René Descartes ‘’No he hallado una mujer cuya belleza pueda compararse a la de la verdad ‘’
BIOGRAFÍA
Biografía
René Descartes (La Haye, Francia 1596 – Estocolmo, Suecia 1650) fue un filósofo, matemático y científico francés. A los 18 años entró a la universidad de Poitiers para estudiar en Derecho. En 1616 se licenció. Siempre fue sobresaliente, y gracias al afecto de sus profesores visitó algunos laboratorios de la universidad. En 1969, en Breda, conoció a Beeckman que estimuló el interés de Descartes por las matemáticas y la física. En 1620 conoció a Faulhaber y entre los dos descubrieron el Teorema de Euler sobre los poliedros. En 1622 durante su estancia en París, creó el círculo de Los libertinos, lo que hace que su reputación ascienda hasta llegar a establecer su casa como un punto de reunión. En 1628, libra un duelo, tras el que comentó: “No he hallado una mujer cuya belleza pueda compararse a la de la verdad”. En 1649 marchó a Holanda, en la que encontraba la paz y la serenidad que no encontraba en Francia. Allí enuncio las leyes de refracción y reflexión de la luz y fundó la geometría.
Biografía
En septiembre de 1649 la Reina Cristina de Suecia le llamó a Estocolmo. Allí murió de una neumonía el 11 de febrero de 1650. Falleció a los 53 años de edad. Actualmente se pone en duda si la causa de su muerte fue la neumonía. En 1980, el historiador y médico alemán Eike Pies halló en la Universidad de Leiden una carta secreta del médico de la corte que atendió a Descartes, el holandés Johan Van Wullen, en la que describía al detalle su agonía. Curiosamente, los síntomas presentados —náuseas, vómitos, escalofríos— no eran propios de una neumonía. Tras consultar a varios patólogos, Pies concluyó en su libro El homicidio de Descartes, documentos, indicios, pruebas, que la muerte se debía a envenenamiento por arsénico. La carta secreta fue enviada a un antepasado del escritor, el holandés Willem Pies. En el año de 1676 se exhumaron los restos de Descartes; colocados en un ataúd de cobre se trasladaron a París para sepultarlos en la iglesia de SainteGeneviève-du-Mont; movidos nuevamente durante el transcurso de la Revolución Francesa, los restos fueron colocados en el Panthéon, la basílica dedicada a los grandes hombres de la nación francesa; nuevamente, en 1819, los restos de René Descartes cambiaron de sitio de reposo siendo llevados esta vez a la Iglesia de Saint-Germain-des-Prés donde actualmente se encuentran.
FILOSOFÍA
El Racionalismo de Descartes
El racionalismo concede a la razón la importancia de principio supremo del conocimiento, ya que es interpretada como origen de los conocimientos. Descartes ha sido uno de los racionalistas más importantes, se basaba en dios para dar las evidencias de la razón. También propone abordar los problemas descomponiéndolos en partes más sencillas hasta llegar a una parte en la que el uso de nuestra razón pueda resolverlo. Sus rasgos fundamentales fueron: La separación de la fe y la razón, humanismo (ser humano se convierte en el eje de la reflexión filosófica y la recuperación de la filosofía clásica. Descartes se baso en la teoría de la existencia de dios de san Anselmo. Que decía: a partir de la idea de dios, existe dios ya que en nuestra mente tenemos ideas. Por ejemplo: tenemos la idea de que esto es un papel, pero no sabemos si es una imaginación o existe de verdad, porque es material. Pero tenemos la idea de que dios existe, para nosotros ya que es algo abstracto e inmaterial y no se puede contrastar.
La verdad indudable de Descartes
Descartes trataba de buscar una verdad indudable. Para ello dudó de todo lo que nos dan los sentidos, dudó de la geometría y de los razonamientos que se habían hecho. De este modo se basó en el cogito ergo sum.
Caracteristicas del ‘’Cogito Ergo Sum’’
Primera persona del singular → autobiográfico, es decir, que solo se puede aplicar a uno mismo. Presente de indicativo → es decir, solo se puede aplicar en cada instante. Infinitivo → es decir, solo se puede usar para informarnos a nosotros mismos Existencia mental → Solamente existe en nuestra propia mente. Funda el criterio de certeza → Gracias al cogito, llega a la creación de este criterio.
Caracteristicas del ‘’Cogito Ergo Sum’’
Descartes dedujo que el origen del conocimiento es una serie de principios o ideas innatas que poseen la razón en sí misma y con independencia de los sentidos, es decir, nuestros conocimientos o ideas que tenemos en nosotros desde que nacemos condiciona nuestro uso de la razón independientemente de lo que percibamos por los sentidos. Y así a la información recibida por los sentidos se le niega todo valor de conocimiento. Dedujo eso, porque dudó de los sentidos (1º duda metódica), porque es cierto que a veces nos “engañan”, y nos hacen sentir cosas irreales. También dudó del mal razonamiento, ya que el “genio maligno” nos confunde los sentidos y razonamos mal (2º duda metódica). Y podemos estar dormidos todo el tiempo, ya que no nos damos cuenta de si estamos durmiendo o despiertos, porque pensamos igual despiertos que dormidos (3º duda metódica).
Las matemáticas en la filosofía de Descartes.
