Sustentabilidad
Carlos García Xenia Rueda
UNAM Diciembre, 2008
Origen de sustentabilidad Se inicia en los años setenta cuando la defensa del medio ambiente se convirtió en uno de los temas más importantes de las campañas y agendas políticas en distintos países.
En junio de 1972, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano celebrada en Estocolmo, Suecia, cuando creció la convicción de que se estaba atravesando por una crisis ambiental a nivel mundial.
A partir de esta conferencia se reconoció que el medio ambiente es un elemento fundamental para el desarrollo humano. Con esta perspectiva se iniciaron programas y proyectos que trabajarían para construir nuevas vías y alternativas con el objetivo de enfrentar los problemas ambientales y, al mismo tiempo, mejorar el aprovechamiento de los recursos naturales para las generaciones presentes y futuras.
Años más tarde, en 1987, la Comisión de Medio Ambiente de la ONU emitió un documento titulado Nuestro futuro común, también conocido con el nombre de Informe Brundtland, por el apellido de la doctora que encabezó la investigación. En este estudio se advertía que la humanidad debía cambiar sus modalidades de vida y de interacción comercial, si no deseaba el advenimiento de una era con inaceptables niveles de sufrimiento humano y degradación ecológica.
En este texto, el desarrollo sustentable se definió como "aquel que satisface las necesidades actuales sin poner en peligro la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades".
¿Definir sustentabilidad?
Cuando se habla de sustentabilidad debe responderse: ¿qué se va a sostener? ¿durante cuánto tiempo? ¿en qué escala? ¿para quién? ¿cómo se pondrá en práctica? La especificidad y concreción de la sustentabilidad deben determinarse localmente mediante procesos que busquen una adecuada articulación entre las diferentes escalas de análisis.
En la actualidad: La Carta de la Tierra Declaración de principios fundamentales para la construcción de una sociedad global en el Siglo XXI justa, sostenible y pacífica. La Carta de la Tierra nos reta a examinar nuestros valores y a escoger un mejor camino. Nos hace un llamado a buscar un terreno común dentro de nuestra diversidad y a elegir una nueva visión ética compartida.
Creación de la Carta de la Tierra Representantes de organizaciones, tanto gubernamentales como no gubernamentales, trabajaron para asegurar la adopción de una Carta de la Tierra durante la Cumbre de la Tierra, celebrada en Río de Janeiro, Brasil, en 1992. A pesar de que la Carta serviría como marco ético para la Agenda 21, el momento no fue propicio.
En 1997 se formó una Comisión de la Carta de la Tierra con el fin de supervisar el proyecto y la redacción de este documento. En ese mismo año, durante la conclusión del Foro de Río+5, celebrado también en Río de Janeiro, la Comisión de la Carta de la Tierra emitió el Borrador de Referencia de la Carta de la Tierra.
La iniciativa de la Carta de la Tierra organizó el proceso participativo de consulta más abierto que se haya efectuado jamás, en relación con la redacción de un documento internacional. La Comisión de la Carta de la Tierra emitió una versión final del documento en marzo de 2000.
Contó con la participación de miles de individuos y cientos de organizaciones de todas las regiones del mundo, de diferentes culturas y diferentes sectores sociales. Ha sido moldeada tanto por expertos como representantes de las comunidades de base. Es un tratado que establece una importante expresión de esperanza y las aspiraciones de la sociedad global emergente.
Lo acordado por los comisionados de la Carta de la Tierra:
"Los propósitos de la tarea llevada a cabo por el Comité Redactor, son cristalizar, basados en las muchas contribuciones recibidas, un consenso sobre los principios morales y éticos fundamentales para la construcción de una sociedad justa, sostenible y pacífica. Esta tarea fue ampliamente inclusiva y culturalmente diversa. Involucró a personas de muchas naciones y cada uno de los sectores de la sociedad, quienes, con diferentes creencias religiosas y tradiciones espirituales, iniciaron una jornada emocionante hacia la definición y articulación del grupo de valores y principios válidos y aceptables universalmente."
Objetivos básicos a cumplir: Ecológicos: preservar un estado natural (físico) de los ecosistemas. Económicos: promoverse una economía que debe garantizar la continuidad en el manejo sostenible de los recursos. Sociales: los beneficios y costos deben distribuirse equitativamente entre los distintos grupos.
En este sentido, la sustentabilidad es: "mejorar la calidad de la vida humana sin rebasar la capacidad de carga de los ecosistemas que lo sustentan“ y para alcanzarla, la sociedad debe: respetar y cuidar la comunidad de los seres vivos; mejorar la calidad de la vida humana; conservar la vitalidad y diversidad de la Tierra; mantenerse dentro de la capacidad de carga de la Tierra; modificar las actividades y prácticas personales; facultar a las comunidades para cuidar de su medio ambiente; establecer un marco nacional para la integración del desarrollo y la conservación; forjar una alianza mundial.
Sociedad
Sustentabilidad
Ambiente
Economía
Dimensiones básicas para la sustentabilidad: Social: equidad de las soluciones propuestas, ya que la finalidad del desarrollo es ética y social. Económica: referida a la eficiencia económica. Ecológica: relacionada con la prudencia ecológica. Cultural: las soluciones propuestas deben ser culturalmente aceptables. Espacial o territorial: se deben buscar nuevos equilibrios espaciales considerando la planificación socio-económica y el uso de los recursos conjuntamente.
La crisis ambiental como reto bioético para la sociedad Desde la revolución industrial, aumentó el CO2 un 25%. El Metano se duplicó. La temperatura aumentó entre un 0.6 y un 0.8%; hay efecto invernadero. La capa de ozono se ve disminuida. Parte de la población mundial muere de hambre.
“asumir una política y un estilo de vida positivo respecto al medio ambiente, en el sentido de preservar la integridad ecológica del planeta”, que sólo es posible si nuestras ambiciones van más allá de nosotros mismos y buscan el bienestar humano y del medio ambiente. La evolución de cada individuo es imprescindible para el bienestar ambiental de la Tierra”
Y ¿en México?