TEORÍAS DE LA FONACIÓN. Integrantes: Jesús D Hernández Carlos Llontop Rodrigo Juan Pablo Las teorías más importantes basadas en datos científicos de investigación y más sometidas a debate han sido las siguientes: a) Teoría mioelástica primitiva de Ewald (1989). La vibración vocal resulta del paso del flujo aéreo respiratorio entra en las dos cuerdas vocales, estando más o menos estiradas y en posición de aducción por contracción de las mismas. El paso del aire origina un movimiento pasivo vibratorio de las cuerdas vocales que es un elemento elástico por la misma presión del aire a su paso desde la subglotis, estando mantenida la corriente aérea por el fuelle pulmonar. La función del sistema nerviosos en este mecanismo sería la de mantener una tensión suficiente en las cuerdas, de tal forma que las características del sonido emitido dependen exclusivamente de la presión infraglótica y de la tensión de los pliegues vocales. Por tanto según esta teoría la fonación sería el resultado de la sucesión repetitiva de estos fenómenos: apertura de la glotis, escape de un pequeño volumen de aire, disminución de la presión infraglótica, actuación de la fuerza elástica y cierre de la glotis, elevación de las presiones infraglóticas, y así sucesivamente.
Esta teoría es insuficiente, pues no explica cómo puede un sonido experimentar una variación de intensidad sin modificar su altura. Solo la existencia de cambios en la masa de las cuerdas vocales durante su vibración puede responder a esta cuestión. Se considera además que la energía proporcionada por la ventilación pulmonar sería insuficiente por si sola para proporcionar la energía sonora que se produce. Se la denomina primitiva porque luego se han propuesto múltiples modificaciones a esta teoría básica. B) Teoría aerodinámica mioelástica completada. Es también denominada mioelástica-aerodinámica. Se trata de una serie de modificaciones hechas a la primitiva teoría mioelástica, que se han ido publicando progresivamente y que suponen importantes aportaciones. Entre los autores que han hecho aportaciones están, Van den Berg en varias ocasiones 1953, 1957, 1958 y 1974, Smith en 1954 y 1965, Lafon en 1958, Perelló en 1962 y 1966, Vallancien en 1972, Hirano en 1970 y 1974, y Wyke en 1974 y 1976. Las aportaciones realizadas se pueden resumir en estos conceptos: - Cuando las cuerdas están juntas, preparadas para fonar, la presión aérea subglótica vence la resistencia que éstas ofrecen a su paso forzando su despegamiento. Pero a la vez que esta fuerza aérea separa las cuerdas vocales, se está produciendo otra fuerza de aproximación de las mismas por la elasticidad cordal (fuerza mioelástica) y por un efecto de succión al disminuir la presión intraglótica por el fenómeno aerodinámico de Bernuilli. El perfil de las cavidades laríngeas experimenta una disminución de su calibre a partir del tubo traqueal siendo mínimo a nivel del esfínter vocal, lo que hace que se semeje mucho a un tubo de Venturini. En el momento en que las cuerdas vocales se
encuentra muy próximas se produce una aspiración de las mismas por fenómeno de Bernouilli. Según este fenómeno al aumentar el flujo aéreo a través de las cuerdas, éstas sufren un movimiento de aspiración hacia la línea media que provoca su cierre brusco al adosarse los labios mucosos. Este fenómeno acabaría el tiempo de oclusión glótica y precedería inmediatamente a una nueva apertura glótica, las fuerzas de retroaspiración se anulan al parar el paso del aire. Así, el tiempo de apertura comenzaría primero rápidamente y se acabaría enseguida progresivamente bajo la presión del aire espiratorio acumulado durante el cierre. Las cuerdas vocales separadas de su posición de equilibrio, tenderían bajo la acción de su propia deformación a aproximarse por elasticidad hasta el momento en que la mucosa se mete de nuevo bruscamente en el orificio glótico retraído realizando el tiempo de cierre. La sucesión de ambos fenómenos establece la vibración de las cuerdas vocales. Sin embargo esta teoría no explica satisfactoriamente algunos aspectos: el mantenimiento de la vibración una vez iniciada; si la vibración recomienza necesariamente con las cuerdas totalmente pegadas, como muestra la cinematografía, hay un efecto de succión que desencadena el comienzo de la vibración e) Teoría neuro-oscilatoria Léod (1968).
de
Sylkvestre
y
Mac
Según esta teoría las vibraciones vocales son consecuencia directa de la acción del músculo vocal. Mac Léod compara la actividad de este músculo a la de los músculos de las alas de los insectos denominados asincrónicos. Estos músculos responden sobre todo a estímulos nerviosos de baja frecuencia, aunque también pueden responder a vibraciones de frecuencia más elevada.
Lo mismo ocurriría en el músculo tiro-aritenoideo. Por tanto, según esta teoría, la vibración de las cuerdas es de carácter activo, siendo los fenómenos espiratorios y fonatorios independientes, como en la teoría neurocronáxica, sin tener en cuenta un hipotético y poco verosímil homorritmo electrofisiológico. Mediante una serie de experimentos Mac Léod aporta una serie de argumentos a favor de esta teoría, sin embargo, también han aparecido otros en contra: ▪ Como la teoría neuro-cronáxica, esta teoría se sustentan en la concepción de la arquitectura del músculo vocal.▪ Experimentos realizados no están a favor de un origen miofibrilar de la energía necesaria para el movimiento cordal. ▪ Al contrario de lo que ocurre con la frecuencia de batido del ala de un insecto, la periodicidad de las vibraciones glóticas es variable y regulable. Habría que demostrar los precisos mecanismos reguladores de la impedancia mecánica del sistema con una larga dinámica de acción.