Baden Powell Y Las Actividades Físicas En El Medio Natural

TÍTULO DE LA CONFERENCIA:

Baden Powell y Las Actividades Físicas en el Medio Natural RESUMEN: Uno de los movimientos que mayor repercusión social ha tenido en el campo de la educación no formal ha sido el Escultismo o el movimiento de los Boy Scouts. Desde su aparición en 1907 hasta la actualidad, son muchos los millones de jóvenes que se han acercado al medio natural a través de este movimiento y otros muchos lo han hecho realizando actividades diseñadas por él pero siendo utilizadas por otro tipo de instituciones o asociaciones. El Escultismo en sí, nacido fuera de la educación no formal y sus orígenes muy ligado al ejército, irrumpió de forma rápida en el campo de la educación formal, siendo utilizado por no pocas instituciones educativas en el proceso formativo de jóvenes. “Una escuela de civismo en los bosques” era una de las definiciones que hacía del método su creador, Baden Powell. Es nuestra intención desde este trabajo acercarnos la figura del General Baden Powell desde un punto de vista biográfico, para después poder conocer algunos de los principios en los que se sustenta el movimiento Scout y finalizar estableciendo algunos de los valores que, a nuestro entender, Baden Powell atribuye a las actividades físicas en el medio natural. AUTOR: José Carlos Tejedor Lorenzo Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte. Profesor de Educación Física en el I.E.S. “Tomás y Valiente” de Peñaranda de Bracamonte (Salamanca).

0- INTRODUCCIÓN: Tendemos a pensar en la utilización del medio natural como recurso educativo y del empleo del ocio y tiempo libre como productos propios de la era postindustrial y de la sociedad de nuestro tiempo. Sin embargo, el análisis histórico de la evolución del uso de la naturaleza en la educación pone de manifiesto que el posible origen del término “actividades en la naturaleza” así como las diferentes etapas por las que dicho término ha evolucionado hasta la época actual ha tenido muchos precursores. A partir del Renacimiento, el concepto teocéntrico del universo deja de tomar relevancia y es “el hombre” en el sentido genérico del término el que comienza a ser el punto central en la forma de entender el orden mundial. Hasta este periodo, las actividades en el medio natural eran concebidas con un carácter utilitario, una adaptación al medio con fines de supervivencia. Es a partir de entonces cuando podemos hablar de actividades en el medio natural por oposición a lo cotidiano, es decir,

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a vivir en las urbes, van a ser utilizadas como recurso en la formación de pequeños y mayores. Por tanto, podemos decir que las actividades en el medio natural, vinculadas al proceso formativo, tienen su punto de partida en el siglo XV-XVI. Muchos son los autores que han utilizado estas actividades atribuyéndoles fines educativos. Desde Vittorino de Felttre con su casa Giocossa (1452), pasando por Jerónimo Mercurialis 1569, (De arte Gimnastica), Montaigne 1580, (De la Educación de los hijos), Rousseau 1762 (El Emilio), Francisco de Amorós 1770, Pestalozzi 1790, la ILE (Institución Libre de Enseñanza) 1878, Georges Hebert 1903, Baden Powell 1907, Gerhard Schmidt y otros con la Gimnasia Natural Austriaca (1919-1928) hasta las asociaciones juveniles surgidas a principios del siglo XX (O.J.E., YMCA, Organizaciones juveniles del las F.E.T. y de las J.O.N.S) pueden ser considerados los precursores del empleo de las actividades físicas en el medio natural vinculadas a la crianza de los jóvenes. En esta evolución histórica sobre la génesis del concepto de actividades en el medio natural, nosotros queremos centrarnos en uno de los movimientos que, a nuestro entender, ha utilizado las actividades al aire libre como eje central de su método educativo; nos estamos refiriendo al “Movimiento Scout” y, más concretamente, a la figura de su creador. El objetivo del presente trabajo pretende, en primer lugar, realizar una aproximación a la obra de Baden Powell, fundador del Escultismo, como uno de los precursores y mayores defensores de la necesidad de la utilización de las actividades en el medio natural dentro del contexto de la educación. Su método, aunque fuera del contexto de la educación formal, va a ser englobado en el marco de la “Escuela Activa” por los principales creadores de ésta -Ferrière y otros- y es considerado como una “pedagogía del aire libre”. Para poder llevar a cabo nuestro cometido, pasaremos por varias etapas. En un primer momento realizaremos un acercamiento a la figura de Baden Powell desde una perspectiva biográfica e histórica. Posteriormente realizaremos un análisis de su método educativo -el Escultismo- intentando conocer la filosofía que impregna la obra de este ilustre educador con una clara vocación militar inicial, pero que quiso formar ciudadanos para la paz. Para finalizar, realizaremos un estudio de los valores que se atribuyen a la naturaleza en el planteamiento de Baden Powell desde una perspectiva educativa, señalando los distintos enfoques que a nuestro entender pueden observarse en la obra de este “ciudadano del mundo”. Antes de finalizar esta introducción queremos reflejar que el origen de este trabajo se encuentra de alguna manera vinculado al agradecimiento personal para con quienes en la década de los 80 hicieron posible que en todo el mundo millones de jóvenes tomáramos contacto con este tipo de actividades fuera del ámbito de la educación formal. Desde aquí señalar nuestro más grande agradecimiento al profesor, educador y párroco D. Francisco Bartolomé González, quien fundó el Grupo M.S.C. (Movimiento Scout Católico) de Benavente, que permitió durante varias décadas que muchos jóvenes tuviéramos contacto con las actividades en la naturaleza merced a ese grupo

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creado de manera altruista y desinteresada y en el que pudimos vivenciar el método ideado por B.P. de una manera práctica. Debemos recordar que a principios del siglo XX en España el currículo escolar no contemplaba las actividades en el medio natural como parte de la educación formal, a excepción de programas experimentales, y que será en el plano de la educación no formal y los contextos extraescolares donde este tipo de prácticas tomen especial importancia. “Suscitar el deseo de conocer, desarrollar el deseo de ser bueno -o, como dice Baden Powell, "apasionar al muchacho en su propia formación"-, es hacer de cada chico, o de cada humano, el agente activo de su formación. La naturaleza es para Baden Powell, que no filosofa demasiado, una realidad experimental”. (Forestier, M.D.; 1965:16). El acercamiento a este movimiento mundial nos permitirá descubrir los valores educativos que emergen de su forma de proceder desde el origen del mismo en 1907. Percibiremos cómo muchas de las aplicaciones educativas que realizamos actualmente en el contexto escolar, sobre todo las relacionadas con la “pedagogía de la aventura en el medio natural” ya habían sido contempladas por el Movimiento Scout. En los orígenes del propio vocablo escultismo encontramos la primera vinculación de este movimiento y el término “aire libre”: “El escultismo es un juego alegre al aire libre, en donde muchachos, grandes y pequeños buscan juntos la aventura, como si fueran hermanos, cosechando salud y felicidad, habilidad y diligencia” (BP, 1922: 14) I- APROXIMACIÓN A LA VIDA DE BADEN POWELL. No podemos adentrarnos en la obra de alguien sin conocer el contexto que la rodeó. Ese es nuestro objetivo: intentar acercarnos a vida de Baden Powell de una manera genérica para poder después analizar su obra y tratar de vislumbrar el papel de las actividades en el medio natural en el movimiento que él fundó. Aproximarse a la biografía de Baden Powell supone entrar en un mundo de aventuras que no tiene fin, donde parece que siempre ganan “los buenos”. Es un ejercicio que resulta muy gratificante para todas aquellas personas que estamos relacionados con el medio natural y donde en el transcurso de la lectura no cesa de invadirnos un sentimiento de “envidia sana” por la forma en que fue capaz de afrontar los retos en los que se embarcó y los resultados que obtuvo. Son numerosas las referencias bibliográficas que podemos encontrar sobre Baden Powell (en adelante B.P.), sin embargo en casi ninguna de las biografías aparece como educador, filósofo o pedagogo: siempre que se habla de él se le asigna la profesión de militar, pintor, escultor, músico, actor y fundador del Movimiento Scout. Sin embargo, su libro “Escultismo para Muchachos” ha sido el referente de muchas instituciones educativas y el inspirador de nuevos métodos de enseñanza-aprendizaje en una época donde las nuevas pedagogías estaban empezando a surgir y donde sus principios han permanecido hasta la época actual. Muy pocas propuestas educativas en el

