INTRODUCCIÓN
El hecho de hablar en público representa un gran temor para la mayoría de las personas, algunos autores indican que es un miedo casi patológico comparable con el temor a la muerte; para poder superar el miedo y realizar bien un discurso es necesario apoyarse de diferentes técnicas que ayudaran durante el discurso o antes de el. El propósito de la oratoria pública puede ir desde, simplemente, transmitir información, a motivar a la gente para que actúe, a simplemente relatar una historia. Los buenos oradores deberían ser capaces de cambiar las emociones de sus oyentes, no sólo informarlos, para ellos los oradores deben estar preparados para cada situación que se le presente. Para poder conocer las técnicas en la oratoria, se desarrolla la presente investigación.
OBJETIVOS Objetivo General:
Conocer las técnicas de la oratoria a través de la indagación.
Objetivos Específicos:
Identificar el objeto de cada una de las técnicas para definir la utilidad.
Conocer la utilidad de dichas técnicas al momento de realizar un discurso. Llevar a la práctica lo aprendido a través de una exposición.
TÉCNICAS EN LA ORATORIA Técnicas de respiración La inhalación: Consiste en la toma de aire que se debe realizar a través de las fosas nasales, por ningún motivo debemos tomar el aire por la boca, porque produce irritación a la altura de la garganta. La exhalación: Se refiere a la expulsión del aire, el cual siempre se realiza por la boca a través de nuestras palabras por ningún motivo se expulsa el aire por las fosas nasales mientras hablamos, porque produce una voz nasal que es algo negativo. La cantidad de aire expulsado, depende de la velocidad y tonos de nuestras palabras.
La materia prima de la voz es el aire, si el mismo se agota, se corta la fonación, de allí la importancia de trabajar la coordinación fono-respiratoria, que permite al que habla la toma de conciencia de que debe recuperar aire antes de proseguir. Los matices, brillo y entonación permiten que el discurso no sea monótono, ni monocorde, palabras que aluden a un mismo tono o acorde en la jerga musical, pero se aplican perfectamente para las características del habla. La aceleración del pulso, taquicardia, sudoración, son síntomas neurovegetativos que dispara el sistema nervioso central cuando se siente miedo, angustia y desolación; quien aprende a dominarse a través de la respiración, una de las herramientas a utilizar durante un discurso, ya tiene ganada la batalla del temor a enfrentarse al público o auditorio. La relajación y respiración, como así también la postura de quien habla, son fundamentales para evitar una sobrecarga de los músculos cercanos a la zona de garganta y cuello. Descansar descargando la tensión muscular hacia la zona de los pies da una sensación de apoyo que permite mantener el resto de los grupos musculares sin contractura. La flexibilidad en la emisión de la voz está dada por la práctica de ejercicios con los labios, lengua y articulación de silabas que van de simple a mayor complejidad, para agilizar la destreza en la emisión oral del discurso Las pausas respiratorias son necesarias para retomar aire cuando aún no se agotó el de reserva, motivo fundamental de quienes expresan
“me quedo sin aire” es, que no hacen pequeñas pausas imperceptibles para recuperar con una bocanada de aire, la cantidad suficiente y El ser humano emite sonidos gracias a tres aparatos que son:
Aparato respiratorio: comprende nariz, boca, laringe, tráquea, bronquios y pulmones. Su función es almacenar el aire y hacer que éste circule de afuera hacia adentro y viceversa. Aparato fonador: comprende la laringe y cuerdas vocales. Su función es producir el sonido. Aparato resonador: está formado por laringe, dientes, paladar, lengua, mejillas y labios. Su función es amplificar y dar sonoridad.
