Rev Fran Tp 2 Mundial

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HISTORIA MUNDIAL TRABAJO PRÁCTICO: LAS ETAPAS DE LA REVOLUCION FRANCESA Introducción: Para poder entender las tres fases en las cuales se divide la revolución francesa debemos hacer un pantallazo general sobre las causas que llevaron a desarrollar dicho proceso. Entendiéndolo como un conflicto social y político, con diversos periodos de violencia. Que marco el final del absolutismo y dio a luz a un nuevo régimen donde la burguesía se convirtió en la fuerza política dominante en el país. Fueron varios los factores que influyeron en la revolución, desde el punto de vista político, las ideas de los iluministas como por ejemplo Voltaire, Rousseau o Montesquie fueron rompiendo el prestigio de las instituciones del Antiguo Régimen y ayudaron a su derrumbe dándole un marco ideológico. En lo económico, la inmanejable deuda del estado fue agravada por el sistema de extrema desigualdad social y de altos impuestos que los estamentos privilegiados no tenían obligación de pagar. Esta situación financiera se agravo cuando la corona decidió intervenir en la guerra de la independencia de las colonias británicas en América del Norte. Esto hizo que aumentara la explotación a los campesinos. La crisis de producción agraria acentuó el malestar general y gran parte de la población se vio arrastrada a la miseria, sumándole a esto una mala cosecha que ocasionaba el aumento en el precio del pan. Aunque la causa principal de la revolución fue la aspiración de los burgueses a acceder al poder, la burguesía era consiente de su poder económico, y aspiraba a tener también el poder político. Algunos ministros de Luís XVI trataron de encontrar una solución pero sus medidas solo agravaron más la situación ya que recurrieron al intento de aumentar los impuestos, pero esta vez tratando también de que la nobleza y el clero además hagan su aporte, medida que provoca el descontento y oposición de estos. Ante la imposibilidad de resolver la crisis económica Luís XVI hizo la convocatoria a los Estados Generales, con el argumento de que solo ese cuerpo podía establecer nuevos impuestos. Dicho estado estaba integrado por los tres estamentos, clero, nobleza y tercer estado. Quienes sesionaban y votaban por separado. Desarrollo: La primera fase de la revolución francesa, comienza con la reunión de los Estados Generales en mayo de 1789 se produjo la apertura formal, aunque estaba pendiente el

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sistema de voto, ya que había dos voluntades políticas. Por una parte la nobleza intentaba que las órdenes funcionaran por separado. Y por otra parte, la del tercer estado, que reclamaba la sesión conjunta de los tres estamentos y el voto por cabeza. Esta propuesta es rechazada. Ante esta situación el tercer estado se considera suficientemente representativo y se constituye en Asamblea Nacional. La medida no es bien vista por Luís XVI quien cierra la sala en donde se reúne el tercer estado, quienes ante esta circunstancia se reúnen en la sala de juego de la pelota y en ella realizan el Juramento del Juego de la Pelota. Los diputados del tercer estado juraron “no escindirse jamás… hasta que se establezca la constitución”. Ante esta circunstancia Luís XVI manda la concentración de tropas en Paris. Con las bases de este nuevo poder, el pueblo de Paris comienza a armarse. En una jornada decisiva el 14 de julio el pueblo se apodera de la Bastilla, fortaleza y prisión real, símbolo del poder absolutista. Esta presión popular no solo fue parisiense, ya que fueron muchas las ciudades que siguieron su ejemplo. Después de los primeros levantamientos, las rebeliones agrarias se habían extendido, produciendo lo que se denomino el gran miedo, esto surge ante el rumor de que los aristócratas mataban a los campesinos. Estos atacaron y quemaron castillos y realizaron ataques personales contra los nobles provocando la sublevación agraria y la quema de títulos de derechos señoriales. Estos ataques se producen en la mitad del territorio francés, produciéndose un pánico colectivo. La Asamblea toma una de sus decisiones más trascendentes, aprueba la Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano. Esta declaración proclama la igualdad jurídica de los hombres, consagra como derechos naturales la libertad, la propiedad y la seguridad. En medio de un clima tenso, caracterizado por la aparición recurrente de la violencia,

muchos

nobles,

comenzaron

a

realizar

operaciones

políticas

contrarrevolucionarias. También empieza a vislumbrarse un nuevo estilo de vida política, dividida en tendencias imponiéndose líderes y portavoces: •