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campo de la educación han sobrevivido una centuria y siguen en pleno auge; ésa es la genialidad del método. En la vida de Baden Powell podemos distinguir varias etapas; nosotros vamos a señalar las que a nuestro juicio nos parecen más relevantes. Cabe destacar que el nombre que le pusieron los nativos africanos cuando realizaba tareas para el ejército fue “Impeesa” que significa “el lobo que jamás duerme”. Este apelativo resume muy bien cómo fue su vida y el carácter de este hombre. Fue una persona inquieta, dinámica, con gran capacidad de trabajo y comprometida con el mundo que le tocó vivir, desde su edad más temprana, hasta el final de su vida. A) LOS PRIMEROS AÑOS DE SU VIDA: Baden Powell nace un 22 de febrero de 1857 en una casa cercana a Hyde Park en Londres. Era el sexto varón y el octavo en orden de los diez hijos que tendría el reverendo Baden Powell, que a su vez era científico y profesor de Oxford. El niño fue bautizado como Robert Stephenson Smyth Baden Powell, tomando los dos primeros nombres de su padrino, el famoso ingeniero Robert Stephenson. Su madre era hija del almirante inglés W.T. Smyth. Su bisabuelo Joseph Brewer Smyth había ido a América a colonizar Nueva Jersey y en el viaje de vuelta a Inglaterra su barco naufragó y murió. Por tanto B.P. es descendiente de un pastor religioso ligado al ámbito científico y de un aventurero profundamente unido a la mar y pertenece, además, a una familia numerosa. Todas estas circunstancias nos ayudarán a comprender algunas opciones que tomó en su devenir vital. Cuando B.P. apenas tenía 3 años fallece su padre y la vida familiar se torna difícil para una familia con diez hijos. Su madre asume todas las tareas familiares y él crece en un entorno donde la economía familiar es más bien escasa. De su madre decía que “era maravilloso cómo esa mujer supo criar a todos sus hijos y ninguno salió malo”. Las notas de la época cuentan que de niño ayudaba en casa y le gustaba observar los trenes, se pasaba horas muertas mirando a los trenes y por esa época quería ser maquinista de tren. El 26 de febrero de 1865 a la edad de ocho años, este niño escribe una composición que titula “LEYES PARA MI CUANDO SEA VIEJO” en la que detalla lo siguiente: “Yo quisiera que la gente pobre sea tan rica como nosotros, es justo que ellos sean tan felices como nosotros; cuando cruzas en el camino con una persona pobre y le das algo de dinero, estás actuando con justicia y debes dar gracias a Dios, porque Él ha hecho que la gente pobre sea pobre y la rica, rica. Y ahora yo te digo que debes ser bueno; siempre que puedas pide a Dios en tus oraciones que seas bueno, pero no serás bueno con sólo rezar, sino esforzándote por serlo. — (Robert Baden Powell). Este manuscrito, de alguna manera, nos puede dar una idea de la educación recibida por Baden Powell y cómo a una edad temprana el concepto de ayuda al prójimo, cuando su familia no tenía una economía boyante, está inmerso en su forma de ser. En 1870 entró con una beca en la escuela Chaterhouse de Londres. A los 14 años fue escogido para que representara una pieza teatral en el colegio,

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hecho que suscitó en él un gran interés por el teatro y la representación, llegando a adquirir grandes dotes para la interpretación. No fue un escolar brillante, como reflejan las notas adjuntas a los boletines trimestrales que escribían los profesores: “en matemáticas ha abandonado sus estudios por completo”. En francés podemos leer la siguiente anotación: “podría ir bien, pero se ha vuelto vago y a menudo se duerme en clase”. Sin embargo, era un escolar muy activo con grandes dotes para la música, el dibujo y una enorme capacidad teatral. En 1872 la escuela de Chaterhouse se cambió a Godalming Surrey. La nueva ubicación escolar disponía de una zona de matorral y un tramo largo de bosque en una ladera muy inclinada. Este espacio estaba fuera del recinto escolar y se convirtió en un lugar frecuentado por BP para aprender a trepar a los árboles, a acechar en busca de señales y como lugar de observación de la vida silvestre. Con frecuencia solía trepar a los árboles para no ser visto por los profesores que paseaban en busca de escolares que salían de los linderos del recinto educativo. “Mas tarde, en mis horas libres, durante mis días escolares, practiqué el Escultismo en los bosques cazando conejos y guisándolos; observando los pájaros; siguiendo las huellas de los animales y otras cosas semejantes… Me divertí tanto en esta clase de vida que pensé ¿por qué los jóvenes de mi tierra no la han de gustar también?” (BP 1983; 2) Durante sus años escolares él y sus hermanos aprendieron a construirse sus propias herramientas para diversión, puesto que la economía familiar no les permitía comprar todo lo que ellos querían. Cuentan que él y sus hermanos se pasaban muchos días excursionando y acampando al aire libre en muchos lugares de Inglaterra. Les encantaba viajar y como no tenían dinero para ello construyeron un pequeño bote que hacían navegar impulsado por una vela, de modo que pasaban la mayoría de las vacaciones escolares navegando y excursionando. Navegaban río arriba, escogían un lugar adecuado para acampar y se dedicaban a pescar, cazar conejos y pájaros para alimentarse. Construían chozas y cabañas de madera dónde poder dormir. En estas salidas B.P. colaboraba con sus hermanos en la navegación, el aprovisionamiento y el lavado de los enseres culinarios. Recorrieron en canoa el Támesis río arriba hasta su nacimiento. Hicieron senderismo por los cerros de Avon. Él y sus hermanos compraron un bote plegable con el que recorrieron grandes distancias desde Londres hasta Gales. Atravesaron el estuario de Severn, que tiene 13 km y corrientes peligrosas, hasta llegar a Wyce. Más tarde se compraron un bote de 10 toneladas con el que iban por las costas de Inglaterra y Escocia en busca de barcos en peligro para salvarlos, pues de esa manera podrían sacar grandes beneficios económicos. Este tipo de prácticas al aire libre no eran muy frecuentes entre los jóvenes de esta época. “La mejor época de mi juventud fue cuando recorrí el mar a lo largo de las costas de Inglaterra como Scout marino en compañía de mis cuatro hermanos. No éramos realmente Scouts marinos, pues los Scouts marinos no habían sido creados todavía. Pero contábamos con un bote de vela de nuestra propiedad en el que vivíamos y hacíamos largas travesías sin importarnos la estación o la clase de tiempo. A veces gozábamos y a veces teníamos dificultades a causa del mal tiempo; pero aceptábamos por igual lo difícil y lo fácil” (BP 1983:1)

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En su etapa escolar no destacó como alumno ejemplar en cuanto al plano académico se refiere, pero aprovechó esos días para preparar la vida que le iba a llegar después. El Dr. Halg Brown dijo de él al despedirse del centro eduativo: “Su habilidad es mayor de la que aparece en el resultado de su trabajo formal y yo estoy satisfecho de su conducta”. B) SU ETAPA EN EL EJÉRCITO: Después de graduarse en Charterhouse en 1876, a la edad de 19 años se presenta a unas pruebas para entrar en el ejército de caballería y saca la segunda mejor nota de varios cientos de aspirantes que se presentaron. Obtiene el rango de subteniente del 139 de Húsares, del que más tarde sería nombrado Coronel de Honor. Fue enviado a la India como oficial especializado en exploración, lectura de mapas y reconocimiento. Su éxito en la India hace que su cometido pase a preparar a otros soldados para esas tareas. Utiliza métodos poco ortodoxos: un sistema de patrullas capitaneados por un guía. Las pruebas superadas y los objetivos conseguidos por los reclutas eran premiados con una insignia que llevaba la flor de lis, el emblema del futuro movimiento scout que BP fundaría. A la edad de 26 años es ascendido a Capitán. Posteriormente es destinado a los Balcanes, Sudáfrica y Malta. En 1889 asume el mando del 5º Regimiento de Dragones de la India. Durante este periodo, durante el disfrute de una licencia acampado en Cachemira, escribió un manual de adiestramiento que titula: “Aids to Scouting” (Guía o Manual para Explorar). El regimiento lo tenía siempre listo para poder actuar ante cualquier incursión enemiga. Introdujo la bicicleta como medio de transporte para los correos y fundó un club ciclista. Diez años más tarde, en 1899, durante una licencia que disfrutaba en Inglaterra, el Ministerio de Guerra hizo llamar a BP y le ordenó que saliera inmediatamente para Sudáfrica, pues había amenazas de guerra. Allí tuvo el cometido de defender la ciudad de Mafeking de los Boers, que avanzaban hacia ella con un ejercito de 9000 personas frente a los 1000 soldados de que disponía BP para proteger a 600 blancos y 7000 nativos. La gran pericia de BP como estratega no era suficiente para desarrollar esta misión, por lo que tuvo una idea: la de contar con los jóvenes muchachos de la ciudad y asignarles tareas, como mensajeros y otras. Fue tal el grado de implicación de los muchachos y la eficacia en la resolución de los problemas propuestos, que ésto marcó a B.P. Al final, y después de 217 días de resistir frente a los Boers, la ciudad de Mafeking fue auxiliada. C) LOS INICIOS DEL ESCULTISMO: Cuando regresa a Inglaterra en 1903, B.P. es ascendido al rango de Mayor General y convertido en un héroe nacional. Pero hay un hecho que observa: el manual de adiestramiento que diez años atrás había escrito estando en la India y con un objetivo muy claro (el adiestramiento de los reclutas) está siendo leído por muchos profesores para estimular la observación y las habilidades en la naturaleza y utilizado como método

