21a._el_decalogo

  • April 2020
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21ª. El Decálogo El Decalogo Para comenzar esta clase numero 10 , queridos lectores, lo haremos interpolando el texto de la Biblia donde nos habla de los Diez Mandamientos, citamos a la Biblia por ser en occidente el libro sagrado que mas se conoce, pero recordemos que en todos los libro sagrados esta la fuente pura y cristalina de la sabiduría, habiendo un único detalle: que no todas las personas aprenden a interpretar los textos sagrados, pues para ello hay que prepararse en el diario vivir, tratando de capturara el hondo significado de la vida. Saben porque el ser humano sufre, y lo mas triste del caso no es sufrir, sino sufrir sin saber para que o sea sufrir inconcientemente, ya que el dolor conciente indica aprendizaje de ese evento de la vida que quizás no se vuelva a reiterar, ya que se ha aprendido de lo malo lo bueno y de lo bueno lo malo,pero el ser humano sufre, porque ha violado la ley de la creación , y al violar la ley agregamos dolor. De esta forma querido lector ingresa en este Mundo de la Ley, colma tu mente de entendimiento, tu corazón de fe y amor, tu conciencia imprégnala de inspiración, que arda la llamarada de la comprensión en ti, que tu Ser te de ojos para ver, oídos para escuchar, que tu Divina Madre Kundalini te auxilie en este Mundo intercediendo ante los Jerarcas de la Ley, que las palmas de la victoria se abran a tu paso, que el laurel se ciña en tu corona, que los aromas del espíritu inunden y bañen tu cuerpo , que te conozcas a ti mismo .... Adelante ingresa y sigue Adelante que el velo de Isis se ha comenzado a rasgar ...

Los Diez Mandamientos

1

Yo soy Jehová, tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. No tendrás Dioses ajenos delante de mí.

No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el Cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.

No te inclinarás a ellas, ni las honrarás, porque Yo soy Jehová, tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen, y hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos. 2. No tomarás el nombre de Jehová, tu Dios en vano, porque no dará por inocente Jehová al que tomare su nombre en vano. 3. Acuérdate del día de reposo para santificarlo.

Seis días trabajarás, y harás toda tu obra, más el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios, no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas. Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día, por tanto, Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó. 4. Honrarás a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová, tu Dios te da. 5. No matarás. 6. No fornicarás. 7. No hurtarás. 8.- No hablarás contra tu prójimo, falso testimonio. 9.- No cometerás adulterio. 10.-No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo.

Lo que es la Letra viva y lo que es la letra muerta Debido a que el ser humano no ha querido someterse a las exigencias de la Ley de Dios, sino ha querido someter la Ley de Dios a las condiciones humanas, desconociendo que las leyes que originaron la Creación, en ningún momento han derogado su vigencia sino que , por el contrario cada día salta a la vista la necesidad de cumplirlas para que, a través de ellas, el ser humano pueda ser rescatado de las garras de este convulsionado mundo donde impera la crueldad, el desequilibrio mental, emocional, y psicológico y donde reina la creencia del más poderoso. Es necesario comprender que el código de ética más perfecto que ha sido escrito a través de la historia de la humanidad es el de los Diez Mandamientos de la Ley de Dios . Ningún escritor humanista, profeta, ha tenido la potestad de derogar estas leyes mucho menos podría hacerlo esa legión de demonios que llevamos dentro para hacernos infringir la Ley. Pero debemos saber lo que es la Letra Viva y la Letra Muerta. La Letra Viva es aquella que se siente y se entiende con el corazón. Las enseñanzas más valiosas se captan a través de inspiración y ésta tiene su basamento en el corazón. La Letra Viva es poder ver el lado oscuro de lo que está escrito, a través de las claves que permiten descubrir y comprender la verdadera Sabiduría. Cuando Jesús cuenta a la gente la Parábola del sembrador, los discípulos le preguntaron: "Por qué les hablas en parábolas?

Él respondiendo, les dijo: "Porque a vosotros es dado saber los misterios del Reino de los Cielos, más a ellos no les es dado"... ..."Por eso les hablo en parábolas, porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden". ..."Para que no vean con los ojos y oigan con los oídos, y con el corazón entiendan y se conviertan y yo los sane".... (S. Mateo 13:10-a).