Para que sea posible el funcionamiento de estos tres aparatos en la producción de la voz es necesario conocer las técnicas vocales que toda persona debe ejercitar para mejorar su expresión verbal, usando la técnica de la respiración y la articulación de la voz. Para realizar la técnica de la respiración, es necesario colocarse de pie con las piernas algo separadas y los pies fijos en el suelo. Los hombros caídos y el cuerpo relajado; las manos en el vientre de forma que las puntas de los dedos de ambas manos se toquen, entonces se realiza la técnica de respiración:
Inspiración: entrada de aire por la nariz en forma silenciosa y profunda. Bloqueo: retención del aire en los pulmones durante unos cinco segundos. Espiración: salida del aire por la boca en forma lenta y controlada.
La voz es el sonido que se produce al pasar el aire por la laringe, produciendo determinadas vibraciones en las cuerdas vocales. El aire debe pasar por la laringe al ser expelido de los pulmones y no al ser inhalado. No es útil el sonido que podría producirse al pasar el aire cuando ingresa, si fuera aspirado por la boca. La respiración en oratoria debe ser: Inhalar por la nariz sin excepciones Exhalar por la boca, mientras se habla El ingreso de aire por vía bucal es malo para el orador pues la boca no posee ninguno de los elementos naturales que sí se encuentran en las fosas nasales, que permiten purificar, filtrar, humedecer y calentar el aire que ingresa a los pulmones. La nariz es un verdadero filtro de impurezas que se vale de la mucosa y el bello interno de las fosas para detener las partículas que pueden ser dañinas para el organismo. Además, esos mismos elementos humedecen y calientan el aire lo necesario para no agredir a la laringe. En cambio, tomar por la boca el aire en su estado ambiental, por lo general contaminado, seco y a baja temperatura, produce un daño enorme a las cuerdas vocales que se resienten y a corto o largo plazo sufren enfermedades complicadas que requieren cuidados muy intensos y delicados. Para evitar estos inconvenientes, el orador debe acostumbrarse a respirar tomando el aire por la nariz, evitando siempre la entrada del aire
por la boca. En cada pausa, debe respirar cerrando la boca y tomando rápido por la nariz. Si Ud. está malacostumbrado y suele respirar por la boca, deberá realizar un esfuerzo adicional para superar el vicio. En todo caso, la recomendación es tomar conciencia de la propia respiración. Analizar cómo respiramos es el punto de partida para poder cambiar un mal hábito. La salida del aire, siempre debe realizarse mientras se habla. Nunca suspirar ni soplar, pues representa aire Perdido. El aire útil es el que sale produciendo el sonido de la voz. Y la administración adecuada de ese aire útil requiere el cuidado de no desperdiciarlo. Recuerde entonces que nunca debe tomar aire por la boca, ni soltarlo en las pausas. Solamente tome por la nariz y suelte mientras habla, naturalmente.En la oratoria, lo más importante es llegar al público, enseñar, persuadir, convencer, deleitar, con un sinfín de palabras correctas y precisas, como también los adecuados movimientos corporales, pero si no se lo hace con una respiración correcta, no se obtendrá el enfoque y énfasis de las palabras para deleitar a las personas. Existen según expertos dos tipo de respiraciones, una es la respiración clavicular y la otra es la respiración diafragmática.
La respiración clavicular es aquella comúnmente usada, cuando inhalamos la mayor cantidad de aire posible, inflamos la caja torácica y elevamos nuestros hombros, es ideal cuando se hace ejercicios físicos, atletismo, natación, etc.; pero el más importante y usado por los oradores es la respiración diafragmática, que consiste en meter la mayor cantidad de aire hasta los pulmones sin levantar los hombros, el aire ingresa y sale emitiendo la voz, sin lograr cansancio alguno. Esta última, si la aprendes, aplicas y prácticas, te ayudará a hablar exitosamente, sin trabas, sin jadeos, y sobretodo sin cansancio. Lo que debes hacer es lo siguiente: inhala aire por la nariz lento y mentalmente contando hasta 4, luego expulsa por la boca, si haces 5 minutos, tres veces por día, te aseguro que en poco tiempo podrás dominar la respiración al hablar.
