SALUD Y HÁBITOS ALIMENTARIOS
Ma. Del Carmen Gangotena, M.Sc. UNIVERSIDAD INTERNACIONAL DEL ECUADOR
LA INFLUENCIA DE LOS HÁBITOS ALIMENTARIOS EN LA SALUD Los
patrones dietarios están fuertemente asociados con el incremento del riesgo de desarrollar enfermedades crónicas no trasmisibles – enfermedades coronarias, cáncer, enfermedad cerebro – vascular, diabetes, hipertensión, sobrepreso / obesidad y osteoporosis.
Los
estudios científicos muestran que una ingesta elevada de grasas y grasas saturadas, baja ingesta de calcio y fibra dietaria se asocia positivamente a condiciones crónicas de salud que amenazan la calidad de vida y aumentan la mortalidad.
Directamente,
el 14 % de las muertes se atribuyeron a dietas pobres y / o estilos de vida sedentarios (McGinnis and Foege, 1993).
ENFERMEDADES CORONARIAS Los factores de riesgo modificable incluyen altos niveles de colesterol, diabetes, sobrepeso, hipertensión, inactividad física y consumo de tabaco. La alimentación, en particular el consumo de grasas saturadas pueden incrementar los niveles de colesterol. La investigación muestra que el incremento en la ingesta de antioxidantes y ácido fólico puede reducir el riesgo de ECV (Boushey and others, 1995; Willett, 1994; Plotnick, Corretti, and Vogel, 1997). La alimentación puede también influenciar otros factores de riesgo como diabetes, hipertensión y sobrepeso / obesidad.
CÁNCER Los estudios muestran un efecto protector poderoso asociado al consumo de frutas y vegetales (Block, Patterson, and Subar, 1992; World Cancer Research Fund and American Institute for Cancer Research, 1997) La evidencia científica muestra también una fuerte asociación entre las dietas altas en grasa y el riesgo de desarrolar cáncer, y éstos están asociados también con un limitado consumo de frutas y vegetales. (Subar and others, 1994)
El incremento del riesgo de obesidad asociado al consumo de dietas altas en grasa, también se convierte en un factor de riesgo (World Cancer Research Fund and the American Cancer Research Institute, 1997).
Los estudios estiman que un 35% de la incidencia de cáncer se debe a los hábitos alimentarios.
La
evidencia muestra que el consumo de frutas y vegetales actúa de manera protectora en el caso de cáncer epitelial. En más de 200 casos control o estudios de cohorte se evidenció que las personas que consumen grandes cantidades de frutas y vegetales o que tienen niveles sanguíneos elevados de carotenoides estaban menos expuestos a contraer cáncer.
DIABETES La única intervención efectiva conocida que puede influir en el desarrollo de la diabetes no insulino dependiente, es mantener un peso corporal saludable acompañado por ejercicio. (American Diabetes Association, 1993). Cerca del 80 % de pacientes con DM II tienen un historial de sobrepeso (DHHS, 1992; Herman, Teutsch, and Geiss, 1987). Se estima que la mitad de pacientes con DM II puedieron haber prevenido su dolencia controlando su peso – mediante mejoras en sus hábitos alimentarios y actividad física –.
McGinnis and Foege (1993)
HIPERTENSIÓN El
aumento progresivo relacionado a la edad de la presión arterial, está asociado con sobrepeso, inactividad física, alta ingesta de sodio y alcohol y baja ingesta de potasio. (DHHS, 1993b). The National Heart, Lung, and Blood Institute estima que del 20-30% de los casos de hipertensión se los puede atribuir al sobrepeso, y que los esfuerzos en prevención deben focalizarse en la ingesta de energía y prevenir y controlar el sobrepeso.
SOBREPESO Es
el factor de riesgo más importante en ECV, Enfermedad cerebro vascular, algunos tipos de cáncer, hipertensión y diabetes, por lo que sus implicaciones para la salud son muy significativas. Existe mucho temor, debido a la evidencia epidemiológica encontrado, el hecho de que el sobrepeso esté presente en niños y jóvenes, presentándose cada vez en etapas más tempranas ECV. (DeBrosse, 1997). USDA/ERS AIB-750 • High Costs of Poor Eating
PATRONES DIETARIOS QUE PREVIENEN EL SOBREPESO En
un estudio presentado en AMERICAN JOURNAL OF CLINICAL NUTRITION DE PK Newby, Denis Muller, Judith Hallfrisch, Reubin Andres, and Katherine L Tucker “Food patterns measured by factor analysis and anthropometric changes in adults” – Am J Clin Nutr 2004;80:504 –13., se encontró que:
Al realizar análisis de clusters de diferentes estudios se encontró una relación significativo entre los cambios longitudinales en medidas antropométricas. Los
patrones dietarios – consumo alto de frutas, consumo de lácteos reducidos en grasa, consumo de cereales alto en fibra, consumo de cereales enteros, consumo bajo de carnes rojas y procesadas, consumo de comida rápida, consumo de sodas. Muestran una ganancia muy modesta en el IMC y el perímetro de cintura, en comparación con otros patrones dietarios como pan blanco, azúcares, alcohol, carnes y papas)
GRACIAS