Descartes consideraba que la verdad se obtenía por un método matemático, por lo tanto el método deductivo. Pensaba que “todo era dudoso y objeto de disputas, y que las matemáticas daban una verdad “.
Discurso del Método
René plasmó la mayor parte de sus conocimientos filosóficos en el discurso del método. Según Eduardo Bello Reguera, “el Discurso es la construcción teórica que inaugura el pensamiento moderno”. Se constituía de tres ensayos: Dióptrica, Meteoros y Geometría. En una carta que dirige a Marin Mersenne le explica que la ha titulado Discurso y no Tratado para poner de manifiesto que no tenía intención de enseñar, sino sólo de hablar. Con esto Descartes trata de alejarse de cualquier problema que pudiera generar su escrito a los políticos y gente de poder de la época. La filosofía cartesiana se debería abordar a través de las meditaciones metafísicas. Creía indispensable un enorme valor práctico: basta pensar bien para actuar bien, y a su paso por la escuela lo ha dejado frustrado. En 1537, en el discurso del método, Descartes enunció:”je pensé, donc je suis” que significa Pienso, luego existo. Que se convirtió en el elemento fundamental del racionalismo occidental y en su enunciado más conocido.
Primera Parte Es
una autobiografía intelectual, en la que pone en duda todos sus conocimientos. Ahí propone un método para llegar a un saber que sea totalmente seguro. A la vez realiza una crítica a las ciencias y la filosofía escolástica de su época. Tras esto admite que las matemáticas ofrecen un saber puro. Concluye diciendo que la única manera de encontrar la verdad es en uno mismo.
Segunda Parte
Señala que las ciencias al haber sido realizadas por muchos autores, cada uno con distinta opinión, no portan la verdadera sabiduría. Propone renunciar a estas opiniones que nos han sido enseñadas y en su lugar utilizar nuestra propia razón. Expone de manera breve los fundamentos de su manera de reformar su propio pensamiento, dudando de manera metódica y provisional de todo lo que le rodea: “El primero, no admitir jamás cosa alguna como verdadera sin haber conocido con evidencia que así era." “El segundo, en dividir cada una de las dificultades que examinare, en tantas partes fuere posible y en cuantas requiriese su mejor solución.” “El tercero, en conducir con orden mis pensamientos, empezando por los objetos más simples y más fáciles de conocer, para ascender poco a poco, gradualmente, hasta el conocimiento de los más compuestos, e incluso suponiendo un orden entre los que no se preceden naturalmente" “Y el último, en hacer en todo recuentos tan integrales y unas revisiones tan generales, que llegase a estar seguro de no omitir nada."
Tercera Parte
Explica que mientras duda de todo, tiene que crear una moral provisional que rija su vida. Esta moral provisional tenía una serie de máximas: Obedecer las leyes y costumbres de su país, conservar la religión y guiarse por las opiniones moderadas. Ser lo más firme y decidido en las acciones y en seguir, las opiniones más dudosas como si hubieran sido verdaderas. Cambiar los propios deseos antes que el orden del mundo. Nada excepto los pensamientos están enteramente en nuestro poder.
Cuarta Parte Es
el capítulo central del discurso. Aquí cita: “je pensé, donc je suis”. A partir de aquí explica la existencia de Dios. Dios nos demuestra a su vez la existencia del mundo, puesto que Dios nos garantiza la evidencia de nuestras ideas. Aún por encima, Descartes afirma que es nuestro deber y no el de Dios, liberarnos de las ilusiones y evitar los errores.
Quinta Parte Aquí
se explica brevemente el contenido de Le monde. Explica la formación del mundo organizándolo al problema de la linterna: una linterna produce un haz de luz, que es lo que nosotros vemos, y conocemos, pero como su haz es finito, no podemos ver lo que está en la oscuridad, y por lo tanto lo desconocemos.
Sexta Parte Descartes
establece una serie de reflexiones sobre el alcance de la ciencia y la investigación. El progreso de la ciencia aporta múltiples beneficios materiales y morales y el progreso de la ciencia precisa la comunicación de las experiencias entre personas.
Terminó el Discurso del Método y... Estuvo
reacio a la publicación de sus investigaciones porque pueden ser interpretadas como blasfemia por la iglesia y los teólogos de la época. Todo esto lleva a Descartes a publicar el DISCURSO, aunque al final se consagró como la medicina de la filosofía moderna.
Bibliografía
http://www.librosmaravillosos.com/metodo/ http://es.wikipedia.org/wiki/Discurso_del_M%C3%A9todo http://carlirebolledo.wordpress.com/2008/08/26/biografia-renedescartes/ http://www.biografiasyvidas.com/biografia/d/descartes.htm http://es.wikipedia.org/wiki/Ren%C3%A9_Descartes http://es.wikipedia.org/wiki/Cogito_ergo_sum http://es.wikipedia.org/wiki/Meditaciones_metaf%C3%ADsicas http://citas-latinas.blogspot.com/2009/01/cogito-ergo-sum.html
Grupo II Integrantes
del Grupo: Javier Ager Solano Rosario Ladrón de Guevara Picazo Javier Sánchez Romero
‘’Vivir
sin filosofar es, propiamente, tener los ojos cerrados, sin tratar de abrirlos jamás.’’ René Descartes.
FIN