Ejercicio nº. 1: - Inspira por la nariz, lenta u silenciosamente. - Retén y bloquea el aire. - Expira por la boca, lentamente, diciendo shhh (como si pidieras silencio ) - Controla la salida del aire y toma el tiempo con un reloj. - Repite el ejercicio varias veces de espacio. Ejercicio nº. 2: - Inspira por la nariz lenta y silenciosamente. - Retén y bloquea el aire. - Expira por la boca, lentamente, como si inflaras una bomba. - Controla la salida del aire. - Repite el ejercicio varias veces, despacio. Ejercicio nº. 3: - Inspira. - Retén y bloquea el aire. - Expira diciendo “ uno...”. - Controla el tiempo y la salida del aire. - Repite varias veces el ejercicio sin cansarte y lentamente. Proceso de fonación: Al chocar el aire con las cuerdas vocales, éstas vibran con la ayuda de la lengua, los dientes, el paladar y los labios; se produce la voz. La respiración realizada en forma correcta, es muy importante para que nuestro aparato vocal este siempre en óptimas condiciones. La laringe es una cavidad que está en la parte superior del conducto respiratorio. La laringe constituye el órgano de la voz porque contiene las cuerdas vocales, por lo tanto debemos cuidar con especial atención. Ejercicio nº. 1: - De pie, con tu cuerpo relajado, coloca suavemente una de tus manos sobre la garganta. - Aspira el aire por la nariz (silenciosa y lentamente). - Coloca la boca en posición de “o” y al expirar pronuncia un sonido al de la letra “o” y largamente hasta que agote el aire. - Siente la vibración que produce el aire al chocar con las cuerdas vocales. - Realiza este ejercicio varias veces todos los días utilizando todas las vocales. Es muy importante recordar que no se debe esforzar ni realizar los ejercicios hasta el cansancio, por el contrario de debe ir poco a poco, hasta lograr aumentar su capacidad de controlar la salida del aire. Técnicas de concentración El orador es la persona que sabe dominar el factor Concentración. No ve, sino observa, no oye sino escucha. Es decir, puede enfocar adecuadamente su atención y rápidamente establecer deducciones apelando a criterios lógicos, analíticos y comparativos.
Ejercicios de concentración: 1.- Para concentrarse, primero relájese, luego respire acompasadamente y, cerrando los ojos, mentalice en el punto DANTIAN (aproximadamente 1 c.m. debajo del ombligo) alejando de sí todo vestigio de preocupación, tristeza, negativismo, odio o pasión. Si gusta puede acompañar este ejercicio de concentración pronunciando en voz grave la partícula iniciática “OMMMM…” a fin de movilizar toda su energía interior en función del éxito. 2.- Otro ejercicio para dominar el sentido de la proporción es introducir las manos en una bolsa de frijoles y coger un buen número; enseguida intente decir cuántos frijoles exactamente hay en cada una de las manos. 3.- Para ejercitar la concentración visual, pida a alguien que le muestre durante tres o cinco segundos una figura cualquiera que UD. no haya visto. Al observarla mírela en la dirección de las agujas del reloj sin desesperarse tomando nota de las particularidades de la imagen en términos de colores, relieves, letras, etc. Luego de retirada la figura de su vista, diga en voz alta todo lo que ha visto. Cada vez que uno se tiene que enfrentar a algo desconocido, siempre va a sentir nerviosismo y ansiedad y en algunos casos miedo, y hablar en público es una de esas actividades en donde todas las personas por más experimentadas que sean también van a experimentar esas sensaciones. No se preocupe por esas sensaciones, realmente son normales, más bien debería preocuparse el día que no las sienta, el tener miedo, ansiedad o nerviosismo no es más que una reacción fisiológica del organismo ante un evento en el que se podrí estar en peligro, y aunque no es que vaya a estar en riesgo de muerte al hablarle a un auditorio, si está experimentando miedo al fracaso social y al ridículo y es por esto que el organismo reacciona así. Todas