MANUAL DE GESTION AMBIENTAL EN EL SECTOR AGROPECUARIO
Cosuelo Urbano Tibaduiza. Fundación Universitaria de Sangil_Unisangil, Programa de Ingeniería Ambiental, Economía Ambiental, Mayo de 2009.
1. Introducción El concepto de gestión ambiental surge en la época de los setenta cuando se empieza a entender que el origen de los problemas ambientales se encuentran en las estructuras económicas y productivas de la economía, y que los principales problemas medioambientales tienen su origen en los procesos productivos mal planificados y gestionados y se define como un conjunto de técnicas que buscan como propósito fundamental un manejo de los asuntos humanos de forma que sea posible un sistema de vida en armonía con la naturaleza, principalmente mediante la transformación de sistemas productivos como estrategia para lograr una mejora integral del medio ambiente y acelerar la conciencia ecológica de la sociedad. A partir de esta contextualización mundial a cerca del tema ambiental se genera una serie de eventos enmarcados en la búsqueda de herramientas constitucionales que permita a los países ejecutar actividades en pro de mitigar desastres ambientales. Desde entonces, la vulnerabilidad del Planeta ha sido denunciada por los movimientos socioculturales, principalmente los de orientación ecológica y ambiental desde hace varias décadas lo cual ha logrado inspirar el concepto de desarrollo sostenible para moldear un nuevo paradigma de desarrollo (Fernández 2001). Sin embargo, mucho se ha hablado a cerca del manejo sostenible del medio ambiente y algunos países han trabajado muy poco en ello a pesar de tener herramientas lo suficientemente claras que se han generado a partir de cumbres internacionales, como la Cumbre de Río realizada en 1992, no obstante, no ha sido suficiente para establecer este paradigma de desarrollo en todos las sociedades. La mayoría de las iniciativas concretas en la dirección de una gestión ambiental que garantice un desarrollo sostenible, ocurren más en los países en desarrollo que en los desarrollados, los países con el mayor número de corporaciones transnacionales están adoptando más los dictámenes de la nueva revolución económica que los principios de la revolución sociocultural; Por ejemplo, los Estados Unidos todavía no han firmado la Convención de la Biodiversidad, atendiendo a la presión de sus corporaciones transnacionales, que buscan el acceso libre a la biodiversidad de los países tropicales sin asumir responsabilidades con su conservación (Fernández 2001). En la economía inmaterial, la dependencia por ciertas materias-primas naturales disminuye drásticamente, por tanto el desarrollo sostenible se queda como una responsabilidad de los que dependen de la economía productiva, mientras recibe la indiferencia de los actores más comprometidos con la economía virtual. Sin embargo, hasta ahora los objetivos de la
revolución económica y de la revolución tecnológica continúan prevaleciendo sobre las propuestas derivadas de la revolución sociocultural (Busch et al. 1991). En este sentido, todas las empresas pequeñas o medianas deben implementar en su sistema de producción las llamadas “Buenas Prácticas de Gestión Empresarial” las cuales buscan tomar acciones para evitar consecuencias negativas en el interior de las empresas, esto se realiza a través medidas de fácil aplicación que los empresarios pueden adoptar para aumentar la productividad, bajar los costos, reducir el impacto ambiental de la producción, mejorar el proceso productivo y la Seguridad del trabajo y protección de la salud laboral. Las Buenas Prácticas de Gestión Empresarial (BGE) que están enmarcadas en los propósitos de la gestión ambiental, comprenden una serie de medidas cuyo objetivo es evitar la pérdida de materia prima, reducir la cantidad de residuos, ahorrar energía, mejorar los procesos productivos, la organización de la producción y tener en cuenta la racionalidad de los recursos naturales (Burch et al. 1996). La gestión ambiental pretende reducir al mínimo nuestras intrusiones en los diversos ecosistemas, elevar al máximo las posibilidades de supervivencia de todas las formas de vida, por muy pequeñas e insignificantes que resulten desde nuestro punto de vista, y no por una especie de magnanimidad por las criaturas más débiles, sino por verdadera humildad intelectual, por reconocer que no sabemos realmente lo que la perdida de cualquier especie viviente puede significar para el equilibrio biológico (Busch et al. 1981). La gestión del medio ambiente implica la interrelación con múltiples ciencias, en donde hay una ínter y transdisciplinariedad para poder abordar las problemáticas teniendo en cuenta que la gestión del ambiente, tiene que ver con las ciencias sociales (economía, sociología), con el ámbito de las ciencias naturales (geología, biología, química,) y con la gestión de empresas (Burch et al. 1996). Finalmente, es posible decir que la gestión del medio ambiente tiene dos áreas básicas de aplicación: Un área preventiva donde las Evaluaciones de Impacto Ambiental constituyen una herramienta eficaz y un área correctiva donde las Auditorias Ambientales conforman la metodología de análisis y acción para subsanar los problemas existentes. 2. Objetivos 2.1. Objetivo General Analizar y entender el manual de Gestión Ambiental en el sector Agropecuario. 2.2.