Aristocracia a la derecha

•

Monárquicos en el centro

•

Patriotas a la izquierda

Comienza la discusión de la futura constitución, las oposiciones se materializan en torno a un cierto número de cuestiones cruciales, como el problema del derecho de paz y guerra, o el derecho de veto, también se decide poner los bienes del clero a dispocision del país. Se aprueba la constitución civil del clero, provocando un profundo cisma en toda la

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nación. Esta convertía a los curas y obispos en funcionarios públicos a los que se les imponía un juramento de fidelidad a la constitución del reino. Produciéndose la división del clero en dos, por un lado los sacerdotes y clero constitucional y por el otro los llamados refractarios. En 1791 se produce la matanza del campo de Marte, la guardia nacional mata a los peticionarios del club de cordeleros que solicitaban la destitución del rey Luís XVI. A esta difícil situación interna se suma la reacción hostil de los monarcas europeos, alentados por un gran número de nobles franceses emigrados, que buscaban apoyo para derrotar la revolución. Comenzando a tejerse una red de conspiraciones en el país a fin de provocar el levantamiento contrarrevolucionario con el propósito de organizar la fuga del rey. El 20 de junio de 1791 la familia real abandona el palacio, disfrazados, pero son reconocidos en Varennes, desde donde se los lleva de vuelta a Paris. Hacen su aparición los Sans Culottes. También en las ciudades y Burgos los clubs y las sociedades populares se multiplican. En septiembre de 1791 la constitución proclama la soberanía nacional y organizaba a Francia como una monarquía parlamentaria. Se establece la división de poderes del gobierno: poder ejecutivo a cargo del rey, poder legislativo a cargo de la asamblea legislativa y poder judicial a cargo de magistrados electos. Luis XVI se vio obligado a aceptar y a jurar la constitución, restableciéndose así su autoridad aunque sus atribuciones quedaron limitadas por la asamblea legislativa. Francia comienza su etapa constitucional con una gran tensión. A fines de 1791 aumenta la posibilidad de un conflicto entre la Francia revolucionaria y las monarquías absolutas. El 20 de abril de 1792 se declara la guerra al rey de Bohemia y Hungría. Los franceses deseaban la guerra, aunque por diferentes motivos, el rey y los contrarrevolucionarios querían la derrota de los revolucionarios franceses para que el antiguo régimen volviera a ser restaurado, por su parte los revolucionarios confiaban en la victoria y creían que la guerra les permitiría difundir la revolución por Europa. En sus comienzos la guerra fue desastrosa para Francia. El pueblo de Paris estaba movilizado por el hambre y había la sospecha de que el rey había pactado con los jefes extranjeros, el asalto al palacio de las Tullerias, donde se suponía que se encontraba la familia real, confirman las sospechas del pueblo. En el país se multiplicaron las declaraciones que pedían la destitución del rey. El 11 de julio la asamblea proclama solemnemente a la patria en peligro y de las provincias llegan batallones de federados que subían a Paris, entre los cuales se encontraban los marselleses.