estas sensaciones son inevitables pero no incontrolables, es decir que existen técnicas y métodos para dominar los nervios, la ansiedad y el miedo para ponerlos a su favor sacando el mayor provecho de esta situación y así lograr salir exitoso. Muchas veces le habrán dicho tranquilo, relájese, pero no le dicen cómo hacerlo, pues bien la intención de este artículo es darle unos tips para que aprenda a relajarse y de esta manera usted tenga el control de la situación al momento de hablar en público. Para relajarse ubíquese en un lugar tranquilo en el que se sienta a gusto y en el que pueda estar a solas, este ejercicio le tomará unos 15 minutos aproximadamente, siga estos pasos y comience a triunfar:
Ambiente el lugar con música suave instrumental (recomiendo sonidos de la naturaleza) Acuéstese boca arriba o siéntese cómodamente Descruce los brazos y las piernas Cierre los ojos Comience a respirar lentamente, inhalando por la nariz y exhalando por la boca Haga consciencia de su cuerpo haciendo los siguientes ejercicios:
Concéntrese en sus pies, siéntalos, muévalos, ahora haga lo mismo con sus pantorrillas, tensiónelas y relájelas al ritmo de la respiración, hágalo por 3 veces, continúe con sus muslos y haga lo mismo, ahora vaya a la cadera y los glúteos, concéntrese en la parte del cuerpo que está recorriendo, no piense en nada mas, nada lo preocupa ni lo altera, solo haga consciencia de su cuerpo, ahora vaya a su abdomen tensiónelo y relájelo por 3 veces, visualice sus órganos, riñones, páncreas, intestinos, hígado, continúe respirando, ahora pase a la caja torácica, expándala con su respiración, sienta su corazón, haga consciencia de él, visualícelo, recuerde que nada lo perturba, proceda con los pulmones y haga lo mismo, ahora perciba sus manos, siéntalas, mueva los dedos, apriételas y suéltelas, al igual que con las piernas proceda con sus antebrazos y brazos, ahora ha llegado al cuello, relájelo y continúe respirando, finalmente está en la cabeza, todos sus pensamientos son tranquilos, nada lo perturba, ahora visualícese frente al público y repita mentalmente, yo puedo, yo soy el mejor, yo estoy tranquilo frente a ustedes, me gusta hablar en público, soy el mejor hablando en público, nada me asusta, el miedo nunca ha existido en mi mente, yo soy un orador experto. Continúe visualizándose como un orador exitoso, que es aclamado por el público mantenga el ritmo de la respiración profunda y sienta todo su cuerpo, hágalo por unos 30 segundos y luego abra sus ojos lentamente, sienta como está ahora tranquilo y relajado. Memorice esta relajación y si es posible grábela con su voz en un tono pausado y tranquilo para que la ponga como guía y así pueda hacer la relajación sin ningún inconveniente. Haga este ejercicio de relajación desde el mismo momento en que va a preparar su discurso, hágalo cada vez que se vaya a dedicar a esta actividad, de esta manera estará ganando confianza y seguridad en usted mismo, esto le ayudará a que cuando llegue el momento de estar frente al público usted esté lo suficientemente tranquilo para hablarles sin mayores complicaciones. Finalmente haga el ejercicio momentos antes de hacer su presentación, así estará tranquilo y relajado y adicionalmente recordará todo lo que va a decirle a su público pues usted es consciente que lo preparó y que es el mejor. Realice la relajación cada vez que tenga que hablar en público y le aseguro que dominará el temor y la ansiedad al hablar en público de forma permanente. Técnicas de relajación No se puede hablar sin un estado previo de paz interior, tranquilidad y auto dominio personal. Para ello, el orador debe: a.- Efectuar un proceso de Tensión-Distensión Muscular Masiva para desentumecer al cuerpo, someterlo y acondicionarlo al trabajo mental. b.- Soltar los músculos y pararse si está sentado para cambiar de posición y vencer la modorra. c.- Descansar y sentarse si está parado, para hallar un momento de quietud.
