2
PROGRAMA DE GOBIERNO DE LA UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA METROPOLITANA
UTEM
PERÍDODO 2009 - 2013 PROFESOR: LUIS PINTO FAVERIO
I.
INTRODUCCIÓN
El contenido de las presentes Líneas Programáticas que someto a vuestra consideración constituye una propuesta que debería orientar una discusión para la toma de decisiones futuras en torno, primero, a un proceso de normalización de nuestra casa de estudios para salir de la crisis académicofinanciera que vive la UTEM y luego al proyecto de desarrollo de la misma. Debemos reconstruir una Universidad que sea capaz de desprenderse de lo mezquino, una Universidad democrática en su funcionamiento que colabore con la consolidación de las libertades públicas, aunque sin aplicar a la vida académica aspectos que son propios de la vida política. La universidad debe sólo basarse en la calidad y en el conocimiento, esa es la universidad autónoma que propiciamos, autónoma pero formando parte de la sociedad, rindiéndole cuentas, sabiendo evaluarse y demostrar su eficacia y su relevancia, sometiéndose a los oportunos sistemas de control por parte de las instancias de Gobierno. Pretendemos una Universidad en concordancia con las recomendaciones y lineamientos principales que se plantearon en la CRES (Conferencia Regional de Educación superior) en 1998 y posteriormente, el año 2008 en Cartagena de Indias, acuerdos respaldados por la UNESCO. Una Universidad que forme a escala superior ciudadanos capaces de actuar eficazmente en los distintos oficios y actividades, aún los más diversos,
3
actuales y especializados. Una Universidad para la formación permanente e intensiva de todos los ciudadanos que lo deseen para: -
la actualización de conocimientos;
-
identificar y abordar los grandes problemas nacionales;
-
colaborar con la industria y las empresas de servicio al progreso de la Nación;
-
forjar aptitudes de compresión y tolerancia;
-
suministrar a los gobernantes elementos basados en el rigor científico para la toma de decisiones en materias tan importantes como el medio ambiente, en el proceso de progresiva cientificación de las decisiones políticas;
-
crear, para fomentar la investigación aplicada, la innovación, la invención;
-
la reducción de asimetrías económicas y sociales inaceptables; y
-
el fortalecimiento de la libertad, de la dignidad y de la democracia.
En suma, una Universidad que cual vigía sea capaz de anticiparse, plenamente situada en el contexto mundial, con sus amenazas sin fronteras, con sus posibilidades inmensas. Una Universidad adaptada al ritmo de la vida de hoy. En los otros niveles de la educación, la tarea consiste más en aprender a aprender. En el nivel universitario también, pero el énfasis debe estar en el aprender a emprender, a contribuir a la vida y al progreso de la sociedad. Una Universidad en fin, con permanencias limitadas de sus alumnos, con diversificación en su oferta, con puentes entre pre grados, grados y diplomados. No cabe duda que
aquellas instituciones capaces de reexaminar su
posición y adoptar nuevas actitudes
de cara al futuro, podrán sobrevivir y
ofrecer a la sociedad egresados preparados en la docencia y en el ejercicio de oficios, destrezas, habilidades; preparados intelectualmente para ofrecer nuevos enfoques, de tal manera que la universidad pueda jugar el papel decisivo que le corresponde en la construcción de los mejores futuros posibles.
4
En este sentido, debemos preparar en conjunto y consensuar a la vez, una agenda de compromiso y de acción que resumirá, después de un gran encuentro de voluntades, los principios que orientarán la política de la UTEM. En los últimos nueve años, se han aprendido muchas lecciones, algunas muy dolorosas, y ya es hora para establecer las bases para forjar una nueva y renovada UTEM: más libre, más culta, más participativa, más equitativa y más pacífica. Más democráticamente jerarquizada. No tenemos mucho tiempo. Ha llegado el momento de la acción. Los invito en nombre de todos los universitarios a unir nuestras
capacidades y
esfuerzos al unísono en nombre de la Comunidad Universitaria Nacional. Esta reunión no sólo debe contribuir a enunciar las soluciones, sino a precisar planes de acción. No podemos perder más tiempo
II.
A MANERA DE DIAGNÓSTICO
Toda la Comunidad UTEM conoce que durante estos últimos años se ha venido paulatinamente desfigurando
la ubicación y misión específica que le
diera la Ley que creó a la Universidad, a tal punto que ha perdido la posición que había logrado en el concierto de las distintas Casas de Estudios Superiores del Consejo de Rectores. Un hecho que avala lo señalado
es que existen
aspiraciones contradictorias entre los estamentos académico y estudiantil de la misión que debería tener nuestra casa de estudios. Otro ejemplo de lo sostenido lo indica la caída del aporte fiscal indirecto (AFI) que de un sexto lugar en 1998 hoy se está en el veinticinco A su vez no se concluyó el proceso de autoevaluación, que habíamos iniciado con esfuerzo, tan necesario para lograr la acreditación. Acreditación que tampoco se ha logrado después de varios intentos con las serias consecuencias que ello conlleva. Por otra parte, tampoco se ha logrado la transparencia necesaria para disponer de la información necesaria que permita conocer su real situación económica financiera, la que a todas luces aparece como grave y que pondría
5
en gran riesgo su supervivencia y por ende la de sus trabajadores (académicos y funcionarios no académicos) Sirvan esas breves líneas de diagnóstico como preámbulo para el Programa de Gobierno que postulo.