El Esoterismo de los Diez Mandamientos La humanidad conoce la historia de los Diez Mandamientos que le diera el Señor Jehová a Moisés en dos tablas de piedra, pero no se conocen en sí la esencia de los diez mandamientos, menos aún en qué consiste la violación de los mismos. Trataremos de ver a grandes rasgos los principales factores de los Mandamientos a fin de saber a qué atenernos cuando nuestra conciencia rechace un acto en el curso de nuestra vida, en el continuo trajinar cotidiano. Primer Mandamiento: Amar a Dios por Sobre Todas las Cosas. El primer aspecto que encontramos para que el hombre infrinja la ley es el hecho de no saber quién es Dios ni dónde está, esto como es lógico, a quienes desconocen los principios veraces del conocimiento de Dios, les queda más difícil cumplir dicho mandamiento. Dios está en cada criatura viviente , en cada ser humano, en cada animalito, por pequeñito que sea, está en cada planta y en general, en todo lo que tenga vida, ahí está Dios. Entonces el hombre para amar a Dios sobre todas las cosas necesita amar al prójimo, a todos los seres de la tierra sin excepción, sean enemigos, amigos o desconocidos. Dios es amor, el amor está latente en todo lo creado, visible como invisible, orgánico como inorgánico. Sintetizando: Amar a Dios sobre todas las cosas significa: sentir y descubrir en nosotros ese principio creador, (Buddhata o Esencia Divina), apreciarle e intensificarle, inclinarnos a Él en adoración y respeto, hacerle vibrar rítmicamente, verle en todo y en todos. Se debe comenzar por amar en nosotros mismos ese principio vital y después le veremos en los demás. Segundo Mandamiento: No tomarás el nombre de Jehová, tu Dios, en vano. El hombre ha llegado a tal grado de irresponsabilidad e irrespeto hacia las cosas de Dios, que jura en las tertulias, cantinas y bares en demostración de guapeza con sus compañeros de borrachera. No juréis ni por la verdad ni por la mentira. Jurar es tomar a Dios como testigo. No hay un temor al delito de mentir, poniendo a Dios por testigo. No hay una responsabilidad consciente hacia el Verbo...

"Mas yo os digo: No juréis en ninguna manera, ni por el cielo, porque es el trono de Dios, ni por la tierra porque es el estrado de sus pies, ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey, ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer un cabello blanco o negro. Más sea vuestro hablar: Si, si, no, no, porque lo que es más de esto, de mal procede". (S. Mateo 5. 34/37). Tercer Mandamiento: Santificar las Fiestas. El hombre ha confundido la santificación con la pereza, nunca santifica las fiestas, pero cree que con no trabajar ya está cumpliendo el mandamiento, el lugar donde el hombre vulgar santifica la fiesta es en la cantina, en el bar, en el cabaret, en el estadio, en el club, etc., pero nunca en su corazón. El hombre debe santificar la fiesta todos los días de su vida, porque la santificación es una obligación de toda persona responsable consigo misma ante Dios, pero la fiesta no se santifica durmiendo y riñendo en casa con la esposa o con el esposo, se santifica en oración , en meditación y en purificación continua, permanentemente al lado de nuestro Dios Interno, siempre dispuestos a servir a Dios, a amarlo y obedecerlo trabajando en la Gran Obra del Padre, bien sea en el taller, en la oficina, en el trabajo, en el campo, en todas partes y a toda hora debemos santificar la fiesta, porque la fiesta no debe ser del cuerpo sino del Alma. Santificar las fiestas significa, conservar la pureza y perfección de nuestro triunfo en el Espíritu y no cometer reiteración en los vicios y pecados. La santidad se conquista acabando con los defectos, errores, y malas costumbres. El estado de total conciencia nos lleva a la santidad física, espiritual y mística. El hombre debe vivir siempre en paz y en armonía con su propia conciencia. Esto demuestra que las fiestas a que las Sagradas Escrituras se refieren que debemos guardar y celebrar son las fiestas del Alma, son los momentos de advenimiento del Ser hacia nosotros donde con una mente limpia y con un corazón lleno de amor, nos prosternamos humildemente para estacionarnos orando y hablando con nuestro propio Dios. Cuarto Mandamiento: Honrar a padre y madre. El hombre nunca honra al papá y a la mamá, menos puede honrar al Padre y a la Madre que no les conoce. Honrar es respetar, servir, apreciar. Pero es necesario distinguir a cuál padre y cuál madre se refiere este mandamiento. Están los padres físicos y los que están en secreto, en nuestro interior. Padre sólo hay uno, el Padre Interno, el Padre que está en los cielos. Madre sólo hay una, la Madre Bendita Devi Kundalini, la Madre de Fuego, la Madre Celestial. Debemos honrar a quienes en este mundo ocupan esos lugares en forma material, los que nos prestaron sus cuerpos para nosotros tomar una nueva existencia, al padre y a la madre físico de este mundo, ellos también merecen el respeto y la honra de sus hijos. Quinto Mandamiento: No matar.