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La insurrección popular triunfa, la asamblea vota la suspensión del rey de sus funciones y la familia real será encarcelada en la prisión del temple. Esta fase vendría a ser la época de la monarquía constitucional. El comienzo de la segunda fase de la revolución la encontrara buscando una salida a esta situación, la asamblea legislativa convoco a elecciones para una nueva asamblea, la Convención. Apenas reunida, la Convención abolió la monarquía y proclamo la Republica. En la Convención se distinguían 3 sectores políticos bien diferenciaos. En las gradas de la derecha de la presidencia se sentaban los representantes de la alta burguesía, los girondinos, que se oponían a las medidas extremas. A la izquierda se ubicaban los diputados mas revolucionarios, los jacobinos, y en el centro se encontraba el sector de la llanura, integrado por grupos de la alta burguesía cuyas ideas acomodaticias fluctuaban entre uno y otro sector. Durante los primeros meses la convención estuvo en manos de los girondinos, tratando estos de imponer una línea moderada, sin embargo no lograron impedir que el rey fuera acusado de traición y condenado a morir guillotinado. La ejecución del rey rompió toda posibilidad de arreglo con las monarquías europeas que invadieron el territorio francés. A principio de 1793 la marcha de la guerra era desfavorable para los franceses, al mismo tiempo se producían sublevaciones contrarrevolucionarias en el interior de Francia y crecía el descontento popular en Paris ante la escasez de alimentos y el aumento del precio del pan. Con el apoyo de la opinión popular los montañeses cuyo núcleo principal eran los jacobinos, controlaron la Convención. El 6 de abril, la Convención creo el comité de Salvación Publica, que habría de ser el órgano ejecutivo de la republica y reestructuro el Comité de Seguridad General y el tribunal revolucionario. Ante el avance de las tropas extranjeras, la comuna lanza una proclama a los parisienses “A las armas ciudadanos, a las armas, el enemigo esta a nuestras puertas”. La comuna da el ejemplo de fervor patriótico, organiza la defensa y encarcela a un gran número de sospechosos. Ante el rumor de que los sospechosos saldrán de la cárcel y crearan otro ejercito que ataque Paris, surge el miedo a las represalias. Los revolucionarios asesinan a un gran número de prisioneros. Desde este momento el terror será el arma de los revolucionarios, que utilizaría contra el enemigo interior y exterior. La Convención promulgo una nueva constitución en la que se ampliaba el carácter democrático de la Republica. Sin embargo, este estatuto nunca llego a entrar en vigor.

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El 10 de julio la presidencia del Comité de Salvación Publica fue transferida a los jacobinos, que reorganizaron completamente las funciones de este organismo. Con la muerte de Marat, destacado líder de los jacobinos, la indignación pública hace aumentar la influencia de los jacobinos en todo el país. El dirigente Maximilien de Robespierre pasó a ser miembro del Comité de Salvación Pública y se convierte en su figura mas destacada en poco

tiempo.

Implanta

medidas

extremas

para

impedir

cualquier

acción

contrarrevolucionaria. Una de sus frases es: “El terror no es más que la justicia rápida, severa, inflexible”. Desde el punto de vista militar, la situación era extremadamente peligrosa para la Republica. Las potencias enemigas habían reanudado la ofensiva en todos los frentes. Esto hace que se emita un nuevo decreto de reclutamiento para toda la población masculina de Francia. Se formaron en poco tiempo catorce nuevos ejércitos, que fueron equipados y enviados al frente rápidamente. Además de estas medidas el comité reprimió violentamente la oposición interna. Maria Antonieta es ejecutada y 21 destacados girondinos mueren guillotinados el mismo mes. Tras estas represalias iniciales, miles de monárquicos, sacerdotes, girondinos y otros sectores acusados de realizar actividades contrarrevolucionarias o de simpatizar con esta causa fueron juzgados por los tribunales, y condenados. Se implementa en octubre de 1793 el nuevo calendario republicano. El Comité de Salvación Pública adopto medidas contra la corrupción y el acaparamiento y comenzó a promover la religión revolucionaria, conocida como la religión a la razón. Esta actitud auspiciada por Chaumette y sus seguidores extremistas entre ellos Hébert acentúa las diferencias entre los jacobinos centralistas liderados por Robespierre y los fanáticos seguidores de Hébert. La guerra se había vuelto favorable para Francia. El general Jourdan derroto a los austriacos el 16 de octubre de 1793, iniciándose así una serie de importantes victorias francesas. A finales de ese año, se había iniciado la ofensiva contra las fuerzas de invasión del Este en el Rin y Tolon había sido liberado. La disputa entre el comité de Salvación Publica y el grupo extremista liderado por Hébert, concluyo con la ejecución de este y sus principales seguidores, en 1794. Robespierre emprende acciones también contra los seguidores de Danton, que habían comenzado a solicitar la paz y el fin del reinado del terror. Danton y sus principales correligionarios fueron decapitados el 6 de abril. Robespierre pierde el apoyo de muchos miembros importantes del grupo de los jacobinos a causa de las represalias masivas que este hacia contra los partidarios de ambas facciones.