III.
DE LA ORGANIZACIÓN
La actual organización de la UTEM muestra un conjunto de unidades cuyas interacciones son muy escasas, pese a estar ubicadas en Facultades; hecho que genera deficiencias de diverso tipo, pero sobre todo, un grave deterioro en el sentido de pertenencia de sus miembros a una institución común con una identidad propia que la distinga y con fines más generales que las derivadas de las tareas específicas de cada unidad. Si tenemos presente que tanto la estructura de la Universidad como sus mecanismos de gestión no son parámetros permanentes, sino que tienen la condición de medios y como tales son enteramente modificables en función del cumplimiento de los fines académicos
que legitiman a la UTEM, será
imprescindible revisar y modificar Estatutos y Reglamentos, puesto que han permitido la generación de vicios que entorpece un comportamiento democrático jerarquizado, soberano y consecuente de sus académicos, imponiéndose a todo nivel un clima laboral caracterizado por el temor y la inestabilidad, sujetos a la conducta electoral que el académico manifieste, ante Directores de Escuela, Jefes de Carreras y Directores de Departamento que tienden a eternizarse en sus cargos, otorgando prebendas a aquellos que les son más cercanos, dando lugar a una suerte de amistocracia enrarecida -por un
lado- y por otro, a una dependencia humillante que dificulta un
comportamiento realmente universitario. Son vicios que también impiden que se genere una verdadera carrera funcionaria con los correspondientes hitos que es razonable esperar en el desarrollo de todo el personal académico y no académico que confía superarse. En este sentido, somos partidarios que ninguna autoridad unipersonal cuyo nombramiento sea de origen
6
eleccionario pueda ser reelecto más de una vez, incluidos: Rector, Decanos y Consejeros Superiores (representantes del estamento académico,
de los estudiantes y personal no académico).
Para mayor abundamiento, podemos agregar que en estos últimos años hemos sido espectadores y yo diría culpables de cómo se han destruido en el seno de la comunidad académica, estudiantil y administrativa, valores tan fundamentales como la solidaridad, la sustitución de una cultura del saber y del ser por otra del temor y de lo útil; de una cultura que comenzaba a ser democrática por otra autoritaria; de una educación superior que debería ser de formación integral, por una exacerbadamente profesionalizante. La normalización de la Universidad requiere recrear una verdadera institución de educación superior en un llamado a todos los componentes de su comunidad, sin distinción, a participar en la tarea de desarrollar la UTEM en un marco de crecimiento personal e institucional. En este período de normalización adquiere un sentido imperativo, como hemos señalado, replantear la legislación
y estructura universitaria
vigente, respetando la autonomía de los claustros triestamentales, con académicos y estudiantes unidos por el diálogo racional y dedicados a la búsqueda de la verdad y a su transmisión, a la creación artística y con un personal administrativo en estrecha colaboración. Insistimos que, por su naturaleza, nuestra comunidad universitaria debe ser democráticamente jerarquizada. Ello significa que la verdadera fuente de autoridad reside sólo en ella, en el sentido de participación de todos sus miembros en la tarea común, en la elección de sus autoridades y en los organismos donde se adopten las grandes decisiones académicas. Para la concreción de estas aspiraciones, que reflejen la voluntad y el sentir
de
la
comunidad,
debe
dotársele
de
mecanismos
efectivos
de
participación, teniendo presente sí, el criterio orientador: cuanto más cercano al saber disciplinario, más jerarquizado el ejercicio de la participación y cuanto más lejano a dicho saber, debe ser más amplio el ejercicio de la participación. Por otra parte, en el debate universitario, pretendemos que todo integrante de la comunidad pueda expresar en forma libre, soberana y sin
7
temor sus posiciones: por ello somos contrarios a la politización de nuestra casa de estudios, lo cual no significa transformar la política, actividad específica en la vida social, en tema vedado; por el contrario, la Universidad debe constituirse en un espacio en que el diálogo, basado en la rectitud, probidad , franqueza,
consideración objetiva y científica de los problemas,
pueda y deba ser llevado hasta sus cimientos.
IV.
