anos? ¿No se ha iltstalado nn tlibnnal pala jnzgar cstos crímenes? ¿No quiere Chl-rouk que se l-raga justicia? "Tal vcz sí -me dice cl tracluctor' . Pclo tras décadas de guellas, tal vez Chhouk prefiera tener paz". Nfiro al delgado canlpesino khr-ncr. Este sonríe Luta vez r-nás al decir en inglós: "Peace". Y lerranta la mano para mostrar dos dedos cr-r V.
FA; ANf [5 üt:f, JUsT¡[iA ¿Paz o justicia? ¿Se puede
tcnerlas al rnismo tier-npo?
¿O
son r.nutua-
rnente excluycntes?
En los conflictos estancados de América Latina, cn los años ochenta y l'lovcnta, se pensó que la exigencia de justicia cla un obstácuio pala la paz. Las dictacluras militares del Cono Sur no cederían el poclcr a los civiles si existía la amcnaza de que los juzgaralr pol los sccucstl'os, tortulas y asesinatos de decenas dc miles de llcrsonas. L¿rs clites sanguinarias de Centloamérica no per.mitir'íar-r la ir-rteglación de los guerrilleros a la vida den-rocrática si ellos insistían en ajustar cuentas con los escuadrones de la muerte. Parecía clue ningúrn gobierno podría sobrevivir. si los criminales, que
conservaban las arrlas -Arger-rtina, Chilc, Uruguay, Brasil- y a veces el podcl El Salvador y Guatemala- se sentían cn peligro. Se optó ¡tol la paz en lugar de la justicia. Los presidentes rioplatenses Raútl Alfonsín y Carlos Ménem emitieron arnplias leves
Perúr, Sierra Leona, Colea clel Sur, Uluguay, Tir-nor Oliental, Ghana, Panamá, Congo, Liltelia y Marr.uccos. Actuahle.nte, Argelia, Afganistán y Burundi scguirán el urisn'ro camino. Sin en-rbalgo, son r-l-mchas las voccs clue se alzan pirrir denur.r-
cial qne críntenes contra la hr,rmanidad como el ger-rocidio, la limpieza étnica, la tortula y otros horrores no puedcn quedar. ir-npunes. Sobre el princi¡tio de soberanía nacional, los estados son responsables de evital que los autorcs queden impunes. El
problema es qlle, con flecnencia, estas naciones se mLrestLan incapaces de hacerlo, bien polclue los clirninales no cstán a sn alcance -pol haber escapado a otlo país o llor tener fucrza suficiente para dcsestabilizal al gobierr-ro- o porque, sir-npler-nente, son ellos quienes continúran detentanclo cl poder. Aquí es donde
entla en juego la justicia internacional. Despr-rés clc los tribunales de Nulernbelg y Tokio, que a pal.tir de 1945 juzgalon a los criminales de guerra alelnancs, italianos y japonescs, la sigr"ricnte institución sil-nilar. tuvo que esperal medio siglo antes de apalecer'. En1993, el Tribunal Crirninal Iuternacional para la antigua Yrrgoslavil (rc.'r'v, por sus siglas cr.r ing'lés) fue institr-rido para jr-rzgal los abusos cometidos durante los conflictos de Bosnia, Croacia y, más tar.de, Kosovo. El ario siguiente, BOO,OOO africanos cle etnia tutsi fueron asesinaclr-is p,-,r el gobielno hutu de Ruar-rda. Otlo tribunal cspecial par.a tlc:ts l... creado en la ciLrdad de Alush¿r, cn la vccina Tanzania. Esr,,. ,-,..,:: ór'ganosollcral'oltcxclusivarlcntecon jtrccc.scritl.altjur, ,... ,_,- .,-. lcgislación intcrnacional. Desde cntonces han sido instituidos otlos ciltc, , tr.: ..:... - . . crímenes dc gucrra, con difelcntcs gr.aclos clr jl:.:-:.,. . : .
yóxito:SiellaLeona,Car-ubova,TimolOri,-.r,:..-:... Líl¡ano había pedido Lllto
llil'il irtvrsri=,: . .. - .