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educativo por las Brigadas Católicas. Es en este momento cuando BP se reúne con el jefe nacional de las Brigadas Católicas, sir William Smith, y le expone que el libro que están utilizando no se concibió como método educativo, que su finalidad era la instrucción de soldados, a lo que dicho dirigente le responde lo siguiente: “Pues bien. Acéptelo en realidad así”. A raíz de ese encuentro se dio cuenta de lo mucho que podía ayudar a los muchachos de su país. Si un libro escrito para adultos había conseguido atraer a los jóvenes muchachos, cuánto más podría hacerlo uno que fuera destinado a ellos mismos. Partiendo de esta idea se puso a recopilar datos sobre las experiencias tenidas en los campos de batalla en Sudáfrica y la India y sobre las enseñanzas aprendidas de los aborígenes de estas zonas. Realizó un estudio pormenorizado sobre la educación de los muchachos a lo largo de las distintas épocas, desde los muchachos espartanos pasando por los antiguos británicos y los pieles rojas. La finalidad estaba clara: escribir un libro destinado a los muchachos. Pensaba que los jóvenes necesitaban algo más que instrucción, por lo que pretendió mostrarle la obra de Dios en la naturaleza (William Hillcourt). Es aquí donde se gesta la idea de su obra clave, “Escultismo para Muchachos”, que no verá la luz hasta años más tarde, en 1908. A principios del verano de 1907 B. P., siendo ya muy popular, se puso en contacto con un famoso editor y propietario de un periódico, Arthur Pearson a quien transmitió sus ideas y proyectos. Como resultado de ese encuentro del 1 al 9 de agosto de 1907, veinte muchachos de diferentes clases sociales acamparon en la isla de Brownsea junto a B.P. Este fue el primer campamento scout que se contempló en el mundo y, según cuentan los relatos de la época, el éxito fue rotundo. D) NACIMIENTO DEL ESCULTISMO: En 1908 aparece el manual “Escultismo para Muchachos” en seis entregas quincenales. El manual aparecía ilustrado por el propio BP. El libro tuvo mucho éxito entre los jóvenes y a final de ese año ya se había traducido a cinco idiomas, llegando a la cifra de treinta y cinco en años posteriores. De forma espontánea chicos y chicas de lugares muy diversos se agrupaban para poner en marcha esas ideas. Lo que en principio nace con el espíritu de ayudar a organizaciones juveniles existentes en esa época, como la Y.M.C.A. (Young Men's Christian Asociation) y las Brigadas Juveniles principalmente, se va a convertir en el libro guía de un nuevo movimiento mundial: “El Escultismo”. BP abre una oficina en Londres para atender todas las preguntas que recibía por carta desde diversos países. Un año más tarde tiene lugar la primera reunión scout en el Crystal Palace de Londres, y a esa reunión acuden un grupo de chicas queriendo formar parte de esta hermandad mundial. Nacen entonces las GUIAS, sería la sección femenina de este movimiento mundial. En 1910 el Movimiento Scout había alcanzado tales proporciones que BP se dio cuenta de que esta tarea iba a ser la obra de su vida y, animado por el Rey Eduardo VII, BP deja el ejército definitivamente para dedicarse al Movimiento Scout. Renunció a su puesto en el ejército, donde ostentaba el

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rango de Teniente General, y se embarcó de nuevo en una nueva vida: la del servicio a los demás. Dos años después, en 1912, realiza un viaje alrededor del mundo para conocer a los scouts de distintos países, y en ese viaje conocerá a la que será su mujer, Miss Olive Saint Claire Soames, quien llegará a ser Jefa Mundial de las Guías y con la que se casará a la edad de 55 años y tendrá tres hijos (Peter, Heather y Betty). El movimiento que había formado sigue creciendo y es entonces cuando se plantea una duda: ¿qué hacer con los hermanos pequeños de los scouts que acuden a las actividades con gran entusiasmo?. La respuesta vendrá con la creación en 1916 de una nueva rama dentro del movimiento: los LOBATOS. Escribe entonces el “Manual del Lobato” ambientado en “El libro de las Tierras Vírgenes” de Rudyard Kipling. En 1920 tiene lugar la primera reunión internacional de scouts (Primer Jamboree Mundial) en la ciudad de Londres. La última noche de ese Jamboree, el seis de agosto, BP fue proclamado Jefe Scout Mundial. De igual manera se da cuenta de que algunos muchachos sienten nostalgia al abandonar la Tropa al cumplir los 16 años. Es entonces, en 1922, cuando crea otra nueva sección dentro del escultismo: el roverismo (Rover) escribiendo el libro “Roverismo hacia el Éxito”. De esta manera, el escultismo aparece como un proyecto que abarca todas las etapas de la vida en los jóvenes. El movimiento scout continuó creciendo y su fundador viajando y entusiasmando a los jóvenes del mundo. Al primer Jamboree de Londres le siguieron otros (en 1924 en Dinamarca, en 1929 en Inglaterra y en 1933 en Hungría). En estas macroreuniones la figura central era BP. Debemos señalar que en el tercer Jamboree celebrado en Inglaterra el Príncipe de Gales anunció que su Majestad el Rey de Inglaterra, Jorge V, concedía a BP el rango de noble y lo nombraría Lord Baden Powell of Gilwell. (Gilwell Park es un lugar adquirido por la familia MacLaren en 1909 y desde esa fecha se celebran allí los cursos de formación para Jefes Scouts). Muchas fueron las condecoraciones y honores rendidos al fundador de este gran movimiento mundial. Finalmente, a la edad de ochenta años, cuando sus fuerzas empezaron a declinar, decidió volver a su añorada África para pasar sus últimos días. Se estableció en Kenya, en un lugar tranquilo desde el que podía divisar las montañas nevadas. Allí falleció un 8 de enero de 1941, pocos días antes de cumplir sus ochenta y cuatro años. Después de su muerte se encontró el siguiente escrito:

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Queridos Scouts: Si alguna vez han visto la obra de "Peter Pan", recordarán cómo el jefe de los piratas estaba siempre haciendo su último discurso de despedida por temor de que, posiblemente, cuando llegara la hora en que habría de morir, no fuera a tener tiempo para darlo a conocer. Así me sucede a mí, y aún cuando no me estoy muriendo en este momento, ésto tendrá que suceder uno de estos días, y deseo decirles una palabra de despedida. Recuerden: esta es la última que oiréis de mí, por lo tanto, medítenla. He tenido una vida muy dichosa, y deseo que todos ustedes tengan también vidas muy dichosas. Estoy convencido de que Dios nos ha puesto en este mundo maravilloso para que seamos felices y gocemos de la vida. Pero la felicidad no proviene simplemente de la riqueza, ni de tener éxito en la carrera, ni dándose uno gusto a sí mismo. Un paso hacia la felicidad es hacerse uno sano y fuerte cuando niño, para poder ser útil y así poder gozar de la vida cuando se es hombre. El estudio de la naturaleza les enseñará cómo Dios ha llenado de cosas bellas y maravillosas este mundo para que lo puedan gozar. Estén satisfechos con lo que les haya tocado y saquen de ello el mejor partido que puedan. Vean siempre el lado bueno de las cosas y no el malo. Pero la verdadera manera de obtener la felicidad es haciendo felices a los demás. Traten de dejar este mundo en mejores condiciones de como lo encontraron; de ésta manera, cuando les llegue la hora de morir, podrán hacerlo felices porque, por lo menos, no perdieron el tiempo e hicieron cuanto les fue posible por hacer el bien. "Esten Listos" es ésta la forma, para gozar de una vida dichosa y morir dichosos: aférrense a su Promesa Scout siempre, aún cuando hayan dejado de ser muchachos. Que Dios los ayude a hacerlo así.