Objetivos Específicos
Conocer los objetivos del Manual de Gestión Ambiental del sector Agropecuario. Interpretar el contexto político-legal en el cual se enmarca la política ambiental del Manual de Gestión Ambiental. Conocer el marco legal Colombiano del Manual de Gestión Ambiental en el sector Agropecuario.
3. Marco Teórico En la actualidad, el fuerte crecimiento de la producción agrícola, la innovación tecnológica y el contexto económico global favorable a la expansión de la producción primaria y la fuerte expansión del complejo agroindustrial, son factores que han puesto inexorablemente a las cuestiones ambientales en un sitio central para el sector, por tanto es imposible no analizar con detenimiento los efectos ambientales que se asocian con la expansión de fronteras agrícolas en aquellas regiones del país que son áreas de crecimiento y actividad. Por otra parte, la creciente inserción del complejo agro-industrial en el mercado global, trae aparejado la necesidad de incorporar las variables ambientales que ocupan un sitio de creciente importancia en políticas agroindustriales. Problemática Ambiental en el sector Agropecuario En este tema existen varios factores complejos de analizar y contextualizar y no solo comprende factores físicos, biológicos, sociales y culturales, si no que hay un fuerte componente de intereses y una participación decisiva del mercado. Esto crea sin duda, la necesidad de reorganizar interdisciplinariamente las ciencias para definir nuevos enfoques de sustentabilidad. Algunos investigadores consideran que el crecimiento poblacional es el mayor problema ambiental seguido de la pérdida de biodiversidad, estos dos factores tienen una estrecha relación con la producción agropecuaria: producir más para alimentar a una población mundial que crece. En la década de los ’90, el sector industrial comenzó a mostrar un incipiente interés en incluir la gestión ambiental en la gestión general de la empresa. Actualmente la mira está puesta también en las actividades primarias ya que los agro-ecosistemas en muchos casos, se han transformado de sistemas domesticados que estaban en relativa armonía con el medio ambiente a ecosistemas “fabricados” que cada vez se parecen más a los sistemas industriales, en cuanto a sus requerimientos energéticos de materiales y en su producción de residuos. Es aquí donde la ISO 14000, puede ser la herramienta para trabajar en gestiones ambientales en el sector agropecuario; a pesar de las transformaciones del sector, la implementación de esta norma, debe tener en cuenta las características propias del mismo. Al ser la norma más implementada para gestión ambiental, se considera como la más adecuada, ya que va a permitir unificar criterios de certificación más rápidamente. La metodología propia de la ISO 14000, se incorporó el la elaboración de protocolos y manuales utilizados en la producción Agrícola, como herramienta fundamental en el diagnóstico inicial y durante el monitoreo ambiental de la producción, en busca de lograr una planificación productiva desde lo ecológico que implica conceptualizar al medio ambiente no solamente desde su aspecto natural sino también desde sus aspectos artificiales y requiere detectar los impactos presentes y futuros.