SOBRE EL GOBIERNO INSTITUCIONAL
Después de las experiencias negativas que ha vivido la UTEM, interesa establecer una nueva estructura de Autoridad que permita la más amplia participación de la comunidad en el gobierno universitario, hoy más cerca de obtener que en el pasado, por los impedimentos de la Ley Orgánica Constitucional de Educación (LOCE) en aquel entonces. En este sentido, pensamos que el verdadero problema de organización del gobierno institucional no es buscar la mejor estructura, sino más bien garantizar el carácter dinámico de ella, hacer que le sea posible adaptarse continuamente a los nuevos desafíos culturales, por ello, consecuente con el espíritu democrático que siempre nos ha animado, nuestra acción rectoral estará encaminada a proponer la creación de mecanismos efectivos de participación y diálogo, que permitan que las decisiones trascendentes de la gestión y de las políticas de desarrollo reflejen la voluntad de su comunidad, respetando los valores de los cuales se nutre y se apegue a los principios del derecho. En esta normalización parecería conveniente una estructura compuesta por un gobierno académico para las funciones de gestión (autoridades ejecutivas), junto a un gobierno colectivo de contrapeso cuyo objetivo sea el de diseño de políticas universitarias y de control del gobierno académico. En primera instancia proponemos:
8
-
Instituir la instancia de éste
un
órgano
de
Claustro Universitario, no constituyendo
gobierno,
pero
si
una
instancia
formula
recomendaciones de políticas universitarias al Consejo Superior, aprueba y propone modificación de estatutos al Presidente de la República, elige al Rector y recibe las cuentas de éste y del Consejo Superior o de la instancia que le reemplace. -
Reemplazar el Consejo Superior por un Senado UTEM. Se concibe como un órgano de gobierno representativo de los diferentes miembros de la comunidad universitaria y de los distintos saberes y cuyas funciones
serían:
La
elaboración
de
la
política
universitaria,
la
aprobación o modificación del presupuesto anual, el control de las funciones académicas, la iniciativa para proponer la modificación de los estatutos y reglamentos de la Universidad. -
En cuanto a la Rectoría (Rector, Vicerrectores, Secretario General, Director
Jurídico,
Contralor
Interno
y
Consejo
Académico),
la
entendemos como la instancia encargada de la gestión administrativa y de la puesta en práctica de las decisiones del Senado (Consejo Superior) ante el cual será responsable. Tiene el derecho de la iniciativa, de proponer políticas al Consejo Superior o Senado. El Rector, a su vez, es el jefe académico y administrativo de la institución. Cabría señalar que ninguno de los organismos colegiados deberá interferir en el necesario poder de decisión de las autoridades unipersonales, especialmente en lo relativo a la gestión administrativa. Para todo esto creemos que el elemento fundamental de la vida de la UTEM ha de ser la libertad, ello implica la ausencia de presiones de todo tipo, un ejercicio racional de la autoridad y la convivencia respetuosa de sus miembros.
9
4.1. PARTICIPACIÓN
DE
LOS
ESTAMENTOS
ESTUDIANTIL
Y
ADMINISTRATIVO
En relación al cogobierno, pensamos que debe ser una decisión de la comunidad académica. No obstante, para lograr una comunidad unida por el diálogo racional, debemos considerar la presencia activa de los estudiantes y del personal administrativo en la vida universitaria. En este
sentido,
hemos
sostenido
siempre
que
los
alumnos
y
personal
administrativo deben participar en todos los organismos colegiados por medio de representantes libremente elegidos, con derecho a voz y voto. La voz de estos
estamentos
enriquece
el
debate
universitario
y
además,
esta
participación, en el caso de los alumnos, tiene un nivel formativo insustituible, especialmente de una personalidad democrática y ciudadana. Por su parte, el estamento de los funcionarios administrativos, llamado también personal no académico, tiene gran significación e importancia, dado que sus funciones son imprescindibles
como
apoyo
a
las
labores
académicas,
de
docencia,
investigación y extensión. La participación de quienes laboran en pos de una misma finalidad constituye un derecho básico; tienen mucho que decir sobre la Universidad. Consecuentemente con ello, tienen el derecho de contribuir en todo lo relacionado con estructura organizacional y del gobierno interior que le afecte en su calidad de trabajadores.
V.
