Confesiones de amor Había un día, un joven pescador que decía sus sentimientos sin ningún temor, y una bella chica que también joven era él la vió asombrado subiendo la escalera. Un día la encontró llorando en un rincón y una bella poesía le contó el pescador: Mi amor y soledad como el vacío de mi alma que cuando mis ojos te ven ella queda en calma. La chica sin dudarlo, de él se enamoró y fue rápido a confesarle su amor; con llanto enfermizo ella un día estaba el joven fue a calmarla porque no descansaba. Él sin dudarlo, un beso le dio y los dos se confesaron su verdadero amor. Nosotros estamos felices aquí y esta historia ha llegado a su fin. Me llamo Christian , me gusta jugar con la pelota y con la computadora. Voy a la escuela Manuel Blanco Encalada. Mis maestras son Sandra y Cecilia. No me falta mucho para terminar la primaria y empezar la escuela secundaria. Estoy muy ansioso, espero que me vaya bien y tener un buen futuro. Yo sé que mis papás me van a apoyar en mi nuevo camino y la próxima escuela será tan buena como en la que estoy ahora.
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