La importancia de este movimiento va más allá que la simple imagen que muchas veces nos muestran en los medios de comunicación de jóvenes con la pañoleta y los uniformes en el medio natural acampando al lado de un río. Haciendo un análisis muy simple podríamos tratar de responder a la siguiente cuestión, ¿cómo es posible que este movimiento, sin ningún mecanismo publicitario, se extendiera a nivel mundial con la rapidez con la que hemos reflejado y que en pleno siglo XXI se calcule que existen en el mundo 28 millones de scouts? ”...de su perfecta concordancia con la naturaleza profunda de los muchachos, mejor aún, con la naturaleza humana que, aunque no guste a ciertos filósofos modernos, se halla en cada uno de ellos. El escultismo pues se presenta como un método de educación activa”. ( Forestier, M.D.; 1965; 20,21)

II- ACERCAMIENTO AL MÉTODO SCOUT: El cometido de este apartado no va a ser el de profundizar en el método scout: más bien queremos detallar los pilares sobre los que se sustenta dicho método para poder entender la filosofía que lo mantiene y realizar después nuestro análisis acerca del papel que las actividades en el medio natural juegan en el mismo. La numerosa bibliografía que existe al respecto permitirá a aquellos lectores interesados profundizar más en dicho método. ¿Cuál sería la definición de escultismo?, muchas podrían ser las respuestas a esta pregunta, pero nosotros nos hacemos eco de las palabras de su fundador: “El vocablo –Escultismo- ha venido a significar un método para

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formar al ciudadano mediante juegos que se adaptan a la naturaleza de la niñez. El escultismo es un juego de muchachos, dirigido por ellos mismos y para el cual los hermanos mayores proporcionan a los menores un ambiente sano, y animarlos a entregarse a aquellas actividades saludables que son conducentes a despertar las virtudes de la CIUDADANIA. Su estímulo más fuerte es el estudio de la naturaleza y la vida en los bosques” (Baden Powell, 1922). Siete son los pilares sobre los que, podemos resumir, se basa el método creado por Baden Powell, siguiendo algunos estudios realizados por la Asociación Chilena de Boy Scouts. En primer lugar, se sustenta sobre una LEY y una PROMESA. La Ley Scout constituye un código de vida basado en los principios scouts, que guiará la forma de proceder del muchacho que desea pertenecer al grupo tanto en la manera de actuar individual como colectiva. Es un código de vida que invita al muchacho a hacer (invitación a hacer) fijándose metas individuales y a ser (invitación a ser) según una escala de valores que proporciona el método. La ley se resume en las reglas que tiene el grupo acerca de cómo resolver conflictos, el compartir las responsabilidades y la participación en el proceso de toma de decisiones. “El muchacho no se gobierna por el NO HAGAS, pero sí por el HAZ ESTO. La ley Scout se concibe como una guía para las acciones, en lugar de un código para sancionar faltas” (BP, 1922). La Promesa constituye un paso voluntario que todo muchacho que desea ingresar en el Movimiento Scout tiene que hacer, y consiste en comprometerse ante sus semejantes a hacer todo lo que pueda para cumplir con la ley scout. El hecho de prometer “hacer todo lo que pueda” conlleva una exigencia personal para con un uno mismo y con los demás. El texto de la promesa pone de manifiesto los deberes de un scout: “Por mi honor prometo hacer cuanto de mí dependa para: cumplir con mis deberes para con Dios, la Patria y mis Padres. Hacer un bien a alguien todos los días y cumplir con el Código de Honor de los Scouts”. En segundo lugar, debemos reseñar que se trata de un método basado en pequeños grupos denominados “patrullas”, que permitirán que el gran grupo, la Tropa Scout, funcione. Este pequeño grupo es una minisociedad donde cada miembro tiene una responsabilidad y donde todos están implicados en la toma de decisiones. Este sistema permite al muchacho una autonomía dentro de su patrulla, pero a la vez una exigencia en cuanto a que el pertenecer a una patrulla conlleva unos deberes y unas obligaciones para con la misma. “Cada muchacho que forma parte de la patrulla comprende que es en sí una unidad responsable y que el honor de su grupo depende, en cierto grado, de la habilidad con que él represente su papel” (BP,1922; 16). El éxito en cualquier tarea grupal depende del grado cumplimiento por parte de cada miembro del grupo en las tareas asignadas como parte integrante de ese grupo. La capacidad de trabajo en grupo es una tarea que aún tenemos pendiente en el ámbito de la educación formal, donde es el individuo y no el grupo el que asume los roles y apenas se presentan situaciones educativas donde se aprenda a trabajar con los demás y para los demás. “La patrulla es la banda de muchachos que se comprometen entre ellos a practicar la Ley Scout. Por ella

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se es Scout. Sus componentes se tienen respeto porque esta Ley es el código secreto que domina la vida y la actividades comunes” (Forester, 1965; 57) En tercer lugar, aparece como premisa en este método el “aprender haciendo”. El escultismo se plantea como un método educativo donde los scouts aprenden de un modo práctico. El ambiente scout brinda multitud de ocasiones a los jóvenes donde actuar y tomar decisiones. “La sabiduría de la naturaleza se asimila a pequeños sorbos durante las caminatas por los bosques, donde el alma incipiente se expande y busca nuevos prodigios. Las excursiones constituyen por excelencia la escuela de la observación y de la práctica que nos hacen comprender las maravillas del mundo portentoso” (BP (BP,1922; 15). La principal escuela va a ser el ambiente natural y el núcleo central girará en torno al campamento del cual BP llega a decir que una semana de esta clase de vida, en el campamento scout, equivale a seis meses de enseñanza teórica en las aulas por excelente que esta sea. En este sentido coincide con M.D. Forestier cuando afirma que “Un chico no es un animal casero. No es un animal hecho para permanecer sentado”. En la época actual igual habría que revisar esa afirmación, seguramente que en la filogénesis humana esa idea es la que es inherente al joven pero la ontogénesis puede cambiar la filogénesis y eso puede que haya ocurrido con la naturaleza de los muchachos actuales con el móvil, ordenador, videojuegos y el propio sistema social. En cuarto lugar, podemos decir que este método utiliza “el simbolismo” como parte fundamental. Esto es algo que está presente en los jóvenes de todas las generaciones. La idea de proyectar sobre algo concreto un deseo abstracto es frecuentemente utilizada por el escultismo. Llevar un pendiente o un tatuaje para un joven actual simboliza algo en su forma de estar en el mundo de hoy. Los jóvenes de cualquier época han proyectado sus aspiraciones en algún que otro héroe real o ficticio. El escultismo atribuye simbología a todo, desde la insignia mundial (la flor de lis rodeada de un cordel anudado con el nudo de rizo) hasta su saludo con la mano izquierda y el dedo meñique separado. Pero hemos de recalcar que el propio nombre escultismo conlleva en sí una simbología especial para los jóvenes ingleses en una época donde el país estaba envuelto en multitud de conflictos bélicos y aparecían los héroes de guerra: uno de ellos fue Baden Powell después del sitio de Mafeking. “Se llama scout a todo soldado escogido por su inteligencia y su valor al que se le encarga en tiempo de guerra preceder al ejercito para descubrir al enemigo y proporcionar al mando las informaciones de cuanto ha sabido ver” (BP; 1983; 1) Pertenecer a este grupo de escogidos era sinónimo de inteligencia, valentía, caballerosidad, aventura y heroicidad, de ahí que la carga simbólica del propio nombre escogido por BP calara con tanto arraigo en una población diana, la juventud inglesa de principios del siglo XX, que tenía el alta estima esos valores en el contexto social y político en que surge el escultismo. Otro de los soportes básicos en los que se sustenta el escultismo es “la vida en la naturaleza”. En la idea primigenia de BP son las actividades en la naturaleza la verdadera escuela de los scouts. “…el secreto del éxito está en el aire del campo y el propósito fundamental del Escultismo es, en realidad, desarrollar el hábito de salir frecuentemente a disfrutar de los beneficios del

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aire libre tanto como sea posible”. “Nuestra organización no es ni un club ni una cátedra, sino más bien una escuela práctica para estudiar las maravillas de la naturaleza. Tenemos que salir frecuentemente al campo para fortalecer la salud del cuerpo y del espíritu” (B.P.1922, 31;32). En la obra de Baden Powell las actividades en la naturaleza constituyen la viga maestra y el campamento se constituye como el mejor lugar donde aprender y desarrollar todas las facetas de los jóvenes, tanto las correspondientes al plano físico como al cognitivo, afectivo, social y espiritual. Aprender en la naturaleza y de la propia naturaleza conforman el punto central del Movimiento Scout. En esta vida en la naturaleza cobra especial importancia uno de los espacios educativos de mayor relevancia dentro del contexto educativo del Movimiento Scout “el campamento”. Sin embargo, el campamento que plantea Baden Powell dista mucho del concepto de campamento que podemos encontrarnos en cualquiera de las agrupaciones de aire libre o clubes deportivos, o asociaciones escolares o aulas de la naturaleza de hoy en día. Es más, no sé si en la época actual se podría llevar a cabo un campamento de este tipo. Para desarrollar esta idea citaremos textualmente el concepto de “Campamento Scout” que Baden Powell propugna. “El campamento es indispensable para adiestrar bien a una tropa. Vivir en tiendas de campaña es algo muy diferente a lo que nosotros llamamos acampar. Cualquier pollino puede vivir bajo un toldo donde no sea más que parte integrante de una recua, y donde reciba cuanto necesite sin hacer el menor esfuerzo para obtenerlo por sí mismo. Los beneficios que una temporada en un sitio como ése ha de proporcionar no valen la pena de que los muchachos salgan de sus hogares. Lo que realmente despierta el interés en la juventud y al mismo tiempo constituye algo educativo es el verdadero acampar: es decir, el campamento establecido por los muchachos mismos, hasta el extremo de hacer sus propias carpas, y aprender a cocinar sus propios alimentos. Luego las tareas de levantar las tiendas de campaña en sitios elegidos por las tropas; la busca de leña y agua potable; la preparación de un sitio para bañarse, cocinas de campaña, letrinas y hoyos para despercdicios; el empleo de utensilios y muebles de campamento, etc es lo interesante, y lo que despierta entusiasmo, además de ser un adiestramiento indispensable” (BP, 1922; 32). Sin lugar a dudas este tipo de actividad sería francamente difícil de aplicar en el contexto educativo actual. Se trata de una idea muy particular de entender las actividades en el medio natural donde el espacio educativo, el campamento, tiene unas connotaciones y una filosofía de vida acorde con el ideal scout. Algunos autores como Evaristo Carriego desde esta óptica han tildado al Movimiento Scout como de utópico y demasiado exigente. La realidad es que no deja de ser coherente con la filosofía del autodesarrollo personal, de forjar personas con carácter capaces de poner en práctica todos los conocimientos y las etapas por las que han ido pasando en la evolución personal; y evidentemente, no podemos olvidar el contexto en el que se originó. Nos adentramos en otro de los grandes soportes des este movimiento, el concepto de “progresión personal”. En el Movimiento Scout tienen cabida todo tipo de personas, que se comprometan a avanzar en su desarrollo personal y colectivo acorde a la Ley y la Promesa Scout. El propio método propone un cuadro de adelanto para cada etapa educativa donde el joven scout irá pasando y consiguiendo metas con la superación de unas pruebas que en algunos grupos denominan “pruebas de adelanto”. Estos logros afectan a los