Manual de Gestión Ambiental en el Sector Agropecuario Este manual se construye bajo la reglamentación legal consignada en la constitución de 1991 la cual es la base constitucional fundamental del Código de Recursos Naturales. Una de las principales argumentaciones a la planificación de este manual de gestión es la alta carga contaminante de residuos procedentes de las distintas prácticas agrícolas, que constituyen alteraciones ambientales contempladas en las legislaciones ambientales de algunos países y que han dado lugar a la promulgación de la Directiva 676 de 1991 sobre la protección de las aguas de la contaminación. En este caso la gestión del sector agropecuario esta constituida por un conjunto de operaciones encaminadas a dar a los residuos Agropecuarios el destino más adecuado, así pues, la gestión esta determinada por varios parámetros como características de los residuos, volúmenes, posibilidades de reutilización y costos de tratamientos entre otros, además por la normatividad y reglamentación de la entidad local reguladora que a su vez cumple directrices del Ministerio Nacional. Objetivos Básicos de La Gestión Producción autosostenible en la medida que se realice aprovechamiento racional de los recursos naturales. Minimizar la generación de residuos Maximizar la valoración de la materia prima para la producción, teniendo en cuenta el aprovechamiento y reciclaje de la misma. Realizar aprovechamiento sostenible de los recursos naturales. Proteger las fuentes de recursos naturales como acuíferos y bosques. Controlar los vertimientos de residuos. Controlar los deterioros ambientales como consecuencia de las prácticas Agrícolas. Optimizar los costos de producción y tratamientos de las prácticas Agrícolas. Caracterización y cuantificación del déficit ambiental del sector. Criterios de producción Cada uno de los subsectores del sector agropecuario presenta un manual de gestión específico donde contempla los planes de acción en cada una de los procesos de producción y desde luego tienen un fundamento legal constitucional y una normatividad reguladora de la producción. Fortalezas Marco legal bien definido para la gestión ambiental. Se dispone de una significativa cooperación internacional en áreas claves para su actividad y la gestión ambiental .Una cartera de aliados estratégicos del sector público y privado Oportunidades
Los sectores agropecuario y forestal y la reactivación de los mismos constituyen una clara prioridad para el Gobierno y la sociedad. Existen espacios para propiciar la formulación de políticas agropecuarias y forestales, así como estrategias que incluyan el enfoque ambiental y socioeconómico a mediano y largo plazo. La apertura de nuevos mercados con particular interés en los productos no tradicionales del sector agropecuario y forestal. Debilidades Falta de capacitación y especialización de los recursos humanos para formular políticas estratégicas para el desarrollo agropecuario sostenible con dimensión ambiental y sectorial. Contradicción entre la necesidad de crecimiento económico en el corto plazo y la conservación del medio ambiente No existe coherencia y consistencia entre la normatividad y las actividades ejecutadas en este sector. Carencia de recursos económicos para el desarrollo de gestión ambiental institucional. Poca integración de las diferentes Dependencias del Ministerio a nivel de Dirección, Técnico y Administrativo en la solución a la problemática ambiental. La falta de adopción e internalización del componente ambiental en la política nacional del sector agropecuario. Amenazas La actitud de productores y técnicos de implementar desarrollo agropecuario y forestal sin la dimensión ambiental ni de desarrollo sostenible. Falta de Institucionalidad Ambiental en el sector agropecuario y forestal. Marco legal En Colombia, con anterioridad a la promulgación del Código Nacional de Recursos Naturales Renovables y del Ambiente, un considerable número de normas fueron emitidas para ir limitando paulatinamente la destrucción de los ecosistemas naturales. Con la expedición del Código de Recursos Naturales Renovables (Decreto Ley 2811 de 1974), se provee de manera general el marco para la administración, protección, aprovechamiento y comercio de recursos naturales especialmente de fauna silvestre. En un sentido amplio, esta norma establece, además, una protección adicional del recurso al definir el Sistema Nacional de Parques Nacionales Naturales, entre cuyas finalidades se cuenta el mantenimiento de la diversidad biológica y estabilidad ecológica mediante un régimen especial de manejo. Para estas últimas y particularmente en lo concerniente a recursos pesqueros, el gobierno colombiano expidió el Estatuto General de Pesca (Ley 13 de 1990), reglamentado por el Decreto 2256 de 1991, normas por medio de las cuales se regula el manejo integral y la explotación racional de los recursos pesqueros con el fin de asegurar su aprovechamiento sostenible.