Matar es cortar la vida o soplo divino. Lo contrario de muerte es vida. Matar es destruir la vida que palpita en toda la naturaleza. Así como ningún mortal es capaz de infundir ese soplo divino, tampoco debe quitarlo a nada ni a nadie, ni a una planta, ni a una flor, mucho menos a los seres de ninguna especie. No matar es colaborar con la Gran Vida Universal. No sólo se mata con el veneno, la bala o el puñal, también se mata con el pensamiento, las palabras y las obras, una palabra torpe, mordaz o de doble filo, así como el desprecio, también hieren y matan los sentimientos y las buenas intenciones de los seres. Dios dijo simplemente, no matarás, pero no especificó a quién ni en qué tiempo ni dónde, solamente ordenó a la humanidad no matar. Ya dijimos que en todo cuerpo viviente está Dios como manifestación de vida, luego quitarle la vida a un ser viviente sea animal o humano, es despojar a Dios de su templo, porque el hombre es el templo de Dios y donde hay vida, ahí está Dios manifestado en aliento. Sexto Mandamiento: No fornicar. Fornicación es perdida de energía en todas sus formas. Fornicación es perdida de energía, de cualquiera de las energías del cuerpo mental , emocional, psíquica, física , sexual siendo esta ultima la de mas relevancia, no interesa cómo ni cuándo o con quién, es terminante la definición. Se fornica con la mente, el Verbo y los órganos creadores. Los diccionarios, los educadores y la mayoría de los religiosos, confunden la fornicación con el adulterio. Esto es un grave error, que le ha costado muy caro al ser humano y son responsables todos aquellos que enseñan que la fornicación es la unión sexual fuera del matrimonio o la unión sexual antes del matrimonio.Fornicacion es perdida de energía y Adulterio es otra cosa. Adulterio es unirse sexualmente con alguien que no es su cónyuge o pareja. ..."Y manifiestas son las obras de la carne: que son, adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia"... (Gálatas 5:19). (Consultar además Hebreos 13.4; Mateo 5.27/32; Levítico 15). El cumplimiento del sexto mandamiento del decálogo del Señor Jehová, es la mejor fórmula para el control de la concepción, la fórmula infalible y precisa, entregada al hombre por el mismo Dios. Existe la ciencia de la transmutación científica que es el mismo Arcano AZF, esta ciencia fue la que practicaron los alquimistas medievales. En Daniel 2-19 dice: "Entonces el Arcano fue revelado en visión de noche; por lo cual bendijo Daniel a Dios en el cielo.". En Ezequiel 5'7 dice: "Por tanto así ha dicho Jehová por haberos multiplicado mas que la gente que esta alrededor de vosotros , no habéis andado en mis mandamientos ni habéis guardado mis leyes." En este versículo nos habla como la misma explosión demográfica se ha sucedido por ese desequilibrio pasionario animal. Esto nos indica también que cuando se practica la Castidad Científica, Arcano AZF, no es necesario que las mujeres usen anticonceptivos de ninguna naturaleza, porque cuando debe nacer un hijo viene por ley trayendo beneficios a los hogares y a la

humanidad ; esto evitaría también que tantos médicos se den a la tarea de practicar abortos , no solo echándose un Karma , sino acrecentando el Karma Mundial. Estudiaremos mas adelante , en las clases de Transformación de le Energía ,mas técnicas de transmutación de la energía, o sea cambio de la energía, también estudiaremos, los Misterios del Sexo, El Matrimonio y el Amor, El Arcano AZF, la Concepción, el Control de la Natalidad, etc,etc.

Séptimo Mandamiento: No hurtar. Hurtar es robar, es apoderarse de lo ajeno sin consentimiento de su dueño con o sin violencia. La utilidad está permitida por la Ley Divina pero el ganar excesivamente en los negocios ya es hurto, es un atentado contra el patrimonio de la sociedad, es acumulación de riquezas. No sólo se roba económicamente, también se roba el honor de las personas, la dignidad y las virtudes de la mujer, los bienes raíces, la voluntad de las personas, etc.. Octavo Mandamiento: No levantar falsos testimonios ni mentir. El Verbo, hablado o escrito debe manejarse sabiamente, no debe utilizarse en calumniar ni difamar a nadie. Afirmar lo que ignoramos o desconocemos es falsedad. La mentira es opuesta ala verdad. Negar la realidad de las cosas es mentir. El engaño, la traición, la hipocresía y el fraude, es la misma mentira disfrazada con apariencia de verdad y justificaciones de la falta de sinceridad y valor. La mentira es el medio más fácil para evadir la responsabilidad. La mentira es la misma disculpa que llevamos a flor de labios. El que niega la verdad y desprecia la justicia, ama la mentira y se vuelve un cobarde. Las calumnias van directamente contra este mandamiento, igual que sus compañeros, la maldad, el odio, el rencor, la soberbia, y la venganza, delitos que ofenden al Padre, que es la Verdad. Noveno Mandamiento: No desear la mujer de tu prójimo. Aquí caemos todos. Sólo escapa aquel que haya desintegrado sus defectos totalmente, aniquilando el Yo psicológico. Para esto necesitamos comprender muy a fondo el puesto que ocupa la mujer dentro de la especie, no confundirla con un instrumento de placer como lo hace el hombre común de la calle. El cuerpo humano es Templo de Dios y no es para la fornicación, según nos dice el Apóstol Pablo. La mujer es el templo sagrado de la concepción de la vida y no es para desearla, sino para amarla de verdad limpiamente en pensamiento, palabra y obra cuando nos corresponde como esposa. Todo aquel que traiciona a su cónyuge sea hombre o mujer, que adultera o desea a quien no le corresponde, está en camino hacia el abismo, porque escrito está que ningún adúltero verá la cara de Dios ni menos aún entrará en el Reino de los Cielos. Es necesario comprender las consecuencias del adulterio. El sexo femenino es receptivo y cuando un hombre deposita allí su semilla creadora,