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distintos planos de desarrollo del ser humano: al desarrollo físico, al desarrollo intelectual al desarrollo emocional, al desarrollo social y al espiritual. El avance es individual y no existe una competencia con otros scouts. Cada scout decide cuándo está preparado para avanzar en la siguiente etapa y puede demostrar que en el cuadro de adelanto ha conseguido las metas establecidas. “Se trata de comprender a los niños y adolescentes siguiendo los estados psicológicos de las distintas edades, de tratarlos con simpatía, de hacerlos activos, de apasionarlos por su propia formación, de creer que, en los peores de entre ellos, subsiste cierto deseo de progreso” (Forestier, M.D.; 1965; 23). Sin lugar a dudas este principio básico en el desarrollo del ser humano no es posible cuando estamos en el aula y tratamos al grupo como clase. Es difícil tratar de cumplir con un programa y respetar los ritmos de aprendizaje individual… ¿Cómo se hace eso? Existen multitud de teorías, pero lo cierto es que al final de año, de ciclo, de etapa… los objetivos a conseguir en el ámbito escolar son los que son y, o progresas al ritmo de todo el grupo, o te descuelgas del mismo. Ese es el panorama de la “educación formal” en la escuela actual. Quizás este principio haya servido para poder acoger a todo tipo de personas en un movimiento mundial como es el Escultismo. La progresión personal en el Escultismo con la intención de convertir un Scout en “ciudadano del mundo” va a abarcar cuatro grandes áreas, según plantea Baden Powell: el desarrollo del carácter y la personalidad, el cuidado de la salud e higiene personales, la implicación en las artes manuales y la destreza constructiva y el servicio al prójimo constituirán las cuatro divisiones del adiestramiento scout para conseguir sus objetivos. Por último queremos señalar como otro de los ejes básicos en el entramado educativo creado por Baden Powell la “concepción del papel del adulto”. Es curioso ver que en todo el planteamiento del escultismo el dirigente, el Jefe de Tropa, no va a jugar el rol de padre, maestro, párroco… No tratará de sustituir a figuras existentes dentro del periodo de formación de los muchachos. Su planteamiento parte de la idea de entendimiento de éste pero desde su mundo, el mundo de los muchachos. Todo dirigente en un grupo scout debe tener unas actitudes hacia los jóvenes que el fundador del escultismo resume en el vocablo “hombre-muchacho”. Esta figura debe ser capaz de ponerse en el lugar del muchacho (empatía), ser consciente de las necesidades y del desarrollo psicomotor de los muchachos en las diferentes etapas por las que éste pasa, tratar a cada muchacho como un ser único e irrepetible y generar en los chicos el espíritu de cooperación y trabajo para conseguir en su progresión personal el máximo de ellos. “… el Jefe de Tropa no tiene que ser ni maestro de escuela, ni oficial de mando, ni director espiritual, ni tampoco instructor. Todo lo que se requiere es el don de saber gozar con provecho del aire libre, compenetrarse del anhelo de los muchachos, y tener el tino de encontrarles otras personas que los encarrilen en la debida dirección, ya sea con respecto a materia de señales o de dibujo, del estudio de la naturaleza o de la exploración” (BP;1922; 4). La concepción de BP con respecto a los adultos y los jefes sigue estando enraizada en los principios de “La Escuela Nueva” aún siendo el Movimiento Scout un movimiento que surgió al margen del anterior. “El trabajo del jefe consiste en dar al muchacho la

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ambición de aprender por sí mismo. La finalidad más importante del Escultismo es la de educar. No digo instruir, sino educar; es decir, empujar al muchacho para que aprenda él mismo porque lo desea, todo lo que tiende a darle carácter”. (BP; 1922; 21 y 41). De nuevo la palabra educar. En una época, la actual, en la que los propios educadores estamos cansados de oír en nuestro contexto de educación formal expresiones como “nuestro papel como docentes es el de instruir en mi materia, para educar está la familia” aparece un movimiento desde la educación no formal que enarbola la bandera de la educación para con los muchachos y la sociedad. De un modo rápido y escueto hemos querido recalcar aquellos aspectos que a nuestro modo de entender son fundamentales en el Movimiento Scout y que hacen de éste toda una filosofía de vida, aunque en algunos círculos críticos se hable de la “utopía de Baden Powell”.

III- PAPEL DE LAS ACTIVIDADES EN EL MEDIO NATURAL EN EL ESCULTISMO. Dentro de esta revisión bibliográfica y documental tratando de aproximarnos al Escultismo desde una perspectiva educativa y a través de las actividades en el medio natural queremos reflejar en esta última parte del trabajo los roles que a nuestro entender Baden Powell atribuye a las actividades realizadas al aire libre. Para ello vamos a servirnos de los estudios realizados por el profesor Martínez Navarro quien, de alguna manera, en sus planteamientos establece dos épocas muy definidas en cuanto a los valores de la naturaleza en la historia de la educación. Vamos a partir de una fecha, la Revolución Industrial (finales del siglo XVIII y comienzo del siglo XIX), en la que podríamos decir que los contextos educativos se sirven de la Naturaleza para educar “desde la naturaleza” y “sobre la naturaleza”. Es en este periodo en el que podríamos emplazar la obra de Baden Powell al menos en sus orígenes, puesto que este Movimiento sigue presente hoy en día. Podríamos hablar de una segunda etapa en la evolución de las actividades en la naturaleza dentro del ámbito educativo que correspondería a la llamada “Etapa Postindustrial” (finales del s. XX y XXI), con la aparición del termino “educación medioambiental”, donde los planteamientos educativos de las actividades en la naturaleza tienen el enfoque de “servir a la naturaleza” y por tanto de “educación para la naturaleza”, esa naturaleza de la que los humanos somos parte. En la obra de Baden Powell vamos a encontrarnos más bien un planteamiento de “educación desde la naturaleza” y “educación para la naturaleza” aunque atisbemos planteamientos también cercanos al concepto de actividad medioambiental dentro del campo de las actividades al aire libre. I- Aproximación a la Educación Física desde las Actividades al Aire Libre en el Escultismo: Sin lugar a dudas, Baden Powell vincula las actividades en el medio natural como fundamentales en el desarrollo de los jóvenes desde un planteamiento del contenido disciplinar propio de la Educación Física. De esta 14