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primel'lninistro Rafik Halili, en
2OO5, presuntamentc por los sirios, pero despuós de la invasiól-r israelí de julio, los libar-reses están más ocupados cn odiar a sn vecino del sur quc al del cstc.
cerladas con candados. Infantes que fueron obligados a nlatar a palos a sus padres y después a colllel'se sus cercblos. A nn homblc lo clesollaron vivo antes de qne picalan y comieran su carne. A otro le allancaron el colazón para llenal cor-r él la boca de su rladre,
IUSTltlA FÁfi4 Igl'{[R Pti:
nna anciaua de 87 años. A miles los cluer-nalon dcr-rtro de sLls casas. En el pequeño país dc seis millones de habitantes, er-rtle 5O,OOO y 2OO,OOO personas fnclon ascsinadas v cnatro millones ), medio (tres cnaltos de la población) tuvieron que huil dc sus casas.
El plir.r.rel tribunal "híblido" del mundo fuc la Coltc Especial
de
Sierra Leona, ir-rtcglada por Llna rlezcla de jueces locales y extlanjelos, en 2OO2. Tarrbién es el prilncro qne en años lecicntes fue estableciclo "en cl tcatlo", cs decir, en cl sitio dondc los crínrcnes fuelor-r
comctidos. Se cncuentra en Fl'eetowlr, la capital de Sielra Leona. Lrs ¿rtlocidaclcs clne tendrá clue juzgar sol-l ilrcourllreusibles. El Irrir-rci¡ral gmpo rebelde, cl Frente Rcvolucionario Unido (nt r., por sus siglas en inglós), no tcnía nobles ideales cor-l-ro r-notivación, sir-ro el contlol de las urinas dc diamantes (pala lo cnal cra financiaclo desdc la vecir-ra Liberia por Challcs Tal'lor', c¡uien adcmás va se dedicaba a semllral el telrol en su plopio país), 1, se hizo famoso por' sn costumble de arrancallc los labios a la gcnte. Pelo toclas las partcs comctielon crímenes contra la humanidad. El siguiente cs un párrafo que bicn puedcn saltalse
Aunque Taylor perdió la guerra en Sierla Leona y en Liberia, logró evadirse a Nigelia. Bajo la idea de clue la paz es mcjor que la justicia, un acuerdo alcanzado bajo la mediación de Estados Unidos lo obligaba a alejalse de la política y rrantencr tranquilos a sus partidarios cn Libclia, que todavía tenían armas y pocier, a car-nbio clc pern-ritille
disfrutar de un cxilio dorado ell Llna villa jr-urto al
mar', coltesía del prcsider-rte nigeriano Oh-rsegun Obasanjo. Tay-lor'
incluso ¡ratrocinó a un faliber'iano que juega en el futbol elll'opeo como candiclato presidelrcial. Los fiscales denuncialor-r clue esto lor-upía el pacto y sigr-rió moviendo los l-rilos a distancia e r-noso
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En Un UAüm e $*ü$ mi[lunss dffi J:: ñátiit Hiiié b rntre 50,00 0y 200,000 las
laspclsonas,.,rássensiblcs
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tas soble el sexo de los fctos de
mujeles embalazadas -v luego les vientle para courpl'obal quién había ganado. Muchas abrielor-r el
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tron ases[n ad¡as v Guatrn
edio tuvier on rlub huir.
vaginas fueron cosidas cor-r hilo de pesca. Miles de bocas fueron
tA ONU JU6ó
un papel
importante en el conflicto en Sierra Leona. AquL un helicóptero de esta
organización en misión de paz
reclanlaron slr cleportación. Obasanjo dijo que sólo lo entregaría si un gobierno liberiano democrático así 1o solicitaba. Apenas electa, la nueva presidenta, Ellcn Johnson-Sirleal así lo hizo.