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Las victorias de los ejércitos franceses, entre la que se destaca la de la batalla de Fleurus facilita la reconquista de los Países Bajos austriacos, esto hace incrementar la confianza del pueblo en el triunfo final. Por este mismo motivo comienza a extenderse el rechazo a las medidas de seguridad impuestas por Robespierre. El descontento general comenzó a transformarse en una autentica conspiración. Robespierre, Saint- Just, Couthon y 98 de sus seguidores fueron apresados el 27 de julio de 1794 (el 9 termidor del año III) y decapitados al día siguiente. Con su muerte termina la etapa más radical de la revolución francesa. La tercera etapa de la revolución estuvo controlada hasta finales de 1794 por el grupo termidoriano que derroco a Robespierre y puso fin al reinado del terror. Se clausuraron los clubes jacobinos en toda Francia, fueron abolidos los tribunales revolucionarios y revocados varios decretos de carácter extremistas, incluido aquel por el cual el estado fijaba los salarios y precio de los productos. Después de que la convención volviera a estar dominada por los girondinos, el conservadurismo termidoriano se transformo en un fuerte movimiento reaccionario. Durante la primavera de 1795 se produce en Paris varios tumultos, en los que el pueblo reclamaba alimentos, estas protestas se extendieron a otros lugares de Francia. Fueron sofocadas y se adoptaron severas represalias contra los jacobinos y sans-culottes que los protagonizaron. La serie de victorias francesas provoca la desintegración de la coalición antifrancesa. Prusia y varios estados alemanes firmaron la paz con el gobierno francés en el Tratado de Basilea el 5 de abril de 1795, España se retira de la guerra, con lo que las únicas naciones que seguían en lucha contra Francia eran Gran Bretaña, Cerdeña y Austria. Restablecida la paz en las fronteras. La convención nacional finalizo la redacción de una nueva constitución, que se aprobó oficialmente el 22 de agosto de 1795. La nueva legislación confería el poder ejecutivo a un Directorio, formado por cinco miembros. El poder legislativo seria ejercido por una asamblea bicameral, compuesta por el Consejo de Ancianos (250 miembros) y el Consejo de los Quinientos. El directorio confía a Napoleón la dirección de las operaciones militares contra las tropas austriacas en el norte de Italia en 1796, en menos de un año Napoleón había vencido a las fuerzas de Austria. El mandato de un director y de un tercio de la asamblea se renovaría anualmente a partir de mayo de 1797, y el derecho al sufragio quedaba limitado a los contribuyentes que pudieran acreditar un año de residencia en su distrito electoral. La nueva constitución incluía otras disposiciones que demostraban el distanciamiento de la democracia defendida por los jacobinos.