d.- Cerrar los ojos y poner la mente en blanco, para favorecer una mejor fijación en el tema. e.- Efectuar una terapia rápida de Auto-Sugestión para programarse a sí mismo en función del éxito. La terapia rápida de Auto-Sugestión empieza con respiración simple acompasada, concentración y fijación del pensamiento en el punto Dantián (1 c.m. debajo del ombligo) y envío de instrucciones mentales decisivas para la ocasión, o en su defecto, de las 7 “E” s: Soy Eficiente. Soy Exitoso(a). Soy Eficaz. Soy Excelente. Soy Extraordinario(a). Tengo Ética. Soy Empresario(a) f.- Favorecer la relajación buscando un medio ambiente sano y una alimentación saludable (debe hacerse al aire libre o en una habitación ventilada, sin ruidos molestos que impidan el trabajo de concentración y debe ingerirse sólo agua y frutas antes de cada ejercicio. Las comidas se ingerirán después). 1. Desde días antes de la presentación: la relajación muscular es una técnica que se va perfeccionando con el tiempo y la práctica, pero que, de forma resumida, consiste en ir tensando y destensando de forma consciente los músculos siguiendo un orden determinado. Lo ideal es entrenar esta técnica durante 15 días seguidos de forma sistemática, para conseguir la automatización del proceso. 2. Cuando te imaginas realizando la exposición, ¿cómo te ves? ¿Nervioso, tropezando, no sabiendo resolver la situación…? O por el contrario, ¿eres capaz de verte realizando una presentación brillante, en la que tu público queda encantado y te da la enhorabuena? La técnica de la visualización positiva, que tanto se usa en el mundo deportivo, consiste principalmente en visualizarse realizando con gran éxito esa presentación, viéndote como realmente quieres que ocurra, y hay que hacerlo de la forma más detallada posible. Imagina la sala donde vas a estar, que ropa llevas puesta, dónde se sienta el público… para después visualizarte realizando tu presentación de forma brillante y consiguiendo tú objetivo. Al principio puede que te cueste, pero no dejes de hacerlo unos días antes del gran día, y sobre todo la noche de antes y un rato antes de realizar la exposición. Proyectar en positivo puede ser de gran utilidad para controlar la ansiedad y nos facilitará el camino hacia el éxito. 3. Segundos antes de la exposición algo tan sencillo como beber un trago de agua antes de comenzar a hablar nos puede ayudar a conseguir un mejor rendimiento cognitivo y a reducir el nivel de ansiedad. Desaparecerá esa sensación de boca seca, algo asociado a la situación ansiógena. 4. Y recordad, lo que nos repetimos de forma constante, esas frases interiores que nos formulamos, son las responsables de nuestros estados de ánimo, así que utilicémoslas para que trabajen a nuestro favor y no en nuestra contra. No dejes de repetirte: “me va a salir bien”, “yo puedo”, “lo he preparado a conciencia”…
CONCLUSIÓN Cuando hablamos de la oratoria estamos hablando del arte de la palabra, de cómo una persona es capaz de transmitir un mensaje hablando, comunicando a un público, a un grupo de personas o un individuo. La clave está en la capacidad del emisor para convencer a un receptor. Para realizar un discurso debe de tener una rigurosa preparación y utilizar técnicas como por ejemplo las técnicas de respiración donde la materia prima de la voz es el aire, si el mismo se agota, se corta la fonación, de allí la importancia de trabajar la coordinación fono-respiratoria, que permite al que habla la toma de conciencia de que debe recuperar aire antes de proseguir. La importancia del discurso radica en la manera en que se transmite a un público. La mejor manera de hacerlo es siguiendo una serie de pautas que nos va a ayudar a que se discurso llegue mucho mejor, sea entendible irreconocible y, lo más importante, lo que le transmitir aquello que quiere que el auditorio reciba.