ADMINISISTRACIÓN Y DESARROLLO ACADÉMICO
Será necesario redefinir actualizar con precisión en que áreas o temas la UTEM deberá alcanzar un muy alto nivel de excelencia que la distinga del resto del sistema. En este sentido se deberá fijar, mediante la participación real de los académicos y no de modo autoritario, prioridades de
10
desarrollo dentro de las áreas propuestas. Todo de acuerdo con la Misión que el Estado le entregó por Ley de la República. Se hace imperioso e indispensable aprovechar las capacidades de las Facultades, rompiendo la inercia del aislamiento de sus diversas unidades académicas, a fin de desarrollar planes y programas de estudios de la mejor calidad educativa y formativa, que permitan alcanzar niveles de competencia en diferentes
áreas de acuerdo a los intereses, capacidades,
condiciones económicas y sociales de las personas. Es necesario asimismo, flexibilizar normas administrativas y de control, todo lo cual lo revisará el Senado. Es además útil, reconocer –dadas las circunstancias- un cierto nivel
de
calidad
excelencia.
mínimo
Debemos
aceptable,
si
se
pretende
retomar estrategias que permitan
alcanzar la un
desarrollo
una
especial
académico de alto nivel. Es
necesario
también,
intensificar
y
mantener
preocupación por la docencia de pregrado, su equipamiento y calidad. Es fundamental fortalecer la inserción de las ciencias sociales en el quehacer
de
indispensable,
la en
organizacionales
Institución. relación
con
Dentro
de
pregrado,
este
mismo
establecer
contexto, los
es
cambios
que signifiquen retomar la esencia del proyecto de
los ciclos básicos, actualizando las mallas curriculares; ciclos que persiguen la formación de un hombre integral, capaz de enfrentar el futuro, materializando así la educación para toda la vida. Concebimos a la Escuela como una legítima y eficiente alternativa de docencia profesional (ciclo de
especialidad). No obstante, reconocemos
la
importancia del cultivo de la disciplina por los departamentos y a su vez creemos que es necesario articular las disciplinas para aprovechar con mayor eficiencia esa variedad, tanto con fines docentes como de investigación aplicada, asistencia técnica y de extensión. Postulamos asimismo, incrementar los cursos de postítulos, ya que estos proveen
incentivos muy poderosos al mejoramiento de la calidad
11
académica interna, obligan a estar actualizados y posibilitan mejorar la calidad de los egresados.
5.1.
EN RELACIÓN A LOS ACADÉMICOS
Hoy más que nunca consideramos una obligación dignificar a los académicos en todo sentido, darles el respaldo suficiente para que se sientan respetados y puedan obrar en consecuencia, para desterrar, de una vez por todas, el clima laboral que se caracteriza por un miedo irracional. Proponemos: -
Poner en práctica real la carrera académica. Constituye una necesidad impostergable, para avanzar a la excelencia, la que deberá volver a estar ligada a un sistema de ingresos competitivos por concurso de antecedentes y oposición debidamente publicitados, a un sistema de perfeccionamiento y a un sistema de evaluación y calificaciones, estricto pero transparente.
-
Se normalizarán las plantas, esto es, que no puede darse que exista más de un 20% de funcionarios a la contrata. Hoy numerosos académicos y no académicos llevan muchos años en la contrata, lo que no tiene justificación alguna.
-
En el mismo sentido, se propondrá la creación de una planta para los académicos de jornada parcial, a la cual se accederá también por concurso. Su objetivo es que estos docentes no tengan que estar todos los semestres, cualquiera sea su antigüedad prestando servicios a la UTEM, en la incertidumbre si van a ser contratados, lo que los hace, además, muy dependientes de las autoridades de turno, situación que desde nuestro punto de vista es denigrante, por decir lo menos.
-
Para las nuevas contrataciones se volverán a revisar las normas de jerarquización para que ellas sean justas, transparentes y flexibles, que consideren las diferencias del quehacer académico favoreciendo una vida académica de calidad. Que en un futuro próximo, sean comparables
12
con el sistema
existente
en otras
universidades del Consejo de
Rectores. -
En relación a las remuneraciones, una vez solucionada la situación de crisis que vive la UTEM, se abordará, como ya lo hicimos una vez, el problema de los sueldos, a objeto de implementar un régimen de remuneraciones basado en conceptos de justicia, objetividad y realismo, que permitan al docente hacer el trabajo tranquilo y con dedicación sin sobresaltos a las tareas que le son propias.
-
Se propondrán tres tipos de nombramientos: a) Dedicación exclusiva b) Dedicación normal c) Jornada profesional - Se revisarán las normas sobre el Semestre Sabático para hacerlas extensivas también a los profesores de jerarquía Asociados y a su vez prolongarlas a un año.
-
Se normará en relación a la carga docente, para llegar a estándares compatibles con los niveles usuales
universitarios; teniendo presente
que el contrato académico contempla también otras actividades además de la docencia. -
Buscaremos la estrategia
para que se pueda jubilar en buena
forma. Al respecto seremos altamente responsables con el manejo de los fondos previsionales y de salud, para que no suceda más lo que hemos tenido que sufrir durante estos últimos años. Por ello, una de las tareas urgentes a abordar es poner al día las imposiciones de AFPs, INP e de Isapres.
VI.