El artesto y procesarrierlto de Taylol fue un glan éxito tanto de la corte especial como de la justicia internacional. El Consejo de Segr,rridad de la oxu le ordenó juzgar sólo a "aquellos con la ma]'or responsabiliclaci" por los crimenes. Hasta ahora ha indiciado a 13 personas (en contraste con ias 1ó2 del tribunal para Yr,rgoslavia). Los juicios de nueve de ellos -tles de cada uno de los dos principales glupos rebeldes y tres cle la progubernamcntal Fuerza de Defensa Civil (cor.), en una demostración de imparcialiclad- están bastante avanzados. Taylor cs el décin-ro. Dos siguen escondidos y el irltimo ha rruerto. La dccisión de la corte de procesar a Chief San-ruel Hinga Norman, el ex jcfe c1e la c¡r la cual ayudó a derrocar a una junta de gol-
pistas en 1998, ha causado enojo entre los sierraleoneses, quienes lo consideran un héroe. "Sin duda tiene que haber una diferencia entre Lln grupo de bandidos y asesinos que va rebanando gente al azar v sin razón, y gente quc trata de defer-rder slls casas, sns vidas, sus hogarcs ], sus niños", protestó Petel Penfold, alto comisionado (enrbajaclor) cle Gran Bretaña en Sierra Leona entre 1997 y 2OOO.
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El fiscal replicó: "Uno puede pelear al laclo r.nismo de los ángeles y sin embargo corneter crímenes contra la humanidad." De diversas mancras, la corte de Sierra Leona es valorada como un modelo, cor-l su mezcla de dos jueces intelnacionales por Llno local, su alrrbicioso programa de vinculación con los habitantes, sus rrediclas de ¡rrotección a las víctimas, su apretado calendario (se espera qne terrnine su trabajo en menos de cinco años, mientras que el de Yugoslavia tiene 17) y presupuesto relativamente bajo,30 millones de dólares al año (un cuarto del de Yugoslavia). Los tribunales de Yugoslavia y Ruar-rda están trabajando bien, alulqlre su labor es vista como costosa y lenta. Los de Camboya e Iraq son otra cosa. El primero tiene una mayoría de jueces locales y competcncias limitadas. El propio presidente, Hun Sen, fue inicialmente mieml¡ro del Khmer Rouge, la organización cuyos miellbros cometieron las mayores atrocidades, y los prir-rcipales líderes vivos, como Ieng Sary, no serán juzgados porque hicieron pactos con el gobierno para aislar a Pol Pot, el temible genocida que
murió en sll cama. El tribunal de Iraq es un show barato. Estados Unidos impuso estuviera formado por jueces locales y regido por leyes nativas (con lo qrie la pena de muerte, prol-ribida en 1a legislación internacional, es aplicable), y así lo convirtió en urla puesta en escena para humillar a Saddarn qr,re
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Husseir.r y
justificar la invasión. El proceso
ha caido en el caos y está avergonzando tan-
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to a acusados como aiuzgadores.
mffi.
Jil5TIIIA FIRMAhIIICTü Hussein tenía que serjuzgado. Couro lo fue el serbio Slobodan y lo es Challes Taylor. Augnsto Pinochet ya va por el mismo camino. Anteriormente, la costumbrc diplomática dejaba a los jefes de Estado más a1lá
del alcance de la justicia. Parece que eso finalmente ha clrcontrado sus límites. Otros peces goldos estár-r en camino. Si er-r Chile la Corte Suprema ha levantado la inmunicl¿rd de la amnistía en algunos casos, la de Algentina declal'ó anticonstitr,rcionales todas las leyes de impr-rnidad y
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muchos clil-ninales están ahola bajo ploceso. Los Lllugllayos están pidiendo a sus jueces hacer lo misrno.
