DIRECTOR, ESTUDIANTE Y MAESTRO
[Estudio de caso]
L
legado el fin de curso, el director de una escuela particular le dijo al maestro Santiago que pasara a ver con él las calificaciones, pero el maestro Santiago ya iba de prisa y no dio mucha importancia al comentario, así que entregó a cada estudiante su evaluación final. Luis Estrada, alumno de Santiago, le preguntó ¿No va a negociar esas calificaciones con el director? porque el 8 que obtuve se transformaría en una nota reprobatoria. Santiago le dijo a Luis que sí pasaría con el director, pero no a negociar, lo cual no dejó de molestar a Luis, quien le confió que había tenido un problema con el director e incluso lo había ofendido. Santiago dijo: Yo no sabía nada, pero trataré de que prevalezca la razón de lo que tu mereces en mi clase, independientemente de tu comportamiento que quizás justifica una llamada de atención y es lo que hizo la autoridad de esta institución. Santiago fue revisando cada evaluación con el director de la escuela y al llegar a Luis Estrada surgió una diferencia: Santiago quería hacer prevalecer la calificación de 8 que ameritaba Luis conforme a su desempeño en el curso y el director se oponía argumentando que tenía muy mala conducta. Santiago insistió en que era la calificación por un curso y no una conducta que no había observado en su clase, a lo cual cedió el director. Al salir Santiago miró a lo lejos a Luis y le hizo un gesto en señal de: “todo bien, estás aprobado”. Al día siguiente, Santiago llegó a la escuela para un trámite administrativo y se encontró a Luis y al director platicando muy relajados. Luis abrazó a Santiago y se retiró. Estando solos, el director de la escuela le dijo a Santiago que le había dado una gran lección, que Luis era un tanto conflictivo porque le faltaba comprensión, pero que ahora que sabía de su confianza estaba más feliz por ello que por su calificación, ha hablado maravillas de mí y ambos nos sentimos escuchados y comprendidos.