INVESTIGACIÓN
La creación de conocimiento constituye una responsabilidad para toda universidad. De hecho, las universidades en que la actividad de investigación
13
se realiza con mayor intensidad están en situación de privilegio para entregar una mejor formación profesional, dado que lo hacen con una docencia de mayor excelencia. En gran medida esto se debe también a que permiten el acceso directo del estudiante al conocimiento y ello los incentiva para sentirse partícipes de la tarea de creación de conocimiento. Por el contrario, la ausencia de investigación o debilidad en este tipo de tareas, conduce a una docencia de carácter repetitiva y rutinaria que tiende a desmotivar al estudiante, y naturalmente la formación que se entrega no es actualizada, por lo que la tarea de investigación debe ser entendida como una labor fundamental y por ello debe ser reconocida e impulsada. En este aspecto, nuestra universidad debe llegar a ser reconocida y prestigiada por desarrollar investigación aplicada de punta, en las áreas
del
conocimiento que sean determinadas prioritarias y por su compromiso con la transmisión del conocimiento adquirido en esas áreas. En esta materia, redoblaremos esfuerzos, tanto en organización, en infraestructura física, equipamiento, laboratorios, personal de apoyo,
biblioteca,
redes
informáticas,
como
en
contratación
de
académicos especialistas, mediante concursos, otorgando facilidades para el desarrollo académico tendiente a conformar un cuerpo de investigadores
que
permitan
incrementar
el
número,
calidad
y
pertinencia de los proyectos que se ejecuten, lo que debería traducirse en un incremento significativo del número de publicaciones ISI y mejor aún, la obtención de patentes. Para ello se establecerá un porcentaje del gasto en investigación, que más que gasto es inversión. Lo anterior requiere de una política adecuada de asignación de recursos, unida a una política de búsqueda y captación de recursos externos por vía de concurso y a través de convenios tanto nacionales como internacionales. Deberemos además, superar categóricamente la etapa en que la investigación
se
realiza
por
iniciativas
individuales
oportunidades externas y para ello se requiere:
y determinada por
14
-
que
los
Departamentos
asuman
su
responsabilidad
esencial
de
investigación aplicada, desarrollo e innovación en las áreas disciplinarias de su competencia. -
que los académicos tengan la formación adecuada para abordar tareas de investigación y además cuenten con adecuadas descargas horarias docentes, para
-
acometer esta importante tarea.
mantener un apoyo temporal a quienes acceden a grados académicos para facilitarles su inserción en la comunidad científica.
-
tener un contacto permanente con los sectores
sociales y productivos.
En este aspecto, se contemplarán mecanismos especiales para la contratación de personal altamente calificado, para atender áreas determinadas prioritarias por la corporación y también para reemplazos temporales y selectivos y para absorber la carga académica de becarios postgraduantes. La Universidad, incrementará los programas internos destinados a proyectos
de
investigación,
en
la
medida
que
sea
posible,
con
financiamiento por concurso. En general, la actividad de investigación aplicada será incentivada, promoviendo y premiando la constitución de grupos multidisciplinarios (interdisciplinarios)
en
áreas
declaradas
prioritarias.
(Medioambiente,
agroindustria, urbanismo, áreas sociales, etc.) La Universidad, a su vez, hará esfuerzos por constituir y consolidar grupos de investigadores de alta productividad científica para que se proyecten como líderes en sus áreas de investigación aplicada. A estos esfuerzos
se
sumará
el
apoyo
para
renovación
o
incremento
de
instrumental y equipo necesario, así como para estadías sabáticas, intercambio, estadías cortas de investigación, invitación a científicos y perfeccionamiento al personal técnico que contribuye a la ejecución de proyectos.
15
Una vez constituidos y en operación los grupos de investigadores, se estimulará la participación y desarrollo de programas de diplomados y de tercer grado. Sin duda existen claras oportunidades para que la Universidad tenga un fuerte desarrollo de la investigación aplicada, pero para ello debemos remover los obstáculos existentes, como ya lo hemos dicho. En tal sentido, será obligación de los Departamentos preparar programas y proyectos de investigación aplicada y básica cuando así lo ameriten, analizarlos y discutirlos colectivamente, priorizarlos y definir las fuentes de financiamiento a las que debe acudirse, efectuar seguimiento
de los proyectos en ejecución y tener
reuniones de evaluación para conocer los avances de cada proyecto, en actitud de colaboración con los investigadores responsables. El órgano de Dirección de Investigación deberá promover la formación de grupos multidisciplinarios para la apertura y desarrollo de líneas temáticas de investigación que se sustenten a partir de uno o varios proyectos de investigación. La Dirección de Relaciones Internacionales y la unidad de Investigación, a su vez, cooperarán activamente en promover y fortalecer la vinculación de investigadores de la Universidad con pares de otros centros de investigación y en la preparación y postulación de proyectos en conjunto con esos países. a los participantes en estos programas y/o proyectos se procurará otorgarles incentivos monetarios. Esto último hará que se procure mantener un fondo de contraparte que facilite el acceso a fuentes concursables externas y por ello la ejecución misma de los proyectos. Como política de difusión de los resultados de investigación, se indica que toda investigación debe dar origen a una o más publicaciones en que se precisen sus objetivos y alcances y los resultados alcanzados. La Universidad asegurará la publicación de los textos a que den origen las investigaciones, previo los controles de calidad correspondiente.
