Trabajo Práctico N° 1 Problemática Psicológica
Universidad Nacional de Rosario-Facultad de Humanidades y Artes. Profesora: Gabriela Carletti. Alumnas: Camila Lewis, Malena Pedrocco, Lucia Galván, Victoria Dubertrand. Año 2018
Consignas: 1) ¿Cuál es la importancia del sueño en la obra de Sigmund Freud? 2) ¿Qué es el sueño o que representa? ¿Cuáles son sus mecanismos? 3) Relatar el sueño del tío José.
1) El sueño es fundamental en la obra de Sigmund Freud debido a que a partir de este fenómeno, el cual atravesamos todos los sujetos, explica los mecanismos del inconsciente. En el análisis de los sueños se encuentra la vía real del inconsciente, los sueños son el camino para llegar a él. Freud descubrirá, a su vez, que es el mejor medio para llegar al conocimiento de los pensamientos de un paciente, le servirá para conocer y teorizar acerca del inconsciente y será una prueba para convencer a los lectores escépticos del psicoanálisis, de la existencia efectiva de este. 2) Freud define al sueño como un deseo inconsciente infantil, despertado por un deseo actual, este se “transfiere” sobre un pensamiento considerado normal y lo transporta hacia el inconsciente donde queda expuesto a las “leyes del proceso primario”: Este pensamiento se transforma en percepción debido a que, a la vez que se realizaba el proceso anterior, se dirige hacia extremo del aparato psíquico. El trabajo del sueño se realiza cuando, por vía alucinatoria, se cumple un deseo que se eleva desde los pensamientos oníricos. Todo sueño posee un sentido; su singularidad procede de las deformaciones que ha sufrido la expresión del mismo. Lo que se recuerda del sueño al despertar es el contenido manifiesto. Cuando se interpreta el contenido manifiesto de un sueño, se presentan las ideas latentes que se encontraban ocultas. Estas ideas latentes no son ya singulares, ni son incoherentes, pasan a ser elementos con significado, que tienen una forma verbal. Freud recurre a la comparación con los jeroglíficos, las imágenes que se presentan no tienen relación con su significado, por lo tanto, el sueño debe ser interpretado como la representación en imágenes de las palabras mismas. El proceso explicado anteriormente que transformó las ideas latentes en contenido manifiesto se denomina como elaboración del sueño, y es el que lleva a cabo la deformación, a consecuencia de la cual no reconocemos ya en el contenido del sueño las ideas del mismo. Pueden producirse además otros mecanismos como la condensación, que transforma varias ideas del sueño en una sola imagen del contenido manifiesto y el desplazamiento, que reemplaza un término por otro.
3) Freud y su colega R. fueron propuestos como profesores honorarios, pero ambos tenían pocas posibilidades de ganar el puesto. A partir de esto, Freud tuvo el siguiente sueño: I) Mi amigo R. era mi tío. Siento por el gran cariño. II) Ante mi veo su rostro un poco cambiado. Parece alargado. Se ve con nitidez una barba rubia que lo enmarca.
La primera reacción de Freud al despertarse la mañana siguiente de haberlo soñado, fue no darle demasiada importancia, pensar que era un sueño “absurdo”. Luego, se da cuenta que esta primera reacción podía tratarse de una resistencia, por lo que decide analizar dicho sueño. Comienza así a realizar análisis, tomando en consideración cada fragmento del contenido manifiesto. Empieza por pensar qué asociaciones puede entablar sobre los elementos soñados. Llega a revelar los dos mecanismos del proceso del sueño: la condensación (el rostro del sueño y el color de la barba son una combinación de R. y José) y el desplazamiento (la importancia que tiene la barba en el sueño). A través de la asociación va recordando hechos y situaciones de su pasado; como que su tío fue penado por haber cometido un delito, una conversación que mantuvo con otro colega, que este último le ha contado que una vez fue perseguido por la justicia. Y así llega a otro mecanismo de condensación: su tío representa a ambos colegas, uno bajo la forma de la estupidez y el otro como un criminal. Llega de este modo a una primera interpretación, que es su deseo de que las razones de los fracasos de sus colegas no sean aplicables a su persona. Pero el análisis del sueño no termina allí. Freud comprende que este deseo de ser nombrado profesor no parecía tan grande como para justificar semejantes distorsiones. Por lo que continúa asociando hasta llegar a otros recuerdos; recuerda así cuando le contaron que de niño un campesino profetizo que algún día sería un gran hombre, y que cuando fue un poco mayor, otro predijo que sería primer ministro. Esto, sumado a su tradición familiar, le trae a la memoria cuando al iniciar sus estudias vacilaba si estudiar medicina o derecho. Recordando así anhelos del pasado, se da cuenta que lo que el sueño intenta realizar es un deseo más antiguo, el deseo infantil reprimido en el inconsciente, que ha sido transformado a través del “proceso primario”.
Bibliografía: Mannoni, O.: La vía real (cap.3) en El descubrimiento del Inconsciente. Ed. Amorrortu, 1987, Bs. As.