Adicionalmente, se han venido dictando nuevas leyes en esta materia, entre las cuales cabe destacar la Ley 17 de 1981, por la cual se aprueba la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), y la Ley 84 de 1989, por la cual se adopta el Estatuto Nacional de Protección de los Animales. Con la consagración de los Derechos Colectivos y del Ambiente en la Constitución de 1991 (Art. 80) y del Desarrollo Sostenible en la Cumbre de la Tierra, celebrada en Río de Janeiro, en junio de 1992, se dio impulso a la expedición de la Ley 99 de 1993, mediante la cual se creó el Ministerio del Medio Ambiente y se organizó el Sistema Nacional Ambiental (SINA). El Ministerio del Medio Ambiente como ente rector de la gestión del medio ambiente y los recursos naturales renovables, tiene dentro de sus funciones la regulación de las condiciones generales y fijación de las normas para el uso, aprovechamiento, manejo, conservación y restitución de los recursos naturales renovables y del ambiente, y en cuanto a la fijación de los cupos anuales, arrea de cultivo, especies de fauna y flora silvestre y de recursos ícticos susceptibles de aprovechamiento. 4. Conclusiones La gestión ambiental es un proceso dinámico, de continua validación de las etapas que lo conforman. La formulación de la política ambiental, precedida de un diagnóstico, debe contemplar objetivos y prioridades claramente definidos, además de un diseño de instrumentos jurídicos, administrativos, económicos y de inversión, entre otros, que orienten la formulación y el desarrollo de los programas para dar pleno cumplimiento a los objetivos. El sector agropecuario tiene una doble responsabilidad, de un lado debe garantizar la alimentación para una población cada vez más creciente y de otro debe contribuir a la conservación de los agro ecosistemas y los ecosistemas vinculados, fuentes y soportes básicos de sus actividades productivas. Los crecientes y elevados costos privados y sociales del deterioro ambiental, la constatación de la irreversibilidad de muchos fenómenos ambientales, la escasa eficacia de las medidas correctoras y compensatorias, nos llevan a concentrar la atención en mediadas anticipatorios y preventivas, lo cual implica diseñar instrumentos tanto de análisis como de política, para la incorporación de la dimensión ambiental en la política sectorial. El Componente Ambiental de La Política Sectorial, se sustenta en un enfoque integrado de la gestión de los recursos naturales, de los bienes y servicios ambientales, de los ecosistemas, de los problemas ambientales globales (desertificación, cambio climático), de la relación entre medio ambiente y desarrollo, de la disminución de la pobreza, de la equidad en el acceso a los recursos y de la visión en cadena, con el propósito de conservar, restaurar y hacer uso sostenible de los agro ecosistemas para la producción de alimentos.
La Política Agropecuaria incluye el principio de sostenibilidad ambiental, entendido como un factor indispensable de la competitividad, por lo cual, el crecimiento económico está sustentado en el uso racional de los recursos naturales, con una visión de largo plazo y en el marco de los acuerdos internacionales, garantizando la satisfacción de las necesidades sociales y económicas de los productores y el mantenimiento de la capacidad productiva de los agro ecosistemas. El Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, dentro de la responsabilidad que tiene con la protección y preservación del medio ambiente, y en cumplimiento de los postulados constitucionales y legales que regulan su manejo, se compromete en todos los niveles de la organización y en todos los procesos administrativos y misionales a desarrollar e implementar buenas prácticas ambientales, con el propósito de minimizar los riesgos de contaminación; igualmente a gestionar mecanismos que permitan el mejoramiento continuo de los procesos que se adopten, a fin de lograr impacto en las acciones, teniendo como resultado un ambiente sano y sostenible (Fernández 2001).
Literatura Citada Burch D.; Rickson R. & Lawrence G. 1996. Globalization and Agri-Food Restructuring. Aldershot: Avebury. Busch L.; Lacy W.; Burkhardt J.; & Lacy L. 1991. Plants, Power, and Profits: social, economic, and ethical consequences of the new biotechnologies. Cambridge, Massachusetts: Basil Blackwell. Busch L; & Sachs C. 1981. “The Agricultural Sciences and the Modern World System”, en L. Busch (Ed) Science and Agricultural Development. Montclair, NJ: Allanheld, Osmun and Co. Fernández R. 2001. Impacto global de las actividades agropecuarias. En: Impacto Ambiental en Agro ecosistemas. Editorial: Facultad de Agronomía UBA. BsAs. www.ministeriodeambiente.gov.co www.minagricultura.gov.co