16
VII. AUTOEVALUACIÓN Y ACREDITACIÓN
Abordaremos
con urgencia estas dos tareas pendientes que
tiene la Universidad tanto a nivel de las carreras profesionales y programas de postgrado que ofrece y ofrecerá, como también a nivel institucional, para lograr posesionarse y legitimarse en el contexto universitario nacional. Por su parte, la autoevaluación es un proceso eminentemente participativo y permanente, que tiene como propósito identificar con exactitud
nuestras fortalezas y debilidades institucionales para proponer
alternativas de aseguramiento de la calidad y pertinencia académica. La acreditación, resultado del proceso de autoevaluación permanente, es un requisito fundamental cuya misión
es certificar el cumplimiento del
proyecto institucional y su condición de calidad, rol que cumple el Estado como garante de la fe pública. De manera que la Acreditación permite informar a los postulantes, estudiantes, familias, a las empresas
y organismos del Estado,
las características y el desarrollo de las instituciones. No escapará a los integrantes de la UTEM
la importancia que para
nosotros reviste el lograr la acreditación, necesaria además, para evitar las deserciones, fortalecer la permanencia y demanda estudiantiles y para tener acceso a fuentes de financiamiento del Estado. En este aspecto tendremos en cuenta los informes de la CNAP y de la CNA a objeto de corregir aquellas observaciones que se han indicado para sustentar la no acreditación.
VIII. ELEMENTOS FINANCIEROS
Este es un tema sumamente delicado y que va a requerir de toda la experiencia que en este campo tenemos. No olvidemos que logramos salir de una crisis similar en una época anterior.
17
Una vez transparentada la real situación por la que atraviesa la UTEM deberemos poner en práctica la estrategia de financiamiento adecuada y estable que contenga diversos componentes y mecanismos respecto de los cuales será necesario establecer políticas definidas; las que deberán ser conocidas y discutidas por todos de modo de traducirlas y adaptarlas a las realidades de cada unidad. La elaboración de esta estrategia conlleva no sólo la decisión de la autoridad y la comunidad sino que además, disponer de una información transparente y confiable en toda la institución, que facilite la obtención de los recursos correspondientes para hacer frente a las obligaciones pendientes en condiciones más favorables. Será prioritario lograr de las autoridades de Gobierno un aporte fiscal sustantivo y estable, sin perjuicio
de buscar otras vías fuentes de recursos,
tales como: proyectos especiales presentados a organismos nacionales y extranjeros, donaciones, exenciones tributarias de industrias que en conjunto con las propias, tales como: realización de programas o proyectos de beneficio para el país, la venta de servicios y el pago de matrículas y aranceles por parte de los estudiantes, puedan allegar recursos, de manera que nuestra casa de estudios logre programar efectivamente su desarrollo. En cuanto al sistema financiero como fuente de recursos al cual la Universidad puede acudir, sobre la base de licitaciones serán elegidas las mejores opciones para la UTEM. El financiamiento tendrá tres destinos prioritarios: -
Servicio de la deuda existente para recuperar la solvencia necesaria que nos permita obtener condiciones de ayuda financiera de menor costo. Recuperar nuestro nivel de clasificación frente al sistema bancario, como ya lo logramos una vez.
-
Gastos de operaciones en el que necesariamente destacan políticas de personal y remuneraciones.
-
Gastos de equipamiento académico y lo que se requiera de planta física, para cumplir con nuestra meta de acreditación de la UTEM.
18
IX.
POLÍTICAS DE TRANSFERENCIA TECNOLÓGICA, DE EXTENSIÓN Y ASISTENCIA TÉCNICA
Buscamos una Universidad inserta en la sociedad, vinculada con las empresas productivas e instituciones financieras. Independiente, pero relacionada con las instancias del poder, con capacidad creadora, con una amplia y actualizada oferta curricular, con estudiantes de todas las edades. Una Universidad que favorezca la movilidad de sus profesores y alumnos mediante eficientes acuerdos interinstitucionales y de cooperación, con centros y organismos tanto nacionales como subregionales e internacionales. En este sentido replantearemos
los objetivos y funciones de la
Vicerrectoría de Transferencia Tecnológica, unidad que fue creada e impulsada durante nuestro Gobierno Universitario, que lamentablemente no ha logrado internalizar en su totalidad la misión que se esperaba
de ella:
propagadora del conocimiento, incluyendo en su quehacer todas aquellas acciones encaminadas a transferirlo a los sectores productivos y sociales, sean públicos o privados y que demanden su aplicación a situaciones o problemas concretos planteados. Debe orientarse prioritariamente a captar de recursos de diferentes tipos para la UTEM. Entre otras acciones deberá preocuparse por: -
Promover los principios que formularon los creadores de políticas de extensión universitaria, en el sentido que son de competencia y responsabilidad de las unidades académicas y en especial a sus académicos, las labores de extensión, puesto que lo que se debe extender es el resultado del trabajo de éstos, por tanto debe radicar en ellos su desarrollo.