manera otorgará unos valores a las mismas desde dos puntos de vista: el “gimnástico-deportivo” y el “higienista”. En cuanto al planteamiento gimnástico-deportivo, en el Escultismo vamos a encontrarnos con un planteamiento de actividades cuyo objetivo estará ligado a la mejora de la condición física de los muchachos. “Por medio del escultismo podemos enseñar a todo muchacho, ya sea de la ciudad o del campo, la manera de llegar a ser participante de los juegos y con ello a gozar de la vida fortaleciendo al mismo tiempo su fibra física y su temple moral” (BP, 1922; 29). En la fogata nº 17 del Libro Escultismo para Muchachos, el título de la misma es “¿Cómo hacerse fuertes?”. Es un verdadero tratado de ejercicios para mantener una buena condición física, en donde prevalece la idea de la necesidad de que un scout sea fuerte poniendo ejemplos prácticos y relatando a modo de manual, varios ejercicios para hacer fuerte el corazón, los pulmones, los distintos músculos del cuerpo… Es en esta misma fogata donde se pone de manifiesto la necesidad del trabajo de una cualidad física básica presente en el curriculo de Educación Física como es la Resistencia, al igual que aparece un apartado específico para otra cualidad física básica que es la Fuerza. La propia divisa scout “Siempre Listo” parece llevar implícito el hecho de estar preparados física e intelectualmente para poder hacer frente a cualquier situación que se nos presente. En la sociedad actual el desarrollo de la condición física se está convirtiendo en una prioridad en el crecimiento de la persona, máxime cuando el número de horas destinadas a la inactividad en cualquier escolar de secundaria viene siendo del orden de dieciséis, contando las ocho horas de sueño diario. Es en la naturaleza y a través de las diversas actividades que plantea el escultismo (ejercicio físico, marchas y caminatas, orientación, trabajos de construcciones, juegos de simulación…) la mejor forma de mejorar esta condición física. En este apartado algunos autores como JAEL, T. han querido ver el escultismo a un movimiento al servicio del estado, de manera que este tipo de actividades estarían encomendadas a la mejora de la condición física de un pueblo, el inglés, en clara decadencia racial durante la época postvictoriana y preocupado por la aparición de competencia económica en nuevos estados. Desde este punto de vista el objetivo de estas actividades al aire libre sería muy similar al que planteaban otros movimientos que tendrían una finalidad militarista y cuyo fin era la mejora de la condición física de los soldados quienes, con fusil en mano en una época de gran belicosidad, serían los encargados defender los territorios nacionales. “La escuela siempre recibió el encargo de prestar atención a la educación física, tras toda crisis militar que pusiera en entredicho el vigor de la pretendida raza. Pero no sólo en el marco de la educación formal. También interesó el cultivo de la educación física a las instituciones de educación no formal con interés regeneracionista como en el caso del movimiento de Boy Scouts” (Martinez Navarro, A. 1993; 125)

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Los orígenes militares de Baden Powell nos acercan al concepto de preparación física para el combate y la protección de la nación tal y como refleja en su libro “Rema tu Propia Canoa”, escrito durante la última época de su vida en su morada de Kenia en 1939, durante el comienzo de la 2ª Guerra Mundial. Es por ello que en este libro aparecen continuamente referencias relativas “BE PREPARATED” (B.P.) pero con un objetivo defensivo en época de guerra y estar preparado también durante la época de paz. En este libro Baden Powell escribe: “Era en cierto modo como nos pasa ahora en Inglaterra, cuando países vecinos son belicosos y amenazan invadir nuestros territorios más prósperos y pacíficos. Nosotros también tenemos que entrenarnos y practicar el lema scout "Siempre Listos" para protegernos”. No obstante, tiene muy claro que los métodos militares y educativos deben ser diametralmente distintos. En el libro “Guía para el Jefe de Tropa” nos da su opinión y de alguna manera se desvincula de la forma de desarrollar la condición física que tiene el ejército. “El entrenamiento a que se somete a un soldado, día tras día, durante meses y meses, indudablemente produce un desarrollo físico admirable. Más aún, el ejercicio físico en esa forma pertenece a la categoría de la instrucción. En ninguna forma debe considerarse como procedimiento educativo bajo el cual los muchachos puedan aprender por sí solos, enseñándose a sí mismos”… “La vida vigorosa al aire libre es la clave del espíritu del Escultismo” (B.P.; 1922; 30 y 11). Además de de la visión militarista del cuidado corporal en cuanto a la mejora de las capacidades físicas, en la obra de Baden Powell encontramos también una visión teleológica en cuanto al concepto corporal se refiere. El mantenimiento y la mejora de la condición física mediante las actividades al aire libre va a permitir al ser humano mantener el envoltorio de su propia naturaleza, la naturaleza humana. El cuerpo será el asiento del alma con el que nacemos y con el que vamos a morir, por lo tanto es el envase sobre el que se sustenta la propia naturaleza humana. Una carcasa, nuestro cuerpo, que debemos mantener mientras estemos en este mundo. El uso que hagamos de éste, nuestro cuerpo, condicionará nuestra forma de estar en el mundo. “…recuerda que Dios te ha prestado tu cuerpo durante tu vida, y depende de ti el hacer buen uso de él. Hazlo tan perfecto como puedas proporcionándole suficiente aire puro, ejercicio, buena alimentación y limpieza. Piensa en esto como parte de tus deberes para con Dios, y practícalo diariamente. Así estarás sano y feliz y también lo suficientemente saludable para ser útil a otros”. La higiene y salud a través de las actividades en el medio natural es otro de los valores relacionados con la Educación Física que podemos observar en la obra de Baden Powell. La medicina y la biología han puesto de relieve que el mantenimiento y conservación de la salud están estrechamente ligados al estilo de vida. El estilo de vida al aire libre que propone el Escultismo contempla una serie de beneficios corporales para los muchachos que lo siguen. De esta manera, en la Fogata nº 17 del libro “Escultismo para Muchachos” nos encontramos con un repertorio de “Seis ejercicios para la Salud” donde Baden Powell comenta a los lectores: “Es posible para casi todo el mundo, aún para aquellas personas pequeñas y débiles, convertirse en fuertes y sanos, si se toman la molestia de hacer algunos ejercicios corporales, todos los días. Sólo se necesitan alrededor de unos diez minutos y no requieren aparatos de

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ninguna clase”. En esta misma Fogata nº 17 encontramos todo un tratado de higiene sobre como mantener limpios y sanos los oídos, la nariz, los ojos, los dientes y las uñas. Además, desde el plano práctico plantea una serie de juegos y actividades para hacer en patrullas prácticas de higiene y juegos para el desarrollo de fuerza. Nos cita un poema de un autor inglés llamado Dryden, que escribió: “Es mejor confiar la salud al aire puro y al ejercicio, que pagar al médico para que os la conserve”. La Fogata nº 18 del libro “Escultismo para Muchachos” lleva por título “Hábitos saludables”, todo un repertorio de actividades y consejos para preservar la salud y la higiene en base al mantenimiento de la limpieza corporal y del entorno, la importancia de no fumar ni beber, ser puro, levantarse temprano y reír como medidas para lograr ese ideal de salud scout. II- Aproximación a la naturaleza humana desde la naturaleza una visión de la “Escuela Nueva” presente en el Movimiento Scout. El conocimiento de la naturaleza reclama su contacto con ella. Ya uno de los padres de la Escuela Nueva, Adolphe Ferrière venía a definir ese movimiento como “un internado situado en el campo donde se fomentaba la relación con la Naturaleza mediante el cultivo de la tierra, la cría de animales y la protección y respeto a los seres vivos, que practicaba la gimnasia con el torso desnudo o hasta en completo baño de aire, asociada a juegos y deportes y que cultivaba la vida al aire libre a través de viajes y campamentos”. Distintas corrientes psicopedagógicas aparecidas a finales del siglo XIX, entre ellas este movimiento, confraternizan en muchos de sus principios educativos con el Escultismo. Si el verdadero origen de la naturaleza humana y sus raíces se encuentra en el medio natural, acercando al muchacho a la naturaleza podremos hacer surgir los principios naturales de nuestros antepasados. Los nuevos métodos provenientes de la psicología y la pedagogía defienden la vuelta la naturaleza para entender la propia naturaleza humana. El desarrollo de las ciudades, la vida en un entorno no natural, desvirtúa la propia naturaleza humana. Las actividades al aire libre que plantea el Escultismo planean la vuelta a la naturaleza como el lugar donde la naturaleza humana cobra sentido. Hay que enseñar a los niños de la ciudad que por encima del techo del cine brillan las estrellas, decía en cierta ocasión Baden Powell. La idea del reencuentro con la naturaleza quedará reflejada en el libro Escultismo para Muchachos en una cita que hace del poeta francés Alexandre Dumas: “Si fuese rey de Francia, no permitiría a ningún niño de menos de doce años entrar en la ciudad. Hasta esta edad los niños deberían vivir al aire libre, al sol, en los campos, en los bosques, en compañía de perros y caballos, cara a cara con la naturaleza que fortalece el cuerpo, que abre el espíritu y la inteligencia, que poetiza el alma y desvela en ella una curiosidad más preciosa para la educación que todas las gramáticas del mundo. Comprenderían mejor tanto los ruidos como los silencios de la noche, tendrían la mejor de las religiones, la que Dios mismo revela en el espectáculo mágico de sus milagros diarios”. (BP.; 1983; 58) La interpretación de esa cita pone de manifiesto el papel que las actividades en el medio natural juegan en la educación de los muchachos scouts desde el punto de vista del creador del Escultismo. Una vez