Los problernas en el mundo siguen siendo demasiados, r-lo obstante, y no se considela col-rvcniente r-ura proliferaciór-r de cortes especiales de alto costo, colr diversos glados de eficacia, modalidades distintas y sujetas a legislaciones que llegan a ser contradictorias. La idea de un tribunal crirninal interna-
,l
cional perrranerrte, con alcance global, fue propuesta por vez primera en el siglo xrx y de nuevo tras la Segunda Guelra Mundial, pero las complicaciones de la Guerra
Fría la corrgelaron. En los novcnta, .-- r
Trinidacl ]¡ Tobago lelarrzó el tcnla col-no Llna alternativa eu la 1ncha contra cl nalcotr'áfico, pel'o, bajo l¿r influcncia cle los tlibunales cle Yugoslavia y Ruanda, pronto evolncionó hacia una Coltc Pcual Internacional, con sede en La Ha¡,a, Holanda (rro sc confund¿r cor-l la Coltc Internacional clc Justicia, tambiér'r en La Haya, cluc sólo :rrbitra en las disputas cntrc cstaclos), con jnrisdicción soblc crírlcnes de gncrla, crírrcncs cor-rtra la hlLm¿rnidad ¡r genocidio. Ésta fuc cstablecida finalnrentc el 1 dcjulio dc 2OO2. El trstatuto de Ror-na, clue le da origeu, dcfinc cluc 1os cr'íurenes contra la hun-raniclacl son los siguientes actos (cuando sol'r cometidos colno paltc clc Lln at¿rcpre amplio o sisternático, cleliberado o pclmitido, contla la población civil): z-rsesir-rato, extct'lrit-tio, csclavitud, cleportaciórr o traslado folzoso clc población, plivaciór-r ilcgal cle la libcrtacl,
toltula, r,iolación, csclavitucl sexnal, elnbatazo for-
zado, cstelilización forzada, persccr-rciór-t contra g1'r-lpos o colccti-
vidades, desapiu'iciór'r forzada, üpürtheid v otros actos clLte cattsct-t
glan suf irliento. La coltc sc basa cn c1 ¡rrincipio de "julisdiccióu ttt-tiversal", bajo cl ctL:rl la pelsecución clc cstos cLír-ucnes uo qltccla lil-r-ritacl¿r por'las soberauías nacionales. Sin cr-nbalgo, stt alcaucc ticnc it-nportantes 1ír-nitcs: Só1o pucdc
juzgar los crímenes corneticlos por nircionales dc los
paíscs que han fimrado v ratificado el Estatuto dc Roma; los cotnetidos contra nacionales dc csos paíscs o erl terlitorio dc csos países;
y los
qr-rc
el Consejo de Scguridad clc la oNu tttlne para su proceso.
Durante las negociacioncs clcl cstatuto, Estados Unidos propllso aden'rás cpre todos los casos a jLlzgal' deiriet'au ser aplobados pol c1 Conscjo dc ScgLrriclacl. Esto significar'ía c¡ue cualcpricl país con capacidacl de vcto (como Estados Unidos) podr'ía arrular' los lll'ocesos. Irrgeniosar-ucntc, los cLlrolleos le clicrolr la vuclta: si el cor-rsejo desea cerlal un juicio, dcbc aprobar r-tna resolución. Es clccir', ctLalclnier país con veto pucdc cvitar c1r-tc se bloc¡-rce un¿r callsa. Con csto sc 1.11:lntllvo 1l pleerlinencia dcl consejo sobrc la coltc sin c¡uc sc ¡rclr-r.riticra sn r-nanipulación al grrsto de lrs gr':irrcles lrolcrrcirs.
TAGORTE EN AGGIOII ) )
) ililtr¡tf lt!¡
¿Significa esto c¡rc
cs-
t:ulos llol' entlal a
Lrna cl'A clolacla clc justicia 1, paz? Restrlrr difícil dccillo ¡ :rrin ruás
crccllo. El objctivo cle llevar a los clinrirrales ar-rte la justicia no cs sólo castigal'sus dclitos, sino olrlig:u' ii potclrcixlcs lic-
tinralios a pellsal' dos vcccs lo tlrrc r nrt r hacer'. l)ucs rl)ís allá rlel tcl lol que l)uc(lrlr irfligil en sns propios paíscs i, dc los acuerdos dc ir-npr-tniclacl c¡uc logren arranc¿r1', sict"upt'c
c'xistir'¿i el peliglo cle cluc 1a cor-tc lcs ponga las rllanos cncirra. Nadie nrás cluc Chal'lcs
Tavlol sc creía fucla clr'l cu.rcc
c1e
ll-
la justicia.
Tlet'r' jrrsticir
i
¡raz
al nris-
rno ticr.r.rpo seguir'á sicndo clilí-
cil. El Tr-ibunal de Siella Lcona fue el plimero que tl'xtó dc
hrccllo. Otlo nlodelo
r
scgtrit'
cs el cle Sudáfi'ica: la conrisiór'l clc lccor-rciliación
plesiclicla por'
cl
nlzobispo Desrlond Tutu oflcció per-dór-r a c¡riencs cor.tfcsalan sLr.s cLírttcncs, pel'o no a toclos: los más glar.es dcbcr'ían ser castigados. NIás de
..-r¿ E
U tanrbién c¡rer'ía clue la colte sólo pr-rclicrr iniciar
r-rn
ploceso si
cl cor-tscjo o urr Estaclo filuralrte clcl cstatr-rto rcfcr'ía cl caso a ella. dos vías son posibles, pelo aclerr:is cl fiscal ticnc
Es¿-rs
iniciativa plopia.