-
Replantear las políticas de extensión, democratizando esta actividad académica,
haciéndola
más
participativa,
otorgando
a
todos
los
académicos las mismas oportunidades de integrarse a programas de extensión y acercándola más a la misión social que debe asumir la UTEM
19
-
Proyectar la imagen de nuestra casa de estudios hacia la comunidad y reflejar ésta en aquella. Misión que implica una constante investigación y análisis de las necesidades y requerimientos de la comunidad.
-
Establecer una estrecha vinculación con las unidades académicas y sus miembros desde un punto de vista estamentario y estructural facilitando a
profesores,
investigadores,
alumnos
y
administrativos
diversos
servicios que les permitan desarrollar sus propias tareas de extensión. -
Lograr una presencia significativa de la UTEM en el debate cultural, científico y tecnológico
del país, proyectando una imagen singular de
todas sus actuaciones -
Fortalecer la acción de asistencia técnica, prestaciones de servicios y/o transferencia tecnológica, aprovechando las capacidades académicas, y los resultados de la investigación aplicada del tipo I&D&I (Investigación, Desarrollo, Innovación) y la infraestructura existente para hacerla más efectiva, actividades todas que requieren
de la formación de grupos
multidisciplinarios del tipo U&D. Similares
al CEDETAI, CEDETEMA y
CEDESOC que fueron generados e impulsados durante nuestra gestión rectoral. -
Generar, paralelamente, incubadoras de empresas a nivel de las Facultades.
X.
POLÍTICAS DE DESARROLLO ESTUDIANTIL
Lo más peligroso de todo en el momento actual es que en lugar de ofrecer a la juventud horizontes de superación y de participación -en lugar de ilusiones y disconformidad- les pidamos que acepten los hechos como irremediables y nos hagamos cómplices de su desencanto. Cuando mitigamos rebeldía y discrepancias en la juventud, lo que estamos haciendo es aplazar los momentos en que tengamos
que trabajar
unidos para alcanzar situaciones más adecuadas a la dignidad del ser humano.
20
Es éticamente exigible que todos los que puedan se unan y levanten sus voces, aun a riesgo de no ser escuchados, teniendo el coraje de decirle a la juventud que las ventajas y la certeza no forman ya parte del presente. Las promesas de seguridad y estabilidad son palabras ligeras en momentos de cambios, en que deben asumir riesgos con valentía, imaginación y creatividad. Pero a la vez hay que demostrar también que tenemos soluciones y que se puede construir un mañana diferente. El estudiante es el centro del trabajo formativo de la Universidad. Su desarrollo personal, su formación ética, profesional y científica representa su principal responsabilidad con la sociedad. La UTEM debe organizar su trabajo formativo de manera de satisfacer, en la medida de sus posibilidades, las demandas y expectativas del estudiante. El personal tanto académico como no académico debe máxima consideración a cada persona-estudiante, contribuyendo al alcance de sus metas que son las nuestras. Debemos reencantar a nuestros estudiantes La UTEM debe destacarse por ofrecer un clima de hospitalidad y estímulo al estudiante que recibe, por permitir la expresión libre de sus inquietudes juveniles en un ambiente de respeto recíproco de tolerancia y activa adhesión a los valores y misión que le son propios. En este sentido, se procurará lograr que la organización estudiantil se caracterice por practicar los valores democráticos, el respeto a todos
sus
miembros, la voluntad de cooperar por el prestigio y desarrollo de su Universidad. Esto lo lograremos con la participación plena de los estudiantes. Al respecto, pretendemos el reconocimiento del derecho soberano de los estudiantes a organizarse en la forma que ellos definan, para la expresión, promoción y defensa de sus intereses gremiales. Asimismo, promoveremos la participación de los estudiantes en las distintas instancias de decisión y gestión sobre asuntos académicos y de bienestar que los involucren. Para ello, estimamos indispensable la existencia de la organización que los agrupe y goce del respaldo de la totalidad del estudiantado, de manera que los represente plenamente, sin intervenciones de
21
cualquier tipo, por parte de las autoridades de la Universidad que tiendan a coartar su independencia. El contar con una organización estudiantil estable y con respaldo permite desarrollar en forma conjunta programas que incorporen a los estudiantes a actividades de la vida UTEM, consolidando una rica integración y convivencia de la comunidad.