queda ligado su destino a esa mujer y por lógica consecuencia, ligado también a su destino kármico y al de todos los hombres que también hayan depositado su semilla a ese mismo sexo femenino. Décimo Mandamiento: No codiciar los bienes ajenos. Codicia es apetito desordenado de adquirir riquezas o bienes, es ansia de acumulación, deseo sin freno, ambición desmedida de querer poseer lo que otros poseen. La sabiduría cósmica enseña que cada cual tiene lo que se merece y lo que por Ley debe tener. El hombre viene al mundo como antes lo vimos ejemplarizado, a recibir lo que se ha ganado sea bueno o malo, pero es el mismo quien se gana los bienes materiales o los karmas. Por este motivo es un error desear o codiciar lo que no nos hemos ganado, lo que no es nuestro y que no nos corresponde de acuerdo con la Ley. Debemos cumplir la Ley, cumplir los Mandamientos y aceptar los designios trazados por nosotros mismos en existencias anteriores de conformidad con nuestros propios actos.

Origen de los mandamientos Por supuesto, y como todos sabemos, los mandamientos son de origen Divino. Es un código de ética y moral, que todavía no ha podido ser igualado, aunque hayan pasado miles de años y se aplique en lugares muy distantes de su lugar de origen. Esto nos muestra que Dios es la verdad y la verdad no tiene tiempo ni lugar. La historia del origen de las leyes de Dios está explicada en: Éxodo: Capítulos 19 y 20.Cap. 31. versículo 18.Cap. 32. versículo 15 al 19.Cap. 34. versículo 27 al 34.-

Los Diez Mandamientos a lo Inmanente y a lo Trascendente (desde nuestros padres físicos hasta nuestros Principios Creadores.)

Si hacemos un análisis del Decálogo, veremos que tiene dos aspectos bien definidos: El primer aspecto nos transmite las leyes que tenemos que respetar para con la Divinidad.

El segundo aspecto nos transmite las leyes que tenemos que respetar para con los hombres, para podernos desenvolver y convivir en armonía con nuestros semejantes. De esta manera veremos que los cuatro primeros mandamientos, nos indican las leyes que debemos respetar para relacionarnos en armonía con la Divinidad . Y los seis restantes para relacionarnos entre los humanos. El Árbol Sephirótico o Árbol de la Vida representa al Ser. En él podemos ver los sucesivos desdoblamientos que se llevan a cabo desde el Espíritu (nuestro Ser) hasta la materia (nuestro cuerpo físico). "Cada uno de estos Sephirotes son partes autónomas de Nuestro Ser, y desde la dimensión que les corresponde, influyen en nosotros y en nuestra conciencia. Debemos conocer sus características y saber manejarlas para la mejor conducción de nuestra obra" . V. M. Lakhsmi en Luz en las Tinieblas. Si analizamos este mensaje, inmediatamente nos damos cuenta de que para llevarlo a cabo, ante todo, como una condición básica y lógica, debemos respetar sus principios, particularidades y su mandato. Para ello se nos entrega la relación de cada uno de los diez mandamientos con los respectivos Sephirotes del Árbol Kabalístico. 1° Mandamiento

PADRE

KETHER

2° Mandamiento

HIJO

CHOKMAH

3° Mandamiento

ESPÍRITU SANTO

BINAH

4° Mandamiento

ÍNTIMO

CHESED

5° Mandamiento

CRISTO INTERNO GEBURAH

6° Mandamiento

ALMA HUMANA

7° Mandamiento

CUERPO MENTAL NETZAH

8° Mandamiento

CUERPO ASTRAL

HOD

9° Mandamiento

CUERPO VITAL

JESOD

10° Mandamiento

CUERPO FÍSICO

MALCHUT

TIPHERET