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más vemos una constante en la obra de Baden Powell: “Educar desde la naturaleza, para la naturaleza”. III- Educación no formal desde la pedagogía del ocio y tiempo libre. El escultismo desde su origen, y en palabras de Baden Powell, es definido como una “escuela de civismo por medio del arte de los bosques”. Esta es una de las múltiples definiciones que su creador nos transmite. En la propia definición aparece el término “escuela”. Desde los orígenes del Movimiento Scout, educadores, psicólogos, filósofos y pedagogos vieron en él un verdadero método educativo, capaz de atraer a centenares de jóvenes en poco tiempo y convertirse en muy pocos años en un movimiento mundial que acogería a millones de scouts. La definición de objetivos, el planteamiento de contenidos, la estructuración de una metodología, el control sobre la evolución y desarrollo en las distintas etapas por las que pasan los muchachos, hacen de este movimiento mundial todo un método educativo. El verdadero propósito del Escultismo en palabras de Baden Powell es “mejorar la calidad del ciudadano futuro, particularmente en lo que se refiere al carácter y la salud; sustituir el ‘yo’ por ‘rendir servicios’; hacer de los mozalbetes individuos eficientes, moral y materialmente, con el objeto de que esa eficiencia pueda ser aprovechada en servicios al prójimo”. (B.P. 1922; 12). Baden Powell es consciente de que la educación de la juventud va más allá del periodo escolar. Que fuera de los muros de la escuela hay un espacio y un tiempo que debe ser atendido mediante un verdadero programa educativo y diseña un método basado en la “pedagogía del aire libre”. De alguna manera nos transmite una forma de enseñar al aire libre. Si cogemos el libro “Escultismo para Muchachos” nos encontraremos con un tratado para enseñar conceptos, desarrollar procedimientos y adquirir actitudes relacionadas con el medio natural. En este apartado queremos señalar que, si nos tomáramos la molestia en analizar los contenidos que se imparten hoy en día en una de las asignaturas que está presente en el currículo de los futuros maestros especialistas en Educación Física, “Actividades Físicas en el Medio Natural”, podríamos observar cómo una parte importante de los contenidos que se transmiten en la misma están presentes en el libro “Escultismo para muchachos”. IV- Uso de las actividades en el medio natural como adoctrinamiento. Utilizar la personalidad infantil y juvenil bajo el pretexto de educar ha sido utilizado con frecuencia a lo largo de la historia por dogmatismos de todo tipo y color. Las características propias de los adolescentes hacen de éstos una población fácilmente manipulable. No han sido pocas las organizaciones que a la sombra de regímenes totalitarios han utilizado el atractivo de las actividades al aire libre para hacer apología de ideas totalitarias o partidistas. Podemos acudir a los estudios de Martinez Navarro, para destacar al Movimiento de Pioneros en la Unión Soviética stalinista (1922), a la Hitler-Jugend (1926); a la Opera Nazionale Balilla (1926), a la Gioventu Italiana, dei Lottorio (1937), a la

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Mocidade Portuguesa (1936) a las Falanges Juveniles de Franco (1940) y hasta la Organización Juvenil Española (1960). Esta última organización plantea: “La finalidad de los campamentos, actividad especialmente querida y cuidada por el Frente de Juventudes, no es, en principio, otra que la finalidad de la Institución juvenil, la educación política (de la juventud) en el espíritu y doctrina de la Falange Española Tradicionalista y las JONS”. (Martinez Navarro, A.; 1993; 136). Si bien no conocemos ninguna referencia acerca de la utilización del Escultismo al servicio de un régimen determinado, no son pocos los autores que quieren ver en la obra de Baden Powell a todo un patriota. Evidentemente que se trata de un método diseñado por un militar y por lo tanto el amor a la patria es una cualidad que se le presupone a cualquier persona vinculada al sistema defensivo de un país. No obstante, el amor a la patria es una de las finalidades del escultismo, en ningún momento aparece enmascarada esta cualidad. En la promesa scout aparece: “Yo prometo por mi honor hacer todo cuanto de mí dependa para cumplir mis deberes para con Dios, la Patria y mis Padres. Ayudar a los demás en toda circunstancia y vivir fielmente la Ley Scout”. Realmente ése el compromiso voluntario que adquiere el muchacho cuando decide pertenecer al grupo. Ese compromiso es refrendado mediante acto público y en compañía de sus allegados y otros hermanos scouts. Es por ello que en los orígenes el método no nace vinculado a ningún régimen político sino que nace en el seno de una sociedad, la británica, en plena revolución industrial, inmersa en un montón de conflictos bélicos nacionales y que coincide en el tiempo con el desarrollo de la I Guerra Mundial donde Inglaterra se une al bando de los aliados. Evidentemente, en esta última contienda los muchachos scouts desarrollarán toda una serie de tareas para cumplir con su deber hacia la patria. Sin embargo, hemos de resaltar que una sociedad que percibe que un movimiento social es capaz de crecer en muy poco tiempo y arrastrar masas, no permanece al margen de ésto. Rápidamente aquellos colectivos que requieren de público bien para subsistir o para tener peso específico en estamentos sociales, o para obtener beneficios económicos, van a procurar acercarse al mismo. El Escultismo se convirtió en poco tiempo y sin mecanismos publicitarios importantes en un fenómeno de masas. Tal es el grado de importancia que toma este movimiento que el propio rey de Inglaterra aconseja a Baden Powell que se dedique a labores propias del Escultismo y abandone el ejército, pues es desde esa posición desde la que mejor va a poder ayudar a su país. En este sentido cabe señalar que la propia iglesia ve en el Escultismo todo un recurso para llegar a conseguir los fines que ella pretende. En muy pocos años aparecen ramas de los Scouts vinculadas al catolicismo, son los llamados Movimientos Scouts Católicos. Tal es el grado de implicación de la iglesia para con este movimiento asociativo que diversos Papas han emitido opiniones sobre este tema. Reflejamos a continuación algunos textos a propósito del Escultismo que desde el Vaticano se han realizado. Hemos podido encontrar textos tanto de Pío XI, como de Pío XII y Juan XXIII.

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“Scouts católicos, esto no significa poco para el que considera bien y sabe apreciar todo el contenido de esas palabras… Hay muchos que profesan modos de vida más cómodos, más tranquilos, menos costosos. Para ser scout, hace falta una disposición constante al valor y al esfuerzo, a la calma y a la reflexión. Y para ser un scout católico hace falta además un sentimiento profundo de Dios, de su ley divina, de su presencia, que da armonía a las maravillas de la naturaleza y nos muestra su aspecto más bello, el secreto, la enseñanza más valiosa” (Pío XXII. A la I Peregrinación Internacional de los Scouts Católicos. Septiembre de 1925). Es por ello que podemos concluir que, si bien el objetivo del Escultismo es formar ciudadanos libres con una forma de vida basada en la Ley y la Promesa Scout, diversas instituciones sociales, desde “el Estado”, pasando por “la Iglesia”, hasta diversos “movimientos asociativos”, se han servido de este movimiento para tratar de inculcar su doctrina, que en ocasiones coincidente con la esencia del Escultismo y en otras ampliando campos que no habían sido desarrollados por este fenómeno social o incluso reforzando algunos aspectos en detrimento de otros para aproximarse más a la ideología que se pretende difundir. Existe una paradoja grande en este sentido, pues los católicos ven en Baden Powell a todo un católico practicante y, por el contrario, podemos encontrar bibliografía que argumenta que B.P. fue un gran Masón o que su método se basa en el sistema de los educativo de los masones. Baden Powell en vida ya veía lo peligroso que podía ser que este entramado organizativo que se había creado en pocos años y que era capaz de captar público de todos los rincones del planeta cayera en manos de mentes cuyo objetivo fuese otro muy distinto de aquel para el que había sido creado. Esta idea la deja plasmada en la carta que escribe como “Último mensaje a de BP a los dirigentes”: “Harán bien en mantener los ojos abiertos, a la vez, para buscar sucesores dignos a quienes ustedes, confiadamente, puedan entregar la antorcha. No permitan que llegue a ser una organización asalariada; consérvenla como un movimiento voluntario, de servicio patriótico”. V- Aproximación a la espiritualidad desde las actividades en el medio natural en la obra de Baden Powell. Independientemente de la vinculación confesional de Baden Powell lo que es evidente que el contacto con la naturaleza nos pone ante un espacio que se escapa a la racionalidad humana. Cualquier ciudadano que asciende una montaña, cuando hace cima le ahonda un sentimiento difícil de explicar. A ninguno de nosotros nos dejan indiferentes determinadas instantáneas sobre el Himalaya, el Cañón el Colorado, los acantilados de Moher… Todas estas formaciones, todos estos paisajes son obra de la naturaleza, pero detrás de esa obra ¿Quién se encuentra?... Para algunos simplemente es una cuestión azarística y de complejas ecuaciones matemáticas, para otros son el reflejo del todo creador, para otros son el camino hacia otra vida… Es en la naturaleza donde el ser humano se siente verdaderamente pequeño y es en la inmensidad de este medio natural donde vamos a encontrarnos en situación de formularnos cuestiones a las que no podemos responder desde la racionalidad. Entra aquí el campo de la espiritualidad, y no sólo vinculada al hecho religioso.