En relación al compromiso
de aranceles por parte de los estudiantes,
aun cuando somos partidarios de la educación pública, haremos
primar los
siguientes criterios.
-
Nadie debe pagar más de lo que cuesta su educación.
-
Nadie debe pagar menos de lo que está en condiciones de pagar.
Deberemos separar el Crédito Institucional del Fondo Solidario, a objeto de hacerlo más transparente y que el estudiante distinga su compromiso con el Estado,
de
su
compromiso
con
la UTEM
y
por lo
tanto,
asuma
la
responsabilidad que tiene: primero de recibirse y segundo de devolver la ayuda obtenida, pagando oportunamente sus obligaciones para facilitar que otros puedan también estudiar.
XI.
EN RELACIÓN AL PERSONAL ADMINISTRATIVO
Consecuente con lo que hemos señalado, consultamos las siguientes proposiciones.
-
Actualizar de la planta de funcionarios no académicos, según lo consignado en el Estatuto Administrativo en relación a los porcentajes de personal de planta (80%) y personal a contrata (20%)
22
-
Proveer los cargos a través de concursos internos y externos según corresponda. Creación de una Comisión de Concurso, con participación de un representante por escalafón.
-
Eliminar de los contratos
la frase “hasta que sus servicios sean
necesarios”. -
Activar los mecanismos de capacitación y estímulo para el mejoramiento del desempeño funcionario.
-
Restituir los beneficios perdidos, como la entrega de uniformes, becas de alimentos y reajustabilidad de los sueldos y asignación de estímulo de acuerdo al IPC.
-
Cumplir con lo establecido en la Ley, referente al pago de imposiciones y de cotizaciones legales.
-
Revisar el tema de la Sala Cuna, en relación a la posibilidad que las mamás elijan entre contratar el servicio que por ley les corresponde, o bien, otorgar a la funcionaria el dinero correspondiente a este fin sea destinado a pagar el salario de una cuidadora.
-
Poner en funcionamiento una comisión triestamental para corregir deficiencias en los reglamentos vigentes.
-
Contemplar la posibilidad de una mayor participación de este estamento con derecho a voz y voto.
-
Crear e implementar una carrera
funcionaria, sobre la base de la
experiencia, el rendimiento y el perfeccionamiento administrativo, con estímulos salariales.
23
XII. PALABRAS FINALES
Somos reiterativos en sostener que
aquellas instituciones que sean
capaces de reexaminar su posición y adoptar nuevas actitudes de cara al porvenir, serán las únicas que podrán sobrevivir y ofrecer a la sociedad egresados preparados en la docencia y en el ejercicio de especialidades, preparados intelectualmente para ofrecer nuevos enfoques. Nuestro objetivo es que la Universidad
juegue un papel importante y decisivo en la
construcción del futuro.
Es urgente retomar la motivación académica, de modo de vitalizar y fortalecer los vínculos con la sociedad en todo su espectro de funciones.
Particularmente, visualizamos a la UTEM recuperando y redefiniendo un espacio que le sea propio dentro del concierto universitario, especialmente dentro de las universidades públicas, comprometida con el sector productivo nacional.
Dentro de esta acción, deberemos
fortalecer las ciencias básicas, las
ciencias sociales, las humanidades, las tecnologías y las artes, a fin de dar profundidad a nuestro quehacer, favoreciendo una formación integral de nuestros egresados.
Han transcurrido nueve años, se han aprendido muchas lecciones, como ya dijimos, algunas muy dolorosas, no hay más que observar la situación deplorable en que se encuentra la UTEM. Por motivos de sobrevivencia institucional, y por ello personal, no podemos darnos el lujo de entregar nuestra soberanía a quienes creen tener la voluntad de superar esta etapa, pero no reúnen la experiencia y los conocimientos necesarios para liderar la etapa que viene: normalizar, recuperar la solvencia y prestigio que un día
24
construimos. Es el momento de establecer las bases para forjar una nueva y renovada UTEM.
Estamos ciertos que con la suma de las voluntades, sin distinción ni animosidades, que integran nuestra Casa de Estudios, enmarcados en las políticas que logremos consensuar a partir de este Programa de Gobierno Universitario que nos permitimos proponer, susceptible de ser mejorado y enriquecido, será menos dificultoso alcanzar la meta de convertir a la UTEM en una universidad moderna, exitosa, con capacidad de
dar respuesta a los
grandes problemas, relacionados con áreas de su competencia, que afectan y afectarán a la Nación.
ADELANTE UTEM ADELANTE
AHORA ES TU RESPONSABILIDAD
SABEMOS COMO HACERLO
CONTIGO ES POSIBLE
Con el mayor de los afectos, Nuestro Compromiso.
LUIS PINTO FAVERIO