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Desde sus primeros momentos, el directorio tropezó con diversas dificultades, muchos de sus problemas surgieron a causa de los defectos estructurales de su aparato de gobierno, otros por la confusión económica y política generada por el triunfo del conservadurismo. El directorio heredo una crisis financiera que se vio agravada por la depreciación de los asignados. En los círculos de la alta sociedad, muchos de sus miembros hacían campaña a favor de la restauración monárquica. Las agrupaciones políticas burguesas, decididas a conservar su situación de predominio en Francia no tardaron en apreciar la ventajas que representaba reconducir la energía desatada por la población durante la revolución hacia fines militares. No habían pasado cinco meses desde que el Directorio asumiera el poder, cuando comienza la primera fase de las Guerras Napoleónicas. Los tres golpes de estado que se produjeron durante el periodo del 4 de septiembre de 1797, el 11 de mayo de 1798 y el 18 de junio de 1799, reflejaban el reagrupamiento de las facciones políticas burguesas. Las derrotas militares sufridas por los ejércitos franceses en 1899, las dificultades económicas y los desordenes sociales pusieron en peligro la supremacía política burguesa en Francia. Luciano Bonaparte, presidente del Consejo de los Quinientos, Fouché ministro de policía, Sieyés miembro del Directorio consideraban que esta crisis solo podía superarse mediante una acción drástica. El golpe de Estado tuvo lugar el 9 de noviembre (18 brumario) derrocando al Directorio. El general Napoleón Bonaparte, héroe en las últimas campañas, fue la figura central del golpe, poniendo fin a la etapa final de la revolución francesa. Conclusión: La revolución francesa se divide en tres fases: La etapa monárquica. En la que los Estados Generales (1789) son convocados por Luís XVI, se reúnen en Versalles, produciéndose la separación del tercer estado y constituyéndose en Asamblea Nacional, ocupando la sala de juego de la pelota y sesionando allí. Los diputados juran no separarse hasta haber dado una constitución a Francia. Surge la Asamblea Constituyente, en la que sesionan los tres estamentos juntos, provocando la perdida de autoridad del rey, produciéndose el fin de la monarquía absoluta. Podemos decir que los principales acontecimientos que tuvo como escenario a la asamblea constituyente fueron: La toma de la bastilla, el 14 de julio de 1789, en la que el pueblo de Paris ataca la prisión-fortaleza y la ocupa.

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La declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, que fue sancionada por la Asamblea, y en la que declara derechos como el de la libertad, igualdad, propiedad y seguridad. Se promulga la constitución de 1791, en donde se sanciona la existencia de los tres poderes, legislativa, ejecutivo y judicial. Se promulga también la constitución civil del clero, por la que los bienes de la iglesia pasan al poder del estado así como también el nombramiento de las autoridades eclesiásticas. Se produce la ruptura con la iglesia de roma. Huida del rey, Luis XVI pretende escapar al extranjero pero es descubierto en Varennes y detenido, debe jurar la constitución. Con la aparición de la Asamblea Legislativa, se produce la declaración de guerra a Austria, quien estaba complotada con el rey y los nobles emigrados. El pueblo y la asamblea desconfían de Luis XVI y asalta a las Tullerias, descubriendo documentos comprometedores, provocando la prisión definitiva del rey y su familia. La segunda parte es la etapa republicana, dominada por la convención y el terror. Luego de la victoria de Valmy se forma la Convención Nacional, en la cual sus principales actos fueron: Abolición de la monarquía y proclamo la Republica Sanción del sufragio Proceso y muerte de Luís XVI. El gobierno revolucionario esta bajo la dirección de Robespierre, este implanta una época de terror, en el que domina la violencia y crueldad, entre los cuales son asesinados Marat y Danton entre otros. Se produce la ejecución de Maria Antonieta, y se declara la ley del sospechoso. El gobierno del terror estaba formado por tres comités, el de Salvación Publica (encargado de la defensa de Francia) con Robespierre como miembro principal. El de Seguridad General, que fiscalizaba la conducta de los habitantes. Y el tribunal revolucionario, encargado de juzgar y sentenciar a los acusados. Finalmente Robespierre es destituido y ejecutado, finalizando así esta segunda etapa. En la tercera y última etapa encontramos al directorio. Se produce cuando la convención nacional promulga la constitución del año III, en 1795 que establecía el directorio, gobierno republicano moderado. Tenía la siguiente organización, el poder ejecutivo estaba a cargo del directorio, integrado por cinco miembros, y el poder legislativo, formado por dos consejos: el de los Quinientos y el de los Ancianos.

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Comienza a destacarse la figura de Napoleón Bonaparte. Las derrotas del ejército junto con los problemas económicos hacen que se produzca un golpe de estado (18 Brumario) en el cual Napoleón se apodera del gobierno. Llegando a su fin la revolución francesa.

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Akal.