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En la obra de Baden Powell aparecen continuamente las referencias al entorno natural vinculadas a la obra de Dios. En el punto seis de la Ley Scout se dice “El scout ve en la naturaleza la obra de Dios y la respeta”. Por tanto, asumir el compromiso de ser Scout conlleva aceptar el respeto a la naturaleza y aceptar que detrás de esa naturaleza se encuentra la mano de Dios. Recurramos de nuevo a la palabras del creador del Escultismo, “Estudio de la naturaleza: Grandes enseñanzas se derivan de la observación de la Naturaleza. En la vida de un pájaro, por ejemplo, el nacimiento de sus plumas de igual forma y color que las de los de su especie que viven a millares de kilómetros de distancia, las migraciones, la forma igual de tejer sus nidos, el color de sus huevos, el desarrollo del polluelo, el cuidado de la madre, la alimentación y la facultad de volar; todo se realiza sin la intervención del hombre; sólo obedeciendo a las leyes del Creador, y constituye una lección inapreciable para los muchachos”. “El Escultismo eleva el nivel moral del más empedernido pillete, y le inculca los principios de fe en Dios. Junto con la obligación que tienen los Scouts de hacer diariamente una buena acción, forma la base de los deberes para con Dios y sus semejantes; con su enseñanza, sus padres o el director espiritual pueden formar más fácilmente en el muchacho la clase de credo deseado” (B.P.; 1922; 15,16 y 26) En la obra Escultismo para Muchachos Baden Powell insta a que tengamos una amplitud de miras en cuanto al hecho religioso, teniendo cabida en el Escultismo cualquier tipo de religión que tenga como punto fundamental la “veneración a Dios”, entendiendo por esta última el “respeto a Dios”. Nos viene a decir con respecto a este apartado que la base de cualquier religión se basa en la “veneración a Dios”, el “respeto al próiimo” y el “respeto a uno mismo”.

VI- Aproximación a la idea de felicidad, de fraternidad y de ayuda la prójimo. Vincular las actividades en el medio natural con una vida plena, feliz y placentera son una constante en la obra de Baden Powell. En su manual de “Escultismo para Muchachos” señala: “Cuando el germen de conocimiento de los bosques ha entrado en la mente del muchacho, la observación, la memoria y la deducción se desarrollan automáticamente, y entran a formar parte de su carácter, quedando integrados en él, no importa cual sea la senda que siga en la vida. Deseamos enseñar a nuestros chicos, no solamente la manera de ganarse la vida, sino también la forma de disfrutarla, o sea, el arte de gozarla en sentido elevado”. (B.P.; 1983; 23) En su último mensaje al público en general, también nos aludía a la idea de la felicidad, “Mi vida ha sido intensamente feliz, no sólo en mi propio círculo hogareño, sino también en el mundo fuera de él... Viendo hacia atrás una existencia de más de ochenta años, me doy cuenta de lo corta que es la vida y de lo poco que valen la ira y la lucha política. La cosa más importante es empeñarse y poner un poco de

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felicidad en la vida de otros”. Después de leer estas palabras casi no somos capaces de seguir escribiendo. La verdad es que el simple hecho de leer lo que este hombre escribió refleja claramente cuál es su idea de estar en este mundo. “Poner un poco de felicidad en la vida de los otros”. ¿Cuántas veces cuando vemos la cara de nuestros escolares disfrutando de una de esas actividades que diseñamos al aire libre no nos sentimos profundamente felices nosotros también?... Es la vida destinada a los otros la que de alguna manera nos hace felices en palabras de Baden Powell. A diferencia de lo que se plantea en algunos círculos religiosos, en la obra de este autor las cosas hay que hacerlas aquí y ahora. El gozar de la vida y disfrutar de la misma debe ser durante nuestra estancia en la tierra. Aún siendo una persona con una enorme creencia religiosa no plantea una vida de sufrimiento en la tierra para gozar en el cielo después de la muerte. Esta idea queda plasmada en unas palabras suyas: “Encontrareis que el cielo no es una felicidad que se goza arriba, después de muerta, sino que lo podéis hallar aquí mismo, en este mundo, en vuestro propio hogar. Por lo tanto, guiad a otros hacia la felicidad y seréis felices. Al hacerlo, haréis lo que Dios espera de vosotras. El Señor sea con vosotras” (Último mensaje de B.P. a las Guías) Con frecuencia se ha asociado al Escultismo con un método militar de educación y con fines de preparación de los muchachos para la guerra. El origen militar de su fundador y el marcado amor a la patria que manifiesta en sus escritos han sido utilizados como principales argumentos para defender esa idea. Sin embargo, cuando analizamos sus escritos lo que descubrimos es una idea totalmente contraria. El hecho de haber estado en el campo de batalla permite unas vivencias humanas y reflexiones posteriores que ponen el punto de mira en “la educación para la paz” para poder acabar con la guerra en el mundo. Citaremos algunos escritos donde podemos ver esta idea. “La guerra, sin embargo fue una desgracia para nuestra civilización y para la cristiandad. Si nos beneficiamos con la lección y realmente queremos evitar que se repita, es nuestra responsabilidad seguir un adiestramiento de las mentes jóvenes en buena voluntad pacífica y la cooperación, sin explotar los triunfos o hacer prevalecer el poder sobre el derecho” (BP en Capitulo X. Escultismo para muchachos. Notas para instructores. No traducido al castellano). "Si no existe una mentalidad de paz en el espíritu y la voluntad de los pueblos, de nada servirán para garantizarla los acuerdos comerciales, las alianzas militares, el desarme general o los tratados. Todo depende de la educación". (WARLETTA, J.A.; 2004) La situación actual del mundo confirma, tristemente, esta intuición de B.P.

IV- CONCLUSIÓN: Como colofón a este trabajo queremos señalar que esta aproximación a la figura de Baden Powell, desde una perspectiva educativa, como precursor en la utilización del medio natural y las actividades al aire libre en el proceso formativo de los jóvenes, nos acerca un poco más a la obra de este gran educador citado en no pocos escritos sobre el tema que nos ocupa, pero del que apenas se destinan unas cuantas líneas en cuanto a la aportación que nos legó al sistema educativo y a la pedagogía de las actividades al aire libre.

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Somos conscientes de que simplemente hemos reflejado algunos de los aspectos de su obra y de una manera sencilla. La gran amplitud de su obra así como el progresivo método educativo que plantea requerirían de un estudio en profundidad que se escapa del objeto al que va destinado este trabajo. Poner a los jóvenes en el medio natural desprovistos de las facilidades de la vida cotidiana supone que ellos deben hacer frente a este medio para subsistir en él, ser capaces de cocinarse su propia comida, realizar sus propias construcciones, curarse sus propias heridas... en definitiva, volver a los orígenes de la naturaleza humana es la idea que trata de transmitir Baden Powell. Un concepto de actividad en la naturaleza auténtico, en el sentido estricto de la palabra. Actualmente es difícil encontrar verdaderos “campamentos scouts”; sin embargo en los contenidos que en los distintos campamentos se realizan es frecuente encontrar multitud de actividades de las que plantea B.P. Creemos que en muchos casos lo que hemos utilizado del Escultismo han sido las actividades que este método plantea (orientación, pistas de rastreo, primeros auxilios, manejo de mapas...) como si a modo de recetario se tratase, sin más objetivo que el trabajar un contenido disciplinar propio de un área, la Educación Física Escolar. Quizás después de acercarnos a este autor podamos ver otros puntos de vista en cuanto a la utilización de las actividades en medio natural con nuestros alumnos. Mediante una metodología activa el Escultismo involucra al educando en su entorno. El desarrollo individual y progresivo de cada uno de los muchachos trata a cada uno como un ser individual, independiente e irrepetible que con su quehacer diario contribuye al bien de la comunidad a la que pertenece. Los deseos de progresión individual ven en la naturaleza una fuente de inspiración en la que el adulto juegan un papel de ayuda en el proceso facilitando las condiciones de aprendizaje. Un estilo de vida donde el ser persona, ser ciudadano, es un objetivo fundamental. Para finalizar, queremos señalar que el acercamiento al método educativo creado por Baden Powell supone toda una aventura en cuanto a la exploración de nuevas ideas en la forma de concebir la educación y el proceso de enseñanza-aprendizaje bastante distinto al que vemos cada día en las aulas. Como educadores y, concretamente, como maestros y profesores de “Educación Física”, resulta un ejercicio muy reconfortante adentrarse en la obra de este autor para, cuando menos, replantearnos formas de proceder o poner en tela de juicio aspectos que nos plantea. Simplemente es lo que hemos tratado de reflejar en este trabajo: realizar una aproximación a la persona y método creado por Baden Powell para mostrar algunos aspectos que pensamos tenían relevancia y vinculación con las actividades en el medio natural en el contexto educativo.

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IV- BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA: •

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