La lcslruesta del gobierno clc Bill Clinton fuc fin-nar el estatuto llcl'o no cll'iallo al senado pala su ratificación. Gcorge Bush explcsó su "tcnror"'cle clne la colte fuera utilizacla "políticalrentc" para afc'ctal a ciudaclanos estadonnidcnscs r' l"r.lz' una aglesivl cantpaña sobre los p:ríscs a ios cluc otorÉia tsistcucia milital llal'a quc sc urrntengan fuera clc la coltc o, si la l'atificalt, se cotnpl'olletalt pol cscrito a no acusal'a ningún estacloultidense (o extranjelo lclacionaclo con cl gobielno dc Estados Uniclos) alttc esc olgarrisnro. El corrglcso c1c Estados Unidos aplobó trnr lcgislación, c¡rc fuc batrtizacla por sns críticos como "lcv clc invasión clc La Hat,a", cn la c¡uc
autoliza cl uso de la fuclza p:rla liltct'al a pclsonal ntilital
Est¿rclos Uniclos
;:
clc
alrestado por la coltc.
I ;' :,; rj i:;'.. i i,
ZOOO solicittrclcs fuclor.r aclnliticl¿rs r' 5,4OO fnelon lechazadas. Pol n.rlrcho ticnipo palcció clllc no sc iban a ler,autal'cal'gos, llcl'o
lccicr-rtcrlelrtc se arrnnció c¡uc cnrpczarían
conrplcto )' sólo scr'álr juzgaclos los acnsados con ciet'tos uiveles de lcsponsnbiliclacl: no los n-ris bajos, pelo talnpoco los de urás alto ruivcl, cor.r.ro Ieng Sar1r, cl iclcólogo clcl Kl-rr-ncl Rouge. Lv Rin, c1tricn no fuc nris c1r-rc r-rn cspía clel particlo, va sabc cluc e-stá
i
luela dc pcliglo v sc rlucr¡c
a
gusto en la estrnctttt'a social de su
En Asi¿r, Islael 1' China encabczan l:r oposición, v hav sólo scis filnlantes. En África poco más de h niitad de los países se ha irrcot'porado, al igual que todas las naciones significativas de Oceanía, incltriclas Australia y Nuerra Zclarrcla. En total, r-nás cle lOO r-racioncs sc lran sometido a la julisdicción dc
¡lfltrilI Itt¡
1¿r
coltc.
supelficialidad de la cor-tcsía. AI
Cl-rhouk Natl-r, con su sonlisa y sns dedos en folma de "V", musitanclo "peace", ¡'sin clue ulro tcnga altclnativa algrura clue oflcccr',
vcl
Aclcnlás clc Estados Unidos, cn Anlét'ica sólo Culta, Guatellala, El Salvaclor', Nicalagua, Sulinarn v Chile (¡!) c'st¿in fucra clcl estatuto. En Eulopa, sólo la Repúrblic¿r Chc'ca, Rusia, Biclollr-rsia v Uclauia.
procesos cotttt'a ciu-
Así c1r-re, además clel boicot estadounidense ]¡ la oposición dc Chiua v Rusia, todo dcpenclc clc las circunstancias locales. A r¡cccs cs mcjor tlacr la paz 1l'inrclo y clcjal' a la justicia espelando cn la pr-rc'rta. En otlas ocrsiorrcs, laurcntableurerrte, la justicia se quL'clar'á ahí. En Cambova, pol cjcnrplo, la courunidad intclnacion¿rl lro colrsiguió obtener del gobicn-ro las garantías pal'a Lll'r proccso
alclca, clonde todo se nrancja cn la :
1os
co acusados v clue 15 l'nás estárr cu car.rtil'lo.
a
hav cllrc achtlitir cluc, al t.t.tct.tos ¡tat'a Cautltova ]¡ stl sllfl'ido pucblo, las cosas clucdaran así: los cr'ínrcllcs inrplrncs. La justicia es tttr lujo
lcjnro pala csta gentc pobrc. Lo
c¡trc
cluielen
., p^r. B